LOS PRÓDIGOS
Aunque las hadas consideran que los Pródigos tuvieron un origen similar a ellas y se distanciaron en algún momento del resto de Linajes, convirtiéndose en criaturas por completo distintas, las Selkies muestran una actitud más pragmática y como han hecho siempre con los extraños, mantienen las distancias dedicándose a sus asuntos, huyen si se presenta una amenaza, y luchan cuando tienen que proteger a sus seres queridos y hogares.
Aunque el contacto de las Selkies con los Pródigos es ocasional, guardan buena nota de esos encuentros y comparten la información con el resto del Linaje para que puedan tomar medidas. Si en algo están de acuerdo es en mostrar desconfianza y tener cuidado.
Por suerte para las Selkies, su situación suele permitirles mantenerse al margen de los asuntos de otras criaturas sobrenaturales, pero a veces, ni siquiera ellas están a salvo.
VAMPIROS
Para las Selkies los vampiros son criaturas sucias y repugnantes, que apestan a Banalidad y son peligrosas, posiblemente garrapatas y sanguijuelas que aprendieron a cambiar de forma y se convirtieron en una plaga. Decir que son los descendientes de un asesino bíblico maldito es ser generoso con ellos.
Por suerte para las Selkies, los vampiros prefieren las grandes ciudades llenas de humanidad, donde pueden beber sangre hasta hartarse, así que no tienen que relacionarse mucho con ellos. Sin embargo, a veces surgen problemas cuando alguno aparece en un puerto turístico o se da una vuelta por la playa de noche.
Para su horror, las Selkies han descubierto que algunos vampiros saben “cantar” para atraer a los animales y beber su sangre, y a veces sus queridas focas se convierten en víctimas. Sin embargo, esta canción no funciona con las propias Selkies, ni siquiera en forma de foca, pero aún así, hay vampiros que pueden hipnotizar con su mirada. Dentro del Linaje también circulan historias sobre “barcos muertos”, que navegaban solos después de que los vampiros mataran a la tripulación.
Y hay historias de encuentros aislados y poco frecuentes con criaturas de las profundidades marinas que duermen en el lecho marino y salen por la noche en busca de sangre. Las Selkies creen que se trata de otra especie de vampiros, o quizás de algún monstruo bebedor de sangre emparentado con las lampreas.
CAMBIAFORMAS
Existen otras criaturas capaces de cambiar de forma en el Mundo del Otoño, y que para las eruditas entre las Selkies constituyen un enigma que les gustaría desvelar. Existen hombres lobo y humanos que son capaces de convertirse en otras bestias de tierra firme, pero que en gran parte desconocen el Ensueño, o no es su prioridad. No utilizan Pieles para cambiar de forma, sino que el cambio parece surgir de su interior. Algunas Selkies dicen que estos cambiaformas sirven a Gaia, una diosa de la naturaleza, que es la que les proporcionó sus dones, y que recorren otros mundos distintos al Ensueño. ¿Qué relación podrían tener las Selkies?
Pero entre estos cambiaformas, los que más preocupan y temen las Selkies, son una especie de hombres que toman la forma de los grandes tiburones que habitan las profundidades del mar, por lo que son los que encuentran con más frecuencia. Los tiburones del Mundo del Otoño ya son un peligro por sí mismos, y en más de una ocasión una Selkie despistada ha terminado entre sus fauces hambrientas.
Por suerte, los hombres tiburón parecen un poco más razonables, y aunque se alimentan de focas y otros mamíferos marinos cuando tienen ocasión, si descubren a una Selkie pueden pasar de largo y dejarla en paz...o tal vez no. Protegen sus propias Grutas y lugares sagrados en los fondos marinos, y combaten a los enemigos del mar, pero en cuanto se derrama sangre, mejor irse bien lejos.
Se dice que en algunos lugares, algunas Selkies han establecido pactos de no agresión con estos cambiaformas. Sin embargo, las Selkies siempre recuerdan y advierten a sus compañeras que no dejan de ser tiburones. Los tiburones cazan focas, simplemente está en su naturaleza.
MAGOS
Los humanos tienen una curiosidad que puede resultar perjudicial cuando se meten en los asuntos de las Selkies, y a lo largo de los siglos ha habido humanos que han querido investigar la naturaleza de las focas cambiapieles y las han cazado con resultados desastrosos. Entre estos humanos hay algunos que poseen sus propios dones para dominar la realidad.
Las Selkies y sus Pieles han sido objetivo de estos hechiceros, especialmente durante la Edad Media. Algunos querían robar las Pieles para poder cambiar de forma, y cuando no lo conseguían, las deshacían para crear pociones que permitieran imitar el don. Otros utilizaban las Pieles para chantajear y esclavizar a las Selkies a su servicio. Ni siquiera las ocasionales represalias eran capaces de detenerlos.
Por suerte, parece que la Ruptura no sólo debilitó a las hadas y duendes, sino el estado de la magia en el mundo, y muchos hechiceros perdieron su poder. En la actualidad, son más débiles y menos numerosos que antaño, y pocos son los que persiguen a las Selkies tratando de robar el poder de su Piel. Por si acaso, las Selkies son muy desconfiadas y cautelosas cuando se encuentran con un hechicero o un brujo.
FANTASMAS
A veces, la muerte no es final. Existen humanos que permanecen en el Mundo del Otoño, aferrándose a lo que recuerdan de sus vidas, moviéndose entre este mundo y el Mundo de los Muertos. Las Selkies prefieren evitarlos, ya que huelen a muerte y su presencia parece atraer la Banalidad.
El contacto con los fantasmas es poco frecuente, pero el legado oral de las Selkies está lleno de historias de fantasmas en el mar. Barcos encantados y traslúcidos que navegan por los mares donde naufragaron. Fantasmas de marineros que regresaron del fondo del mar para entregar un mensaje a sus seres queridos, o espectros furiosos que quieren compartir su miseria atrayendo a otros a su perdición. Los tesoros de siglos pasados a veces también suelen tener guardianes fantasmales, que se resisten a renunciar al botín que ansiaron en vida.
Mantener las distancias es lo habitual cuando las Selkies detectan la presencia de un fantasma. Sin embargo, también se dice que algunas Selkies ayudaron a algunas de estas almas sin reposo, entregando su última voluntad, o alertando a otros de dónde se encuentran sus restos para que puedan disfrutar del descanso eterno.