EL FEUDO DEL ULSTER
PRESENTACIÓN
El Feudo del Ulster abarca todo el territorio de Irlanda del Norte, aunque en tiempos antiguos sus fronteras eran más difusas. En cierto sentido, se convirtió en un territorio de refugiados, primero para los vampiros que perdían ante la llegada de las sucesivas oleadas de invasores y posteriormente para los Vástagos anglonormandos y protestantes, rechazados y expulsados de otros dominios por los Vástagos irlandeses. Las antiguas rencillas se entremezclaron con otras más recientes.
De esta manera, los Vástagos del Ulster reflejan los conflictos que han afectado a la región, y de los que el reciente conflicto entre católicos y protestantes sólo ha sido el más reciente. La violencia sectaria ha servido como pantalla para otros conflictos sobrenaturales, e incluso los manipuladores más expertos se han visto arrastrados por enemistades que poco o nada tenían que ver con ellos.
Recientemente parece que la Estirpe del Ulster ha encontrado algo parecido a la paz, o mas bien, una tregua. Los supervivientes se alzan y preparan las armas en las Noches Finales, escribiendo una nueva batalla en una Yihad con raíces en las leyendas. Aunque como en el Feudo de Connacth los Vástagos del Ulster se enfrentan a una reconstrucción, los enfrentamientos internos por el poder parece que no cesan...
TEMA Y AMBIENTE
Tema: Nombres falsos. Pocas cosas son lo que parecen entre los Vástagos del Ulster, y muchos de ellos adoptan nombres falsos o reclaman un falso legado a la hora de justificar sus acciones. En este juego de identidades el nombre de otros se utiliza para derramar sangre, o para engañar a los incautos. Aunque las facciones parezcan consolidades, el doble juego y los manipuladores ocultos están al orden del día. Las sonrisas amistosas se convierten de un momento a otro en puñales por la espalda.
Ambiente: El conflicto entre católicos y protestantes en Irlanda del Norte ha causado un eco internacional y se ha extendido a la cultura popular. Barrios divididos, murales patrióticos, desconfianza y sectarismo han estado presentes durante décadas, incluso siglos, entre la población norirlandesa. Aunque los acuerdos de Viernes Santo han dado una oportunidad a la paz, las viejas tensiones siguen soterradas, quizás esperando un motivo para estallar.
TRASFONDO HISTÓRICO
El territorio del Ulster ha estado ocupado al menos desde la Edad de Hierro. Varios fuertes y pueblos se extendían por el territorio y vampiros de diversos clanes se enfrentaban por el dominio de las tribus locales. Un antiguo del clan Nosferatu, conocido simplemente como Miles (el soldado), llegó en algun momento antes de Cristo y creó una prole para enfrentarse a otros Cainitas, que lo habían rechazado de los dominios del sur. Al contrario que otros linajes, los Nosferatu no fueron aceptados en el orden prerromano, ganándose la reputación de adorar a dioses malignos y practicar el canibalismo. Por su parte, los Nosferatu procuraban permanecer apartados de los demás clanes, pero reaccionaban ferozmente si se veían acorralados. Miles instaló su refugio en un pequeño pueblo en la confluencia de los ríos Lagan y Farset. Durante el siglo VII se había construido un asentamiento fortificado, que recibía el nombre de Belfast.
En el año 1177, durante la invasión normandad e Irlanda, John de Courcy consiguió tierras al este del Ulster, incluyendo Belfast. John ordenó la construcción del castillo de Belfast y el castillo de Carrickfergus. Su hermano Robert fue Abrazado por un antiguo Ventrue. Sin embargo, no se declaró Príncipe, sino que reconoció el dominio del antiguo Miles y los Nosferatu, a cambio de su protección y buena voluntad. Los demás clanes, incluyendo otros Ventrue, que desconocian el pacto, se mostraron intrigados. Sin embargo, Robert de Courcy pudo establecerse en Irlanda sin la amenaza que sufrían otros Cainitas normandos.
Más atrevida fue Eileen, una Cainita irlandesa del clan Brujah, que se proclamó Baronesa del Ulster. Para consolidar su dominio pagó tributo al Príncipe Mithras de Londres, entrando en conflicto con los Nosferatu. Eileen creó una prole en el Ulster, y reclutó mercenarios del clan Gangrel. A Miles no le gustó nada esa interferencia en su territorio, pero poco tiempo después caía en letargo.
