Vincent Blackhill

[Theazlin]

"Cuando cada paso que das hacia el éxito te acerca un poco más al más estrepitoso de los fracasos" ____________________________________________________

FICHA


El reparto de PUNTOS GRATUITOS ha sido el siguiente:

· 3 puntos a Fuerza de Voluntad (pasando de 4 a 7)
· 7 puntos a Auspex (pasando de 3 a 4)
· 5 puntos en trasfondos (adquisición de Estatus 2, Recursos 2 y Criados 1)

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En cuestión de TRASFONDOS he seleccionado los siguientes:

- Contactos 3: Tres contactos principales. (Por determinar)
- Generación 2: 11ª generación
- Estatus 2: Respetado como un Ancillae o Ductus.
- Recursos 2: Moderado.
- Criados 1: Un criado. (Por determinar)
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A nivel de MÉRITOS Y DEFECTOS he seleccionado los siguientes:

Joven promesa (Mérito social 3 puntos): Eres una de las promesas de la ciudad, una estrella en alza dentro de tu Secta. Todo el mundo quiere conocerte y ser tu amigo, incluso aquellos que están en el poder tratan de prepararte para posiciones de mayor responsabilidad. Tienes un -1 a la dificultad de todas las tiradas Sociales contra cualquier vampiro de tu Secta que no esté oponiéndose activamente a tu ascenso.

Hasta la fecha Vincent ha demostrado ser, ante todo, eficaz, algo muy valorado entre la sociedad cainita en las noches que corren. Su personalidad fuerte, sus métodos directos y su capacidad le han llevado a destacar dentro del clan y de la Secta como un futuro aspirante a la política... aunque nadie se ha parado a preguntarle si ese es el camino que desea tomar. Su sire ve en él la posibilidad de ganar repercusión social, sus superiores ven la posibilidad de introducir a uno de los suyos en la telaraña política de alguna ciudad que les interese y los demás perciben a alguien perspicaz, constante e inteligente, capaz de generar soluciones donde otros ven problemas.

Representante (Mérito social 1 punto): Tu fama ha excedido los límites de tu Secta. Todo el mundo sabe quién eres, qué has hecho y qué se supone que has hecho (que no tiene por qué ser lo mismo). La publicidad puede ser buena o mala; lo que importa es que todo el mundo conoce tu nombre. Si los individuos ajenos a tu círculo social inmediato saben lo suficiente para relacionar tu cara con tu nombre es cuestión aparte.

Sabueso, investigador, solucionador, agente... es igual que sobrenombre quieras usar, en el fondo todos hacen referencia a lo mismo: El señor Blackhill se encarga de cumplir su cometido con eficacia. No son pocas las historias que sobre él circulan. Seguramente muchas de ellas contengan poca verdad, algunas en cambio quizás se queden cortas pues, como siempre, los cuentos dependen de quién los cuenta. Se dice que ayudó a caer en desgracia a un primogénito destapando algunos de sus trapos sucios para el clan, que sirvió como informante al príncipe de alguna ciudad europea sobre su propia primogenitura o que ha ayudado a solventar crímenes en muchas ciudades del norte; y sí, algunas lenguas dicen también, que seguro que alguno de los problemas que ha solucionado ha acabado muerto en alguna esquina.

Impaciente (Defecto mental 1 punto): No tienes paciencia para quedarte y esperar. Quieres hacer las cosas ya, y que el Diablo se lleve al último. Cada vez que te ves obligado a esperar en vez de actuar, es necesaria una tirada de Autocontrol para ver si te largas por tu cuenta.

Vincent no soporta la ineptitud y aunque es consciente de que eso muchas veces le reporta problemas hay una parte de sí mismo que espera de los demás lo que él se exige a sí mismo: velocidad, eficacia y pasión. Si a eso le sumas que no soporta la sensación de pérdida de tiempo, algo que relaciona con la holgazanería, encontramos un carácter impaciente que más de una vez ha cometido errores que después ha tenido que subsanar... al coste que sea.

Recién llegado (Defecto social 1 punto): Acabas de llegar a tu nueva ciudad de residencia, y lo has hecho sin conocer a nadie del lugar. Las facciones existentes pueden tratar de reclutarte o eliminarte, mientras que las Arpías te evalúan y te examinan. Mientras tanto, tu ignorancia de los acontecimientos recientes, historia y política de la ciudad puede llegar a desconcertarte en determinadas ocasiones, causando que cometas determinados errores.

Apenas has oído hablar de Copenhage, de su sistema de organización o de los vástagos que habitan la ciudad. Te han encargado un trabajo y vienes a cumplirlo. Así ha sido siempre hasta ahora aunque en su interior Vincent empieza a vislumbrar dudas. Está cansado de correr, de huir, de responder a tan elevadas expectativas y empieza a plantearse un cambio de no-vida.

