Off Topic
Poco después de despedirse de sus compañeros. La Toreador y el Lasombra iniciarion el breve recorrido hacia la casa en la que sucedió todo. Al llegar visteis una casa, de un tamaño bastante similar a la del resto del vencindario. Salvo por la diferencia de que ésta estaba completamente derruida. A penas quedaba algo del tejado protegiendo la casa de las inclemencias del tiempo. La puerta estaba carbonizada, apenas un trozo se sujetaba por las visagras. Toda la madera estaba completamente enegrecida por el fuego. No había nadie alrededor, o al menos no lo parecía. Por lo que se podría decir que teníais cierta intimidad para realizar vuestro trabajo. Si echaís un vistazo al exterior de la casa, podréis observar que el tronco de un árbol cercano se encontraba ennegrecido y algunas de sus hojas habían desaparecido, probablemente fruto del fuego cercano.
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Una vez llegaron, Dryston se detuvo un rato para observar el exterior. Parecía que había sido un fuego bastante intenso, por poco no se propagó por todo el pueblo. No había nadie más en las cercanías. "Perfecto" pensó el Lasombra. Se levantó un poco la máscara para meter dos dedos en su boca y emitir un chiflido, con una melodía concreta y ensayada. Era la llamada a sus mastines, probablemente necesitarían la ayuda de ambos canes para la investigación, su olfato era muy superior. Mientras llegaban, se dispuso a pasar al interior a través de lo que antes hubiera sido la puerta de entrada, y entonces le dijo a Liv.
- Mis perros serán muy útiles para esta tarea -justo antes de entrar, se detuvo a un lado dándole paso a Liv, con cierta cortesía algo tosca- Las damas primero.
- Mis perros serán muy útiles para esta tarea -justo antes de entrar, se detuvo a un lado dándole paso a Liv, con cierta cortesía algo tosca- Las damas primero.
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Liv mostró un agradecimiento exagerado claramente sarcástico ante tu acto de cortesía. - ¡Gracias! Es usted todo un caballero, mi señor... - soltó un par de risotadas y entró en la casa o lo que quedaba de ella. Pocos segundos después de silvar, notaste una presencia familiar cerca. Los mastines aparecieron de entre las sombras y empezaron a jadear fuertemente mientras se relamían. Cusith tenía las fauces manchadas de sangre y pelaje blanco. Suponías que había tomado un pequeño tentempié mientras esperaba tus órdenes. Garmr se mantenía firme y te miraba atentamente.
La Toreador se movía por el interior sin tocar nada. Observaba atentamente pero se mantenía al margen. Dentro de la estancia habían los restos de una cama de matrimonio, varios armarios chamuscado, una chimenea derruida, una pequeña habitación con otra cama más pequeña, libros quemados por todas partes, restos de ropa. A simple vista no podíais sabes el origen del fuego, pero si que se lo llevó casi todo a su paso.
La Toreador se movía por el interior sin tocar nada. Observaba atentamente pero se mantenía al margen. Dentro de la estancia habían los restos de una cama de matrimonio, varios armarios chamuscado, una chimenea derruida, una pequeña habitación con otra cama más pequeña, libros quemados por todas partes, restos de ropa. A simple vista no podíais sabes el origen del fuego, pero si que se lo llevó casi todo a su paso.
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Mientras Liv merodeaba por el interior de la casa, Dryston se agachó para mirar más de cerca a Cusith. Fauces ensangrentadas y restos de pelaje blanco... ¿Una cabra? ¿Quizá un lobo de las nieves? Fuera lo que fuese, le tranquilizó la idea de que su víctima no había sido un humano... al menos aparentemente. Eso traería problemas...
-Veo que te lo has estado pasando bien, Cusith... -Dryston se levantó y señaló al interior de la casa. Entonces el Lasombra pronunció una serie de órdenes en Aldmeris, uno de los idiomas con los que había entrenado a la pareja de canes- ¡Garmr, Cusith! ¡Ne molag, men!
En cuanto lo escucharon, los mastines se introdujeron en la casa y empezaron a olisquear cada rincón, en busca de una fragancia que resaltase entre el olor a quemado. Alcohol, aceite, perfume, algún componente alquímico... algo que llame la atención de su olfato canino, y que pudiera haberse vertido ocasionando el incendio. Dryston entró tras ellos, y tras observar rápidamente el estado de la casa, decidió inspeccionar directamente lo que antes fue el cuarto de los padres en busca de algo que resultara sospechoso.
Tirada de Dryston:
Zickenrolls 3d10f6 = 0( (1, 2, 9 → 0 successes against 6) ) ones:1 #percepcion+investigacion
-Veo que te lo has estado pasando bien, Cusith... -Dryston se levantó y señaló al interior de la casa. Entonces el Lasombra pronunció una serie de órdenes en Aldmeris, uno de los idiomas con los que había entrenado a la pareja de canes- ¡Garmr, Cusith! ¡Ne molag, men!
En cuanto lo escucharon, los mastines se introdujeron en la casa y empezaron a olisquear cada rincón, en busca de una fragancia que resaltase entre el olor a quemado. Alcohol, aceite, perfume, algún componente alquímico... algo que llame la atención de su olfato canino, y que pudiera haberse vertido ocasionando el incendio. Dryston entró tras ellos, y tras observar rápidamente el estado de la casa, decidió inspeccionar directamente lo que antes fue el cuarto de los padres en busca de algo que resultara sospechoso.
Tirada de Dryston:
Zickenrolls 3d10f6 = 0( (1, 2, 9 → 0 successes against 6) ) ones:1 #percepcion+investigacion
