[Recurso] Personajes Pregenerados de 5ª ed.

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El otro día entró un nuevo usuario al foro comentando lo bien que le vendrían personajes pregenerados para su partida de Vampiro 5ª y es cierto que pregenerados hay cientos de las ediciones anteriores y no son difíciles de adaptar, pero hay pocos escritos con las reglas de 5ª en la mano. Así que, abro este hilo por si alguien se anima a crear o subir sus personajes jugadores, empezaré yo mismo.


PROFETA LASOMBRA

Este hombre nació en una de los peores suburbios de Roma y creció como un actor de segunda, mendigando y malviviendo para salir al paso día tras día. Llegó a viejo completamente desgastado por la vida y a sus 50 años parece un anciano. Pero algo se cruzó en su vida, una manada Sabbat que le abrazó como carne de cañón, El Profeta sobrevivió al combate y acabó siendo aceptado en la secta. Diez años después de aquello, era el vampiro más antiguo de su manada, su experiencia en sus largos años mortales le ayudó a sobrevivir allá donde los más impetuosos neonatos se arrojaban temerariamente a la refriega. Participó en la Cruzada de la Gehenna y volvió terriblemente cambiado, guardando el terrible secreto que aún le persigue.

Poco después su clan decretó la deserción del Sabbat y, desde entonces, lucha por hacerse un hueco en la Camarilla. Su experiencia como actor y buscavidas le ha valido para convertirse en el cabeza de un culto a Caín que gana cada vez más influencia y adeptos entre los suburbios de la ciudad. Ahora que la Camarilla ha abierto sus puertas a la Fé, los cainitas son cada vez visto como una casta sacerdotal. No obstante, a veces es difícil olvidar el salvajismo y los traumas durante su período en la Espada de Caín. La lucha por recuperar la propia Humanidad es constante y un duro esfuerzo.

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MAFIOSO TOREADOR

A veces los pecados de una vida no se pueden borrar. El mafioso huye de su pasado en otro mundo, en otro país, habiendo participado en el saqueo y contrabando de obras de arte incluso siendo mortal. Abrazado por su conocimiento de la pintura, más que por su talento, el mafioso creció siendo una despreciable marioneta de su sire, intentó cortar los hilos tan pronto como pudo y así comenzó su huida. Actualmente ha conseguido establecerse en un dominio, lejos de su alcance, donde se ha convertido en un poderoso mecenas del movimiento anarquista y en un conseguidor de mercancias ilegales, drogas y suministros. Los errores de su pasado le siguen persiguiendo, pero se ha cansado de huir, ha encontrado en esta ciudad algo por lo que dar la cara, una amante, una causa y está dispuesta a defenderla.

El mafioso tiene un aspecto elegante y cuidado, sobre todo entre los círculos anarquistas que se mueve. A veces viste caras chupas de cuero y símbolos soviéticos para mezclarse con la chusma, pero aun así, los viste con atención al detalle, como si fueran disfraces. Su habla es lenta y suave, su aspecto ligeramente atractico. Detesta ensuciarse las manos y empuñar un arma, prefiere que sus matones se ocupen de ello, pero está dispuesto a matar cuando es necesario.

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INVESTIGADOR VENTRUE

Desciendes de un gran linaje de arcontes, el sire de tu sire fue Justicar, incluso. Como mortal, dediscaste tu vida a alcanzar la cima, nacido en una familia aristocrática de tradición militar, te alistaste en cuanto tuviste la edad y alcanzaste el rango de Capitán. Serviste en la guerra y, cuando estuviste preparado, tu sire te alistó en el mayor cuerpo de élite que existe, la Camarilla. En el brazo armado de la Camarilla realizas todo lo que se te ordena, esperando ser reconocido algún día con el título de arconte, tienes paciencia, cumples con tu deber, vives para servir y crees que estás al lado correcto de la Ley. Pero tu mayor temor, un miedo que anida en tu interior, es no estar a la altura y que la fachada de seguridad en tí mismo que muestras se desmorone. Temes no alcanzar jamás el renombre que la sangre de tus venas exige y, si no lo haces, no sabes qué será entonces de tu vida.

Eres un tipo profesional, metódico y conservador. Tu aspecto parece el de un agente, a veces demasiado rígido e inflexible. Como firme defensor de las Tradiciones, lo que más desprecias son los Anarquistas, incluso el Sabbat tiene una jerarquía, pero ellos no son más que escoria rebelde. Crees firmemente en la superioridad de tu sangre azul, los Ventrue son el corazón de la Camarilla, además de un honor, es un deber y una responsabilidad. Nobleza obliga.

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LA INFILTRADA GANGREL

Nací en un suburbio de Irlanda, en los peores años del IRA, naranjas y verdes regaban las calles con su roja sangre, la vida era barata, no valía nada, podías morir en cualquier momento, incluso en la Iglesia, nadie estaba a salvo. Mi familia fue asesinada y el odio enraizó en mi corazón, odio por mis hermanos, odio por mi país, odio contra Dios por haberles dejado morir de aquel modo. Fue entonces cuando me alisté y fue reclutada, solo que por un ejército distinto del que yo esperaba, la Espada de Caín. Aquellas décadas de guerrilla fueron mi bautizo de fuego, destrozaba a mis víctimas con salvajismo, con una canción en los labios.

