Episodio 4. Reset & reload

[Voivoda]

Eres nuestros ojos y oídos en la calle.

En pocas noches había cambiado bastante el panorama y las palabras de Anders resonaban como un goteo constante en tus pensamientos. El Regente de la Capilla de Copenhague apenas te había hablado antes. Te habías llegado a cruzar con él por los pasillos de la Capilla y apenas había dado un taimado "buenas noches", como el que un jefe da a un empleado en un pasillo de una oficina. La charla de media hora que tuviste hace un par de noches con él ha sido la conversación más larga que habéis mantenido y, por ello, no te esperabas su muestra de confianza.

Eres nuestros ojos y oídos en la calle.

Por alguna razón de la que el Regente no ha dado más explicaciones, no parece que el concepto tradicional de Coterie sea seguro para el Clan en Copenhague. Anders entiende que el curso de vuestras investigaciones y descubrimientos requiere de un trabajo por separado utilizando determinadas salas de Bloodspot como escenario de contacto entre unos y otros. Un grupo de Brujos trabajando juntos por la ciudad parece que pone algo nerviosos al resto de Vástagos. Discreción, lealtad e información compartida. Los tres principios que deben regir nuestras decisiones, según Anders.

Vincent había mostrado al parecer sus preocupaciones por la posibilidad de que os estuvieran siguiendo de alguna manera. El vehemente nuevo fichaje de la Capilla había vuelto a Finlandia después de vuestras indagaciones sobre MT Hojgaard y la señora Koivunen. Al parecer, vuestro compañero de Clan tenía ya una cierta relación pasada con Tampere, la ciudad finlandesa en la que se licenció y había trabajado en su día la ejecutiva de MT. Vincent intentaba ahora consolidar su presencia allí con un refugio seguro, tras lo que se había comprometido a contactar con vosotros vía Bloodspot.

Eres nuestros ojos y oídos en la calle.

El pobre Alexander había terminado por desistir de vuestras andanzas. Con gesto apesadumbrado, quizá con un cierto tono de vergüenza en su voz, había acudido a tu habitación hacía algunas noches. La conversación con Munk y el descubrimiento de los susurros hambrientos de su propia Bestia ante el miedo del concejal le habían hecho sentir incómodo. Cada salida fuera de los muros de la moderna Capilla de Copenhague le generaban una ansiedad y una tensión que le ponían en permanente lucha consigo mismo. Al parecer, Anders había dado cierta credibilidad a la teoría de Lars sobre una posible distorsión espacio-temporal relacionada con el crimen que investigáis. Casi sin atreverse a mirarte cara a cara, Alexander te había comunicado que iba a dedicarse en cuerpo y alma al estudio de una posible respuesta que uniera los principios de la física y los de la Taumaturgia.

Le sonreíste con calidez como respuesta. Sabes que es lo mejor para él, probablemente también para ti... y que en un laboratorio él es de más ayuda a tu Sire que tú misma, que sí necesitas el aire fresco de la noche.

Eres nuestros ojos y oídos en la calle.

La frase de Anders era una invitación a convertirte en el principal, por no decir único, agente en movimiento del Clan por Copenhague cada noche. Por el chat de Bloodspot también has visto a dos hermanos más de Clan, Soren y Sara. Ambos están asentados en la vecina ciudad de Malmö, ya en Suecia, desde donde al parecer informan directamente al Regente de Copenhague de lo que sea que estén investigando. Investigaciones que, en todo caso, parece que han reforzado la necesidad de ahondar más en la línea de estudio que apuntó Lars hace algunas noches.

Tenías por tanto una amplia red de contactos y posibilidades dentro del Clan, una especie de amplia Coterie a distancia. Pero realmente estabas sola. Desentrañar qué coño implicaba la muerte del chico en el puente de Oresund y qué papel juega MT en todo ello quedaba prácticamente en tus manos.

- ¿Me estás escuchando?

