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ESCENA 1 - EL LIBERTARIO:

Gamma, Iota y Sigma se encuentran patrullando a pie por las calles. El frío invierno de noviembre acucia los corazones a este lado del muro de Berlín, con su lengua de gélido viento sobre la piedra y el incesante rocío de la madrugada. Las calles están desiertas. Pocos ciudadanos osan eludir el toque de queda, por eso la presencia de tres chavales corriendo por el callejón, llama su atención.

Encuentran a los tres adolescentes, graffiteando parte una contrafachada de una pared con un signo inacabado de rebelión y anarquía. El agente Iota, parece deducir que se trata del simbolo de Enigma, un autoproclamado terrorista que no supone más que una nimia preocupación para el Gobierno, y la Tecnocracia, que intenta afanarse para ver si el susodicho se trata de un subversor de la realidad.



Gamma, el más en forma de los tres agentes, sale corriendo tras ellos. Consigue atrapar a uno de ellos, el portador de los sprays de pintura. Tras un intercambio de opiniones entre los tecnócratas y ante el arrepentimiento instantáneo el muchacho, deciden soltarlo, con la promesa de que mañana limpiará aquello.

Al salir del callejón, se encuentran con un Tímpano que para junto a ellos, y les invitan a subir y escuchar un audio que han conseguido captar. En la grabación, puede escucharse mediante una voz distorsionada, a dos personas nas hablando sobre si sacar en portada el testimonio de varios niños que hablan de ciertos abusos por parte del Obispo Becker. El Agente Iota se da cuenta que se debe tratar de la publicación El Libertario, un periódico anarquista que se mueve en los bajos fondos, y que milagrosamente ha conseguido escapar durante el año y medio que se estima lleva creado, de la censura y del control del gobierno. Una amenaza que los Colmillos censores de la Boca están deseando masticar hasta digerir.

Tras darle la ubicación casi exacta y la conversación transcrita, los tres Dedos se dirigen hacia allí. Al llegar, el Agente Sigma comprueba mediante un procedimiento de Datos, que no hay nadie en su interior. Gamma, hace uso de sus callejeras artes, para abrir con exquisita precisión la cerradura y acceder al almacén, donde el olor a tinta, papel y cola, no dejan duda de la correspondencia de su hallazgo.

Allí, entre un pasillo formado por media docena de mesas enfrentadas, se encuentra una imprenta, en estos momentos, parada, donde dos cajas coronan las cintas. Unos extraños panfletos en su interior, con textos con mensajes sencillos que alientan a la rebelión y que llaman poderosamente la atención del propagandista Sigma.




Ese simbolo, ahora completo, les trae un recuerdo. Un recuerdo que merece ser vivido de nuevo.


ESCENA 2 - VIENTOS DE VARSOVIA:

Años atrás, Sigma se encuentra en el ascensor de la Fernsehturm camino del despacho de la Mano. Es un despacho amplio, pero mal iluminado. El rostro de su jefe, apenas es percibible de entre las sombras de las persianas que chocan contra su rostro. Sobre la mesa, hay una caja negra y metálica con una esfinge marcada sobre el metal. Junto a ella, una carpeta con dos expedientes. El gobierno capitalista no puede soportar la idea de que en el bloque Comunista, el virus que provocó la Gran Pandemia, fuera menos mortífero, y por ello, quieren provocar una segunda oleada más letal en el otro lado del telón de acero.

Para ello, contarán con la ayuda de un científico polaco llamado Piotr Kowalski, que introducirá el virus en los gasoductos de las afueras de Varsovia que reparten gas a toda Europa Oriental. El agente Sigma, tendrá que contactar con la Agente infiltrada Lambda, en Varsovia, exactamente dentro de 19 horas.

La Mano recuerda a Sigma la importancia vital del éxito de la misión, y le hará ver que tal vez si consigue llevarla a buen puerto pueda borrar la mácula en su expediente.

Tras las pertinentes falsificaciones realizadas por el agente Gamma, los tres agentes se conocen y el agente Sigma informa de la misión, escondiendo el contenido de la caja negra, y dejando nimios detalles de la misma. Los tecnócratas se ponen ahora a trazar la forma más segura y discreta de pasar el muro. Gracias a la experiencia del agente Gamma en sus jóvenes años de contrabando, y de unos mapas antiguos que se agencia Sigma, el agente Iota, mediante complicadas fórmulas bayesianas, comienza un ritual que le ayudará a seleccionar la mejor de las opciones de pasar sin ser vistos.

