Re: Iberia Nocturno XXI aniversario
Publicado: 14 May 2020, 17:30
VENTRUE
Para los Ventrue la península ibérica ha sido un campo de batalla desde hace siglos. Llegaron en época romana para combatir contra los Cainitas de Cartago, y terminada la guerra, conquistaron numerosos dominios, que compartieron con otros clanes.
La caída de Roma y el período visigodo fueron un período de decadencia para los Ventrue romanos, que perdieron terreno ante el empuje de sus enemigos. Su presencia fue reforzada en los inicios de la Reconquista, con la llegada de varios Patricios poderosos llegados de Francia, y de nuevo se encontraban en la ofensiva. No obstante, su poder a menudo se encontraba limitado por el poder de otros clanes, especialmente los Lasombra. Actualmente, aunque siguen siendo un clan importante en la península, a menudo se encuentran superados por otros clanes que se adelantan a la hora de apoderarse de los dominios durante la Reconquista.
Todavía quedan algunos Ventrue de linaje romano, descendientes del antiguo Camillus de Roma, especialmente representados en el Reino de Aragón y Al-Ándalus. Le siguen en importancia un linaje descendiente del antiguo Alexandre de París, especialmente influyentes en el Reino de León. Por último, en las juderías del reino de Aragón se encuentran unos pocos Cainitas descendientes del antiguo Elías, cuya sangre procede de la nobleza del antiguo reino de Israel.
ANASTASIO EL GALLEGO, COMANDANTE DE LA RECONQUISTA
Nacido en el año 970 en la familia de un escudero menor en Ribadeo, Anastasio mostró gran habilidad con las armas desde una temprana edad, y fue enviado a entrenar al servicio del rey Sancho el Gordo de León. Con la lucha constante contra los musulmanes, Anastasio tenía amplias oportunidades de mostrar sus talentos marciales y se convirtió en capitán de caballería cuando sólo tenía veintiséis años. Pero el servicio al rey de León no se pagaba bien, y Anastasio viajó al norte a Francia, a vender sus habilidades a señores con mejores bolsas. Luchando de forma independiente, continuó labrándose una reputación formidable como guerrero, y lo más importante, como líder. Sus tropas no lo abandonaban en momentos inoportunos y nunca malgastaba la vida de sus hombres innecesariamente.
En el año 1006 Anastasio aceptó una oferta del Barón de Aire para ayudarlo en un ataque contra el Obispo de St. Desuna, que disputaba el derecho del barón a llevar sus piaras de cerdos a alimentarse en el bosque que marcaba la frontera entre sus dos posesiones. Aunque esto le pareció a Anastasia una pequeña disputa má entre dos señores feudales menores, la lucha enmascaraba una guerra más sutil y antigua. El Obispo era un peón de Clodauuiva, el Príncipe Lasombra de Dax, mientras que el Barón de Aire era la víctima incosnciente de Henri Beaucaire, señor Ventrue de Pau. Aunque amobs Cainitas enmascaraba su guerra en las batallas entre sus dos clanes para conseguir influencia en Francia, lo cierto es que los dos se habían odiado durante décadas y la escaramuza menor entre sus dos peones era sólo una batalla más en su lugar disputa.
Henri había enviado a un chiquillo a acompañar el ataque, pero había calculado mal, y su chiquillo descubrió demasiado tarde que Clodauuiva estaba al lado de su siervo, y cuando despertó para descubrir que su peón, el obispo, había sido derrotado, se abalanzó sobre el chiquillo de Henri, derribándolo. Sin embargo, en ese momento Anastasio intervino y consiguió clavar una estaca al Cainita mientras bebía del desafortunado Ventrue, y no queriendo arriesgarse a más problemas con lo que creía que era un demonio, hizo que lo quemaran lo más rápido posible. Henri estaba encantado por haberse deshecho de su rival, y cuando Anastasio regresó a Pau, persuadió al mercenario de que aceptara el Abrazo a su servicio.
Henri Beaucaire estaba buscando guerreros en su Francia natal para llevarlos a la península ibérica, donde se había convertido en el principal poder Cainita en el reino de León. Aspiraba a convertir el reino en el principal poder de la península y con los Ventrue al mando. Anastasio se convirtió en su general predilecto, y colaboró con otros chiquillos para extender la influencia del clan con el avance de la Reconquista.
Sin embargo, el Príncipe de León demostró ser demasiado atrevido y terminó siendo destruido en una emboscada de los Ashirra en 1136, debilitando el poder de los Ventrue en el reino. Por aquel entonces Anastasio ya había pasado más de cien años como Cainita, pero realmente el Abrazo no había cambiado mucho su perspectiva sobre el mundo. Siguió prestando su servicio a otros Príncipes y viajó a otros lugares como Inglaterra y Tierra Santa, y sus señores nunca tuvieron motivo alguno para dudar de su lealtad. Aunque Anastasio se ha mostrado independiente, por lo general lucha al servicio de quien mejor pague. Aunque hubiera podido hacerlo, nunca ha reclamado ningún dominio, prefiriendo no encontrarse atado a ningún territorio.
En el año 1205 el Arzobispo Ambrosio Moncada de Madrid le ofreció una paga magnífica por liderar la guerra contra los Ashirra musulmanes en la Reconquista en la Sombra. Aparte de la habilidad indudable de Anastasio, su neutralidad en las disputas e intrigas de los Lasombra y los Amici Noctis es su otra gran virtud. En años posteriores, Anastasio ha actuado para conquistar los dominios de Al-Ándalus y desplazar a los sultanes Ashirra. El Arzobispo ha insinuado que lo apoyaría si quisiera reclamar el dominio de Oviedo en premio a sus servicios, pero Anastasio es consciente de que tiene mucho que ver con la aversión de Moncada por Marbuena, la Príncipe actual, a quien considera una persona débil. Para mantener a su patrón contento, ha establecido un refugio en la ciudad, aunque pasa más tiempo en la frontera sur. A menudo duerme dentro de un cofre de armas reforzado con acero y custodiado por sus fieles ghouls.
Si los Amici Noctis tuvieran idea de cuánta información ha conseguido adquirir Anastasio, puede que no llegara a la próxima noche. De forma similar, si otros antiguos Ventrue comprendieran lo que les oculta, recibiría todavía menos misericordia. Sin embargo, Anastasio es un hombre discreto que prefiere guardarse sus opiniones y luchar en las batallas para las que se le ha contratado, esperando su próximo desafío. Su papel en la reconquista es muy conocido, y tiene el respeto de muchos Cainitas, especialmente debido a su relación con el Arzobispo de Madrid. Que no suela utilizar toda su influencia es considerado una señal de necedad o astucia, dependiendo del punto de vista. En realidad, sólo se atiene a su juicio y su espada; no confía en el Arzobispo de Madrid, pero le permite creer que tiene cierto control sobre él.