La voz te saca de tu larguísimo ensimismamiento. Aterrizas de golpe en tu nueva realidad. Tu nueva realidad es una sala de striptease cerrada y vacía en la parte trasera de un antro en el que has sido testigo de todo tipo de actividades lúdicas y sexuales antes de acceder a esta estancia. Vuelve de nuevo a tus oídos el lejano martilleo de la música tecno al otro lado de las puertas insonorizadas. Además de la barra y el escenario, y de una multitud de sillones acolchados, sólo tienes por compañía a la peculiar mujer trans con quien Anders te ha recomendado reunirte esta noche.

Musitas un "perdón" y vuelves a prestarle atención. Su nombre es Job y al parecer es una reconocida Tecnomante (nombre con el que en el Clan se denomina a los Taumaturgos especializados en las nuevas tecnologías) que ha llegado a Dinamarca hace algunos meses procedente de Estados Unidos. A pesar de que mantiene los rasgos físicos generales de un hombre, Job, que tiene unos marcados rasgos asiáticos, viste y se maquilla como una mujer y habla de sí misma en femenino. De hecho lleva un vestido de noche y unos tacones de aguja finísima, así como una marcada línea de maquillaje en sus labios y en sus ojos. Lleva la cabeza rapada, lo que da a todo el conjunto un aspecto cuando menos llamativo. Frente a ella ha apoyado en la mesa su notebook de Apple, cuyo logo emite un destello azulado. Te mira con gesto de cierto enfado, cruza una pierna sobre la otra y da una calada a un cigarrillo que según la ley no debería poder fumar aquí dentro. La ley, en todo caso, no parece haber entrado en este lugar.

Job se puso en contacto hace algunas noches con Anders, Lars y Claudia. Al parecer, un grupo de Vástagos había contactado con ella para investigar un caso parecido al que tienes entre manos.

- En la misma noche en que descubristéis el caso del puente, la policía localizó otros cuerpos de adolescentes muertos en la isla de Saltholm, que por cierto está prácticamente debajo del puente. La versión oficial es que murieron por una sobredosis. El caso es que a la misma hora, hubo un minicorte en toda la red de Bloodspot. Apenas perceptible, pero un corte que no debería haberse producido con los sistemas de protección que tiene la red. Es más -dice cogiendo carrerilla- situaciones parecidas con crímenes extraños y microcortes en nuestras redes se produjeron al mismo tiempo en otras ciudades del mundo. Mis propios hermanos y hermanas de Coterie están en esas ciudades investigando como hago yo aquí.

Job da una larga calada al cigarrillo.

- Querida, no te quiero aburrir. El caso es que la idea de tu Sire no es tan descabellada, hay ciertos elementos que pueden hacer pensar en algún tipo de distorsión temporal.. Yo estoy en este gélido país para descubrir qué coño ha pasado en la Red, para comprobar si hay una explicación a esa distorsión desde el punto de vista de la física cuántica aplicada a la tecnología. Tu Sire y ese chiquillo que tiene parece que son más místicos. En fin, espero resolverlo cuanto antes porque, con todo el cariño por tu ciudad, tengo la sangre congelada y espero volverme a casa cuanto antes -Job realiza un suspiro teatral e innecesario- Me dijo Anders que esto es lo que más te podía interesar.

Con un movimiento de su mano izquierda expande una especie de plano en 3D desde la pantalla a un espacio en el aire donde queda flotando por encima de ti. Lo miras sin terminar de comprender.

- Estos son los planos de la obra que MT Hojgaard quería realizar en el puente de Oresund y que ahora está en todos los periódicos por el escándalo de corrupción que según me dijo tu Regente conocías bien. Es una obra desproporcionada -Job va señalando distintos puntos del plano- Es cierto que querían realizar una estación eléctrica subacuática, un párking y un espacio de almacenaje de contenedores de barcos como han dicho oficialmente. Pero lo cierto es que la obra incluye más espacios que no sabemos a qué se pueden dedicar y por lo que entiendo de los planos, una cantidad de generadores que podrían dar electricidad a toda Dinamarca. Una barbaridad, vaya.