Durante la Edad Oscura, la Baronesa Eileen y sus partidarios Brujah y Gangrel se enfrentaron a Robert de Courcy y sus partidarios Nosferatu y Ventrue. Las intrigas y batallas se recrudecieron hasta el despertar del anciano Miles en el siglo XIII. Miles apareció una noche conocida como La Noche de la Luna Nueva, y cayó sobre Eileen y sus partidarios, proclamándose Príncipe del Ulster. Gobernó con puño de hierro y ningún otro Cainita se atrevió a enfrentarse a su dominio hasta que Dermod, del clan Brujah, decidió vengar la muerte de la Baronesa Eileen y decapitó a Miles, planeando unificar todos los dominios de Irlanda bajo su autoridad. Sin embargo, poco tiempo después Dermod caía en un enfrentamiento con Magda, una anciana Lhiannan. Los Cainitas del Ulster, dirigidos por Milesius, un chiquillo de Miles, aprovecharon para rebelarse y el dominio cayó en el caos.
En el año 1315 Edward Bruce, hermano del rey de Escocia, desembarcó en el Ulster y tomó Belfast, algunos clanes y nobles le juraron fidelidad y lo reconocieron como rey de Irlanda, pero sus ambiciones fueron detenidas con su derrota y muerte en la Batalla de Faughart en 1318. El castillo de Belfast, que habia sido destruido, fue reconstruido.
El dominio del Ulster se convirtió en un campo de batalla durante las Guerras Anarquistas. En general, los Brujah y Gangrel del sur de Irlanda se enfrentaban a los Nosferatu y Ventrue del norte. Durante esta época Milesius y Robert de Courcy lideraron a los Cainitas del dominio, y ambos cooperaron sin llegar a proclamarse Príncipes. Los Cainitas del Ulster se encontraban a la defensiva, y a medida que pasaba el tiempo recibieron a varios vampiros de origen anglonormando que habian sido expulsados de otros dominios irlandeses por los Anarquistas. Entre ellos se encontraba un antiguo Malkavian llamado Malcolm.
Finalmente, durante el siglo XV, Milesius tomó la iniciativa y contactó con la Camarilla. El apoyo de la secta permitió a los Vástagos del Ulster conseguir aislar a sus adversarios y rechazar sus ataques. En el año 1485, Malcolm por los Malkavian, Milesius por los Nosferatu y Robert de Courcy por los Ventrue realizaron un pacto por el que proclamaban a Geároid O'Shae, un chiquillo de Robert, como Príncipe del Feudo del Ulster.
El castillo de Belfast fue destruido y reconstruido en varias ocasiones durante el siglo XVI, debido a los sucesivos conflictos. Hasta el siglo XVI la mayor parte de las tierras de los alrededores en manos del clan irlandés de los O'Neill, pero la corona de Inglaterra, en manos de la dinastía Tudor, tomó medidas para ejercer su poder sobre el territorio. En el año 1573, Walter Devereux, conde de Essex, emprendió una expedición para pacificar la zona, ejecutando a varios líderes locales. Sin embargo, los irlandeses del Ulster se rebelaron en 1597, devastando la zona.
A pesar de los conflictos de la conquista de los Tudor, los Vástagos del Ulster permanecieron unidos entre ellos. Utilizaron a las guarniciones inglesas para atacar a sus enemigos, y debilitaban sus apoyos. Los Nosferatu, especialmente, realizaban sabotajes y asesinatos, pero la rebelión de 1597 escapó por completo a sus previsiones, y varios Vástagos del Ulster fueron destruidos en los disturbios. El Príncipe Gearóid y los Ventrue estrecharon sus vínculos con Inglaterra, pero preferían no depender de la ayuda de Mithras. Robert de Courcy y Eginardo, un antiguo Ventrue, actuaban como consejeros y diplomáticos, buscando atraer nuevos apoyos contra el Feudo de Connacth, que durante esta época se consolidó como el principal rival de la Estirpe para alcanzar la hegemonía en Irlanda. Sin embargo, a pesar de su población de Vástagos, Belfast seguía siendo una población reducida, formada principalmente por ingleses, escoceses y maneses. La cercana Carrickfergus tenía una población mayor.