Tras el éxito del ritual, los agentes se infiltran en el bloque comunista sin ser observados y se dirigen a Varsovia. Allí, el agente Sigma vuelve a ser preguntado por el contenido del paquete, sin que él mismo llegue a ser revelado.

A la hora indicada se presentan en el Stare Miasto, casco histórico de la capital polaca, donde tendrán lugar la reunión con Lambda, del que no tienen ningún dato. El nerviosismo empieza a ser evidente, cuando pasan los minutos sobre la hora Hache y Lambda no se presenta. Pero cuando están pensando en improvisar un plan, un coche aparece derrapando hacia ellos.

Sigma se queda perplejo al comprobar que la identidad de Lambda corresponde a la de Ludmilla Schmidt, su antiguo y único amor de juventud.



Lambda les explica que el doctor Piotr Kowalski se ha echado atrás. Que fue a visitarlo a la universidad y descubrió que arrepentido se marchaba en tren a Praga. El auténtico plan sale a la luz, y a Iota y Gamma le entran las dudas de lo éticamente correcto del plan. Sigma por el contrario, junto a Lambda, están decididos al éxito de la misión.

Se inicia una carrera vertiginosa hasta la estación, donde descubren al tren ya en movimiento. Tras una fuerte discusión en el coche, con intentos frustrados de provocar un accidente, consiguen igualar la velocidad del tren antes que el mismo coja el ritmo de crucero y desaparezca entre los bosques.

Saltan al tren, incluida Lambda, que hace estrellar el coche contra la arboleda. Perciben la presencia de agentes de la Stasi en el interior del tren que a su vez se han percatado de su presencia. Raudos se dirigen al vagón donde debe encontrarse el doctor Kowalski. Gamma e Iota abogan por el aborto de la misión, al darse cuenta que el doctor está ya en poder del enemigo. Pero Lambda y Sigma continuan decididos al encuentro con Kowalski. Los otros dos agentes, al ver comprometido la protección de sus compañeros, deciden seguirles.

En el tercer vagón descubren disparos, que no parecen ir destinados a ellos. Se oyen ciertos ruidos de una refriega al otro lado, y al abrir Lambda la puerta del vagón de la discordia, es abatida por un tiro certero y silencioso en el estómago. Ludmilla cae en los brazos de Sigma, a pocos segundos de su muerte.

Iota con un procedimiento apropiado de disparo certero, provoca su primera muerte, colocando una bala en la frente del agente rival, y provocándolo un breve pero potente vértigo emocional. Los tres agentes, ven como el agente que disparaba hacia el interior del vagón, sale huyendo y al acercarse al compartimento descubren a Kowalski agonizando víctima de un envenenamiento. Un hombre enmascarado cuya máscara presenta profundas grietas, permanece colgado en la ventana. En su pecho, el anagrama del panfleto y de la pared. Se descuelga y desaparece en la negrura de la noche y los bosques.



De vuelta al presente, descubren como la puerta del almacén del Libertario está siendo abierta. Sigma y Gamma se esconden, pero un menos ágil Iota no tiene sino tiempo para observar, para su sorpresa, a su antiguo amigo, Jürgen Morris.




-FIN DE LA SESIÓN 1-

El encuentro con Jürgen es tenso pero también tierno. Dos amantes que durante tanto tiempo habían pensando no volverse a ver, de pronto se encontraban. El agente Tau descubre la presencia de Sigma y Gamma agazapados tras la imprenta, lo que le hace estar poco receptivo al acercamiento inicial de Baudric.

Pero pronto, el sentimiento cálido del amor le envuelve y se deja caer sobre los brazos de su amante. En la fogosidad de tal encuentro Baudric besa a Jürgen, lo que produce, por supuesto, la sorpresa de sus compañeros, que nunca durante estos años, hubieran caido en la cuenta que su compañero fuera homosexual. El agente Iota, acababa de cometer un delito flagrante frente a sus propios ojos.

Baudric interfiere por Morris ante sus compañeros, y ante la llegada de refuerzos anunciada por el anular, supervisor de los meñiques, le obliga a marcharse y escapar. Jürgen marcha con la promesa de volverse a ver, y anunciando más respuestas en Teufelsberg. Debían buscar la esfinge.