Con otro movimiento, dirige el mapa hacia tu móvil, que vibra al recibir el documento.

- Ahora te mandaré mi número de teléfono y una dirección en Bloodspot por si quieres contactar conmigo. No sé más de tus investigaciones, esto es cuanto puedo ofrecerte. Como le dije a Anders, hay otros Vástagos investigando el asunto de Saltholm y las posibles distorsiones espacio-temporales. Creo sinceramente que no tienen el potencial ni la capacidad de investigación que tiene nuestro Clan en su conjunto, pero conviene que sepas que no eres la única que está haciendo preguntas aquí y allá. En algunos chats de la Red de hecho se habla de un grupo de Brujos, o de una Bruja... Bueno, de momento parecen rumores de quienes nos temen por nuestra tradición de, por así decir, no ser muy transparentes. Pero bueno, ten cuidado en todo caso.

Mantienes tus manos metidas en los bolsillos de tu chaqueta. Puedes tocar con los dedos el papel con los nombres que apuntó Sidse. Hace apenas una semana de aquella reunión, aunque ahora parece que hubieran pasado años.

Eres nuestros ojos y oídos en la calle.

OFF: Tienes -4 puntos de Sangre.

Pues allá vamos. Soy consciente de que este turno es muy largo, pero para reconducir la partida y dirigirla a una partida en solitario había que realizar algunos ajustes y proporcionar a Birgitte un cuadro completo de la situación. La idea es que Birgitte entienda que el Clan Tremere renuncia en cierto modo al sistema tradicional de Coteries para reforzar su red interna. Creo además que da más coherencia al Clan. De este modo, Vincent, Alexander, Soren, Sara y Job (es decir, todos los PJs que se han caído y además un PNJ Tremere que quedaba suelto) se convierten en tus Contactos. Dejando a un lado a Alexander, cuya relación con Birgitte sigue siendo estrecha lógicamente, con el resto no es que tengas "amistad", pero todos jugáis en el mismo bando: el del Clan Tremere.

Creo que es una manera de dar coherencia al Clan y al hecho de que Birgitte se vaya a mover sola. En cuanto a la investigación en sí, pues en este post no avanzamos mucho, pero bueno, al estar tú solo pues te invito a poner un poco en orden la información que tienes y vamos tirando. Creo que nos lo vamos a pasar bien.

[DarkOsca]

Muchas cosas han cambiado en la vida de Birgitte en las últimas semanas. El primer cambio ha sido relacionado con su coterie. 3 lobos solitarios unidos por un objetivo común. Sonaba bien pero el resultado no fue todo lo satisfactorio que debía ser. Birgitte estaba exhausta de tirar de sus compañeros. Vincent era un sabueso, pero ocultaba más de lo que mostraba. Establecer la confianza necesaria para ser realmente eficaces habría costado demasiado. Con Alexander el caso es distinto. Lo conoce bien. No se encuentra cómodo fuera de las paredes de la Capilla. Fuera de su mundo. Cada vez que lo miraba desprendía ese halo de tristeza de encontrarse en un lugar que no le pertenecía. Mejor así, mejor cada uno trabajando en su especialidad.

Anders le sigue pareciendo distante. Pese a haber tenido una ¿conversación? de varios minutos con él no cree que hayan empatizado nada. Es algo que pasa con casi todos los Brujos que conoce. Establecen en torno a sí una coraza que raras veces dejan penetrar. Todo es tan duro, tan frío. Mejor seguir tratado con Lars. Él, al menos, es un oído que escucha, que no siempre prejuzga.

Surgen aliados, contactos, por todas partes, aquí, en la ciudad, en Suecia, Finlandia. Este tema es lo más grande que ha tenido Birgitte entre manos en su no vida. Ha aprendido, de sus compañeros de coterie, a ser más paciente, a no lanzarse a la calle sin tener un propósito concreto. Como una hormiguita, su primer objetivo va a ser recopilar toda la información que tiene. El segundo, contactar con sus nuevos compañeros y ampliar el foco de la imagen obtenida. Aunque todavía no estén ordenadas, quiere tener todas las piezas disponibles.

1.- El principal foco de investigación al que estaban atendiendo era Kuivonen. La finlandesa es el punto de entrada a MT, corporación que está detrás de todo esto. Unas obras desproporcionadas, que sin duda esconden algo. Allí parece estar el origen de todo. Un bucle espacio-temporal o algo así, ha dicho Lars, aquí Birgitte puede incidir poco, será mejor que sus más capaces compañeros sigan por esa línea y la tengan convenientemente informada. Sidse ha nombrado a 2 personas que podían saber algo más Mette Marie y Sam. Nombrarle a Lindhart a la finlandesa.

2.- Pilou Munk. El concejal está completamente quemado. La conciencia de Horms hace que haga algunas llamadas, sin exponerse demasiado, para intentar proteger a Munk. Parece que es demasiado tarde, está sentenciado.

3.-Niño asesinado. Ropajes. Salud dental muy escasa. Se alimentaba de pescado. Tuberculosis. La policía no ha llegado a ninguna conclusión precisa. Lindhart. Sayal. La última conclusión a la que se había llegado es que quizá se tratara de un niño de otro tiempo, enlazando con el bucle temporal antes nombrado.

4.- Obispo celebrando misa. He percibido el olor a sangre fresca y a una madre abrazando a un joven. Esto fue lo que dijo Vincent cuando examinó las prendas del niño. Otro camino difícil de seguir de manera concreta pero, quizá, abstractamente, esté indicando un ritual que siguieron. La pista no está tanto relacionado con el quién y dónde sino el qué.

5.- Konge. Empresa funeraria regentada por los Giovanni. Familia König. Rama de la investigación que está sin tocar. Sería conveniente no llamar a puerta fría, establecer un punto de contacto previo.

6.- Por eso he apuntado el nombre de Ascario de Amiens, Absalón y Swen de Roskilde. Hechos pasados relacionados con el clan Malkavian y el Tremere. Este puede ser el origen de todo. Teniendo a tanto erudito trabajando en ello, imagino que lo mejor sería contactar con ellos para completar la información.

Con esto concluye la recopilación de pistas. Con infinita paciencia Birgitte rellena una pizarra con todas ellas. Tiene que trabajar en cada una, pero antes, debería alimentarse. Su siguiente paso va a ser poner en conocimiento a Lindhart del tema de la Kuivonen. Abrir otro canal de investigación. Antes de llegar a la comisaría aprovechará, si se encuentra con alguna persona solitaria, a recargar su reserva de vitae.

[Voivoda]

El ligero gruñido, casi como un ronroneo pero con un tono mucho más profundo e intimidatorio, surge de lo más profundo de tu garganta sin que te des cuenta. Las frías calles de Copenhague son un desierto en medio de la noche. Un desierto lleno de luces led, anuncios de IKEA y de coches que no contaminan, de escaparates donde se pueden contemplar agradables cocinas... pero un desierto al fin y al cabo.

Nunca has sido especialmente hábil a la hora de buscar alimento como un depredador puro. De hecho, la idea de verte así te incomoda, temes que puedas incluso abrir una puerta a tu Bestia interior que probablemente sea mejor mantener cerrada. Te sientes más segura en pubs, fiestas, espectáculos nocturnos, cines. Espacios donde poder hablar, simular que eres algo que no eres... y donde alimentarse es casi una consecuencia lógica más de tu propio carácter social. Donde otros se ven a sí mismos como pomposos tigres, tú te consideras un auténtico camaleón, capaz de adaptarte a cualquier circunstancia y conversación.

Siempre que haya alguien con quien conversar.

