Re: [Recurso] Celebrando la oscuridad
Publicado: 31 Oct 2022, 21:35

Jimmy corría frenéticamente por el almacén abandonado. Lo que parecía un trabajo fácil, se había complicado. Mucho. Él y sus dos compañeros, Hope y Leif habían encontrado un nido de chupasangres y habían decidido atacar durante el día para asegurarse.
Sin embargo, lo que parecía un simple almacén abandonado, se había convertido en una trampa mortal. Leif había sido el primero en morir. El suelo de madera podrida estaba en una situación muy precaria, y los chupasangres lo habían aprovechado en su favor. Las escaleras que descendían a los sótanos habían sido aserradas deliberadamente, y Leif había caído a su muerte en un suelo cubierto de tablones afilados.
A pesar de aquel horrible revés, Hope había insistido en seguir adelante, ahora motivada por la sed de venganza, y tras recorrer el sótano habían encontrado tres cajones escondidos detrás de una estantería. Hope se había abalanzado sobre el primero, estaca en ristre, pero el chupasangres había abierto los ojos y la había atrapado con la mirada. Hope comenzó a gritar como una desquiciada, arañándose la cara y sollozando. Y de repente, los no muertos se alzaron, tambaleantes, sacudiéndose el letargo del día. Dos de ellos cayeron sobre Hope y la devoraron.
Jimmy utilizó su escopeta, pero por algún motivo se había atascado, ante la risa de los chupasangres. Arrojó el arma inútil contra uno de ellos y echó a correr, tratando de alcanzar la salida. Uno de los chupasangres le cerró el paso y tuvo que dar marcha atrás.
Ahora se encontraba acorralado en un rincón, y los tres chupasangres se acercaban anhelantes. Eran criaturas pálidas y escuálidas, de mirada hambriento y con el aspecto de perros rabiosos.
En medio de la oscuridad que lo rodeaba, Jimmy se apoyó contra la pared, y sus dedos se hundieron en la madera desmenuzada y podrida. En ese momento, cuando parecía que no quedaba ninguna esperanza, decidió jugar una última carta. Embistió la pared de madera. Sintió una punzada de dolor en el hombro pero la madera cedió, y la inercia del impulso lo empujó hacia adelante, en medio de una lluvia de tablas podridas, astillas e insectos.
La luz del sol entró por el hueco, alcanzando a los tres sorprendidos chupasangres, que se habían lanzado detrás de Jimmy para impedir que huyera. Sus ojos se abrieron llenos de sorpresa y terror antes de que se convirtieran en cenizas.