JDN - Escena IV: Agua

#21

Me quedo con el grupo en silencio, observando alrededor mientras caminamos y, una vez nos acercamos a la cueva, enciendo mi linterna apuntando hacia dentro, percatándome junto al resto de las pisadas dejadas por lo perros y policías que estuvieron aquí durante el día.

Suspiro observando todo aquel desorden y como los demás se van organizando, por lo intento concentrarme y relajarme un poco antes de extender un poco mi mano, dejando que el péndulo cuelgue de mi muñeca. Detengo su movimiento con mi otra mano, y hago la consulta mentalmente.

Muéstrame donde esta Erin pienso con intensidad, pero prontamente recapacito la consulta, pues esto no es como un perro que marca el terreno exacto donde estará algo, solo es un guía. Por lo que formulo otra solicitud Si Erin estuvo aquí o paso por esta cueva, favor muéstrame donde estuvo o paso

Aguardo la respuesta o lo que pueda generar el objeto.

#22

-"Deberíamos ir pensando cuánto tiempo vamos a estar buecando, no creo que más de 1h, cómo mucho, fuera recomendable. NInguno querrá que los abuelos de Jessie llamen a la poli, no?."- Pienso en la azotaine que me dará mi padre si pasa algo malo, mientras enciendo la linterna y a punto al suelo , mirando las huellas.

#23

El interior de la cueva está casi completamente a oscuras. El cielo gris apenas permite que pase un rayo de luz por la entrada de la cueva o el hueco que hay en el techo, y vuestras linternas solo alumbran un círculo bastante pequeño. Jessie siente la respiración agitada de su hurón cuando lo coge en brazos, pero al acariciarlo parece tranquilizarselo suficiente como para no tener que meterlo en la mochila.

A la luz de las linternas la cueva parece diferente. La piedra húmeda emite pequeños destellos al iluminar las pequeñas gotas de agua con las linternas. En otra situación quizá os hubiese parecido bonito, pero cada destello os hace volver la vista con la sensación de haber visto algo moviendose.

El péndulo de Mateo oscila varias veces antes de detenerse por completo, para después comenzar a girar lentamente sobre sí mismo debido a a la tensión de la cuerda. Mateo se queda mirándolo unos segundos, pero de repente la luz de una de las linternas le da en cara y le deslumbra.

-¿Que estás haciendo?- le pregunta Paul W., y tras parpadear un par de veces se da cuenta de que es él quien le está alumbrando. Sin embargo antes de responder, distingue algo por el rabillo del ojo que le llama la atención. El péndulo metálico refleja la luz de la linterna de Paul, creando un pequeño punto irregular de luz que recorre parte del fondo del riachuelo. Sin embargo, durante un segundo este desaparece, para reaparecer a medio metro de distancia. Al alumbrar con la linterna ese punto, Mateo descubre una mancha completamente negra donde debería haber arena. Pegado a la roca, hay un hueco de medio metro de ancho y apenas veinte centímetros de alto, exactamente en el mismo lugar en el que el día anterior vio algo que le provocó escalofríos.

Mientras tanto, Paul K. es el único que ha decidido quedarse en el exterior de la cueva inspeccionando las huellas. Todas las que encuentra son de adultos y de perros, aunque extrañamente no hay ninguna de estos últimos a menos de metro y medio de la entrada de la cueva. La mayoría estan parcialmente borradas, pero todas están revueltas, por lo que no parecen haber seguido una direccion concreta. Paul está a punto de darse por vencido y entrar en la cueva junto con sus compañeros, cuando descubre tres huellas casi completamente borradas en uno de los laterales de la cueva. A diferencia del resto no son de botas sino de deportivas, pero sobretodo son bastante más pequeñas que las de la policía.

Lo bastante pequeñas como para ser de una chica de su edad.

Moctezuma_I · #24

Quizás fuese la ausencia de un adulto, o quizás el que sus linternas no tenían la suficiente potencia para ahuyentar a la oscuridad, pero a la niña le pareció mas tenebrosa la cueva de lo que la recordaba. Acaricio a Mr. Socks tanto para calmar al animalito, como para tranquilizarse a sí misma. Pero algo llamo su atención, Jessie observaba a Mateo, le resultaba extraño el objeto que estaba manipulando, parecía un reloj de bolsillo, pero sin reloj, más extraña aún era verle con el brazo extendido tratando que esa cosa no oscilara, o ¿estaba tratando de que si lo hiciese? No entendía que estaba haciendo, pero no dijo nada y permaneció intrigada.

Cuando Mateo señalo la oscuridad en la roca permaneció boquiabierta, como puede ser que no la viese el otro día, de hecho, le parecía que fue ahí al lado donde cayó.

- ¿Sera profundo ese agujero? Quizás deberíamos mirar dentro. La niña se agacho y agarro una piedra y la tiro al hueco, para saber cuan profundo podía ser.

#25

-Chicos, necesito que alguno saque una foto con el móvil de esto, he descubierto unas huellas de pies pequeños, podía ser importante.- Espero la llegada de alguno de mis compas sin perder de vista esas huellas de zapatillas, ahora sé que un niño, o niña, estuvo en la cueva, haciendo que mis esperanzas aumenten.

#26

Rory Donegal

Rory se quedó quieto inclinando la cabeza mientras trataba de enfocar la mirada sobre aquella mancha oscura en la charca. Se acercó unos pasos ensimismado hasta que el chapoteo de la piedra le hizo volver en sí.

- ¡Un momento!- le gritó al compañero que esperaba fuera.

Su mirada volvió a concentrarse en la piedra y la mancha, a ver que pasaba...

#27

Quedo sorprendido ante el comentario de Paul, lo que me desconcentra un poco de lo que estaba intentando de hacer, sin embargo, esto hace que podamos descubrir algo inusual.

-Ehm, es un péndulo ¿Qué es ese agujero? Observo a los demás acercándose hasta el lugar, pero me llama la atención lo que menciona el otro Paul, por lo que me alejo de los demás hasta ir donde esta él, mientras guardo mi péndulo - ¿En encontraste algo? - Me acerco despacio para ver que esta viendo, mientras saco mi celular.

#28

Al alumbrarlo de cerca con las linternas alcanzais a ver el fondo del agujero. A través del agua no resulta fácil calcular la profundidad a la que se encuentra el fondo arenoso, pero cuando Jessie tira una piedra veis que debe de medir medio metro hacia abajo. Sin embargo, parece extenderse más en horizontal, os cuesta colocar las linternas en el agua para alumbrar el interior evitando que se mojen, pero podría llegar a los dos metros de longitud. No alcanzaríais el final del hueco únicamente metiendo el brazo.

Mateo ve rápidamente las huellas que señala Paul K. Caminaban hacia el bosque, en dirección opuesta a la entrada de la cueva, y las suelas habían dejado un dibujo bastante curioso en la tierra. Mientras que la mayoría de deportivas tenían dibujos complejos en la suela, esta solo tenía lineas horizontales, exáctamente a la misma distancia unas de otras. Comparándolas con vuestros pies, son un par de números más pequeñas, como poco, por lo que seguramente pertenezcan a una chica o a un niño más pequeño que vosotros. En cualquier caso, os queda claro que no son de ninguno de los dos, y seguramente tampoco de Rory ni de los gemelos.

#29

-Fotografía las huellas y la dirección que toman, puede ser una pista para otro día, ahora volvamos con el resto para que no se metan en líos.- Pensar en ésas huellas de pies pequeños me llena de asombro. ¿ Los peques se adentran tanto en el bosque sin supervisión ? o son muy valientes o yo soy un cagado, además, hemos venido para mirar en la cueva, y no hay tiempo para jugar a detectives en el exterior.

Moctezuma_I · #30

La niña era de una naturaleza curiosa e impulsiva, pensó que no era mucha la distancia ni la profundidad, su pequeño cuerpo podría meterse en esa grieta sin problemas. Además, ella era buena nadadora, así que no le debería costar mucho esfuerzo bucear los 2 m. Consciente que de todos los presentes probablemente era la única que tenía una muda seca en la mochila. Así que no se lo pensó mucho, aún era una niña de mentalidad infantil y no sentía ninguna atracción hacia los muchachos que la acompañaban, así que el pudor que sentiría en el futuro por desvestirse delante de un chico no estaba presente en la actualidad. Así que con la imprudencia propia que le caracterizaba saco la bolsa en la que llevaba la galleta, dejo la galleta con Mr. Socks encerrado en la mochila y se quitó las zapatillas y dejo los calcetines dentro, y los puso a un lado de la mochila, se quitó el vestido y lo puso sobre su calzado y quedándose con la ropa interior típica de una niña de su edad, agarro la bolsa y metió la linterna dentro para que no se mojara y continuase alumbrando. Consciente en ese momento de que los muchachos la estaban mirando, les dice: -No me miren así embobados. Solo voy a ver que hay al otro lado, ustedes esperen aquí si lo desean, quizás haya una pista allá dentro. - Después meditándolo un poco, deja las siguientes instrucciones antes de internarse en la estrecha grieta -Alumbren la entrada del túnel por si se me apaga la linterna. Si alguien quiere seguirme que me siga. No tardare en volver. Y por favor estén atento a Mr. Socks que no se escape- mientras se metía en la fría agua, esta, estaba realmente helada más de lo que lo recordaba, tanto que tuvo que hacer realmente un esfuerzo para poder, meterse en ella y sumergirse para adentrarse en el estrecho hueco.