Acechar en las calles no es tu especialidad y por eso tu propia Bestia gruñe ligeramente, molesta mientras te susurra que abandones tus falsas excusas morales y te abandones a lo que realmente eres desde el momento en que dejaste de respirar. Miras el reloj de tu móvil. Sientes la cabeza despejada después de haber puesto por escrito todas las pistas que has ido acumulando. Aún no hay una línea recta, pero al verlo todo junto y en solitario sí has tenido la sensación de que hay hilos de los que tirar. Las posibilidad de contactar de nuevo con Job en el futuro te reconforta. Esa peculiar hechicera tecnológica te cayó bien.

Miras desde las sombras la silueta del edificio de la comisaría central de Copenhague. Siguiendo con el paralelismo, es como si fuera una caseta en medio de un desierto. En pleno siglo XXI, pero situada en medio de un barrio anodino de oficinas que está totalmente vacío por la noche.

OFF: Para este turno tenía dos opciones. Decirte directamente que hicieras la tirada de Caza o describir las sensaciones de tu personaje (al que para seguir el hilo de tu respuesta he situado un par de noches después de la charla con Job). Cuando hago este tipo de turnos a veces puedo caer en poner en el personaje sensaciones que tú consideres que no tiene tan claras, por lo que no dudes en matizarlas para darle la personalidad que tú le quieras dar. A partir de aquí podemos hacer lo siguiente.

- Hacer la tirada de todos modos cerca de la comisaría (que sería Astucia + Supervivencia a dificultad 7. La estándar es 6, pero sumarías 1 por no tener Supervivencia)
- Buscar un ambiente que te sea más favorable por tus características, pero que te hiciera perder más tiempo (por ejemplo un lugar donde tuvieras que utilizar Expresión o Etiqueta junto a tu Carisma o Manipulación, o donde usar tu Dominación o tu Voz Encantadora)
- Ir a tiro hecho a las cercanías del Elíseo y aprovechar tu Estatus 1 para que se te facilitara algún refrigerio (te haría perder más tiempo, pero te abre la puerta de contactar con otros Vampiros ya que tienes además el mérito de "Habitual del Elíseo")
- Dejar pasar más tiempo para alimentarte y entrar directamente en la comisaría.

[DarkOsca]

Ya es bastante desagradable el hecho de tener que alimentarse para encima tener que hacerlo con urgencia. No Birgitte va a tomarse su tiempo, todo el que estime necesario. Se dirige hacia uno de los múltiples Eliseos de la ciudad, concretamente a Børsen, la antigua bolsa, el más informal entre los permanentes.

Allí se presentará a la arpía que esté en ese momento al cargo, comentando sus intenciones y a la vez preguntando si hay más vástagos en la zona, con los que conversar. Se va a tomar la noche con absoluta calma, intentará saciar su hambre por completo, aunque tenga que usar varios recipientes para ello e intentará estrechar lazos con el resto de cainitas de la ciudad. Un reposo antes de volver a la dura tarea principal que ocupa su tiempo en estas noches.

[Voivoda]

Entrecierras los ojos ante el placer de notar la Vitae corriendo garganta abajo, revitalizando tu cuerpo muerto. El joven camarero que yace a tu lado ligeramente mareado te mira con absoluta devoción, acostumbrado como está a servir de alimento a los Vástagos que se pasean por el homenaje a la decadencia que es el Elíseo de Borsen. Su sangre se entremezcla en tu interior con la de la joven emprendedora sueca que está dándose a conocer por el salón central del vetusto edificio reconvertido esta noche en una falsa fiesta en la que empresarios de compañías tecnológicas celebran las ganancias del semestre. Una personalidad vacía, unas cuerdas vocales en permanente y cansino movimiento, pero una vitalidad sanguínea que te revitaliza.

