Webvampiro

- JAJAJAJAJAJAJAJA...- El monstruo soltó una enorme carcajada en la que Cesc pudo observar incómodamente una boca gigantesca de la que asomaban unos colmillos especialmente grandes, y conteniendo la risa respondió.- Glu no sirve a nadie porque Glu no es un siervo, en eso nos diferenciamos. Glu trabaja para alguien porque cree en su proyecto y ese alguien, de aceptar siervos, no escogería a uno tan enclenque como tú. No,- y en este momento puso la voz del agente López- usted, señor Cesc, y disculpe por si hago un juicio demasiado simple, sirve a otro tipo de intereses: los de su clan, tal vez, los suyos propios, los de su señor..., por cierto, ¿cómo has dicho que se llama aquel al que sirves? Espera... que no lo has dicho...- y en ese momento se movió al salón- pero pongámonos más cómodos, este tipo moribundo parece que te incomoda,- y cambiando la voz de nuevo le lanzó a Cesc una orden- Siéntate, Glu se ocupa.

Spoiler:

{ https://www.youtube.com/watch?v=NlprozGcs80 - Canon by Pachelbel }

{ https://www.youtube.com/watch?v=lV8i-pSVMaQ - Jaws Theme by John Williams }

Glu tardó unos minutos más en salir de baño, su cara expresaba la satisfacción de un trabajo bien hecho, sus manos manchadas la crueldad bien hecha de ese trabajo. Miró a Cesc y con una mueca de alegría le dijo:

- Muy bien, pajarito, Glu está muy contento con tu comportamiento, has sido un chico obediente y te has portado bien, mami te dará natillas esta noche. Ahora esperaremos tranquilamente a que llegue el blanquito, él no se portó tan bien, ¿sabes?

Aquella mole se sentó en el sofá, tranquilamente, sonriendo. Esperaba paciente aquel momento en el que rompería esa tranquilidad y casi por un momento parecía muy interesado en lo que Cesc tenía que contar.

Spoiler: Mientras tanto, el taxi de Daren llegaba su destino y un mensaje sonaba en el grupo de la coterie.

- Son 20 euros.

El albino no lo escuchó. Ver ese maldito nombre reflejado en la pantalla del móvil le había dejado inmóvil completamente. Pasaron unos pocos segundos.

- ¿Señor? Esta es la dirección.

- Sí...perdone...disculpe- guardó el móvil tembloroso en el bolsillo y sacó como pudo la cartera. Los nervios traicionaban la disciplinada mano que rebuscaba el billete de 20 euros conforme intentaba despegarlo de otros papeles que tenía guardados ahí. Pagó y se bajó del coche.

Cuando bajó, volvió a pegarse el móvil casi a la nariz y volvió a mandar otro mensaje a Bruno.

Cita:

WHERE THE FUCKING SHIT ARE YOU? Sabbat tiene a Cesc! Bruno!

<¿Y si es una trampa?¿y si Francesc ya está muerto?¡Maldita sea!> pensó levantándose las solapas de su chaqueta negra y evitando la luz anaranjada de las farolas.

<Situación, Egwu, planteamiento del problema...identificar primero las variables> seguía pensando. Decidió avanzar por una de las calles laterales del edificio vigilando que no hubiera ventanas directas a la calle por ese lado. A todas luces pretendía llegar al portón sin que nadie lo viese venir por la calle. Al menos había gente por la calle, era verano, pero claramente él se distinguía del resto de personas que iban con ropa ligera y andaban tranquilamente. Él no podía. Estaba muy asustado y muy rabioso.

<Esto es muy extraño...¿por qué no me ha esperado en el piso donde estaba Pere?¿por qué se está usando de Cesc para que vaya allí?

Cuando llegó al portón, se detuvo. Bien pegado a la pared observó el edificio de enfrente un momento, apoyando la mano sobre el pomo del portón, se agarraba al pomo como si con eso consiguiera el valor que necesitaba para afrontar lo que estaba ocurriendo. Se sacó el móvil e hizo una búsqueda rápida sobre los términos slang de la palabra droga en catalán, pero al bajar la mirada hacia la pantalla se dio cuenta de que empezaba a salir sangre de debajo de la puerta y esto hizo que declinara su intención de que cualquiera del edificio le abriese la puerta con un simple engaño.

Lentamente volvió a guardarse el móvil, no sin antes ponerlo en silencio quitándole la vibración y agarró el pomo de la puerta apretándolo cada vez con más fuerza...usándose de su poder de la sangre para forzar el mecanismo y romperlo en silencio.

Dos chicos jóvenes se detuvieron frente a la puerta y esperaron la reacción del tanzano, que rápidamente apartó la mano para permitirles meter la llave y entrar. Cuando entraron, la puerta casi se iba a cerrar cuando el albino puso el pie como tope, esperando que ambos siguieran su camino en dirección a su piso. En el momento que desaparecieron tras su puerta, silenciosamente, el tremere empujó con el piel la puerta y caminó muy despacio hacia la escalera, poniendo su movil en silencio sin vibración.


