[Lore] Magos romaníes
Publicado: 05 Jun 2020, 18:57
De la Guía de las Tradiciones:
Los romaníes (a menudo referidos como gitanos, un término que muchos encuentran despectivo) son un grupo étnico que emigró desde el noroeste de la India en algún momento del primer milenio d.C. y comenzó a llegar a Europa en gran número durante el siglo XIV. Muchos romaníes fueron convertido en esclavos en Bulgaria, Transilvania y otros reinos de Europa Oriental y no serían liberados hasta el siglo XIX, cuando se produjo un éxodo de los romaníes de la zona por Europa y América.
Durante este siglo también surgieron muchos de los estereotipos modernos sobre los gitanos, junto con ideas y teorías pseudocientíficas y erróneas, que llevó a dar una imagen romántica de los "verdaderos romaníes" como músicos y danzantes vagabundos con pañuelos al cuello. Este estereotipo se ha perpetuado durante el siglo XX mediante la literatura, el cine, y sociedades reconstruccionistas de períodos medievales o renacentistas, así como juegos de rol mal documentados.
Durante la Gran Convocatoria, los magos romaníes que acudieron con frecuencia fueron tratados con desdén por otros místicos europeos. Aunque Nightshade y Chalech les ofrecieron lugar entre los Verbena y los Euthanatoi, los romaníes los rechazaron, creyendo que el uso de la magia de la sangre de los Verbena y los tratos con los muertos de los Euthanatoi los convertían en marimé o impuros.
Al final, la mayoría de los magos romaníes encontraron su lugar entre los Cuentasueños o permanecieron independientes. Tradicionalmente su magia está relacionada con la curación, la protección de espíritus hostiles y las maldiciones (Correspondencia, Entropía, Espíritu y Vida). Algunas mujeres romaníes actúan como adivinas, pero siempre lo hacen en beneficio de los payos (no romaníes) y nunca entre su pueblo. La forja siempre ha sido una ocupación habitual entre los romaníes (incluso hoy muchos romaníes realizan trabajos sencillos de mecánica y electrónica) y algunos incrementan su habilidad con tecnomancia. Algunos romaníes tienen lazos con los espíritus feéricos de la India, Persia, Oriente Medio y los Balcanes (representados con el Mérito: Sangre Feérica) y sus dones únicos a veces dan a los extraños la impresión equivocada de que existe una especie de "afinidad racial de sangre gitana" (Nota: una referencia al suplemento Gitanos) con la que obtienen su poder místico.
Actualmente los Cuentasueños romaníes se encuentran entre todas las facciones de la Tradición. Los antropólogos, lingüístas e historiadores que tratan de redescubrir su historia y cultura se encuentran entre los Baruti (una facción de maestros y narradores que toman su nombre africano en honor a la cofundadora y mártir de la Tradición, Naioba). Los tecnomantes que mezclan sus artes tradicionales con la forja, la mecánica e incluso la electrónica y la informática se unen a la Sociedad de la Rueda Fantasmas (tecnochamanes que aparecieron en el siglo XIX). Los que desean preservar la cultura romaní tradicional de la asimilación -a menudo en las grandes comunidades de Europa Oriental, que se han asentado en su mayoría- encuentran su lugar entre los Guardianes de la Llama Sagrada (conservadores que tratan de mantener vivas las culturas amenazadas o agonizantes). Algunos miembros, alarmados por el creciente odio racial y la violencia dirigidos contra los romaníes tras la caída del comunismo han decidido convertirse en Lanzas Rojas (Cuentasueños militantes, cuyo nombre fue inspirado por las guerras creek, dedicados a proteger sus familias y pueblos de las agresiones externas).
Aunque los Cuentasueños han sido el hogar tradicional de los magos romaníes, se encuentran en todas las Tradiciones (aunque entre los Eutánatos y Verbena siguen siendo extremadamente minoritarios), así como en la Unión Tecnocrática. Los romaníes son una especie de minoría invisible en el mundo moderno. Algunos países se niegan a reconocer a los romaníes como un grupo étnico distinto, y muchos romaníes prefieren mantener sus orígenes en secreto para no enfrentarse a los prejuicios y rechazo de los payos. Otros intentan hacerse oír y reclaman su herencia y soluciones a los problemas a los que se enfrentan en el siglo XXI, incluyendo la violencia racista en Europa Oriental y el pago de reparaciones por las persecuciones que sufrieron durante el Porrajmos, el Holocausto romaní.
