[Análisis] Libro del narrador 2a Ed.
Publicado: 19 Sep 2019, 00:31
Pese a haber jugado muchos años a la segunda edición de Vampiro Edad Oscura, hasta hace un par de años no llegué a conocer a este libro, quizás porque salió en 2003 en castellano, cuando la Factoría ya iba en caída libre y, además, es un libro pequeño y, a primera vista, sin importancia. La compré por coleccionismo, incluía una gran pantalla de cartulina con una ilustración de una batalla campal entre los ejércitos Tzimisce y los Ventrue por un lado y las tablas de equipo y referencias útiles por el otro.
Pero el libro en sí llama la atención en primer lugar por dos cosas, porque son 70 páginas, frente a las 190 del Companion de la primera edición y porque no se llama Companion, sino Libro del narrador, como el de La mascarada. Algunas cosas tienen su explicación y poco a poco trataré de ir desgranándolo.
No encontramos cómic ni capítulo de combate con maniobras especiales y justas a caballo, aquello fue directamente incorporado al reglamento básico de 2a edición. El libro abre en el capítulo 1 con Líneas de sangre: Laibon, Lamia, Lhiannan, Salubri, Baali y Gárgolas. Las ilustraciones son muy bonitas, tanto es así, que muchas las han recliclado para V20. Añaden los Baali y las Gárgolas respecto al Companion, en realidad los Baali y Daimonion ya habían aparecido en el primer Companion en un capítulo aparte, remarcando su carácter de personajes del narrador. Pero, siendo que aparecen en El libro del narrador de La mascarada junto a las demás líneas de sangre no tenía sentido seguir escondiéndolos.
Así que ahí tenemos un primer capítulo con seis preciosas líneas de sangre que nos recomiendan que usemos con mucho cuidado y envolviéndolas en mucho misterio (mira, pero no toques). A alguna le dan un buen rediseño, como a los Lhiannan, que le ceden su debilidad de clan a los Baali; los Salubri también cambian de debilidad de clan; las Lamias pasan a considerar Deimos una senda de Mortis y los Salubri muestran ya claramente la división en dos linajes.
El segundo capítulo nos muestra seis nuevas vias o caminos que se suman a los cinco del libro básico: El camino de la noche, de los huesos, de la metamorfósis, de la sangre, de la paradoja y de tifón. Me doy cuenta al leer este capítulo de que los 6 caminos "especiales" son para los 6 clanes "especiales" que no formarán parte de la Camarilla. Lo cual me hace pensar en lo "especiales" que quisieron hacerlos. En este capítulo si que se desarrollan las éticas de las sendas y las jerarquía de pecados que, personalmente, no me gustan nada. Tras leerlos con calma, creo que el de la Noche y el de la Paradoja tienen cambios importantes respecto a otras versiones, el de la Noche creo que es el camino más jugable de los 6.
El tercer capítulo se exponen la disciplinas de estas líneas de sangre, en la que no me voy a detener demasiado. Disciplinas raras para líneas de sangre raras, la mayoría ya las conocemos, en primera edición se encontraban en el Companion y ahora forman parte del reglamento básico de V20 Edad Oscura. La sorpresa es que las gárgolas (el nuevo fichaje) no tienen Viscerátika, sino rituales enseñados por los Tremere, parece ser que en Edad Oscura aún no han desarrollado la disciplina.
Y, finalmente, en el cuarto capítulo llegamos a las herramientas del narrador y a lo que, supongo yo que debería ser el núcleo del libro, aunque son las últimas veinte páginas. El capítulo comienza con unas cuantas ideas para escribir personajes no jugadores y te dan un buen número de personajes predefinidos con una lista de habilades y atributos que pueden venir muy bien para improvisar (erudito, caballero, comerciante, sacerdote, etc). Me hubieran venido muy bien cuando narraba en mesa Edad Oscura.
Luego viene tres páginas con la explicación de cómo funcionan los nombres y apellidos en la Europa medieval y una gran tabla de nombres sajones, normandos, francos, castellanos, italianos, etc. Personalmente, creo que a los americanos este tipo de cosas les ayudarán bastante, los europeos creo que estamos más familiarizados con los nombres de nuestros vecinos.
Y de nuevo las reglas de como montar una batalla campal que venían ya en el primer Companion, aquí se encuentra ampliadas y, diría yo, mejoradas. Es interesante el sistema de moral de las tropas y cómo les afecta usar poderes sobrenaturales abiertamente.
El capítulo concluye con un sistema para reflejar los estragos de la edad en personajes que viven durante siglos, algo que tras las crónicas Giovanni y las crónicas de Transilvania era cuestión de tiempo que apareciera. Lo interesante es que destaca la importancia del aislamiento progresivo, la pérdida olo difícil que es mantener los Aliados, los Contactos, la Posición y demás un siglo tras otro, más aún si entras en letargo. Y es que aquí también se mencionan dos mecánicas que a mí me parecen muy interesantes: la Sed de Caín o sed de antiguo y el Sueño de las edades.
La Sed de Caín es algo que se aparece en las novelas, aparece en este libro y quizás aparezca en Elíseo, pero nunca se mencionó en los reglamentos hasta Réquiem y V5 en Mascarada, refleja el hecho de que un antiguo necesita cada vez vitae más espesa y potente, lo cual le lleva a alimentarse de otros vampiros. Listas una buena cantidad de factores que predisponen a que aparezca, entre los que se encuentras los caminos, la naturaleza del personaje y si es un diablerista, por ejemplo.
El sueño de la edades es algo que se había explicado antes, pero que en este libro reciba una mecánica. Pasados 500 años a los vampiros les resulta cada vez más difícil mantenerse despiertos, necesitan dormir el letargo. Bueno, pues ahí están las reglas.
En conclusión, un libro muy chulo, pero muy corto, que introduce muchas ideas y muy buenas y reescribe las líneas de sangre para Edad Oscura ocho años después de su primera aparición. El problema de este libro es que carece de los interesantísimos capítulos de trasfondo y ambientación que tenía el Companion y son 120 páginas que se echan en falta. Es evidente que ese trasfondo lo puedes buscar en una enciclopedia o en Tres Pilares, pero El libro del narrador no es suficiente para meterte de lleno en la Edad media o en Vampiro. Con lo corto y redundante que es, no sorprende que pasara desapercibido y es una verdadera lástima, porque tiene pequeños tesoros ocultos.