
Colmillos Plateados La mayoría de los Colmillos Plateados españoles son descendientes de la belicosa Garra Conquistadora, una Casa de la tribu que prosperó en la Antigua Roma. Mientras otros Garou evitaban las ciudades, la Garra Conquistadora abrazó de lleno las tradiciones romanas, pensando en utilizar el poderoso imperio para apaciguar a los humanos. Aunque en principio sus intenciones eran nobles, su belicosidad y sus intenciones fueron corrompidas por los vampiros romanos. Con la caída del Imperio Romano la tribu se deshizo entre el Harano y las rencillas internas.
En España, los últimos Colmillos Plateados de la Garra Conquistadora se unieron a una nueva y dinámica Casa que surgió durante la Baja Edad Media: Wyrmfoe, mejor conocidos en la península ibérica como los Matadragones. Al contrario que sus parientes de otros lugares del mundo, los Colmillos ibéricos han abandonado el ideal de gobernar sobre la Nación Garou por las hazañas personales.
Los Colmillos ibéricos son caballeros, no reyes. Desde el siglo XIV han colaborado con las demás tribus, luchando en primera línea y demostrando su nobleza a la menor oportunidad y combatiendo codo con codo incluso al lado de Roehuesos y Señores de la Sombra.
Esta valentía en ocasiones se ha convertido en auténtica temeridad rayana en la locura, en lo que los demás Garou ibéricos han denominado “El Síndrome Quijote”. A medida que envejecen, muchos Colmillos Plateados se muestran cada vez más audaces y temerarios en sus esfuerzos, prefiriendo morir en el campo de batalla que en la cama.
Los siglos de batallas sin fin y la emigración hacia América se han cobrado su precio, y los Colmillos Plateados ya no son tan numerosos como antaño, aunque en contraste con otros lugares de Europa, la tribu todavía es bastante dinámica y los casos de locura no son tan frecuentes (sobre todo porque los miembros más dementes suelen apostar por un final lo más glorioso posible).
Los últimos Matadragones viven en sus propiedades, dispersas por Cataluña, Valencia y Andalucía, siempre preparados para la acción y dispuestos a tomar las armas a la menor oportunidad.
Algunos héroes destacados
Antoni”Halcón-de-Invierno” Esturs (Ahroun): El actual líder y “rey” de los Colmillos Plateados españoles es un Ahroun de casi cincuenta años que llegó al poder tras el largo reinado de su tío abuelo Don Lluís “Despierta-laRabia” Esturs. Su familia procede de un linaje aristocrático que ha dado grandes héroes a los Garou.
Antoni comenzó su carrera como un símbolo de juventud, apostura y destreza. Ahora, años después, tiene un largo historial de hazañas impresionantes, entre ellas acabado con el Demonio de Llers, un enemigo ancestral de los hombres lobo. Sin embargo, no ha conseguido superar su timidez natural ni sus dudas, y ahora, tras la muerte de su leal consejero Alfons, se siente más solo que nunca en el trono. No faltan servidores y aduladores, pero Antoni siente cada vez más el peso de la corona sobre su cabeza y ha comenzado a sentir miedo de fallar a los suyos. De momento aguarda con aparente serenidad, pero el pesimismo lo atormenta, junto con los inicios de una depresión y quizás pronto llegue al camino del Harano.
Desde su trono en el Túmulo de las Herraduras de Plata, Antoni busca un sucesor digno. Sin embargo, la decepción le embarga, y en su Clan sólo ve a un grupo de aduladores y oportunistas que ponen por encima su posición que el bienestar de la tribu. Quizás haya llegado el momento de buscar en otro lado, y en estos tiempos no le importa tanto un buen linaje como sangre joven con ilusión y capacidad.
Antoni es un hombre de unos cincuenta años que se mantiene en buena forma. Es alto, rubio, y de ojos azules. Suele vestir con trajes caros y lleva su klaive enfundada en una antiquísima vaina que le protege de los efectos de llevar plata. En forma lupina es un lobo pálido de tonos blancos, amarillentos y ocres.
María Francisca “Voz de Plata” de Guzmán (Galliard): María Francisca nació en una familia descendiente de los Colmillos Plateados en Granada. Sus padres habían sido hidalgos y militares en los últimos siglos, y el fundador de su linaje había sido un héroe de los Colmillos Plateados durante la Guerra de la Independencia.
Estudió en un colegio privado y pasó varios veranos en Francia, donde conoció a destacados intelectuales, diplomáticos y artistas en las fiestas que organizaban sus padres. Fue durante su juventud que decidió estudiar lenguas y literatura y quizás comenzar una carrera como escritora.
La muerte de su padre provocó su Primer Cambio. Recién terminado el instituto, emprendió un viaje por varios países, conociendo a varios miembros de su tribu. Sin embargo, para fastidio de quienes querían convertirla en una figura decorativa y diplomática, María Francisca vio en su naturaleza una puerta a la libertad. Cuando regresó a Granada, se unió a una manada intertribal, aprendiendo a luchar contra el Wyrm no sólo con elegantes palabras, sino con una mano firme cuando era preciso. En estos momentos, su objetivo y el de sus compañeros es encontrar un Túmulo perdido en Granada, que desapareció en algún momento del siglo XIX.
María Francisca es una mujer joven, mediada la veintena, de cabello rubio oscuro, ojos castaños, y rostro alegre y empático. Viste con elegancia y discreción, prefiriendo los tonos sobrios y oscuros, aunque cada vez se muestra más informal en compañía de su manada. En forma lupina, es una loba ibérica, de color pardorrojizo.