Me convertí en una cainita, en una guerrera de la Yyhad y en una experta en infiltrarme en las líneas enemigas y acabar con las coteries Camarilla desde dentro. Mi última misión debía ser una una célula anarquista, debía infiltrarme, acabar con su líder y conducirlos a una emboscada, pero entonces perdí el contacto con mi manada de origen. El Sabbat se desvaneció sin dejar rastro, me abandonaron y ahora he quedado a mi suerte, en medio de una misión que ya no importa y defendiendo unas ideas que me son indiferentes.

De aspecto endurecido, la infiltrada parece una curtida veterana de la guerra de sectas, sus ropas son prácticas, su pelo corto y el tatuaje de un lobo rematan la impresión de depredadora que visten sus ojos. Camina como un chacal, en silencio, acechando, una sombra inquietante para aquellos miembros de la secta con tendencias más humanitarias.

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MADRE MALKAVIAN

Nací en un país africano, mis padres murieron antes de que mis hermanos y yo fuéramos mayores y tuve que encargarme de los pequeños. Llevo siendo la madre de alguien desde que tengo uso de conciencia, conseguir comida, alimentar a los pequeños, enterrarlos cuando mueren. Yo misma he estado a punto de morir en numerosas ocasiones, hambre, enfermedades, violencia. Hubiera sido así si no fuera por aquella criatura nocturna que me convirtió en un monstruo inmortal. Desde entonces sigo cuidando de mis niños por la noche y ellos cuidan de mí durante los días, le doy mi sangre porque les mantiene fuertes, lleva siendo así desde hace 20 años. Mis pequeños siempre serán mis pequeños. Necesito dinero para mantener el orfanato, necesito sangre para alimentarles, ellos necesitan mi protección. El mundo es peligroso ahí fuera, mientras estén conmigo, no les pasará nada.

La madre es una malkavian de mediana edad y una atractiva piel oscura. Siempre está rodeada de ghouls niños, que tienen cada uno varias décadas de edad y son más peligrosos de lo que parece. Habla con candor, con dulzura, salvo que amenacen a tu familia, momento en el que la Bestia sale a la superficie. Tus ropas son amplias, baratas y cómodas, en ellas escondes un biberón lleno de vitae.

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DRUIDA TREMERE

Antes de ser inmortal tenía una vida mejor, era un despertado, capaz de moldear la realidad a Voluntad. Era capaz de escuchar la voz de la Tierra y esta alimentaba mis poderes y llenaba de vida mis pulmones. Era un poderoso brujo y tenía numerosos seguidores en los pequeños pueblos que frecuentaba. Vivía en la naturaleza, con contacto con los bosques, con la luz y el agua. Todo eso se acabó. Ahora estoy muerto, un resucitado más en la Casa Tremere, lo he perdido todo. Mi sire quería mi influencia en el culto y mis conocimientos de hechicería espiritual, conocimientos que se volvieron inútiles la noche en la que fallecí. He perdido la conexión con mi Avatar, mi cuerpo ya no respira, no puedo contemplar la luz y me veo obligado a parasitar a las comunidades a las que antes ayudaba.

Estoy lleno de rencor y odio hacia el clan, hacia mi sire, hacia los vampiros. He oído hablar de la Golconda, del renacer como humano, haré todo lo posible por alcanzarla, mientras tanto, no tengo más remedio que alimentarme de mis seguidores y seguir realizando los rituales con la ayuda de mi magia de sangre. Las anarquistas me cuentan entre los suyos, más por desprecio a mi clan que por querer tumbar a la Camarilla. Pero, si pudiera, reduciría hasta el último Tremere a cenizas.

El druida viste con ropas sacerdotales, cargando con numerosos abalorios de significación ocultista. Su rostro engañosamente moreno parece esconder que ahora es un no muerto y, por encima de todo, odia serlo. Su desprecio por sí mismo solo está a la altura del que siente por el Clan Tremere.

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SABUESO BRUJAH

Ibas a ser un político importante, sindicalista, de izquierdas, pero el día que ganaste el asiento de diputado te diste cuenta del precio. Cohecho, sobornos, te viste involucrado en una maraña de corrupción que salpicaba a todo el partido y que tú ocultaste. ¿Cuál era la alternativa, ocho años de gobierno de la derecha? Hiciste lo que debías, callarte, renunciaste a tus ideas y una parte de ti cambió, murió. Alguien vio como un mes tras otro te encargabas de limpiar los trapos sucios del partido y te asesinó. Resucitaste como un no muerto, sin familia, sin partido, como un vampiro, como un no-muerto.