ESCENA 3 - LA MORADA DEL CIENTÍFICO:

La conocida como "La Montaña del Diablo", es un monte berlínes al oeste de la ciudad, ya a las afueras de la misma, pero dentro del perimetrio oficial, un poco antes de la frontera regional con Brandemburgo. Posee un complejo de edificaciones semiderruidas de antiguos sistemas de control navegacional aéreo cuando la ocupación estadounidense y posteriormente abandonadas cuando desalojaron la capital germana.

Actualmente, la zona es conocida por acoger a cierta gente bohemia, extranjeros y demás despojos sociales, que no contribuyen nada al sistema. No obstante, el gobierno los deja establecerse allí, en su pequeño redil de pecado, sin que la mayoría de las veces, merodeen por allí. Esa noche, es una de las excepciones de la regla.

Los agentes suben la colina por la zigzagueante carretera que lleva hasta las instalaciones. "The times they are changin' de Bob Dylan", suena cantada y tocada por un artista local, que envalentonado por el alcohol, propaga un himno prohibido. Al ver a los agentes, deja de cantar y se mete en su chabola.




Los dedos intentan preguntar a una prosituta, pero nadie parece, ni tener la intención de colaborar, ni conocer realmente, la existencia de dicha esfinge. Se ponen a investigar los graffitis de la zona, auténticas obras de arte, para cualquiera con una pizca de sentido estético. Aberraciones y garabatos para la mayoría. El agente Sigma hace un sondeo con uno de sus procedimientos mentales y de datos, conocido como "¿Ha visto usted a esta persona?¿Ha visto usted esto?", y apenas consigue visualizar una puerta con la esfinge, en las edificaciones militares de lo alto de la colina.

Suben y descubren la puerta. Nuevamente el agente Iota, haciendo gala de sus procedimientos probabilísticos intenta visualizar la presencia de algún subversor, algo que confirma al sentir su iluminación rechazada y tan solo visualizar un cuerpo ingrávido en un líquido verde, la presencia de alguien importante y unas plumas de color ocre flotando en la más completa oscuridad.

Al abrir la puerta, solo ven una escalera que se introduce en la negrura. Al descender, son atacados por un búho de ojos dorados, pero el trio de agentes consigue esquivarlo. Las luces se encienden.



Encuentran un enorme y desordenado laboratorio donde descubren a Robert Koch padre de la Bacteriología y que se hizo famoso por descubrir el bacilo de la tuberculosis en 1882, presentando sus hallazgos el 24 de marzo de 1882 a la Sociedad Fisiológica de Berlín, así como el bacilo del cólera en 1883 y por el desarrollo de los postulados de Koch, y que considerado uno de los fundadores de la bacteriología, recibió el Premio Nobel de Medicina en 1905 por sus trabajos sobre la tuberculosis. Además conocen que Koch es un progenitor y uno de los miembros más importantes de la tecnocracia germana, o al menos asi lo era.

Koch se muestra medianamente huraño, pero parece con ganas de hablar. Les cuenta de la creación del virus que generó la Gran Pandemia, de hecho los agentes encuentran las cajas negras con esfinge como la que años atrás intentaron entregar al Doctor Kowalski. Desde entonces ha vivido denostado en éste laboratorio, guardando el secreto tecnócrata, ante las amenazas vertidas hacia la figura de su mujer, a la que el propio Koch ha mantenido durante tanto tiempo con vida, hasta que ésta, ya cansada de vivir en aquella situación, solicitó a su esposo que no la siguiera manteniendo con vida y que la dejara envejecer y morir.



De hecho podrán descubrir el cuerpo de su mujer flotando en una enorme probeta de un líquido verdoso y burbujeante, cuyo gesto parece tranquilo y dormido, casi como un icono religioso, a trasluz. Una vez, que su mujer ya no está con él, Robert se siente en deuda con la gente y sienta las bases de su venganza, apoyando ese movimiento rebelde del que sabrá su existencia.

Los agentes descubren con sorpresa, de la existencia en el laboratorio de los panfletos. Tras un tenso enfrentamiento con Baudric, Koch entrega una dirección a los agentes, en un panfleto con el que ha hecho un avión de papel. El Aeródromo de Werneuchen.