Anastasio es la antítesis de un caballero cristiano noble. Es un hombre bajo, moreno y robusto, que se parece mucho a un moro, y algunos Cainitas chismosos han extendido rumores sucios sobre la virtud de su madre. Pero su aspecto oculta gran fuerza, paciencia e ingenio. Normalmente viste con sencillez, con camisa y pantalones, más parecido a un campesino que a un guerrero. Simplemente se asegura de transmitir una apariencia inofensiva y nunca comete el error de subestimar a sus enemigos,
Clan: Ventrue.
Sire: Henri Beaucaire.
Naturaleza/Conducta: Autócrata/Defensor.
Generación: 7ª
Abrazo: 1006
Edad aparente: Mediados los treinta.
Atributos: Fuerza 4, Destreza 4, Resistencia 3; Carisma 2, Manipulación 3, Apariencia 2; Percepción 4, Inteligencia 3, Astucia 3
Habilidades: Alerta 3, Atletismo 2, Esquivar 3, Intimidación 2, Liderazgo 4, Pelea 3; Armas C.C. 4, Equitación 4, Etiqueta 3, Interpretación 1, Supervivencia 3, Tiro con Arco 2; Lingüística 3, Política 3, Senescal 2
Disciplinas: Animalismo 1, Dominación 3, Fortaleza 4, Potencia 2, Presencia 2
Trasfondos: Aliados 5, Criados 5, Influencia 3, Posición 4
Virtudes: Convicción 2, Autocontrol 4, Coraje 5
Camino: Reyes 6
Fuerza de Voluntad: 9
Nota: Anastasio sólo se alimenta de guerreros que hayan derramado sangre.
ELÍAS, SEÑOR DE SEFARAD
Elías nació en una familia judía cuando el reino de Israel estaba ocupado por Egipto durante la dinastía de los Ptolomeos. Su padre pertenecía a la nobleza, aunque era un hombre bueno y humilde que enseñó a sus hijos que la nobleza de la sangre tenía que ser acompañada de la nobleza de los actos, y Elías creció admirando a su padre.
Sin embargo, estalló la guerra entre los Ptolomeos de Egipto y los Seléucidas de Siria, y el padre de Elías marchó a la guerra. Ganaron los Seléucidas y la familia de Elías tuvo que exiliarse con unos parienes que vivían en Alejandría. Elías deseó vengar a su padre, que había muerto en la guerra. Una noche Elías hablaba con unos amigos de sus deseos y cómo lamentaba que la falta de dinero le impidiera levantar un ejército para recuperar el reino de Israel. En la oscuridad de la noche sus palabras fueron escuchadas.
La anciana Nefer, una Cainita milenaria, podía comprender la necesidad de vengar a su padre, pues ella misma había conocido en su momento al gran Horus. Intrigada, observó a Elías durante un tiempo, e incluso se le dio a conocer bajo otra identidad. Cuando Elías quedó postrado en el lecho, consumido por una enfermedad, sólo lamentaba no haber podido hacer que su padre se sintiera orgulloso. La anciana decidió que lo ayudaría.
Estuvo bajo la tutela de su sire durante un tiempo, y ella le habló de la lucha entre los diversos clanes, y la guerra que dividía Egipto entre los partidarios entre el divino Osiris y su hermano oscuro Set, ambos campeones de la luz y la oscuridad. Los descendientes de Set prosperaban en la corrupción, y ahora estaban bebiendo la sangre del reino de Israel bajo la ocupación de los Seléucidas.
Elías viajó a Israel, donde fomentó y apoyó la rebelión de los israelitas contra los Seléucidas. Acompañó presonalmente a los macabeos y tomó servidores entre ellos, para finalmente ayudar a sostener su gobierno. Sin embargo, quedó enfurecido cuando las élites judías comenzaron a intrigar y luchar entre ellos, debilitando el reino de Israel hasta que quedó bajo protección romana. Desde entonces Elías decidió que actuaría al lado del pueblo, rechazando gobernantes indignos.
Contra la ocupación romana se alzó una milicia urbana y campesina que se alzó contra los romanos y los aristócratas judíos que los apoyaban. Aparecieron los sicarios, que asesinaron a opresores y causaron disturbios en Jerusalén. Como había hecho con los macabeos, Elías les prestó su apoyo e incluso llegó a acompañarlos directamente, pero en una batalla contra un destacamento de legionarios, su corazón fue atravesado por el mango de madera de un pilum y los soldados romanos prendieron fuego a aquella criatura que se resistía a morir.
Los leales servidores de Elías consiguieron robar su cuerpo con grandes pérdidas y su leal Rebekah le dio toda su sangre para que pudiera curarse. Consiguió recuperar la consciencia justo a tiempo de devolverle un poco de su sangre y convertirla en su chiquilla. Cuando Jerusalén fue arrasada por los romanos, Elías y su chiquilla Rebekah decidieron huir y viajaron por todo el Imperio Romano.
Elías entró en letargo poco después de la caída de Roma y despertaría unos siglos después. Con el paso del tiempo su fuego rebelde se había apagado un poco y decidió regresar a Egipto para volver a ver a su sire. Fue entonces cuando se unió al Inconnu.
Desde el siglo X se ha instalado con su chiquilla Rebekah en Barcelona, y ambos han decidido erigirse en protectores de la comunidad judía, especialmente contra los Cainitas y otras amenazas sobrenaturales. La Príncipe Mireia Subira de Barcelona ha aceptado que el barrio judío se convierta en dominio exclusivo de Elías, y otros Cainitas saben que atacar a los judíos es tentar al desastre. Más de alguno ha sufrido algún desafortunado “accidente.”
Por supuesto, Elías es consciente de que ni siquiera su considerable poder le permite estar en todas partes, pero procura extender rumores sobre su verdadero alcance para disuadir a otros Cainitas. Al mismo tiempo también ha emprendido su propia purga de la corrupción. Poco después de llegar a la ciudad destruyó un templo de Set oculto, y también ha actuado para neutralizar los planes de las Serpientes. Ni siquiera los mortales especialmente corruptos están a salvo de su ocasional ira. Su chiquilla y amante Rebekah reside con él en Barcelona, y también recibe invitados Cainitas de vez en cuando, especialmente de su propia religión, como Menahem de Girona o Sara de Toledo. En los últimos tiempos ha recibido noticia de los ataques que está recibiendo la comunidad judía de Girona, y siente que debería investigar.
Elías es un hombre joven de piel pálida por la enfermedad que lo llevó a la tumba. Tiene cabello castaño y rizado, con barba y bigote, ojos negros y grandes, y una nariz aguileña. Viste con ropas sencillas, procurando pasar desapercibido en sus largos paseos por el barrio, vigilando y atento. Cuando habla con alguien suele mostrarse apasionado en su discurso, y cuando se enfrenta a una justicia en ocasiones gesticula y golpea la pared.
