


Tal y como lo expone Ludwig Schmidt, sociólogo y especialista en análisis de movimientos globales de la Camarilla. Perteneciente al clan de la Rosa y, actualmente, ejerciendo como analista de las ciudades del norte de Europa:
Los Ventrue de Londres siempre han ostentado una posición destacada en la ciudad; así ha sido desde tiempos inmemorables en los que la capital británica fue reclamada por los Sangre Azul. Más allá de los siete meses de gobierno de Andrew Kendall y de los 13 años en los que, coincidiendo con la Segunda Guerra Mundial y la postguerra, no hubo Prínicipe Londres ha sido siempre gobernada por miembros del clan Ventrue... hasta el ascenso de Erika Sallow.
No hay que ser un analista especialmente dotado para deducir que la situación actual no debe gustar mucho a los Sangre Azul, y mucho menos a Harold Moore, primogénito del clan y posible aspirante al trono. Cabe destacar que en este sentido que los rumores circulan por Alemania últimamente y los Lictores del clan empiezan a murmurar que quizás va siendo hora de que Moore se retire y posicionar a alguien con mayor peso para que pueda, en unos años, reclamar el puesto de Príncipe. Incluso suena el nombre de Joshua Pearson, un Tribuno de los Sangre Azul que asentaría al clan en el cargo para luego cederlo a un hermano de clan y retomar sus funciones actuales.
Lo que sí que sabemos es que el concepto de Dignitas está muy presente entre los Ventrue de Londres, incluído Moore; y que respetan las tradiciones del clan con fervor y, hay quien diría, cierto fanatismo. Conocemos, por ejemplo, que hace relativamente poco han empezado un Agoge con uno de los abrazos más recientes (desconocemos su nombre pero en caso de descubrirlo haríamos llegar tal información a nuestros enviados en Londres), lo cual está centrando parte de la atención de los Ventrue de la capital. Al parecer se trata de alguien prometedor, a juzgar por el revuelo que ha levantado en Alemania.
Hay que destacar algo que puede resultar muy importante. Los Ventrue más importantes de Londres, a excepción de Ezra Jones, Guardián del Elíseo, son todos lo que se denomina Olímpicos. Mucho cuidado porque sus juegos pueden ser tan importantes para ellos como un asunto de vida o muerte. Y el problema es que casi nunca se sabe cuál es el terreno de juego para intentar evitarlo.
Por si se diera el caso de que los destinatarios de este informe desconocieran a qué denominan Olímpico los Sangre Azul haré un breve resumen:
Una partida entre Olímpicos puede durar años. Lo primero que hacen es escoger modalidad: hombre contra hombre u hombre contra el mundo. En el primer caso cada Ventrue escoge a un humano y su objetivo es que venza empresarial, económica, política o físicamente al resto de oponentes. Manipulan, invierten y traicionan con la finalidad de que su humano salga victorioso por encima de los demás, aunque muchas veces juegan "a ciegas" y no saben qué humanos han escogido el resto hasta la finalización del tiempo (que pueden ser semanas, meses o años).
En la modalidad de hombre contra el mundo, uno de los Ventrue escoge a un humano y lo hace público, así como un tiempo determinado. Su objetivo es que sobreviva y prospere a pesar de los intentos del resto de jugadores por destruirle, siempre de forma indirecta.
Dicho esto, los movimientos económico recientes de algunos de los Ventrue de Londres nos sugieren, por su extrañeza y falta de sentido empresarial, que los Olímpicos de la ciudad han empezado un nuevo juego. Si es hombre contra hombre u hombre contra el mundo lo desconocemos.
Finalmente me resulta vital destacar a Stephen Grant. Los Ventrue de Alemania hablan de él con cierta admiración a la par que exponen su falta de humanidad. Parece que no tiene ningún interés en la política pero se le tiene como una pieza muy valiosa dentro del gran tablero de ajedrez.