Tic (Defecto físico 1 punto): Realizas algún movimiento repetitivo en momentos de tensión, y que delata por completo tu identidad. Por ejemplo,una tos nerviosa, frotarse las manos constantemente, crujir los nudillos, etc. Cuesta un punto de Fuerza de Voluntad abstenerse de realizar el tic.

Su carácter nervioso busca maneras de liberarse y a pesar de que la mayor parte del tiempo Vincent puede aparentar tranquilidad y serenidad hay ocasiones en que le supera. Entonces es cuando sus manos buscan algo con lo que juguetear: un lápiz que mover de dedo en dedo, una moneda que desplazar por el dorso o unas llaves con las que repiquetear contra la mesa.

Sueño profundo (Defecto mental 1 punto): Cuando duermes, te es muy difícil despertarte. En cualquier tirada de este tipo, eleva en dos la dificultad y escenifica que parece que nunca puedes llegar puntualmente cuando tienes una cita a primera hora.

A pesar de no tener ninguna prueba científica de ello, Vincent cree, reminiscencias de sus estudios en psicología, que toda la tensión que acumula durante la noche provoca que su dormir sea profundo, lo cual no significa que sea placentero. Tal vez como un mecanismo propio del cuerpo para aligerar la presión mental. Al fin y al cabo, los cuerpos de los vástagos están muertos pero sus mentes se rigen por normas similares a las de los mortales.

[Theazlin]

HISTORIA
Poco se sabe de Vincent antes de sus primeros años como vástago. No por ser misterioso u ocultar un secreto oscuro, simplemente porque las cosas mundanas no trascienden cuando poco afectan a los vampiros y ese fue, precisamente, el caso. Más allá de sus cualidades, vivencias, éxitos o fracasos, Vincent era un hombre y como tal solo era una efímera promesa que podía o no hacerse realidad pero que, por suerte o desgracia, se ganó la oportunidad de fraguar ese vaticinio en la no-vida. Baste decir que en él vieron la posibilidad de crecer y prosperar gracias a su intelecto y su perfeccionismo; unas cualidades atractivas para el clan Tremere.

De sus primeros años como vástago poco a trascendido salvo su entusiasmo, implicación y eficacia en labores menores, las cuales afrontaba con la ambición y la convicción de quien busca en cada acción la perfección. Esto le valió ascender deprisa y empezar a encargarse de tareas algo más complejas, proceso que desveló un gran talento para la investigación. Sus superiores, que no eran ajenos a ello y que no iban a dejar escapar la oportunidad de beneficiarse, decidieron aprovecharlo y pronto cambió las funciones de recadero por las de espía y detective. Su perspicacia e inteligencia hicieron que superara las previsiones más optimistas y que su nombre empezara a pronunciarse con cierto respeto en reuniones en las que él no estaba presente, hecho que no siempre es positivo pues es bien sabido que los vástagos, al igual que los humanos, son seres envidiosos y que temen perder lo que han ganado. Y alguien que sube rápido puede representar un peligro.

En una de esas conversaciones que se suceden en la más hermética privacidad, uno de sus superiores, Terö Uskon, aguijoneado por el miedo al ascenso de Vincent, decidió poner en marcha un astuto plan que habría de hundir a la joven promesa. Si, como decía su sire, tan bueno era entonces el clan había encontrado la persona perfecta para encargarse de un problema que venían arrastrando desde hacia años. En Tampere, Finlandia, un miembro de la primogenitura se oponía sistemáticamente a las propuestas del representante de los Brujos. Se trataba de Akseli Perttu, miembro de los Nosferatu. La rivalidad entre ambos se remontaba a hacía décadas y, sin duda, estaba entorpeciendo enormemente los planes de expansión de los Tremere por la región impidiendo con su influencia toda acción beneficiosa para los Tremere.
En la mente de Terö la situación estaba clara: las continuas alabanzas del sire de Vincent le obligaban ahora a aceptar la propuesta o arriesgarse a que se consideraran sus elogios como una manera vacía de ensalzarse a sí mismo pues en realidad no veía en su chiquillo el potencial del que presumía. Tras este jaque, Vincent sería enviado a Finlandia donde fracasaría en su cometido de averiguar algo turbio de un primogénito y, para más complejidad, del clan de las ratas. Es bien sabido por todos que la información suele estar manchada con el hedor y la podredumbre de las ratas de alcantarilla. Y así fue como, con cierto recelo, el sire de Vincent se mostró confiado en su chiquillo y en las capacidades de éste para solventar el problema del clan en Tampere. Una semana más tarde Vincent Blackhill abandonaba Oslo con el objetivo de tener éxito en una tarea que parecía demasiado compleja para un vástago de su edad y experiencia.