Clan: Ventrue.
Sire: Nefer-meri-Isis.
Naturaleza/Conducta: Defensor/Rebelde.
Generación: 5ª
Abrazo: Siglo II a.C.
Edad aparente: Mediados los veinte.
Atributos: Fuerza 5, Destreza 6, Resistencia 5; Carisma 6, Manipulación 5, Apariencia 4; Percepción 5, Inteligencia 7, Astucia 6
Habilidades: Alerta 5, Atletismo 4, Esquivar 5, Liderazgo 4, Subterfugio 3; Armas C.C. 5, Equitación 2, Interpretación 3, Sigilo 2, Supervivencia 4, Trato con Animales 3; Investigación 5, Lingüística 6, Medicina 4, Ocultismo 4, Política 5
Disciplinas: Animalismo 4, Dominación 6, Fortaleza 7, Ofuscación 4, Potencia 5, Presencia 5, Protean 3
Trasfondos: Aliados 4, Contactos 5, Criados 2, Posición 3, Recursos 3
Virtudes: Conciencia 4, Autocontrol 3, Coraje 5
Camino: Humanidad 7
Fuerza de Voluntad: 8
Nota: Elías sólo se alimenta de ricos y poderosos que hayan cometido una flagrante injusticia.
ELVIRA ENRÍQUEZ, PRÍNCIPE DE LEÓN
Cuando Henri Beaucaire llegó al reino de León, cada uno de sus chiquillos se convirtió en una pieza de lo que consideraba una corte que se extendería por todo su dominio, de manera que dependieran unos de otros. Eligió a Elvira cuando decidió que su corte necesitaba una reina que inspirara a sus vasallos con su imagen...y que acabara con los rumores maledicentes sobre la sexualidad del propio Henri.
Elvira era una dama de la corte del rey Alfonso VI. Se había criado entre la nobleza leonesa como dama de compañía de la reina Inés de Aquitania. Siempre se mostró correcta con su señora, y le dio palabras de ánimo cuando el monarca la repudió, acusándola de ser estéril.
Pero Elvira estaba siendo observada por Henri, quien decidió que aquella dama leonesa sería su reina. Se fijó principalmente en su hermoso aspecto, pero también apreció que fuese una buena administradora. Satisfecho, le dio el Abrazo...y casi la pierde, pues Elvira quedó horrorizada por haberse convertido en Cainita e intentó suicidarse. El Príncipe de León estaba pensando en destruirla y elegir de nuevo, pero Anastasio, hermano de sangre de Elvira, en una actitud muy poco habitual en él, le ofreció consuelo y la ayudó a seguir adelante.
Elvira se mantuvo sumisa con su sire, acompañándolo en las recepciones a otros Cainitas y dando la imagen de consorte digna y leal. Cuando su sire se ausentaba, ella quedaba a cargo de la regencia de León, sin atreverse a realizar demasiados cambios.
Con la muerte de Henri Beaucaire en 1136 quedó liberada de la abrumadora presencia de su sire, y sus hermanos de sangre acordaron que ella heredaría la posición de Príncipe de León, aunque otros afirmaban que no estaba preparada para asumir semejante responsabilidad. Elvira continuó actuando de manera discreta, e incluso propuso a los Lasombra una alianza para participar juntos en la Reconquista en la Sombra. Sin embargo, desde la victoria de las Navas de Tolosa los Magistri ven en cualquier aliado una rivalidad indeseada, así que las ofertas de sus emisarios han sido cortésmente rechazadas.
Elvira ha buscado el apoyo del padre Fernando de Burgos, un confesor Malkavian que también tiene su propia influencia eclesiástica en los monasterios del norte de la península. En realidad Fernando ha percibido la debilidad de la Prínciep y planea atraerla a la Herejía Cainita.
Sin embargo, Elvira tiene sus propios planes. Estuvo detrás del asesinato de su sire, advirtiendo a unos Ashirra de que Henri Beaucaire se preparaba para realizar una nueva incursión en Badajoz. En estos momentos en que el reino de León se ha unido a las posesiones de la Corona de Castilla trata de mantener cierta autonomía, y puesto que los Lasombra no están interesados en apoyarla, planea enfrentar al Arzobispo Ambrosio Moncada de Madrid con el padre Fernando de la Herejía Cainita, buscando que se debiliten mutuamente, y cuando llegue el momento presentar una nueva oferta de ayuda.
Elvira fue Abrazada por su belleza. Es una dama alta, de cabello largo y liso de color castaño, y hermosos ojos de color azabache que destacan en un rostro redondeado y joven. Viste con la moda de la monarquía, mostrándose digna como una reina, y llevando una pequeña diadema de oro y zafiros. Cuando habla, lo hace con voz suave y tímida, pero en realidad tiene una mente muy ingeniosa y calculadora, siempre buscando la mejor manera de aprovechar una situación. Demasiado tiempo pasó a la sombra de su sire, y ahora no está dispuesta a dejarse avasallar.
Clan: Ventrue.
Sire: Henri Beaucaire.
Naturaleza/Conducta: Juez/Solitaria.
Generación: 7ª
Abrazo: 1077
Edad aparente: Unos veinte.
Atributos: Fuerza 2, Destreza 3, Resistencia 2; Carisma 3, Manipulación 4, Apariencia 5; Percepción 4, Inteligencia 3, Astucia 3
Habilidades: Alerta 2, Empatía 2, Expresión 3, Liderazgo 1; Armas C.C. 2, Etiqueta 4, Interpretación 2, Pericias 2, Sigilo 1; Academicismo 2, Investigación 3, Lingüística 2, Política 3, Senescal 4
Disciplinas: Auspex 2, Dominación 3, Fortaleza 3, Ofuscación 1, Potencia 1, Presencia 3
Trasfondos: Aliados 3, Contactos 4, Criados 2, Influencia 2, Posición 4, Recursos 4
Virtudes: Convicción 3, Autocontrol 4, Coraje 3
Camino: Reyes 6
Fuerza de Voluntad: 6
Nota: Elvira sólo se alimenta de mujeres que hayan sido repudiadas por sus esposos.
FLAVIO SIDONIO, PRÍNCIPE DE ZARAGOZA
Cayo Flavio Sidonio era hijo de una de las mejores familias de Roma. Desde que era pequeño mostró actitud por la filosofía y como parte de su familia patricia podía dedicarse a estudiar y filosofar todo lo que quisiera, viviendo de rentas. Para Flavio, Platón y su república de reyes filósofos era el exponente más elevado que podía ofrecer la filosofía.
Tras quedar huéfano, Flavio convirtió su mansión en un lugar donde se reunían sabios y literatos de Roma, debatiendo sobre diversos temas filosóficos, arte, literatura y también de política. Tras copiosos festines regados con el mejor vino, lo mejor para continuar era un debate sosegado.