A los Toreador de la ciudad les divierten este tipo de espectáculos en los que organizan fiestas o reuniones privadas con una temática perfectamente encajable en el mundo real, pero que esconden en realidad un intento de entretenerse ellos mismos buscando nuevos tipos de Vitae. Hoy este espacio de la antigua Bolsa de Copenhague está repleto de ambiciosos desarrolladores de aplicaciones web, avariciosas especialistas en las apuestas digitales, expertos en mercados de valores online y demás fauna que intenta vestir a la última mientras desearía tener los millones suficientes para dormir incluso en trajes de Armani.

A pesar de la soterrada rivalidad entre los Malkavian y los Toreador, a los Lunáticos les divierten también estos juegos del Clan de la Rosa, y disfrutan de la puesta en escena. Un primer vistazo te permite comprobar que no hay rastro de la Príncipe, a la que hace meses que nadie ve en público, aunque su chiquillo sí se ha dejado ver. Reconoces también los andares algo presuntuosos de Stefan Larsson, que acompaña siempre de una chaqueta de cuero, también llegas a ver de refilón a Erika Mikkelsen conversando animadamente con varios admiradores de Mark Zuckerberg e incluso puedes ver cómo la fascista de Greta von Stauffenberg habla con un chico cuya edad aparente es más de una década menor que la de ella. ¿Será su presa predilecta?. En la otra punta del salón, Angela Bigelow parece un tanto fuera de lugar, con un gesto de cierta incomodidad mientras una mujer algo más joven que ella parece estar soltándole un discurso que a la Brujah no parece interesarle demasiado.

Si pudieras respirar, suspirarías de tranquilidad por fin. Tus ideas están organizándose en un tablón de la capilla, no tienes que estar pendiente de nadie más que de ti misma y la Sangre fluye de nuevo por tus venas escondiendo en lo más profundo de tu ser cualquier tipo de pensamiento visceral. Te sientes cómoda en el Elíseo, donde unos y otros te saludan con cierta calidez.

- ¡Qué aproveche, Birgitte!



Las gafas de cristales amarillos anticipan la sonrisa dulce de Benedict Dubois, que toma asiento a tu lado mientras cruza una pierna sobre otra y te mira como si fuera tu mejor amiga. Te divierte su apariencia inofensiva, aunque nunca dejas de recordar que la Arpía es un poder en sí mismo y conviene reírle las gracias en su justa medida para no ofenderle y que saque lo peor de lo que pueda guardar en su corazón ceniciento.

Casi sin darte tiempo a contestar, sigue hablando.

- ¡Cuánto tiempo sin verte, Birgitte! Bueno, a ti, y a casi nadie de tu familia. ¿Estáis bien?, ¿necesitáis algo?.

OFF: Reserva de Sangre llena

[DarkOsca]

Todo esto empezó con él. Con una foto en su teléfono móvil. La presencia de Dubois sigue inquietando a la pequeña Tremere. Hasta ahora, la noche había sido plácida. Reencuentro con viejos conocidos, intercambio de trivialidades. Alimentación, placentera, culpable. Todo alejado del caso, un paréntesis en la no vida. Pero esto cambia abruptamente, con el Toreador no va a poder esquivar el tema.

-Hola Benedict. Muy bien, gracias por preguntar. Lo bueno de llevar mucho tiempo sin ver a alguien es esa sensación de cosquilleo en el estómago que tengo ahora. Los reencuentros nos hacen apreciar a nuestros seres queridos. ¿Tienes alguna novedad?

Se acerca al Toreador y baja el tono de voz.

-¿Algún chismorreo?

Comienza tanteando el terreno. Sus defensas están altas otra vez. Si su corazón latiera habría acelerado en este momento, bombeando sangre hacia su cerebro, para mantenerlo alerta. Este sitio tan agradable, cargado de sonrisas y gestos amables puede ser más peligroso que el más oscuro de los callejones del peor barrio de la ciudad.

[Voivoda]

- ¿Qué otra cosa tengo, si no chismorreos?

