Kurt aguardó, junto a su viejo aliado, a la entrada de la Capilla, atento, ante cualquier tipo de eventualidad.

Marcelo escupió al suelo, con cara despectiva, al escuchar el nombre de su sire de boca de Giuliana. Aquel estúpido vejestorio, que parecía tener un palo de escoba metido por el culo, había sido el responsable de todo lo que había pasado y de que se encontrara en aquella precaria situación. No obsta...

Cadem, el barrio mas bohemio y colorido de Londres, recibió a los dos vástagos “sanfranciscanos” con una fina capa de lluvia que comenzó a caer justo a las 19:00, en el momento en el que Brook Wilson aparcaba el Mercedes en las inmediaciones del refugio de Adam. El viaje, de apenas veinte minutos, h...

Marcelo se lanzó, sumido en una vorágine de hambre y rabia, hacia el desdichado saco de zumo que sería su cena aquella noche. Como el animal hambriento que era en ese momento comenzó a beber de su víctima, sin mostrar miramientos, de la manera más salvaje y visceral de la que era capaz. Poco a poco ...

Acababa de salir del refugio cuando la sorpresa inundó el pecho del Ventrue. La noche, aquella larga y, al parecer, eterna noche, le deparaba, con cada paso que daba, una nueva pieza del enrevesado rompecabezas en el que tanto él, como sus compañeros, estaban entrando poco a poco... ... En primer lu...

El Toreador observó, con algo de incomodidad, como aquella criatura le estaba enfrentando. Estaba claro que su voluntad era más fuerte de lo que el propio Kurt esperaba, quizá estuviera en lo cierto y fuera un enviado del altísimo para ayudarles en su misión. Sea como fuere había llegado el momento ...

Jason sonrió, con la sonrisa de quien se siente satisfecho por un trabajo bien hecho, ante las palabras de su viejo amigo. Estaba claro que al farsante le agradaba el lugar, incluso él mismo se hubiera quedado de buena gana en aquel refugio si así lo hubiera dispuesto el patricio, por suerte, el san...

El patricio se relajó, al fin, al ver como su hermano salía de su autoimpuesto trance. Esta vez, y gracias sin duda a la experiencia y fuerza de voluntad de Brook, no había sucedido nada de lo que Jason tuviera que preocuparse. No hubo desvanecimiento, desorientación o pérdida de consciencia por par...

Jason se acomodó en el sillón que había elegido, aquello iba a tomar más tiempo del que había previsto y no había motivo para pasarlo de manera incómoda. El toreador aún tardaría, al menos treinta o cuarenta minutos, en acicalarse, tiempo que podían permitirse y que no alteraba para nada sus planes,...

El toreador relajo su postura, sin dejar de vigilar de cerca cualquier tipo de movimiento amenazante de aquella "gárgola". La tensión se palpaba en el ambiente y, de algún modo, aquella bestia parecía ser consciente de ello ¿acaso aquel ser era un guerrero avezado y experto en combate, en ...