Spoiler:

Pasaron un par de minutos y el monstruo cambió de actitud, ahora era un niño impaciente y malhumorado con un plato de brócoli y zanahoras delante esperando un postre de chocolate blanco con nueces el cual podía oler ya y que al parecer todavía no había llegado. Así que miró a Cesc con un gesto desagradable y le con voz seca y cortante: "Está tardando mucho...", lo que no dijo o al menos no con un tono audible para Cesc fue: "...y se me acaba el tiempo". ¿A qué se refería exactamente? ¿Acaso el monstruo tendría que hacer algo importante después? ¿O quizás la experiencia haciendo este tipo de juegos le habría llevado a calcular el tiempo de reacción de los agentes externos? ¿Cuánto tardarían el resto de mossos en echar de menos a Sols y a López? ¿Cuándo algún vecino decidiría atreverse a salir de casa y se encontraría con el cadáver de Julia? O quizá fuera alguna posibilidad mucho más retorcida, tal vez...

Al otro lado de la puerta Daren pudo escuchar aquella particular voz y a pesar de que una parte de él deseaba que Cesc estuviera equivocado se trataba indudablemente de aquel monstruo grande y cruel que lo atacó hacía sólo unas semanas y del que se logró librar casi milagrosamente.

Spoiler:

Cada paso era un nuevo nudo en la garganta del tremere y otro poco más de adrenalina, si su cuerpo aún soltase dicha hormona como cuando estaba vivo. Subía despacio pero intentando aligerar el paso para llegar a donde quería. Más alto. Más oscuro.

<Sabbat. Sabbat, Sabbat...ese monstruo es del Sabbat.> pensaba apretando los dientes. Era extraño, estaba cada vez más aterrorizado por la idea de volver a verlo. Y más rabioso también. Algo en su ser se removía con furia y esa voz sibilina era lo que estaba permitiendo que su mente pensara de nuevo a toda velocidad cómo sacar de ahí con vida a Fornals. Y de nuevo, en la ansiedad que le traía el recuerdo de aquel ser en el piso de la vecina de Amelia, le volvía la misma idea. El mismo poema.

Canto IX "La Odisea"

“—¿Por qué, Polifemo, profieres tan tristes clamores durante la noche y nos arrancas del sueño? ¿Alguien, entre las mortales, te habrá robado tus rebaños? ¿Alguien te habrá dominado por la astucia o por la violencia?

“Polifemo, desde el fondo de su antro, responde con estas palabras:

“—Amigos míos, Nadie me ha dominado por la astucia y no por la fuerza.

<Y nadie soy para enfrentarme a esta mala bestia, apenas pude escapar la última vez...Ulises engañó una sola vez a Polifemo. Y este Polifemo además es menos estúpido y más tramposo. Mierda. Estúpido Egwu...te atrapará esta vez...y me necesitarás...> la última frase se coló en sus pensamientos bordada con la misma velocidad que el resto, intentando recordarle que al final su supervivencia dependería de aquella asquerosa presencia que le advertía de que no siempre podría solucionar las cosas de forma limpia...de que tendría que escucharla y al final obedecerla trazando en su conciencia duras decisiones cada vez más deshumanizadas....

Spoiler: Un pie en el primer peldaño que le llevaba al piso superior, alejado de la puerta del piso. La oscuridad era aún más densa pero algo de luz había brotado en su inteligencia, porque al rozar el bolsillo de su chaqueta buscando su puñal, notó una de las dos piedras de lapislazuli y una idea le cruzó veloz y desesperada como un relámpago. Miró desde arriba por fín, la notable distancia contra el suelo del hueco de la escalera por el que se podían ver todos los pisos abajo. Sacó la piedra de lapislazuli que había usado en el ritual y la dejó caer con toda intención de que causara algo de estruendo en el pasamanos del piso bajo. Rápidamente se ocultó en la escalera y sacó su puñal.

<¿Sabes Egwu? Te mereces esta mierda. Por cobarde y orgulloso. Ya lo decía ese autor....Reverte. En el "Club Dumas"..."cada cual tiene el diablo que se merece" > la voz sibilina volvía a atacar, pero él apretó los ojos rápido para hacerla callar.

Era tentar dos veces a la suerte. Pero como una vez le dijo Laren....

Cita:

- Un día aprenderás que la lógica de atacar cuando sientas tus fuerzas igualadas es precisamente la estupidez que esperan tus enemigos - me dijo ella mientras se cruzaba los brazos - que pierdas el tiempo reorganizando fuerzas mientras ellos acumulan más, y entonces así, agotes las escasas probabilidades del uso del factor sorpresa.

No. Bruno no vendría. No, nadie llegaría a tiempo. Él no era nadie, pero era el que estaba.

Spoiler: