¿Qué te motiva a rolear?

[Baudelaire]

La hoja de personaje es un breve resumen de todos los aspectos que le hacen ser quién es. Tal como un dibujo de un ojo… NO es un ojo; la hoja está lejísimos de ser exactamente lo que quiero jugar. Si la tomo como una tabla de arcilla que dicta sus acciones, será bastante limitado lo que podré interpretar. Si la veo como una guía referencial, probablemente habrá más espacio para ir más allá.

En algunos manuales se comparan personajes con atributos equivalentes, pero que se explican de manera diferente… lo que significa que tienen conceptos también distanciados. Lo mismo para los arquetipos de personalidad, son categorías amplias y es entretenido matizarles. Con dos personajes A y B (en la Era Victoriana) que poseen la misma naturaleza: futurista… A piensa que la sociedad se convertirá en un estado policial brutal y B, por el contrario, apuesta a que llegará la eudaimonía soñada por los pueblos helénicos.

Igualmente, en muchas de las partidas en las que he jugado… los dados han yacido dormidos durante capítulos completos. Si mi personaje tiene Apariencia 4, aún si lanzar un dado… hay consecuencias en la reacción que obtiene. Si mis dados son saltarines o más tranquilos, en nada afectan las posibilidades que hay de utilizar un atributo narrativamente. Justo ahora estoy interpretando a un soldado mongol que se halla en el Egipto recién conquistado por Napoleón. Acaba de aprender como usar un fusil; a pesar que sabe como usarlo, nunca lo ha disparado. Su puntuación de armas de fuego es cero… pero al acumular la experiencia suficiente comprará el primer punto, lo que será coincidente (probablemente) con su primera experiencia en una batalla de la época. Domina su arco compuesto corto y tirar flechas desde un caballo, ¿cómo se compara tal entrenamiento con la pólvora y la explosión que podría quemarle (es un vampiro saliendo de un letargo de 2 siglos)?

Hacerse preguntas por el significado de lo que estará anotado en la hoja ayuda a que sea una mejor representación. Si es por tener círculos pintados de negro, puedo simplemente hacerlo sin historia alguna. Sin embargo, mi interés personal es la consistencia entre lo que ha experimentado mi personaje y lo que está registrado en la hoja. Igualmente, lo que cambiará será en consecuencia de lo que se haya desarrollado dentro del juego.

[Xenomorph93]

La vida es incontrable, siempre acarrea consecuiencias sin importar cuales sean.
Vivimos en un mundo ( bibimos en una zociedad, lo se ) en que realmente no podemos ni salir a la esquina una noche a las tres de la mañana sin sus consecuencias. El rol justamente lo que nos permite (sin cruzar la realidad obvio) es experimentar todos esos roles, como si fueran vidas aparte. Podemos ponerle cosas que nuestro persona no haria, crearle rivales, ver como crece , como se desarrolla , el amor que desarrollas por tus personajes.

Es algo que hasta ahora nadie ha podido entender, salvo con quienes escribi la historia y seguramente ustedes. Llevamos desarrollando historias desde 2007 con estos personajes de MDT, y muchos de los personajes han muerto y otros evolucionado, pero ninguno es igual que cuando empezo... representamos retos y desafios por medio de villanos que representaban injusticias del mundo real, miedos y he llegado a amarles incluso a los villanos mas odiados.

Ha tenido un impacto mas emocional que un simple Hobby al compartirlo con muy buena gente.

[Baudelaire]

Los juegos de rol, al ser sociales, inevitablemente contienen el componente emocional.

Si hay diégesis, magnífico. Si mis ganas de reír coinciden con las ganas de reír de mi personaje es una maravilla.

Si se hace coincidir la alimentación fuera de juego con la escena dentro de juego, la inmersión es brutal.

Una pequeña muestra de diégesis:

En una escena de Mano Negra: Vampiro (ambientada en 2 mil 1, en plena Gehenna), la jugamos un rato en la terraza del balcón de la anfitriona. Invité al grupo, era yo el narrador, a acomodarse allí. Les entregué cascos de bicicleta para simular los antiguos de un biplano. En el mundo real, eran cuatro sillas y unas tablas simulando las alas. El vuelo era en medio de una tormenta cerca de los Himalaya y justo estaba lloviendo ese día en Santiago de Chile. Soplaba algo de viento y se sentía el frío.

Ya puedes imaginarte el resto, el pobre armatoste pierde el control y se produce un aterrizaje de emergencia en una pista remota. Entonces nos sentamos a la mesa, porque al interior de una bodega junto al hangar el kamut encontró una.

Parece a medio camino entre rol en vivo y rol convencional. Pero funciona perfectamente con un grupo que ha acordado un contrato lúdico para desarrollar cada capítulo de aquélla manera.

Antes del embarazo de una jugadora (que interpretaba a una noruega reconvertida a la religión odínica… una escalda), cada sesión tenía una pequeña escenografía. Jugábamos en los distintos rincones de mi cuchitril (salvo aquél vuelo y el preludio en un bar parisino en departamento de tal jugadora).

Sin embargo, cuándo Caín saltó desde el Everest a la Luna, sintió que se había roto un límite tácito para ella. Estuvo algunas sesiones sin participar, hasta que finalmente se "desuscribió de la partida". Había dejado de tener la motivación para seguir y lo expresó en términos de un videojuego. Pero luego me lo explicó, para ese momento ya era imposible volver a reunirse con la explosión social que había comenzado. Un jugador y una jugadora que se habían distanciado por asuntos afectivos. Así que el grupo terminó deshaciéndose inevitablemente.

Antes que la emergencia sanitaria nos atrapara, intenté reunir nuevamente al kamut para mi cumpleaños. Sin embargo, la coordinación fue imposible.

¿Quién sabe si alguna vez seguiremos avanzando en la crónica? Lo que sí sé es que aún con otro grupo y quiénes deseen continuar, me gustaría retomarla.

La experiencia fue increíble y era muy agradable preparar la salita cada viernes por la noche.