Los romaníes (a menudo referidos como gitanos, un término que muchos encuentran despectivo) son un grupo étnico que emigró desde el noroeste de la India en algún momento del primer milenio d.C. y comenzó a llegar a Europa en gran número durante el siglo XIV. Muchos romaníes fueron convertido en esclavos en Bulgaria, Transilvania y otros reinos de Europa Oriental y no serían liberados hasta el siglo XIX, cuando se produjo un éxodo de los romaníes de la zona por Europa y América.
Durante este siglo también surgieron muchos de los estereotipos modernos sobre los gitanos, junto con ideas y teorías pseudocientíficas y erróneas, que llevó a dar una imagen romántica de los "verdaderos romaníes" como músicos y danzantes vagabundos con pañuelos al cuello. Este estereotipo se ha perpetuado durante el siglo XX mediante la literatura, el cine, y sociedades reconstruccionistas de períodos medievales o renacentistas, así como juegos de rol mal documentados.
Durante la Gran Convocatoria, los magos romaníes que acudieron con frecuencia fueron tratados con desdén por otros místicos europeos. Aunque Nightshade y Chalech les ofrecieron lugar entre los Verbena y los Euthanatoi, los romaníes los rechazaron, creyendo que el uso de la magia de la sangre de los Verbena y los tratos con los muertos de los Euthanatoi los convertían en marimé o impuros.
Al final, la mayoría de los magos romaníes encontraron su lugar entre los Cuentasueños o permanecieron independientes. Tradicionalmente su magia está relacionada con la curación, la protección de espíritus hostiles y las maldiciones (Correspondencia, Entropía, Espíritu y Vida). Algunas mujeres romaníes actúan como adivinas, pero siempre lo hacen en beneficio de los payos (no romaníes) y nunca entre su pueblo. La forja siempre ha sido una ocupación habitual entre los romaníes (incluso hoy muchos romaníes realizan trabajos sencillos de mecánica y electrónica) y algunos incrementan su habilidad con tecnomancia. Algunos romaníes tienen lazos con los espíritus feéricos de la India, Persia, Oriente Medio y los Balcanes (representados con el Mérito: Sangre Feérica) y sus dones únicos a veces dan a los extraños la impresión equivocada de que existe una especie de "afinidad racial de sangre gitana" (Nota: una referencia al suplemento Gitanos) con la que obtienen su poder místico.
Actualmente los Cuentasueños romaníes se encuentran entre todas las facciones de la Tradición. Los antropólogos, lingüístas e historiadores que tratan de redescubrir su historia y cultura se encuentran entre los Baruti (una facción de maestros y narradores que toman su nombre africano en honor a la cofundadora y mártir de la Tradición, Naioba). Los tecnomantes que mezclan sus artes tradicionales con la forja, la mecánica e incluso la electrónica y la informática se unen a la Sociedad de la Rueda Fantasmas (tecnochamanes que aparecieron en el siglo XIX). Los que desean preservar la cultura romaní tradicional de la asimilación -a menudo en las grandes comunidades de Europa Oriental, que se han asentado en su mayoría- encuentran su lugar entre los Guardianes de la Llama Sagrada (conservadores que tratan de mantener vivas las culturas amenazadas o agonizantes). Algunos miembros, alarmados por el creciente odio racial y la violencia dirigidos contra los romaníes tras la caída del comunismo han decidido convertirse en Lanzas Rojas (Cuentasueños militantes, cuyo nombre fue inspirado por las guerras creek, dedicados a proteger sus familias y pueblos de las agresiones externas).
Aunque los Cuentasueños han sido el hogar tradicional de los magos romaníes, se encuentran en todas las Tradiciones (aunque entre los Eutánatos y Verbena siguen siendo extremadamente minoritarios), así como en la Unión Tecnocrática. Los romaníes son una especie de minoría invisible en el mundo moderno. Algunos países se niegan a reconocer a los romaníes como un grupo étnico distinto, y muchos romaníes prefieren mantener sus orígenes en secreto para no enfrentarse a los prejuicios y rechazo de los payos. Otros intentan hacerse oír y reclaman su herencia y soluciones a los problemas a los que se enfrentan en el siglo XXI, incluyendo la violencia racista en Europa Oriental y el pago de reparaciones por las persecuciones que sufrieron durante el Porrajmos, el Holocausto romaní.