Durante el siglo XVII el Príncipe Geároid utilizó sus apoyos para incrementar la población de su dominio, al mismo tiempo que apoyaba la llegada de colonos protestantes. La ciudad recibió una corporación y privilegios, pudiendo enviar representantes al parlamento. En 1640 Belfast adquirió los monopolios comerciales de Carrickfergus, desviando el comercio y la llegada de colonos. Muchos de los recién llegados eran protestantes.
La Estirpe de Belfast era reducida, pero contaba con muchos apoyos en las tierras de los alrededores. El Príncipe Gearóid también supo canalizar a los descontentos hacia el Príncipe Séamas de Dublín, buscando provocar una reacción que permitiera denunciarlo a la Camarilla. Entre los colonos protestantes llegaron varios Vástagos del clan Ventrue, pero también varios representantes de la familia Dunsirn, vinculada al Clan de la Muerte. En principio su presencia pasaría desapercibida durante décadas. Oficialmente, la familia no haría conocida su presencia hasta el siglo XVIII.
Durante la guerra civil inglesa, los católicos del Ulster aprovecharon el conflicto para rebelarse en 1641. Los rebeldes tuvieron un éxito rápido para la rebelión rápidamente generó en una confusión y masacres contra los protestantes. Estos actos fueron vengados por británicos y escoceses. Miles de colonos británicos fueron expulsados de sus casas o asesinados. Sólo Lisburn, Derry, Enniskilly Belfast resistieron a los rebeldes. El parlamento escocés envió ayuda al Ulster para acabar con la rebelión, y muchos de estos soldados se asentaron en Belfast.
La rebelión de 1641 fue bien aprovechada por el Príncipe Séamas de Dublín para acabar con sus rivales, y el Príncipe Gearóid de Ulster apenas consiguió escapar de un atentado. Sin embargo, era la ocasión que aguardaba. Envió cartas y evidencias al Justicar Severus, del clan Ventrue, y gracias a sus diplomáticos (entre los que se encontraba su sire Robert y el cronista Eginardo), consiguió atraer al Justicar a su favor. Séamas fue depuesto, y Dublín quedó bajo la ley de la Camarilla, hasta que se nombró a Elizabeth Bendish como Príncipe.
Milesius y el Príncipe Geároid enviaron a sus propios agentes para establecer su dominio sobre la ciudad. Sin embargo, de los antiguos de Belfast, sólo el antiguo Malcolm se trasladó a la ciudad. El Príncipe Geároid se sentía más seguro en Belfast, y hasta cierto punto se sentía ligado al mismo. No obstante, esperaba que con el tiempo conseguiría convertir a su ciudad en la capital de Irlanda. Con un gobernante débil en Dublín, y con los antiguos de la Estirpe en su favor, podía dedicarse a engrandecer el Ulster.
El Príncipe Geároid aprovechó las medidas británicas para pacificar la isla y establecer la supremacía de los protestantes en su favor. Los clanes Nosferatu y Ventrue lo respaldaban, y aunque había algunos Vástagos católicos en su dominio, no mostraron un descontento excesivo, o preferían trasladarse a otros dominios más hospitalarios.
Durante la guerra entre Guillermo de Orange y Jacobo II de Inglaterra, Belfas cambió de manos en dos ocasiones. El ejército católico de Jacobo II tomó la ciudad en 1689 sin lucha, pero ese mismo año el ejército protestante de Guillermo de Orange obligó a las fuerzas de Jacobo a retirarse de la mayor parte del Ulster. Muchos soldados contrajeron la disentería, y Belfast se convirtió en un gran hospital, en el que murieron más de 3.500 enfermos. Varios Vástagos, especialmente los Nosferatu, se alimentaron de los moribundos.
Guillermo de Orange llegó al Ulster en 1690, y derrotó decisivamente a Jacobo II en la Batalla de Boyne, con el apoyo de los protestantes del Ulster. Sin embargo, en Irlanda la guerra continuaría un año más. Tras la guerra se implantaron leyes penales duras para someter a los católicos irlandeses, y que permitieron el ascenso social de los protestantes.
El siglo XVIII fue un gran período de prosperidad para Belfast, como ciudad comercial, aunque los campesinos del Ulster sufrieron elevados impuestos y desahucios de sus tierras, además de los periódicos efectos de sequías y heladas.
Sin embargo, para el Príncipe Gearóid no era suficiente. Ambicionaba convertirse en Príncipe de toda Irlanda, y en verdad su influencia se extendia sobre toda la isla, pero los Vástagos de Dublín, se resistían a aceptar su autoridad. Ni siquiera sus aliados tradicionales, los antiguos Nosferatu y Ventrue, se mostraban dispuestos a aceptar sus planes, temiendo que tanto poder en manos de un solo Vástago terminara eclipsando el suyo.
Antes de que estallara un enfrentamiento interno, el regreso de los Anarquistas distrajo la atención de Gearóid. El Príncipe Séamas de Dublín había huido a Escocia, y ahora, como James el Rojo, fomentaba la inestabilidad entre los Vástagos más jóvenes, y muy especialmente entre los católicos, que al igual que sus contrapartidas mortales sufrían la opresión de los protestantes. Hacia 1740 algunos Anarquistas Brujah y Gangrel participaron en varias revueltas campesinas provocadas por los problemas de subsistencia, y aunque fueron fácilmente rechazados, poco a poco comenzaron a convertirse en un problema real.
En 1789 el “Belfast Telegraph” publicó una editorial elogiando la Revolución Francesa y sus ideales, y un año después comenzaron a formarse grupos políticos que apoyaban a los revolucionarios, y que pedía una revolución similar en Irlanda. Se formó la Sociedad de los Irlandeses Unidos que pedían la independencia y el fin de la discriminación religiosa. Sin embargo, con el comienzo del Terror en Francia, la sociedad se dividió entre quienes condenaban la violencia y seguían apoyando la Revolución. El gobierno británico, temiendo una insurrección, proclamó la ley marcial y comenzó a desarmar los pueblos del Ulster. Muchos Irlandeses Unidos fueron arrestados. Las duras medidas del general Ralph Abercromby terminaron provocando la temida rebelión en 1798, que fue rápidamente aplastada.
El Príncipe Gearóid del Ulster veía la mano de sus enemigos en las actividades de los revolucionarios, y en gran parte así era. Como había hecho en el pasado, apoyó varias medidas de represión. Sin embargo, James el Rojo simplemente utilizó los disturbios y la rebelión para distraer al Príncipe. En 1798 reunió a su prole y lanzó un ataque directamente contra el Príncipe, destruyéndolo en una reunión con sus partidarios. Milesius y los Nosferatu también fueron engañados por Thomas Chapman, un chiquillo de James el Rojo que se sacrificó para distraer su atención mientras su sire y sus hermanos destruían al Príncipe.
Sin embargo, a pesar del golpe de efecto, James el Rojo no consiguió unificar a los Vástagos de Irlanda bajo su estandarte, como era su propósito, y durante los años siguientes se libraron una serie de batallas encarnizadas entre la Estirpe irlandesa. James el Rojo fue destruido en Dublín, y varios de sus chiquillos, que habían permanecido en el Ulster, fueron cazados uno tras otro, con la ayuda de Vástagos llegados de Londres. En 1800 Caitlin O'Shae, la chiquilla más antigua del Príncipe Gearóid, fue proclamada Príncipe del Ulster con el apoyo de Milesius.
El nombramiento de la Príncipe Caitlin ocasionó cierta división entre la Estirpe del Ulster, especialmente entre los Ventrue. Muchos veían que el antiguo Milesius era el verdadero poder tras el trono. Por otra parte, el Primogénito Robert de Courcy, que había resultado herido durante la guerra contra los Anarquistas, se había hundido en el letargo. Los Sangre Azules del Ulster se encontraban en una posición de debilidad, pero al mismo tiempo no estaban dispuestos a recibir la “ayuda” y tutela de los Ventrue de Londres.
La rebelión irlandesa supuso la reorganización de Gran Bretaña e Irlanda en el Reino Unido. El parlamento irlandés fue abolido, y sus representantes enviados al parlamento británico. Por su parte, los protestantes, aunque desconfiaban al principio, terminaron apoyando la unión, que les beneficiaba económicamente. Durante el siglo XIX Belfast se convirtió en la principal ciudad industrial de Irlanda, produciendo lino, maquinaria pesada, tabaco e industria naval, protagonizada por la compañía Harland y Wolff, una de las mayores empresas de ingeniería naval del mundo. Emigrantes de Irlanda, Escocia e Inglaterra acudieron al Ulster, lo que ocasionó ciertos estallidos de violencia entre católicos y protestantes.