Dubois sonríe de un modo tan sumamente ingenuo que resulta evidente su teatralidad. Te genera una extraña sensación, ya que al mismo tiempo desconfías de él, pero sus gestos y su zalamería resultan atractivos, invitan a estar cerca de él, a querer hablar más con él. Seguramente gracias a su capacidad para generar esas sensaciones tenía la posición que tenía. Inofensivo en apariencia, letal cuando apunta su lengua hacia alguien.

- Tengo entendido que en vuestra... universidad, no dejan de licenciarse estudiantes.

Entrecierras los ojos ante la manera velada que tiene la Arpía de dar a entender que sabe que tu Capilla no ha logrado generar una Coterie cohesionada como se espera de vuestro Clan.

- Bueno, no pasa nada, no es el siglo XIII, ¿verdad?, es normal que vayamos de un sitio a otro -Dubois resta de inmediato agresividad a su comentario previo- Pero he oído que a los König, ya sabes, los alemanes de la familia de levantamuertos, les alegra que no estéis muy unidos -Dubois vuelve a su mirada inocente- Yo personalmente prefiero vuestra estabilidad, aunque seáis una familia un poco rara no lo vamos a negar, antes que a los follazombies esos... pero por lo que tengo entendido tienen buenos contactos en la policía y andan preguntando por los crímenes de hace unos meses.

Aguantas unos segundos más, Dubois parece querer llegar a algún sitio.

- Quizá si supiera qué tiene tan frenético a tu Sire últimamente podría echaros una mano. ¿No estará por casualidad investigando también alguno de esos crímenes y por eso ahora los König intentan ir un paso por delante?

[DarkOsca]

Sonríe, inicia su sonrisa seductora que muta en carcajada. Sigue siendo atractivo este gesto. Resalta su perfecta dentadura, sus labios carnosos, perfectamente pintados de un color carmesí. Sus ojos se cierran, formando una línea que precede a las arruguillas de sus sienes. El sonido que emite parte desde su garganta rompe la tranquilidad de la estancia.

-Dubois, querido, si supiera lo que está haciendo Lars te lo diría, pero es tan indescifrable para mi como para ti.

Se rehace, manteniendo una apariencia de buen humor.

-El hermetismo de nuestra... universidad, está bien justificado. Allí se guardan conocimientos de los que luego se benefician el resto de clanes, incluyendo el tuyo. Por lo tanto es normal que no sea comprensible, desde fuera y a veces, desde dentro, los movimientos que se realizan en ella.

Vuelve a un gesto serio, demostrando un dominio emocional total.

-Hablas de los König, de que están investigando. Quizá podrías presentarme a alguno de ellos. Puede ser interesante intercambiar impresiones con alguien tan distinto, aunque tengan un acento horrible.

Por último, su gesto es coqueto. Se acerca a su interlocutor y apoya su cabeza contra su hombro.

[Voivoda]

- Con tanto secretito sois a la vez aburridos y muy interesantes.

Sonríes ligeramente con el comentario de Dubois. Al acercarte a él notas que huele a perfume, un ligero aroma a rosas. Es un perfume de mujer que le da una personalidad poliédrica, compleja, llena de misterios.

- Y mientes fatal.

Dubois mantiene su sonrisa y se separa ligeramente de ti, aunque el tono de su voz tiene un cierto tono de advertencia. Parece percibir tu propia sensación de alerta y sonríe de un modo absolutamente angelical al mismo tiempo que posa ligeramente su mano derecha en tu brazo izquierdo.

- No se me ocurre una fiesta más divertida que una con hechiceros y necrófagos -la fama que le ha ubicado como Arpía se debe a comentarios como estos que a muy pocos, probablemente a ninguno, de los otros Vástagos se les permitiría hacer- Pero sí, querida, cuenta con que podré concertarte una cita con ellos si quieres...

-------- - Es esa de allí.