El Príncipe Camillus de Roma acudió una noche y participó en el debate. Frente a los ideales elevados de la divinidad que Flavio planteaba, el antiguo Ventrue opuso que los humanos eran seres materiales y por lo tanto los deseos materiales también podían ser elevados, poniendo como ejemplo a hombres virtuosos de la época de la República que también habían tenido deseos que no habían menoscabado su grandeza, antes bien, los habían hecho ser conscientes del mundo en el que vivían.
Flavio y el Príncipe Camillus se mostraron interesados por continuar el debate y finalmente una noche Flavio fue invitado a un lugar especial, bajo las calles de Roma, donde recibió el Abrazo. Su sire le mostró que ahora era una criatura de deseo, y aferrándose al deseo podía ser algo todavía más grande.
En los siglos siguientes Flavio se convirtió en consejero de su sire y finalmente recibió su propio dominio en Zaragoza, donde llegó a tiempo de fomentar las primeras persecuciones cristianas. Para Flavio la nueva religión era una amenaza para el orden romano y desde entonces la ha seguido combatiendo durante siglos, fomentando las persecuciones y tratando de debilitar la influencia de la Iglesia sobre su dominio. En estos momentos se da cuenta de que está librando una batalla perdida y que necesita buscar una nueva perspectiva que le ayude a someter a los Cainitas cristianos, y especialmente a sus traicioneros chiquillos.
Desde hace siglos Flavio ha permanecido en contacto con la Manus Nigrum, una secta antiquísima que tiene agentes en la ciudad. Quizás el apoyo de esa secta sea realmente lo que necesita para mantenerse en el poder, pues sabe que los antiguos que forman por ella simplemente se despreocupan de las religiones. En estos momentos se encuentra en negociaciones, pero cada vez más la influencia de la Manus Nigrum sobre Zaragoza es más fuerte. Sus aliados observan y vigilan ante cualquier señal de traición hacia el Príncipe, preparados para golpear.
Flavio es un hombre maduro, de largo cabello escaso en las sienes, y barba canosos, a imitación de su ídolo, el filósofo Platón. Como el filósofo tiene hombros anchos, pero su vida ociosa le dio un cuerpo ligeramente obeso, aunque no por ello es menos diestro y fuerte. Suele mostrar un ingenio sarcástico y le gusta demostrar su erudición, especialmente cuando se trata de humillar o contrarrestar un discurso religioso. Normalmente suele vestir con sencillez. Hace tiempo que dejó atrás las togas, pero irónicamente ha encontrado los hábitos monacales sorprendentemente cómodos. Viste con el hábito gris del sacerdocio de cenizas, y en verdad, se considera un sacerdote del deseo.
Clan: Ventrue.
Sire: Camillus.
Naturaleza/Conducta: Autócrata/Juez
Generación: 6ª
Abrazo: Siglo I d.C.
Edad aparente: Casi cincuenta.
Atributos: Fuerza 4, Destreza 3, Resistencia 4; Carisma 5, Manipulación 6, Apariencia 2; Percepción 4, Inteligencia 6, Astucia 4
Habilidades: Alerta 2, Esquivar 2, Expresión 5, Intimidación 3, Liderazgo 4, Subterfugio 4; Armas C.C. 2, Etiqueta 3, Interpretación 2, Pericias 2, Sigilo 2; Academicismo 5, Investigación 4, Lingüística 3, Ocultismo 3, Política 4, Teología 2
Disciplinas: Animalismo 3, Auspex 4, Dominación 5, Fortaleza 5, Obtenebración 2, Potencia 3, Presencia 5
Trasfondos: Aliados 3, Contactos 4, Influencia 2, Posición 5, Rebaño 3, Recursos 4
Virtudes: Convicción 5, Instintos 3, Coraje 4
Camino: Pecado 7
Fuerza de Voluntad: 7
Nota: Flavio sólo se alimenta de muchachos atrapados por el deseo. Normalmente utiliza su Presencia sobre sus víctimas antes de alimentarse.
NADIM INB NURI, INTERMEDIARIO PROFESIONAL
Nadim ibn Nuri es un ambicioso Ashirra que planea hacerse un nombre sin importarle los obstáculos que los antiguos puedan interponer en el camino hacia su éxito. Un andalusí de Sevilla que creció en el barrio del puerto aprendiendo el oficio de comerciante de su padre, fue primero convertido en ghoul y después Abrazado por un Ventrue que necesitaba un agente en el lugar, por lo que ahora se encarga de la tarea ingrata de coordinar los asuntos del clan Ventrue en la zona y vigilar las idas y venidas de otros vampiros dentro y fuera de la ciudad. El hecho de que la mayor parte del clan Ventrue haya pasado de relacionarse con los antiguos romanos a los enemigos cristianos de Al-Ándalus contribuye a su crispación, y otros Ashirra desconfían de sus intenciones.
Sin embargo, Nadim ha encontrado formas de sacar provecho de su complicada situación; ha conseguido gran información de todo tipo, desde el tipo de recipientes de los que beben los Ventrue que visitan Sevilla hasta los refugios preferidos de los viajeros del Qabilat al-Khayal, o los vicios retorcidos de los Raye'en al-Fen. También acumula pequeños favores por servicios ajenos a su profesión, que si sabe utilizarlos bien se convertirán en favores importantes cuando llegue el momento, incrementando su posición entre los Ventrue. Por supuesto, es perfectamente posible que su sire y los antiguos le asignaran a Nadim su posición no como castigo, sino siendo conscientes de sus capacidades.
El aspecto aniñado de Nadim contribuye a que muchos de sus clientes no lo consideren mucho más que un chico de los recados con pretensiones. Su rostro moreno y sus mejillas se conservan saludables aunque está muerto, y mantiene la inocencia en sus ojos grandes. Refuerza esa impresión vistiéndose con los pantalones y túnica de un rico estudiante.
Clan: Ventrue.
Sire: Nuri.
Naturaleza/Conducta: Superviviente/Vanguardista.
Generación: 9ª
Abrazo: 1132
Edad aparente: Casi veinte años.
Atributos: Fuerza 3, Destreza 3, Resistencia 3; Carisma 4, Manipulación 3, Apariencia 3; Percepción 3, Inteligencia 2, Astucia 4
Habilidades: Alerta 2, Atletismo 2, Empatía 3, Esquivar 2, Liderazgo 1, Pelea 2, Subterfugio 3; Comercio 4, Etiqueta 2, Pericias 3, Sigilo 2, Trato con Animales 2; Investigación 3, Lingüística 3, Política 2, Senescal 2
Disciplinas: Animalismo 1, Dominación 3, Fortaleza 2, Presencia 3
Trasfondos: Contactos 4, Criados 2, Influencia 2, Mentor 3, Recursos 4
Virtudes: Conciencia 3, Autocontrol 3, Coraje 3
Camino: Humanidad 7
Fuerza de Voluntad: 6
Para los Ventrue la península ibérica ha sido un campo de batalla desde hace siglos. Llegaron en época romana para combatir contra los Cainitas de Cartago, y terminada la guerra, conquistaron numerosos dominios, que compartieron con otros clanes.