Durante el siglo XIX Milesius y Caitlin O'Shae gobernaron conjuntamente Belfast. La Príncipe era consciente de que el apoyo de su compañero era necesario para mantenerse en el poder, no sólo ante la rivalidad del Feudo de Connacth, dirigido por la Príncipe Elizabeth Bendish, del clan Toreador, sino ante la presión de los Ventrue londinenses. El Primogenito Robert de Courcy despertó hacia el año 1820, pero no desaprobó los actos de su descendiente, dedicándose a sus negocios pero interfiriendo poco en el gobierno en el gobierno del Ulster. De hecho, mediante la adquisición de terrenos por toda Irlanda contribuyó al apoyo de sus compañeros irlandeses.
En este período, la familia Dunsirn también realizó negocios con la Estirpe de Dublín. Los Vástagos de la Camarilla y los banqueros escoceses llegaron a acuerdos para no estorbarse en sus inversiones, y a cambio los Dunsirn se comprometieron a que ninguna otra facción interfiriera. La familia en especial, concentró sus inversiones en la industria naval. Annabella Dunsirn era la solícita matriarca, y se convirtió en una presencia asidua en los salones de la Principe del Ulster.
Durante la Gran Hambruna de 1845 muchos campesinos emigraron a Belfast, donde los hospitales de la ciudad estaban a rebosar y los periódicos protestaban contra el gobierno británico por no ser capaz de ayudar al pueblo que moría en las calles. A pesar de la hambruna y una epidemia de cólera la ciudad continuaba su crecimiento, ampliando los canales del puerto y recibiendo en 1849 la visita de la reina Victoria. La tierra extraída de los canales fue utilizada para construir una isla artificial, la Isla de la Reina, cerca del este de la ciudad.
La Príncipe Caitlin O'Shae estableció varios acuerdos con los Ventrue de Londres, que favorecieron las inversiones en la ciudad. Por su parte, Milesius y los Nosferatu supervisaron las obras arquitectónicas, construyendo varios refugios para su clan. Las Ratas de Cloaca no veían con buenos ojos los acuerdos con Londres, previendo con razón que terminarían endeudando el Feudo y recibiendo interferencias de los Vástagos británicos. Por otra parte, durante este período, varios Brujah y Gangrel se establecieron en la periferia de Belfast, pero los Nosferatu a menudo los hacían desaparecer, temiendo un brote de Anarquistas.
Belfast se estaba convirtiendo en un gran puerto comercial, superando a Dublín en tamaño y valor económico. Sin embargo, la prosperidad se veía enturbiada por los periódicos enfrentamientos entre católicos y protestantes, que con demasiada frecuencia degeneraban en heridos y destrozos. Los disturbios fueron especialmente intensos en 1857 y 1864. Los conflictos comenzaron a ir más allá de las diferencias religiosas, entre los católicos, que deseaban más autonomía para Irlanda, y los protestantes, que defendían el Reino Unido y se negaba a la creación de un parlamento irlandés.
Con la expansión de la ciudad, la Príncipe Caitlin buscó nuevos apoyos, alcanzando un acuerdo con el clan Tremere, permitiendo el establecimiento de una capilla en Belfast en 1868. Se nombró Primogénito y Regente del Ulster al Dr. Andrew Mortimer, un médico y cirujano, que pronto se integró con el resto de la Estirpe.
Belfast recibió reconocimiento oficial como ciudad en 1888. En esta época era la ciudad más grande de Irlanda, y el tercer puerto más importante del Reino Unido (después de Londres y Liverpool). A principios del siglo XX en la ciudad se encontraba la mayro fábrica de tabaco del mundo, industrias de té, abanicos y otros productos. El 75 % de la población era protestante y se oponía a la autonomía. Sin embargo, el 75 % del conjunto de la población irlandesa era católica y apoyaba el restablecimiento de un parlamento irlandés. Los unionistas protestantes celebraban a menudo desfiles y manifestaciones para mostrar su fuerza, para hacer frente a las manifestaciones de los católicos. Muchos veían en la autonomia irlandesa una guerra contra los protestantes. Las tensiones y conflictos se incrementaron, formándose milicias. La guerra civil parecía inminente.
A medida que el dominio de Belfast incrementaba su tamaño y poder, los Vástagos del Ulster presionaban a sus rivales, tratando de alcanzar la Hegemonía sobre toda Irlanda. Sin embargo, su labor se veía entorpecida con la creciente interferencia del Príncipe Mithras de Londres, cuyos embajadores sugerían que una unidad de la Estirpe similar a la del Reino Unido sería ventajosa para todos. Se descubrieron varias intrigas de los Vástagos londinenses para derrocar a la Príncipe del Ulster, pero sus partidarios, especialmente los Primogénitos Nosferatu y Ventrue, le mantuvieron su apoyo.
En 1915 la Príncipe Caitlin celebró una reunión de los antiguos del Ulster, en un evento social. A pesar de la vigilancia de los Nosferatu, la reunión fue interrumpida por un atentado con bomba. Varios de los presentes fueron destruidos, entre ellos la propia Príncipe y el embajador de Londres, Thomas Lynch. El Primogénito Milesius resultó herido y cayó en letargo poco después.
El Príncipe Mithras de Londres aprovechó la debilidad del Ulster para enviar a Garreth Blythe, del clan Ventrue, que fue proclamado Príncipe del dominio, respaldado por varios Vástagos ingleses. El Primogénito Ventrue, Robert de Courcy, no asistió a su nombramiento. Poco tiempo después aparecía. Un tiempo después aparecía el antiguo Milesius, quien proclamó que el asesinato de la Príncipe Caitlin era obra de agentes de Mithras y ordenó la retirada de todos los Vástagos ingleses que hubieran llegado después de 1915. Siguieron varios meses de enfrentamiento entre la Estirpe del Ulster, dividida entre los partidarios de Milesius y los del Príncipe Garreth. El Primogénito Robert de Courcy terminó apoyando a Milesius, afirmando que prefería a un Nosferatu libre al mando del Ulster que un lacayo inglés, aunque fuera de su propio clan. Las guerras entre la Estirpe se recrudecieron cuando se descubrió que el Sabbat se encontraba tras los atentados contra los Príncipes de Irlanda, y la guerra se intensificó reflejando los conflictos entre los mortales.
Para evitar la guerra civil entre católicos y protestantes se intentó dividir Irlanda en dos zonas con dos gobiernos distintos. Las conversaciones para encontrar una conciliación fracasaron, mientras ambos bandos se armaban. Irónicamente la economía seguía prosperando. El Alzamiento de Pascua en Dublín en 1916 marcó el estallido del conflicto irlandés. En 1918 los separatistas irlandeses ganaron la mayoría de escaños en Irlanda, aunque no en el Ulster, donde los unionistas mantenían su mayoría. El resultado fue la división de la isla, con parlamentos separados, y con la mayoría protestante del norte consolidando su poder, creándose en 1920 la provincia de Irlanda del Norte dentro del Reino Unido. James Craig se convirtió en Primer Ministro del territorio. Sin embargo, los ataques de los separatistas irlandeses continuarían durante los años siguientes.
Los Vástagos de Irlanda consiguieron una breve unidad en la guerra contra el Sabbat. El Príncipe Mithras se apartó de un conflicto en el que consideraba que no habría grandes ganancias. Abandonado a su suerte, el Príncipe Garreth fue derrocado en 1919 y Milesius tomó el poder, apoyado por Nosferatu y Ventrue. Sin embargo, una vez derrotados los Cainitas, no tardó en reanudar su antigua rivalidad con el Feudo de Connacht, provocando al nuevo Príncipe Donal O'Connor de Dublín, y utilizando su poder para purgar o expulsar a varios Vástagos Brujah y Gangrel del Ulster, partidarios de los separatistas irlandeses.
Los primeros años de Irlanda del Norte estuvieron marcados por la violencia sectaria. Católicos y protestantes se enfrentaron en las calles de Belfast y otras ciudades. Los paramilitares protestanes y el IRA realizaron varios atentados. Se produjeron cientos de asesinatos, incendios y represalias al azar. El rey Jorge V visitó la ciudad en 1921 contra la opinión de sus consejeros, tratando de poner fin a las luchas, pero las treguas y llamadas a la paz resultaron inefectivas. Sólo el estallido de la guerra civil irlandesa en el sur, desvió la atención del IRA y la paz, no exenta de tensiones, regresó a Irlanda del Norte. El nuevo parlamento, dominado por los protestantes, tomó una serie de medidas para reducir la influencia de los católicos. La crisis económica de 1929 también se hizo notar sobre el territorio, generando grandes bolsas de pobreza.