ESCENA 4 - LOS AMOS DEL CIELO:
El Aeródromo está a aproximadamente una hora de coche, lo que entre todas las acciones de la noche, incluido cruzar nuevamente el muro, les debería hacer llegar allí casi finalizando la madrugada, y es un sitio abandonado donde la hierba crece sobre la pista de aterrizaje, y donde los hangares aparecen semiabandonadas de chatarra de la gran guerra, y más concretamente de la Luftwaffe. Decenas de Stucas y Junkers permanecen varados al paso del tiempo, con el óxido cubriendo sus pinturas oscuras, y con sus escarapelas y distintivos de cola nazis, mancillados con graffitis de la hoz y el martillo.



Descubren aquí, en uno de los hangares, más panfletos y un enorme y potentísimo rastro mágico que les hace ver de la existencia de un poderosísimo y largo ritual. El fuerte ruido de un motor, más una sombra gigantesca que se abalanza sobre ellos, los harán descubrir un enorme zepellin que se escapa del Aeródromo.

El agente Sigma, haciendo gala de un procedimiento vulgar, se teletransporta al interior del dirigible, para descubrir en su interior a Enigma, y como la nave está completamente atestada de aquellos panfletos llamando a la rebelión, que Jonas intuye, serán lanzados sobre la capital. Pero Sigma comprende que tiene que salir de allí, pues parece como si el lugar, estuviera regido por sus propias leyes espacio-temporales, y siente la opresión de una celda de cristal cayendo sobre él, e incluso al disparar a Enigma, la bala es incapaz de salir de aquel cubículo.

Vuelve al punto de partida, donde sus dos camaradas solo lo han visto desaparecer durante medio segundo. Sigma parece confuso y ciertamente lastimado, con hebras de humo saliendo de su abrigo. De su bolsillo, ahora descubren, el panfleto recubierto por un aura azulada. El agente Iota, haciendo un ejercicio de voluntad, recoge el panfleto, y descubre que dichos panfletos están imbuidos en una magia que afianza el mensaje.

Tras discutir sobre la válidez o no de las artes de Enigma, y sobre el calado de su mensaje, deciden volver a la ciudad, una vez que Sigma ha intentado ponerse en contacto con la Unión sin éxito. Al llegar a la Berlín occidental, verán los panfletos volando sobre la ciudad, les recordará a la nieve o a las cenizas volando. O mejor dicho, a la cal. Y viajarán entonces nuevamente al pasado.



ESCENA 5 - CONCENTRACIÓN DE HORROR:

Se visualizan cada uno en una celda, mirando hacia las ventanas enrejadas, donde ven pasar la cal volando sobre la fría noche. Uno sentirá la aspereza de lapared húmeda y encalada. Otro, la mirada oscura de una rata, con sus ojos amarillos. El último de ellos, las lágrimas recorriendo su rostro. Definitivamente, todos sus sueños dorados, parecen haber pasado de largo.

Jonas aparece sentado en una silla atado, mientras mira una televisión que no deja de bombardear constantemente imágenes bélicas. Sus ojos están siendo forzados a mirar. Baudric, desnudo, mientras lo fumigan con algún líquido helado y con un olor fuerte. Sus manos y sus pies luchan por no resbalar contra el azulejo blanco. Gunter, aparecerá siendo ahogado en una bañera de sangre, luchando en cada instante por respirar. Por supuesto, también se verán siendo inyectados con algo en diferentes partes del cuerpo, durante varias dosis.

Se darán cuenta de que eso forma parte de una rutina diaria. La libertad para ellos, aparecerá cuando en el escaso tiempo que tengan, vean en el patio a una enigmática figura. Tiene una máscara blanca e impoluta como cosida a su cara. No tiene grietas. Parece apenado y con un gran peso sobre los hombros. Pero en su mirada se adivina, el mismo gesto de rebeldía.

-FIN DE LA SESIÓN 2-

ESCENA 5 - CONCENTRACIÓN DE HORROR:

Los agentes siguen descubriendo su pasado. Se encuentran presos en un campo de concentración, donde Fuego Nórdico intenta que expíen sus pecados. No se conocen, pero los tres comparten las torturas y el dolor de la incomprensión.