Bent mira en la dirección que le señala Angela. Es la primera vez que está en el Elíseo, aunque ha oído hablar de él muchas veces. Mientras que otros espacios similares en otras ciudades tienen fama de ser un espacio de batalla más, solo que más civilizada, en el caso de Copenhague parece que ese territorio de enfrentamiento dialéctico queda reducido al Parlamento Nocturno mientras que el Elíseo es realmente un lugar de esparcimiento en el que, respetando debidamente las reglas, se hace la vista gorda con los comentarios excesivos o las miradas indiscretas. Brunhilda controla los mecanismos más profundos del Elíseo, sus horarios, sus participantes, incluso las fiestas temáticas de los Toreador parece que primero se comunican a la Nosferatu. Eso hacía al menos que Bent se sintiera en un lugar en el que, aún siendo nuevo, no era hostil.

Angela Bigelow no estaba muy por la labor de ser paciente. Había despachado con demasiada brusquedad para el gusto de Bent las conversaciones banales que habían surgido a su paso. Un joven desarrollador digital que quería convencerla para que le ayudara a publicitar una app sobre comparación de bancos y una mujer de mediana edad que al parecer había visto a Bigelow en alguna ocasión y quería convencerla para que se convirtiera en asesora de un lobby medioambiental. Cierto es que no eran conversaciones demasiado profundas, pero Angela no había hecho el más mínimo esfuerzo por disimular siquiera un mínimo interés.

Su único objetivo era señalarte quién era Birgitte. Ese era el nombre de la Tremere.

Bent mira en la dirección que le señala Angela.

La tal Birgitte parecía una chica joven, jovial, con cierta vitalidad natural. Era de una estatura particularmente corta, aunque ese aspecto quedaba disimulado al observarla sentada en un sofá junto a un chico de gafas con cristales amarillos que Angela previamente había indicado a Bent que se trataba de Benedict Dubois, una de las Arpías de la ciudad. Lo cierto es que no es la imagen que te esperabas encontrar de una hechicera e incluso de la Arpía que la acompaña. Parecen dos compañeros de clase comentando el último examen en la universidad.

Pero si algo te había enseñado tu corta experiencia en la no-vida era que no podías fiarte de las apariencias.

[RubenDC]

Un zapato negro, impoluto, de manufactura italiana, pisa el mármol de la escalera, enfundado en ese zapato está el pie derecho de Bent Møller. Se podía decir que con ese paso acababa de entrar al Elíseo, por primera vez en su no vida.

Møller estaba alerta, le parecía que en cualquier momento le impedirían el acceso ¿quien era él para estar allí? Es cierto que aconsejado por la señora Bigelllow se había puesto sus mejores galas, traje oscuro hecho a medida, camisa y corbata, pero eso no implicaba nada. Por el rabillo del ojo contempló a Angela, quizá ella era el motivo por el cual su presencia era tolerada en el lugar. Su Sire se movía con una gracia felina, majestuosa, parecía un deprededor merodeando por la sábana, tenía una mueca en el rostro que Bent no sabría decir si era de desprecio,de hastío, o una mezcla de ambas.

Mientras Angela, parca en palabras, se deshacía de todo aquel que entablase conversación con ella, Møller volvió a detectar un leve aroma a menta, era Brunhilda quien lo protegía, era en ella en quien confiaba, no debía olvidarlo.

Bigellow señala a dos jóvenes universitarios, o al menos eso es lo que aparentan. El primero de ellos, Benedict, gafas llamativas de cristales amarillos, es una de las Arpías de la ciudad, la segunda, una chica menuda con gesto travieso, es la bruja, aunque no debería llamarla así, Birgitte mejor.

Ambos parecen inofensivos, eso hace que Bent les preste una atención mayor.

- Es esa de allí. dice Angela muy despacio, para lentamente girar la cabeza y apartar la mirada de la escena.

Bent asiente, pero se queda mirando un instante más, lo justo para que su escrutinio sea detectado.

Mucho le queda por aprender al señor Møller, de Angela, de Brunhilda, de la Camarilla, de todo...