La caída de Roma y el período visigodo fueron un período de decadencia para los Ventrue romanos, que perdieron terreno ante el empuje de sus enemigos. Su presencia fue reforzada en los inicios de la Reconquista, con la llegada de varios Patricios poderosos llegados de Francia, y de nuevo se encontraban en la ofensiva. No obstante, su poder a menudo se encontraba limitado por el poder de otros clanes, especialmente los Lasombra. Actualmente, aunque siguen siendo un clan importante en la península, a menudo se encuentran superados por otros clanes que se adelantan a la hora de apoderarse de los dominios durante la Reconquista.
Todavía quedan algunos Ventrue de linaje romano, descendientes del antiguo Camillus de Roma, especialmente representados en el Reino de Aragón y Al-Ándalus. Le siguen en importancia un linaje descendiente del antiguo Alexandre de París, especialmente influyentes en el Reino de León. Por último, en las juderías del reino de Aragón se encuentran unos pocos Cainitas descendientes del antiguo Elías, cuya sangre procede de la nobleza del antiguo reino de Israel.
ANASTASIO EL GALLEGO, COMANDANTE DE LA RECONQUISTA
Nacido en el año 970 en la familia de un escudero menor en Ribadeo, Anastasio mostró gran habilidad con las armas desde una temprana edad, y fue enviado a entrenar al servicio del rey Sancho el Gordo de León. Con la lucha constante contra los musulmanes, Anastasio tenía amplias oportunidades de mostrar sus talentos marciales y se convirtió en capitán de caballería cuando sólo tenía veintiséis años. Pero el servicio al rey de León no se pagaba bien, y Anastasio viajó al norte a Francia, a vender sus habilidades a señores con mejores bolsas. Luchando de forma independiente, continuó labrándose una reputación formidable como guerrero, y lo más importante, como líder. Sus tropas no lo abandonaban en momentos inoportunos y nunca malgastaba la vida de sus hombres innecesariamente.
En el año 1006 Anastasio aceptó una oferta del Barón de Aire para ayudarlo en un ataque contra el Obispo de St. Desuna, que disputaba el derecho del barón a llevar sus piaras de cerdos a alimentarse en el bosque que marcaba la frontera entre sus dos posesiones. Aunque esto le pareció a Anastasia una pequeña disputa má entre dos señores feudales menores, la lucha enmascaraba una guerra más sutil y antigua. El Obispo era un peón de Clodauuiva, el Príncipe Lasombra de Dax, mientras que el Barón de Aire era la víctima incosnciente de Henri Beaucaire, señor Ventrue de Pau. Aunque amobs Cainitas enmascaraba su guerra en las batallas entre sus dos clanes para conseguir influencia en Francia, lo cierto es que los dos se habían odiado durante décadas y la escaramuza menor entre sus dos peones era sólo una batalla más en su lugar disputa.
Henri había enviado a un chiquillo a acompañar el ataque, pero había calculado mal, y su chiquillo descubrió demasiado tarde que Clodauuiva estaba al lado de su siervo, y cuando despertó para descubrir que su peón, el obispo, había sido derrotado, se abalanzó sobre el chiquillo de Henri, derribándolo. Sin embargo, en ese momento Anastasio intervino y consiguió clavar una estaca al Cainita mientras bebía del desafortunado Ventrue, y no queriendo arriesgarse a más problemas con lo que creía que era un demonio, hizo que lo quemaran lo más rápido posible. Henri estaba encantado por haberse deshecho de su rival, y cuando Anastasio regresó a Pau, persuadió al mercenario de que aceptara el Abrazo a su servicio.
Henri Beaucaire estaba buscando guerreros en su Francia natal para llevarlos a la península ibérica, donde se había convertido en el principal poder Cainita en el reino de León. Aspiraba a convertir el reino en el principal poder de la península y con los Ventrue al mando. Anastasio se convirtió en su general predilecto, y colaboró con otros chiquillos para extender la influencia del clan con el avance de la Reconquista.
Sin embargo, el Príncipe de León demostró ser demasiado atrevido y terminó siendo destruido en una emboscada de los Ashirra en 1136, debilitando el poder de los Ventrue en el reino. Por aquel entonces Anastasio ya había pasado más de cien años como Cainita, pero realmente el Abrazo no había cambiado mucho su perspectiva sobre el mundo. Siguió prestando su servicio a otros Príncipes y viajó a otros lugares como Inglaterra y Tierra Santa, y sus señores nunca tuvieron motivo alguno para dudar de su lealtad. Aunque Anastasio se ha mostrado independiente, por lo general lucha al servicio de quien mejor pague. Aunque hubiera podido hacerlo, nunca ha reclamado ningún dominio, prefiriendo no encontrarse atado a ningún territorio.
En el año 1205 el Arzobispo Ambrosio Moncada de Madrid le ofreció una paga magnífica por liderar la guerra contra los Ashirra musulmanes en la Reconquista en la Sombra. Aparte de la habilidad indudable de Anastasio, su neutralidad en las disputas e intrigas de los Lasombra y los Amici Noctis es su otra gran virtud. En años posteriores, Anastasio ha actuado para conquistar los dominios de Al-Ándalus y desplazar a los sultanes Ashirra. El Arzobispo ha insinuado que lo apoyaría si quisiera reclamar el dominio de Oviedo en premio a sus servicios, pero Anastasio es consciente de que tiene mucho que ver con la aversión de Moncada por Marbuena, la Príncipe actual, a quien considera una persona débil. Para mantener a su patrón contento, ha establecido un refugio en la ciudad, aunque pasa más tiempo en la frontera sur. A menudo duerme dentro de un cofre de armas reforzado con acero y custodiado por sus fieles ghouls.
Si los Amici Noctis tuvieran idea de cuánta información ha conseguido adquirir Anastasio, puede que no llegara a la próxima noche. De forma similar, si otros antiguos Ventrue comprendieran lo que les oculta, recibiría todavía menos misericordia. Sin embargo, Anastasio es un hombre discreto que prefiere guardarse sus opiniones y luchar en las batallas para las que se le ha contratado, esperando su próximo desafío. Su papel en la reconquista es muy conocido, y tiene el respeto de muchos Cainitas, especialmente debido a su relación con el Arzobispo de Madrid. Que no suela utilizar toda su influencia es considerado una señal de necedad o astucia, dependiendo del punto de vista. En realidad, sólo se atiene a su juicio y su espada; no confía en el Arzobispo de Madrid, pero le permite creer que tiene cierto control sobre él.