Durante uno de los almuerzos en el comedor, el enigmático personaje de la máscara se acerca a ellos y con disimulo les ofrece tres afilados cepillos de dientes, la más mortífera arma para los recursos que tenían.






Esa misma noche, el prisionero Iota, tendrá recompensa a su sempiterna necesidad de obtener información, y consigue oír algo a unos guardas que distienden cerca de su celda. Las palabras "horno, estropeado, paseíto y palas" le hacen sacar sus propias conclusiones. En esas divagaciones queda dormido hasta que a la mañana siguiente los tres son despertados a patadas y con el aviso de que aquella mañana van a dar un paseo.

Los agrilletan en cadena, con el enigmático hombre de la impoluta máscara en la cola.

Minutos después, se encuentran en la nieve, apenas abrigados, y seguidos por tres soldados. El pensamiento de que los van a ejecutar está ahí, a razón de la carretilla con sacos de cal y varias palas que porta el tercero de los guardas. Tan sólo el "buen ánimo" del hombre de la máscara, que incluso tira de ellos cuando las fuerzas de alguno flaquean, los hace sacar de ese estupor con hedor a muerte.

Mientras caban, y los guardas se relajan, el hombre de la máscara consigue fundir con sus manos, ante la sorpresa de Iota, los eslabones de su cadena, para atacar a los tres guardas, y escapar libres, por los oscuros bosques de la Selva Negra. Mientras se pierden en la deshojada arboleda, vuelven con cada paso en la nieve, a su presente.

ESCENA 6 - INNERE DÄMONEN (Demonios internos):

Los agentes se encuentran ya al lado occidental del muro, donde a lo lejos una extensa columna de humo, los avisa de que, tal y como había deseado el agente Sigma, los Antiáereos habían derribado el zepellin. Lamentablemente, aquello no había evitado que Berlín se empapelara de aquellos panfletos trucados, animando a la rebeldía y la anarquía.

La gente en las calles camina con otro rostro, e incluso parece salir de alguna forma, el sol sobre Berlín. La gente no camina de una manera mecánica e incluso alzan el rostro ante un futuro esperanzador, en contra de los mensajes de alarma y protección que el gobierno intenta infundir en sus corazones a través de las pantallas y la megafonía.

Los agentes deciden que hacer mientras vagan sin rumbo por Berlín. Gamma recibe un mensaje de la mansa Selene, pidiendo hablar con él, cosa que levanta las sospechas del agente que decide lanzar el móvil por la ventana del coche, y avisar a sus compañeros de que seguramente estén siendo espiados.

Un mensaje en su beeper, les hace saber que existe un gabinete de crisis, e insta a los agentes a permanecer en sus casas hasta nuevo aviso.

Cuando los agentes están debatiendo distintos planes de actuación, que abarcan desde intentar capturar al Obispo Becker, como presentarse en la propia Fernsehturm y hacerla caer a fuego y plomo, un nuevo mensaje de correo llama la atención de Sigma. Es un correo que no puede visualizar desde el móvil, y cuyo asunto reza: "Nacionalsocialismo - Patriotismo - Totalitarismo, hijos del mismo padre". Pero lo que más llama la atención de Jonas, es que éste correo ha sido enviado hace 20 años. Intuye el bueno de Quant, que se trata de su Genio intentando decirle algo. Decide apearse del coche, aún sabiendo que ese comportamiento, en pleno brainstorming de los tecnócratas, ponía nuevamente la sombra de la sospecha sobre él.

El Agente Sigma llega a casa y descubre el mensaje. Es un video que lo envuelve en un misticismo y le hace visualizar una escena tan real como vivida. Se da cuenta que esta dentro del cuerpo de su abuelo Harald Quandt, en una prisión en algún territorio del norte de África. Tiene la sensación de haber leído ya varias veces la carta que le ha enviado su madre, Magda Goebbels, y que sostiene entre las manos, pero ante la incredulidad de su contenido, entre lágrimas, vuelve nuevamente a leerla:

"¡Mi amado hijo! Ya llevamos seis días en el Führerbunker—papá, tus seis hermanos pequeños y yo, para la seguridad de dar a nuestras vidas nacionalsocialistas el único fin honorable posible... Sabrás que me quedé aquí contra la voluntad de papá, y que incluso el pasado domingo el Führer quería ayudarme a salir. Conoces a tu madre—tenemos la misma sangre, para mí no había duda. Nuestra gloriosa idea está arruinada y con ella todo lo hermoso y maravilloso que he conocido en mi vida. El mundo que viene después del Führer y el nacionalsocialismo ya no vale la pena vivirlo y por lo tanto me llevo a los niños conmigo, porque son demasiado buenos para la vida que seguiría, y un Dios misericordioso me entenderá cuando les dé la salvación... Los niños son maravillosos... Nunca hay una palabra de reproche o llanto. Los impactos están sacudiendo el búnker. Los niños mayores arropan a los más jóvenes, su presencia es una bendición y hacen sonreír al Führer de vez en cuando. Que Dios me ayude a tener la fuerza para hacer lo último y más duro. Solo nos queda un objetivo: lealtad al Führer incluso en la muerte. Harald, mi querido hijo—quiero darte lo que aprendí en vida: ¡sé leal! Leal a tí mismo, leal a la gente y leal a tu país... Siéntete orgulloso de nosotros e intenta mantenernos en la memoria.."




Luego la conciencia de su abuelo vuela hasta Berlín para contemplar el infanticidio provocado por su madre en el FührerBunker a sus seis queridos hermanastros, para luego ser asesinada por Joseph Goebbels, el gran propagandista nazi, y luego acabar suicidandose.

Jonas sale de ese viaje místico, pero no está en su presente. No aún.

Gamma e Iota, se dirigen al piso de éste último, después de que recibiera un extraño mensaje con una "X" en su móvil. Eso era señal de que tenía visita en su casa, de alguien del Complejo de Cassandra, grupo tecnócrata que lucha por la reforma interna de la misma. Desde las sombras. Como la "X" que se mostraba en su ventana y que confirmaba sus sospechas.

Mientras sube y Baudric explica a Günter aquella facción oculta de la Unión, Gamma recibe un nuevo mensaje donde su ex-amigo Friedrich le avisa por dos veces de reunirse con él urgentemente, a costa de desvelar su secreto. Gamma decide ignorarlo.

Al entrar en el apartamento de Baudric, encuentran a una oscura figura, con otro fantasmágorica, Genio de Stern, que se marcha al verlo. El personaje en la sombra, se trata nada más y nada menos que John Courage, el rebelde por excelencia de la Tecnocracia, un hombre que habia desertado del NOM más de media docena de veces.

Courage afianza las sospechas de Iota. Aplaca algunas de sus dudas y acrecenta otras, pero básicamente le confirma la existencia de un plan de que él tenía conocimiento pero no acceso. El Proyecto Phoenix, donde un fin es programado para un nuevo comienzo. Aquella Unión bajo el Fuego Nórdico no tenía ningún futuro. No podía tenerlo.

El malogrado y famoso hombre de negro, hace ver a ambos compañeros que serán llamados a declarar en varias horas para conocer sus versiones de lo acaecido en la noche anterior. Courage, hace ver a Baudric que él no tiene los recursos y procedimientos necesarios para modificar sus recuerdos, cosa que sus compañeros sí, y si bien, no podría hacer coincidir todas sus versiones, por falta de tiempo, si podría implantar falsos recuerdos o modificar los actuales, para ganar tiempo con Control y su particular Habitación 101, pues les llevaría tiempo intentar pegar los trozos de espejo en los que se convertirían los recuerdos de Iota, con las versiones de sus compañeros.

Iota accede. Courage abre su maletín y saca su dispositivo de alteración mental y se dispone a proceder. Gamma con su procedimiento de "Esclarecer la situación" descubre que el famoso triple agente, dice la verdad, y tan solo va a modificar sus recuerdos. Iota coloca su barbilla frente a la inquisidora óptica, que empieza a realizar su trabajo.

ESCENA 7 - SEMILLAS DE ODIO:

Jonas vuelve a un nuevo hecho de su pasado. Se encuentra en una manifestación contra el Macroestado europeo. A su lado, su amada Ludmilla. Lucha desde el bando que ahora le han enseñado a odiar.

Unos antidisturbios le preparan una emboscada. Jonas consigue ayudar a Ludmilla a escapar por una enrejada, pero es interceptada por otro grupo de policias. Quandt es golpeado y cuando está a punto de perder la consciencia, escucha como uno de los antidisturbios pasa una especie de dispositivo por su nuca, para acabar con las palabras "Subversor".