Durante la Segunda Guerra Mundial Belfast fue bombardeada por los alemanes. En 1941 los bombarderos de la Luftwaffe atacaron la ciudad, causando graves daños materiales y humanos. Más de 100.000 personas quedaron sin hogar y su industria resultó gravemente afectada.
El gobierno del Príncipe Milesius fue una época de hierro para la Estirpe de Belfast. La población de Vástagos de la ciudad prácticamente se encontraba reducida a los clanes Malkavian, Nosferatu, Tremere y Ventrue. Los Brujah del Ulster resultaron especialmente afectados, recibiendo acusaciones de Anarquismo, y siendo obligados a huir. Los insultos y ofensas al Príncipe de Dublín eran habituales.
Hacia 1960, especialmente con el comienzo de nuevos conflictos en el Ulster, Milesius mostró más flexibilidad. Sorprendió a todos al renunciar al trono de Belfast en 1970 abdicando en James Valentine, un Ventrue que curiosamente no pertenecía al linaje de los DeCourcy. Pronto quedó claro que era un simple portavoz del consejo de la Primogenitura. Durante esta época el Primogénito Ventrue Robert DeCourcy comenzó a ausentarse con más frecuencia, dejando la gestión de sus intereses en manos de sus descendientes.
Las tensiones y resentimientos entre católicos y protestantes resurgieron ante la discriminación de la población católica y la violencia estalló de nuevo en 1969. El IRA se reformó y lanzó una campaña de atentados en Irlanda del Norte. En respuesta se formaron grupos paramilitares protestantes, y las bombas, los asesinatos y la violencia callejera se convirtieron en un elemento de la vida cotidiana. El ejército británico fue movilizado en el territorio, y el parlamento norirlandés fue disuelto en 1973. La violencia política y la crisis devastaron la economía durante la década de 1980.
La ciudad quedó dividida entre católicos y protestantes, con barrios aislados o en estado de asedio ante el enfrentamiento de sus vecinos. Hubo familias que tuvieron que trasladarse a la fuerza o amedrentadas por el clima de la vecindad. Poco a poco las poblaciones de un bando y de otro comenzaron a igualarse, debido al crecimiento demográfico de los católicos y la migración de los protestantes. Unas 1.500 personas murieron en los sucesivos atentados hasta los Acuerdos de Viernes Santo en 1998 que condujeron a la paz.
En general los Vástagos de Belfast procuraron permanecer alejados de los conflictos, aunque inevitablemente algunos vieron perjudicados sus intereses. La gran mayoría de la Estirpe de la ciudad era protestante de la ciudad o permanecía ajena a los conflictos de religión. Los Nosferatu aprovecharon la clandestinidad para crear un auténtico laberinto que les permitía moverse entre los barrios. Para los Vástagos que visitaban la ciudad, la ciudad parecía una prisión amurallada, en la que todos sus movimientos eran supervisados.
Y entonces en 1996 el Sabbat atacó. Nadie sabe cómo consiguió atravesar las defensas y la vigilancia de los Vástagos de Belfast, pero el Príncipe James Valentine fue asesinado, junto con muchos de los antiguos. Milesius desapareció, y la Estirpe del Ulster quedó dividida y conmocionada. Los supervivientes trataban de permanecer ocultos, y durante meses no se atrevían a relacionarse con otros. La noticia de que el líder del Sabbat, Rafael Molinero, había sido asesinado, proporcionó cierto alivio, y poco a poco la Estirpe del Ulster comenzó a reconstruirse.
POLÍTICA ACTUAL
La ciudad de Belfast ha vuelto a desarrollarse desde los Acuerdos de Viernes Santo, comenzando una regeneración. Sin embargo, la segregación religiosa ha continuado, con ocasionales disturbios callejeos y el aislamiento de las comunidades.
Entre la Estirpe de Belfast también se ha producido un aislamiento. El Príncipe Malcolm, del clan Malkavian, es lo más parecido a una autoridad reconocida, y los demás clanes de la Camarilla lo han aceptado. Sin embargo, entre los Ventrue, tradicionales aliados de los Nosferatu, se ha producido un cambio al haberse unido su Primogénito al Culto de Mithras, que parece haberse asentado en la ciudad.
Por otra parte, la familia Dunsirn, que durante mucho tiempo ha permanecido neutral en la política del Ulster, mantiene un interés renovado en el dominio. Varios vampiros del clan de la Muerte han comenzado a tomar posiciones en los dominios menores y muchos temen que planeen tomar el control completo.