Anastasio es la antítesis de un caballero cristiano noble. Es un hombre bajo, moreno y robusto, que se parece mucho a un moro, y algunos Cainitas chismosos han extendido rumores sucios sobre la virtud de su madre. Pero su aspecto oculta gran fuerza, paciencia e ingenio. Normalmente viste con sencillez, con camisa y pantalones, más parecido a un campesino que a un guerrero. Simplemente se asegura de transmitir una apariencia inofensiva y nunca comete el error de subestimar a sus enemigos,
Clan: Ventrue.
Sire: Henri Beaucaire.
Naturaleza/Conducta: Autócrata/Defensor.
Generación: 7ª
Abrazo: 1006
Edad aparente: Mediados los treinta.
Atributos: Fuerza 4, Destreza 4, Resistencia 3; Carisma 2, Manipulación 3, Apariencia 2; Percepción 4, Inteligencia 3, Astucia 3
Habilidades: Alerta 3, Atletismo 2, Esquivar 3, Intimidación 2, Liderazgo 4, Pelea 3; Armas C.C. 4, Equitación 4, Etiqueta 3, Interpretación 1, Supervivencia 3, Tiro con Arco 2; Lingüística 3, Política 3, Senescal 2
Disciplinas: Animalismo 1, Dominación 3, Fortaleza 4, Potencia 2, Presencia 2
Trasfondos: Aliados 5, Criados 5, Influencia 3, Posición 4
Virtudes: Convicción 2, Autocontrol 4, Coraje 5
Camino: Reyes 6
Fuerza de Voluntad: 9
Nota: Anastasio sólo se alimenta de guerreros que hayan derramado sangre.
ELÍAS, SEÑOR DE SEFARAD
Elías nació en una familia judía cuando el reino de Israel estaba ocupado por Egipto durante la dinastía de los Ptolomeos. Su padre pertenecía a la nobleza, aunque era un hombre bueno y humilde que enseñó a sus hijos que la nobleza de la sangre tenía que ser acompañada de la nobleza de los actos, y Elías creció admirando a su padre.
Sin embargo, estalló la guerra entre los Ptolomeos de Egipto y los Seléucidas de Siria, y el padre de Elías marchó a la guerra. Ganaron los Seléucidas y la familia de Elías tuvo que exiliarse con unos parienes que vivían en Alejandría. Elías deseó vengar a su padre, que había muerto en la guerra. Una noche Elías hablaba con unos amigos de sus deseos y cómo lamentaba que la falta de dinero le impidiera levantar un ejército para recuperar el reino de Israel. En la oscuridad de la noche sus palabras fueron escuchadas.
La anciana Nefer, una Cainita milenaria, podía comprender la necesidad de vengar a su padre, pues ella misma había conocido en su momento al gran Horus. Intrigada, observó a Elías durante un tiempo, e incluso se le dio a conocer bajo otra identidad. Cuando Elías quedó postrado en el lecho, consumido por una enfermedad, sólo lamentaba no haber podido hacer que su padre se sintiera orgulloso. La anciana decidió que lo ayudaría.
Estuvo bajo la tutela de su sire durante un tiempo, y ella le habló de la lucha entre los diversos clanes, y la guerra que dividía Egipto entre los partidarios entre el divino Osiris y su hermano oscuro Set, ambos campeones de la luz y la oscuridad. Los descendientes de Set prosperaban en la corrupción, y ahora estaban bebiendo la sangre del reino de Israel bajo la ocupación de los Seléucidas.
Elías viajó a Israel, donde fomentó y apoyó la rebelión de los israelitas contra los Seléucidas. Acompañó presonalmente a los macabeos y tomó servidores entre ellos, para finalmente ayudar a sostener su gobierno. Sin embargo, quedó enfurecido cuando las élites judías comenzaron a intrigar y luchar entre ellos, debilitando el reino de Israel hasta que quedó bajo protección romana. Desde entonces Elías decidió que actuaría al lado del pueblo, rechazando gobernantes indignos.
Contra la ocupación romana se alzó una milicia urbana y campesina que se alzó contra los romanos y los aristócratas judíos que los apoyaban. Aparecieron los sicarios, que asesinaron a opresores y causaron disturbios en Jerusalén. Como había hecho con los macabeos, Elías les prestó su apoyo e incluso llegó a acompañarlos directamente, pero en una batalla contra un destacamento de legionarios, su corazón fue atravesado por el mango de madera de un pilum y los soldados romanos prendieron fuego a aquella criatura que se resistía a morir.
Los leales servidores de Elías consiguieron robar su cuerpo con grandes pérdidas y su leal Rebekah le dio toda su sangre para que pudiera curarse. Consiguió recuperar la consciencia justo a tiempo de devolverle un poco de su sangre y convertirla en su chiquilla. Cuando Jerusalén fue arrasada por los romanos, Elías y su chiquilla Rebekah decidieron huir y viajaron por todo el Imperio Romano.
Elías entró en letargo poco después de la caída de Roma y despertaría unos siglos después. Con el paso del tiempo su fuego rebelde se había apagado un poco y decidió regresar a Egipto para volver a ver a su sire. Fue entonces cuando se unió al Inconnu.
Desde el siglo X se ha instalado con su chiquilla Rebekah en Barcelona, y ambos han decidido erigirse en protectores de la comunidad judía, especialmente contra los Cainitas y otras amenazas sobrenaturales. La Príncipe Mireia Subira de Barcelona ha aceptado que el barrio judío se convierta en dominio exclusivo de Elías, y otros Cainitas saben que atacar a los judíos es tentar al desastre. Más de alguno ha sufrido algún desafortunado “accidente.”
Por supuesto, Elías es consciente de que ni siquiera su considerable poder le permite estar en todas partes, pero procura extender rumores sobre su verdadero alcance para disuadir a otros Cainitas. Al mismo tiempo también ha emprendido su propia purga de la corrupción. Poco después de llegar a la ciudad destruyó un templo de Set oculto, y también ha actuado para neutralizar los planes de las Serpientes. Ni siquiera los mortales especialmente corruptos están a salvo de su ocasional ira. Su chiquilla y amante Rebekah reside con él en Barcelona, y también recibe invitados Cainitas de vez en cuando, especialmente de su propia religión, como Menahem de Girona o Sara de Toledo. En los últimos tiempos ha recibido noticia de los ataques que está recibiendo la comunidad judía de Girona, y siente que debería investigar.
Elías es un hombre joven de piel pálida por la enfermedad que lo llevó a la tumba. Tiene cabello castaño y rizado, con barba y bigote, ojos negros y grandes, y una nariz aguileña. Viste con ropas sencillas, procurando pasar desapercibido en sus largos paseos por el barrio, vigilando y atento. Cuando habla con alguien suele mostrarse apasionado en su discurso, y cuando se enfrenta a una justicia en ocasiones gesticula y golpea la pared.
Clan: Ventrue.