Iota ve como sus recuerdos están siendo modificados mediante aquel cachibache. Pero la máquina también consigue hacer aflorar sus recuerdos reales más intimos. Visualiza en el pasado el haber estado con Jürgen Morris tras una noche de pasión, para ser interrumpidos por agentes de Fuego Nórdico, tal vez otros dedos, que les atacan por su condición sexual, consiguiendo noquear tanto a Iota como a Tau.

Gamma, tambien es alertado por Courage, que le invita a pasar por el mismo procedimiento que Baudric. Slovan acepta y al pasar por la máquina, ve sus recuerdos siendo modificados, como escenas que no han pasado pero podrian haber sucedido. Como haberse encontrado con Friedrich y discutir con él, o con Selene, cambiada y buscando el cambio, que abandona el hogar.

Un desolado Günter va hasta su habitación, y se encuentra a su Genio, aquella detectivesca silueta. Él se quita su sombrero de ala, para ponerse una kipá judía e imbuirlo en un nuevo recuerdo dentro del recuerdo.

Visualiza un menorá; ese caracterísitco candelabro judio de siete brazos. Hay fiesta en casa, y un enorme banquete da fe de ello. En la gramola, suena "El Partisano de Leonard Cohen", dando fe tambien del exquisito gusto del padre de Günter, que le inculcó su amor por la música.

Pero la bucólica escena es rota por la policia que asalta el hogar de los Slovan y ante la resistencia del partisano, abren fuego sobre él. Günter solo quiere aplacar los gritos de su madre, ahogarlos contra su pecho, antes de ser desprendido de sus brazos para siempre. Dolorido, Gamma vuelve a la realidad, mientras intenta resistir las lágrimas en el balcón de sus distintos ojos.

Al unísono, un nuevo mensaje llega a sus buscas, convoncándoles a una ineludible cita con Control y su particular Habitación 101 en la Torre Alex...

-FIN DE LA SESIÓN 3-

ESCENA 8 - CONTROL:

Iota despide a Courage , que le aconseja el advertir a Sigma para que modifique sus recuerdos. No hay tiempo para implantar una versión fiable. Tan solo la manera de ganar tiempo, confundiendo a Control al unir las piezas del puzzle.

Gamma e Iota van hacia al apartamento de Sigma, y ven con extrañeza el giro de 180 grados que Jonas ha dado en su actitud. Consiguen convencerlo para que modifique sus recuerdos, y juntos salen hasta la Torre Alex, hogar de la Torre de Marfil. Las calles ya rezuman revolución. La gente empieza a congregarse, y algunas lecheras de la policia se reparten por la ciudad.

Allí tienen una fría bienvenida...

Dentro, solo una silla metálica en la oscuridad apenas rota por el piloto rojo parpadeante de una cámara. Un enorme espejo, y cuando se sientan, foco lateral enorme, empiezan a aparecer pantallas frente a ellos con cardiogramas y visores de púpila. Una voz metálica y casi robótica que se
acopla para llamarlos.

-Agente: XJ-23478 Alias “Iota”, Stern, Baudric...
-Agente: LS-67431 Alias “Gamma”, Slovan Gunter...
-Agente: KT-88229 Alias “Sigma”, Quandt, Jonas...

El interrogante gira en torno a cinco preguntas:

-¿Ha visto este logo? - Mientras se visualiza el logo de Enigma.
-¿Conoce la ubicación del periódico el Libertario?
-¿Conocen el paradero del Agente desertor TAU, de identidad mundana, Morris, Jurgen?
-¿Estuvieron frente al Zepellin? ¿Intentaron detenerlo?
-¿Conocen la identidad del terrorista que se autoproclama lider de este movimiento rebelde, llamado Enigma?.

En el caso de Iota añaden:

-¿Pertenece usted a un movimiento corruptor dentro de la Unión denominado Complejo de Cassandra?
-¿Ha mantenido contacto con una persona que se hace pasar por John Courage?

Los agentes salen de la torre medianamente convencidos de su "inocencia" en aquel improvisado y requisitorio juicio al que habían sido sometidos. Les son asignados unos sectores y un grupo de policias a los que dirigir. Ya es de noche y empieza a llover. La gente se agolpa ya en las calles. El tumulto avanza, con aquellos panfletos cargados con promesas de libertad.