Eres uno de los pocos Brujah que quedan en la Camarilla, aspiras a convertirte en Primogénito de un clan que apenas reconoce el título, pero eres consciente de que un cargo así te abriría muchas puertas. Mientras tanto, te tragas tu orgullo e indignación y haces lo mejor has hecho siempre, limpiar la mierda de otros. Con frecuencia te envían a tapar infracciones de La Mascarada, pero a veces has llegado a eliminar testigos y progenie no autorizada, eres un Sabueso, un agente del Sheriff. Compras la sangre porque detestas cazar o correr el riesgo de perder el control.

Vistes con un traje pasado de moda, pero al contrario que la mayoría de tu clan, tu aspecto no llama la atención. Una barba descuidada y una corbata roja sobre el cuello abierto delatan una pizca de inconformismo. Tu voz trata de ser calmada, mostrando una frialdad impresionante entre los otros Brujah, manteniendo a la bestia bajo control. Pero no siempre lo consigues, a veces, simplemente, se te va de las manos.

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MATÓN NOSFERATU

Partir piernas, romper rodillas, el trabajo de matón a sueldo requiere de discreción, no hacer preguntas y ensuciarse las manos. Alguien te sacó de allí y se ha convertido en tu jefe, sire y mentor, un ser asquerosamente ladino que necesitaba músculo para imponer llevar a cabo sus intrigas. Ya eras una mole músculo antes del abrazo, un hombre retorcido y violento, el abrazo no ha cambiado lo que eras, lo ha resaltado.

Ahora partes huesos y rodillas igual que antes y eres todavía más retorcido y monstruoso, tu bestialidad se deja ver. Aunque en el fondo, oculta a la vista de todos, solo esperas ser aceptado. No disfrutas con tu trabajo, no eres un sádico, haces lo que debes para salir adelante y sueñas con algún día cambiar de vida, un sueño imposible.

Eres enorme, una gabardina desgastada apenas es capaz de contener tu cuerpo, resultas intimidante incluso sin proponértelo, un aura de peligrosidad te rodea. Tu rostro cuajado de cicatrices es horrible, tus años como boxeador dejaron huella, tu nariz partida y dientes rotos se ven resaltados por el aspecto cetrino de tu piel verdosa.

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MERCENARIA HÉCATA

Incluso como mortal, naciste en el culto a la Madre Oscura, estabas marcada. Tu infancia y adolescencia fue un duro periodo de aprendizaje entre el resto de Bahari del templo, situado al sur de Grecia. Cuando estuviste preparada, fuiste iniciada en los misterio de Lilith y enviada a imponer su ley, cuando era necesario, por la fuerza. Con el tiempo te ganaste el abrazo y fuiste elevada en la no-muerte, convertida en una de las elegidas de la diosa, en un instrumento de su venganza. Los ritos Bahari eran todo tu mundo, eran todo lo que conocías.

Todo cambió el día en el que los cainitas lanzaron su ataque, más de una docena de vástagos en cada bando encontraron la muerte definitiva aquella noche, pero tú fuiste la última en quedar en pie. Quizás no la más fuerte, pero sí la última superviviente. Ahora te debates entre restablecer contacto con la orden o empezar una nueva vida, lejos de las Bahari, lejos de la guerra que estuvo a punto de acabar contigo. Tu fé en la Madre Oscura se reesquebraja. Por el momento, vendes tus servicios como mercenaria al mejor postor.

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AGITADORA MINISTERIO

En vida luché por una causa, los derechos de los inmigrantes ilegales y los oprimidos en una sociedad que los aplasta o les da la espalda. Llegué a este país escondida en un camión y no tardé en darme cuenta de que no era el paraíso que nos habían vendido, nos explotaban, nos perseguían, nos mataban. Lideré una revuelta entre los míos, cuando no tienes nada que perder, te da igual todo. Echamos las puertas de la comisaria abajo y escapamos, algunos murieron, los llamamos mártires. Desde entonces encabezo la lucha por los derechos de mi minoría, cada mejora que hemos conseguido ha sido a base de quemar las calles, no vamos a detenernos.

Entonces me asesinaron. Renací entre el Ministerio, ahora soy un manipuladora inmortal, mi corazón ha dejado de latir, pero sigo defendiendo la causa de mi pueblo. Entre las élites conservadoras también hay vampiros, gordos y complacientes, atiborrados de sangre. Los echaremos a patadas de su trono, tumbaremos la Camarilla y un nuevo orden comenzará. Cada amanecer, cuando vuelvo a mi refugio, recuerdo el rostro de mi familia, dejada atrás. Sé que no puedo volver a buscarla, mi sitio esta aquí. Pero la desesperación por saber cómo están comienza a consumirme. Tan rodeada de gente y seguidores como estoy, me encuentro completamente sola.

De aspecto atractivo, la agitadora es una mujer de piel oscura y rostro curtido por el viento. Sus ropas tienen tonos africanos, resaltando la herencia cultural de su país de origen. Su mirada a veces parece vacía, absorta en sí misma, pero cuando habla de la causa es cuando cobra vida.