Sire: Nefer-meri-Isis.
Naturaleza/Conducta: Defensor/Rebelde.
Generación: 5ª
Abrazo: Siglo II a.C.
Edad aparente: Mediados los veinte.
Atributos: Fuerza 5, Destreza 6, Resistencia 5; Carisma 6, Manipulación 5, Apariencia 4; Percepción 5, Inteligencia 7, Astucia 6
Habilidades: Alerta 5, Atletismo 4, Esquivar 5, Liderazgo 4, Subterfugio 3; Armas C.C. 5, Equitación 2, Interpretación 3, Sigilo 2, Supervivencia 4, Trato con Animales 3; Investigación 5, Lingüística 6, Medicina 4, Ocultismo 4, Política 5
Disciplinas: Animalismo 4, Dominación 6, Fortaleza 7, Ofuscación 4, Potencia 5, Presencia 5, Protean 3
Trasfondos: Aliados 4, Contactos 5, Criados 2, Posición 3, Recursos 3
Virtudes: Conciencia 4, Autocontrol 3, Coraje 5
Camino: Humanidad 7
Fuerza de Voluntad: 8
Nota: Elías sólo se alimenta de ricos y poderosos que hayan cometido una flagrante injusticia.
ELVIRA ENRÍQUEZ, PRÍNCIPE DE LEÓN
Cuando Henri Beaucaire llegó al reino de León, cada uno de sus chiquillos se convirtió en una pieza de lo que consideraba una corte que se extendería por todo su dominio, de manera que dependieran unos de otros. Eligió a Elvira cuando decidió que su corte necesitaba una reina que inspirara a sus vasallos con su imagen...y que acabara con los rumores maledicentes sobre la sexualidad del propio Henri.
Elvira era una dama de la corte del rey Alfonso VI. Se había criado entre la nobleza leonesa como dama de compañía de la reina Inés de Aquitania. Siempre se mostró correcta con su señora, y le dio palabras de ánimo cuando el monarca la repudió, acusándola de ser estéril.
Pero Elvira estaba siendo observada por Henri, quien decidió que aquella dama leonesa sería su reina. Se fijó principalmente en su hermoso aspecto, pero también apreció que fuese una buena administradora. Satisfecho, le dio el Abrazo...y casi la pierde, pues Elvira quedó horrorizada por haberse convertido en Cainita e intentó suicidarse. El Príncipe de León estaba pensando en destruirla y elegir de nuevo, pero Anastasio, hermano de sangre de Elvira, en una actitud muy poco habitual en él, le ofreció consuelo y la ayudó a seguir adelante.
Elvira se mantuvo sumisa con su sire, acompañándolo en las recepciones a otros Cainitas y dando la imagen de consorte digna y leal. Cuando su sire se ausentaba, ella quedaba a cargo de la regencia de León, sin atreverse a realizar demasiados cambios.
Con la muerte de Henri Beaucaire en 1136 quedó liberada de la abrumadora presencia de su sire, y sus hermanos de sangre acordaron que ella heredaría la posición de Príncipe de León, aunque otros afirmaban que no estaba preparada para asumir semejante responsabilidad. Elvira continuó actuando de manera discreta, e incluso propuso a los Lasombra una alianza para participar juntos en la Reconquista en la Sombra. Sin embargo, desde la victoria de las Navas de Tolosa los Magistri ven en cualquier aliado una rivalidad indeseada, así que las ofertas de sus emisarios han sido cortésmente rechazadas.
Elvira ha buscado el apoyo del padre Fernando de Burgos, un confesor Malkavian que también tiene su propia influencia eclesiástica en los monasterios del norte de la península. En realidad Fernando ha percibido la debilidad de la Prínciep y planea atraerla a la Herejía Cainita.
Sin embargo, Elvira tiene sus propios planes. Estuvo detrás del asesinato de su sire, advirtiendo a unos Ashirra de que Henri Beaucaire se preparaba para realizar una nueva incursión en Badajoz. En estos momentos en que el reino de León se ha unido a las posesiones de la Corona de Castilla trata de mantener cierta autonomía, y puesto que los Lasombra no están interesados en apoyarla, planea enfrentar al Arzobispo Ambrosio Moncada de Madrid con el padre Fernando de la Herejía Cainita, buscando que se debiliten mutuamente, y cuando llegue el momento presentar una nueva oferta de ayuda.
Elvira fue Abrazada por su belleza. Es una dama alta, de cabello largo y liso de color castaño, y hermosos ojos de color azabache que destacan en un rostro redondeado y joven. Viste con la moda de la monarquía, mostrándose digna como una reina, y llevando una pequeña diadema de oro y zafiros. Cuando habla, lo hace con voz suave y tímida, pero en realidad tiene una mente muy ingeniosa y calculadora, siempre buscando la mejor manera de aprovechar una situación. Demasiado tiempo pasó a la sombra de su sire, y ahora no está dispuesta a dejarse avasallar.
Clan: Ventrue.
Sire: Henri Beaucaire.
Naturaleza/Conducta: Juez/Solitaria.
Generación: 7ª
Abrazo: 1077
Edad aparente: Unos veinte.
Atributos: Fuerza 2, Destreza 3, Resistencia 2; Carisma 3, Manipulación 4, Apariencia 5; Percepción 4, Inteligencia 3, Astucia 3
Habilidades: Alerta 2, Empatía 2, Expresión 3, Liderazgo 1; Armas C.C. 2, Etiqueta 4, Interpretación 2, Pericias 2, Sigilo 1; Academicismo 2, Investigación 3, Lingüística 2, Política 3, Senescal 4
Disciplinas: Auspex 2, Dominación 3, Fortaleza 3, Ofuscación 1, Potencia 1, Presencia 3
Trasfondos: Aliados 3, Contactos 4, Criados 2, Influencia 2, Posición 4, Recursos 4
Virtudes: Convicción 3, Autocontrol 4, Coraje 3
Camino: Reyes 6
Fuerza de Voluntad: 6
Nota: Elvira sólo se alimenta de mujeres que hayan sido repudiadas por sus esposos.
FLAVIO SIDONIO, PRÍNCIPE DE ZARAGOZA
Cayo Flavio Sidonio era hijo de una de las mejores familias de Roma. Desde que era pequeño mostró actitud por la filosofía y como parte de su familia patricia podía dedicarse a estudiar y filosofar todo lo que quisiera, viviendo de rentas. Para Flavio, Platón y su república de reyes filósofos era el exponente más elevado que podía ofrecer la filosofía.
Tras quedar huéfano, Flavio convirtió su mansión en un lugar donde se reunían sabios y literatos de Roma, debatiendo sobre diversos temas filosóficos, arte, literatura y también de política. Tras copiosos festines regados con el mejor vino, lo mejor para continuar era un debate sosegado.