ESCENA FINAL - TENTADA VIA INCOGNITA (Ve por el camino a lo desconocido):

Los agentes dan instrucciones claras a cada uno de sus subordinados de no abrir fuego bajo ninguna circunstancia a los ciudadanos. Esa decisión tiene sus detractores, pero la autoridad de los meñiques se hace fuerte y consiguen convencerlos.

En un determinado momento, Enigma aparece en escena y alenta a las masas, antes de recibir un disparo por la espalda desde uno de los puestos de seguridad del muro. Cae, pero todos los agentes lo ven levantarse y ocultarse entre las sombras. Gunter además, lo ve introducirse por aquella puerta enrejada del muro por el que tantas veces habían pasado.

Iota realiza una serie de procedimientos vulgares que alteran las líneas férreas del tiempo, y consigue primero que el más díscolo de los agentes no pueda contradecir sus órdenes, y el tumulto pueda pasar aquella primera barricada, y segundo adelantarse hacia el interior del muro, una vez que Gamma, ha dejado caer por donde escapó el enigmático hombre enmascarado.

Baudric descubre un rastro de sangre, pero además en el interior de los túneles del muro, cajas equidistantes con la pólvora exacta para derribar el ladrillo. Stern hace gala de sus magníficas dotes investigatorias, a las que se unen las de Quandt y Slovan.

Pronto siguen el rastro hasta los sótanos del Reichstag, el parlamento alemán, para luego encontrar a Enigma en el techo del edificio. Llueve a mares, y la vista de la ciudad es magnífica. A lo lejos, la gente jalea creando revolución y esperando revolución. La máscara de Enigma se cae a pedazos, pero eso es lo que menos preocupa a los agentes. Lo que llama su atención es el pulsador que mantiene en su mano y que hará explotar todas las cargas del muro.

Iota hace clara sus pesquisas, y deja entrever que la identidad de Enigma es la de sus tres Genios, y que habían despertado en el campo de exterminio. No iba desencaminado, pero no era exactamente así. Enigma le reclama su voluntad, para accionar el dispositivo, y tras un breve pero intenso debate, hace explotar el muro, que empieza a caer por toda la ciudad.

Koch observa desde su privilegiada vista de la Montaña del Diablo, y tras ver su venganza completa, se sumerge en el tanque de líquido verde para descansar eternamente con su amada esposa. Jurgen es atrapado nuevamente, pero ya no le importa; Iota seguiría su legado de libertad. En alguna comisaría desierta, Friedrich denuncia el secreto de Gamma, mientras Selene abandona la ciudad entre lágrimas en busca de una nueva vida. Un tal Fedorov, recibe una privilegiada ficha con los datos de Sigma.

Los máximos líderes de la Boca, el Ojo, la Nariz y el Oído, partes de Destino, son emboscados por miembros del ala secreta de la Tecnocracia y gestantes del Proyecto Phoenix. En el despacho de más alto de la Torre, un certero y místico disparo de Courage acaba con la Mano.

La revolución ha triunfado y la gente ahora es libre. En los tejados del Parlamento, los agentes descubren el rostro de Enigma para ver cada uno de ellos su rostro, y entonces entienden que Enigma no es sino el reflejo rebelde de cada uno de ellos. El impulso, el deseo de cambiarlo todo, la venganza interna por lo que fueron castigados.

Pero entonces, la lluvia comienza a cambiar de sentido, y en lo lejos las nubes y el cielo empezaran a apagarse como sectores, como escenas, que se van derrumbando, como cortinas que caen, hasta que llegan a los confusos agentes. Y despiertan...

EPÍLOGO - FRÍA REALIDAD:

El blanco y negro da paso al color. No hay ucronía, tan solo una fría realidad. Un sueño compartido de libertad. Una cruenta prueba de rebeldía contra lealtad del verdadero rostro del Nuevo Orden Mundial. Los agentes han demostrado ser "No aptos" y son encerrados hasta nuevo aviso, mientras en la celda contigua, alguien golpea su cabeza y sus puños contra la pared, mientras se maldice por no haber sabido diferenciar fantasía de realidad...

https://www.youtube.com/watch?v=DsSYxaAj9Qo

-FIN DE LA PARTIDA-