Lamentablemente para los intereses de Terö y felizmente para los de Vincent y su sire, siete meses después se destapaba la existencia de un chiquillo secreto del primogénito Nosferatu de Tampere abrazado sin el auspicio del príncipe de la ciudad. Y, por si fuera poco, dicho chiquillo parecía demostrar ciertas inclinaciones anarquistas compartidas con su sire según evidenciaban pruebas halladas en su refugio y en una caja fuerte de un banco menor afincado en la propia ciudad de Tampere. Curiosamente, o no, ambos Nosferatu admitieron su "parentesco" pero negaron categóricamente sus escarceos con el anarquismo.
Cuando Vincent presentó en Oslo su informe final no olvidó añadir que la existencia de un chiquillo ilegal habría bastado para que Akseli dejara la primogenitura pero no para que perdiera la influencia que tenía sobre otros miembros bien posicionados en la corte de la ciudad. Tendencias anarquistas, en cambio, cortaban de raíz cualquier relación consistente con cualquier cargo de la ciudad y dejaba vía libre a los Tremere para proponer y aprobar las medidas que deseaban; especialmente después de que la persona que hubiera destapado todo el asunto no fuera el recién llegado Vincent sino el mismo primogénito Tremere. Nadie en Oslo dudó de quién había solventado el problema y de dónde habían salido las pruebas irrefutables que inculpaban a Akseli y a su chiquillo, quien, por otro lado, alcanzó la muerte definitiva por orden del príncipe.
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[Theazlin]

Creo, [mention]Voivoda[/mention], que Akseli puede ser un enemigo de Vincent, ¿no?
Habría que desarrollar un poco este tema porque lo escribí ayer, entre biberones de mi hija y el sueño que tenía pero la idea creo que puede dar juego.
El problema es que también podría poner a Tero como enemigo y esto ya empezaría a ser dibujarse una Diana en el pecho... pero no te diría que no tampoco

[Theazlin]

CRIADO: Arthur Mitcon
La capacidad de sentirse solo no es un sentimiento exclusivo de los humanos. Cabría incluso plantearse si no se exacerba con la inmortalidad, un don que pone de manifiesto la individualidad del ser al contemplar, desde lejos, como el devenir del tiempo marchita y corrompe todo lo efímero del mundo. Sin la presencia del paso del tiempo como agente que urge a actuar, a pensar y a hacer, los vástagos pueden perder, en parte, el motor que impulsa la existencia, arrinconando la necesidad de relacionarse a nivel profundo y hallando, con el paso del tiempo, en la soledad el único compañero imperecedero del viaje que es existir.
Vincent Blackhill no fue ni es ajeno a este sentir que, con el paso de los años, se hacía más intenso. Y fue entonces cuando, tras la tarea de Tampere, Vincent conoció a Arthur Mitcon, un joven escritor apasionado y talentoso pero poco afortunado que había dejado su Inglaterra natal para buscar alternativas literarias en Oslo.

No fue su talento, su capacidad ni su pasión por alcanzar el sueño de ser escritor lo que llamó la atención de Vincent. Fue el reflejo de sus demonios en forma de persona excesivamente perfeccionista que vivía de la imagen que los demás tenían de él; fue el sentirse reconocido en el sufrimiento de quien intenta sustentar una imagen de perfección mientras por dentro sufre lo indecible por sentirse, en el fondo, un fraude; fue esa mirada triste que traiciona una sonrisa agradable. Ver los miedos del joven Arthur hace que Vincent no pierda la perspectiva de los suyos propios, siendo para él un recordatorio constante de que la fuente de su sufrimiento está en su interior y que solo cuando él acepte sus propias debilidades podrá dejar caer parte del peso que sostiene su espalda.

Mantener vivo a Arthur y no abrazarlo responde a dos aspectos esenciales: el primero es la necesidad de asentarse en un lugar y demandar el correspondiente permiso para hacerlo; y en segundo lugar está el hecho de que Vincent sospecha que con el abrazo hay una parte del carácter que detiene su evolución de la misma manera que la vejez se detiene en el tiempo. Esta sospecha le atormenta por dentro y no se atreve a abrazar a Arthur pues podría ser la constatación de sus creencias y, por lo tanto, la evidencia de que, en parte, ya es tarde para Vincent.
EN CONSTRUCCIÓN

[Theazlin]

[mention]Voivoda[/mention], viendo cómo está desarrollándose Vincent, ¿Qué te parece si hago un cambio en la ficha y en vez de Percepción 4 e Inteligencia 3 pongo Percepción 3 e Inteligencia 4? Tengo la sensación que está cogiendo derroteros más intelectuales (en dirección a la psicología) que de percepción.

[Voivoda]

Me parece bien, los prólogos están para ajustar estas cosas.