El Príncipe Camillus de Roma acudió una noche y participó en el debate. Frente a los ideales elevados de la divinidad que Flavio planteaba, el antiguo Ventrue opuso que los humanos eran seres materiales y por lo tanto los deseos materiales también podían ser elevados, poniendo como ejemplo a hombres virtuosos de la época de la República que también habían tenido deseos que no habían menoscabado su grandeza, antes bien, los habían hecho ser conscientes del mundo en el que vivían.
Flavio y el Príncipe Camillus se mostraron interesados por continuar el debate y finalmente una noche Flavio fue invitado a un lugar especial, bajo las calles de Roma, donde recibió el Abrazo. Su sire le mostró que ahora era una criatura de deseo, y aferrándose al deseo podía ser algo todavía más grande.
En los siglos siguientes Flavio se convirtió en consejero de su sire y finalmente recibió su propio dominio en Zaragoza, donde llegó a tiempo de fomentar las primeras persecuciones cristianas. Para Flavio la nueva religión era una amenaza para el orden romano y desde entonces la ha seguido combatiendo durante siglos, fomentando las persecuciones y tratando de debilitar la influencia de la Iglesia sobre su dominio. En estos momentos se da cuenta de que está librando una batalla perdida y que necesita buscar una nueva perspectiva que le ayude a someter a los Cainitas cristianos, y especialmente a sus traicioneros chiquillos.
Desde hace siglos Flavio ha permanecido en contacto con la Manus Nigrum, una secta antiquísima que tiene agentes en la ciudad. Quizás el apoyo de esa secta sea realmente lo que necesita para mantenerse en el poder, pues sabe que los antiguos que forman por ella simplemente se despreocupan de las religiones. En estos momentos se encuentra en negociaciones, pero cada vez más la influencia de la Manus Nigrum sobre Zaragoza es más fuerte. Sus aliados observan y vigilan ante cualquier señal de traición hacia el Príncipe, preparados para golpear.
Flavio es un hombre maduro, de largo cabello escaso en las sienes, y barba canosos, a imitación de su ídolo, el filósofo Platón. Como el filósofo tiene hombros anchos, pero su vida ociosa le dio un cuerpo ligeramente obeso, aunque no por ello es menos diestro y fuerte. Suele mostrar un ingenio sarcástico y le gusta demostrar su erudición, especialmente cuando se trata de humillar o contrarrestar un discurso religioso. Normalmente suele vestir con sencillez. Hace tiempo que dejó atrás las togas, pero irónicamente ha encontrado los hábitos monacales sorprendentemente cómodos. Viste con el hábito gris del sacerdocio de cenizas, y en verdad, se considera un sacerdote del deseo.
Clan: Ventrue.
Sire: Camillus.
Naturaleza/Conducta: Autócrata/Juez
Generación: 6ª
Abrazo: Siglo I d.C.
Edad aparente: Casi cincuenta.
Atributos: Fuerza 4, Destreza 3, Resistencia 4; Carisma 5, Manipulación 6, Apariencia 2; Percepción 4, Inteligencia 6, Astucia 4
Habilidades: Alerta 2, Esquivar 2, Expresión 5, Intimidación 3, Liderazgo 4, Subterfugio 4; Armas C.C. 2, Etiqueta 3, Interpretación 2, Pericias 2, Sigilo 2; Academicismo 5, Investigación 4, Lingüística 3, Ocultismo 3, Política 4, Teología 2
Disciplinas: Animalismo 3, Auspex 4, Dominación 5, Fortaleza 5, Obtenebración 2, Potencia 3, Presencia 5
Trasfondos: Aliados 3, Contactos 4, Influencia 2, Posición 5, Rebaño 3, Recursos 4
Virtudes: Convicción 5, Instintos 3, Coraje 4
Camino: Pecado 7
Fuerza de Voluntad: 7
Nota: Flavio sólo se alimenta de muchachos atrapados por el deseo. Normalmente utiliza su Presencia sobre sus víctimas antes de alimentarse.
NADIM INB NURI, INTERMEDIARIO PROFESIONAL
Nadim ibn Nuri es un ambicioso Ashirra que planea hacerse un nombre sin importarle los obstáculos que los antiguos puedan interponer en el camino hacia su éxito. Un andalusí de Sevilla que creció en el barrio del puerto aprendiendo el oficio de comerciante de su padre, fue primero convertido en ghoul y después Abrazado por un Ventrue que necesitaba un agente en el lugar, por lo que ahora se encarga de la tarea ingrata de coordinar los asuntos del clan Ventrue en la zona y vigilar las idas y venidas de otros vampiros dentro y fuera de la ciudad. El hecho de que la mayor parte del clan Ventrue haya pasado de relacionarse con los antiguos romanos a los enemigos cristianos de Al-Ándalus contribuye a su crispación, y otros Ashirra desconfían de sus intenciones.
Sin embargo, Nadim ha encontrado formas de sacar provecho de su complicada situación; ha conseguido gran información de todo tipo, desde el tipo de recipientes de los que beben los Ventrue que visitan Sevilla hasta los refugios preferidos de los viajeros del Qabilat al-Khayal, o los vicios retorcidos de los Raye'en al-Fen. También acumula pequeños favores por servicios ajenos a su profesión, que si sabe utilizarlos bien se convertirán en favores importantes cuando llegue el momento, incrementando su posición entre los Ventrue. Por supuesto, es perfectamente posible que su sire y los antiguos le asignaran a Nadim su posición no como castigo, sino siendo conscientes de sus capacidades.
El aspecto aniñado de Nadim contribuye a que muchos de sus clientes no lo consideren mucho más que un chico de los recados con pretensiones. Su rostro moreno y sus mejillas se conservan saludables aunque está muerto, y mantiene la inocencia en sus ojos grandes. Refuerza esa impresión vistiéndose con los pantalones y túnica de un rico estudiante.
Clan: Ventrue.
Sire: Nuri.
Naturaleza/Conducta: Superviviente/Vanguardista.
Generación: 9ª
Abrazo: 1132
Edad aparente: Casi veinte años.
Atributos: Fuerza 3, Destreza 3, Resistencia 3; Carisma 4, Manipulación 3, Apariencia 3; Percepción 3, Inteligencia 2, Astucia 4
Habilidades: Alerta 2, Atletismo 2, Empatía 3, Esquivar 2, Liderazgo 1, Pelea 2, Subterfugio 3; Comercio 4, Etiqueta 2, Pericias 3, Sigilo 2, Trato con Animales 2; Investigación 3, Lingüística 3, Política 2, Senescal 2
Disciplinas: Animalismo 1, Dominación 3, Fortaleza 2, Presencia 3
Trasfondos: Contactos 4, Criados 2, Influencia 2, Mentor 3, Recursos 4
Virtudes: Conciencia 3, Autocontrol 3, Coraje 3
Camino: Humanidad 7
Fuerza de Voluntad: 6