Prólogo Dorothy

Mago La Ascensión 20º Aniversario

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Prólogo Dorothy

#1

Mensaje por Vytros » 06 Jul 2021, 03:13

Oscuridad, y de repente un zumbido, algo electrónico un patrón que se repite. Una onda de colores que ante tus ojos empieza a bailar como si estuviera viva. De repente se desdobla en un canon, un trio, un árbol fractal se abre con toda su belleza ante tus ojos como un complejo caleidoscopio de herzios, ondas números que como una cortina cubrían un dibujo apenas perceptible. Un número rojo empezó a brillar con fuerza, poco a poco las ondas se tintaron de carmesí, todo se extendió, olor a sangre, un temblor y el zumbido ensordecedor.

De repente el zumbido del móvil despierta a Dorothy, con su mejilla apoyada contra uno de los anuarios. Se había quedado dormida en el aula del periódico estudiantil en nuestra señora de la piedad. La directora le había concedido permiso para trabajar en la primera edición aunque aún no hubieran empezado las clases. A su alrededor sin embargo todo parecía oscuro ¿Que hora era?¿Se había quedado dormida?

Cuando alzó la vista a la pantalla la figura de Wells observaba preocupado ¿Desde cuando era capaz de estar en otros equipos informáticos? Había un texto escrito en la pantalla, replicado una y otra vez.

- Ten cuidado, la disonancia provoca una cacofonía. La cacofonía provoca una resonancia reverberada que se retroalimenta. El chirrido de un acoplamiento. Dolor, dolor, dolor, dolor, dolor, dolor, dolor, dolor...

¿Que narices estaba diciendo? Cuando Dorothy observó a su alrededor confirmó que se encontraba en el despacho del periódico estudiantil. pero estaba cambiado, los archiveros de plástico de colores habían sido sustituidos por pesados armarios de metal para los portafolios. En las paredes había un poster de los be gees y otro de los beetles. Varios restos de pancartas sobre amor y Paz y el eslogan haz el amor no el dinero en letras chillonas. Nada parecía encajar. Y por el enorme ventanal, las nubes de tormenta tronaron con fuerza, empezaba a llover y el chillido de algún pájaro resonó en la tormenta.

El anuario que tenía entre las manos era del año 1964 y las fotos mostraban multitud de estudiantes con el pelo largo y enormes gafas de pasta vestidos con ropas holgadas. Lo único que reconocía era el ordenador de la sala, con su compañero observando silencioso en una ventana abierta en el windows.

Dorothy Williams (elpajarometalico)
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Re: Prólogo Dorothy

#2

Mensaje por elpajarometalico » 08 Jul 2021, 11:12

https://www.youtube.com/watch?v=Iok2esEdEp4

La imaginación se rompe y se resquebraja en minúsculas cicatrices de color para conformar un nuevo mosaico que se extiende al infinito. En que su centro el cerebro vomita los cuatro humores que compone la mente. Haciendo humear cada pequeño fragmento a su contacto , condenándoles a cada ínfimo instante a ser . Y como los microrganismos al hacer contacto con el alcohol estos se rompen y aparece el color , un color que se escapa , mediante formas inverosímiles ... Un fractal que se repite...

... y se repite .... y se repite ... y se repite ... y se repite ... y se repite .... y se repite ... y se repite ... y se repite ... y se repite ... y se repite. En todo su abanico cromático. Mientras ambos nos hundimos lentamente en una escalera escarlata con el perfume más íntimo de la humanidad. Sabiendo del inminente abandono de aquel plano onírico , intento retener por un instante su dibujo entre mis dedos pero siento como el recuerdo cae como una suave gasa de seda hacia el suelo perdiéndose en aquella sombría habitación.

El áspero sabor de la sequedad en mis labios me recibe en la realidad acompañado por una ligera migraña. Mientras mi mente se queda fija , sin saber bien por qué ,en la reunión con Ms Elizabeth de esta mañana , repitiéndose casi en un bucle. Siento entonces el suave papel debajo de mis dedos mientras mis ojos logran dibujar el anuario que me ha servido como almohada. Mientras una melodía flota ,de forma torpe , en el aire cerrado de la estancia dibujando una serie de tonadas y melodías de piano de diversas músicas de videojuego , aquellas que sabría perfectamente tarararear al haber sido el telón de fondo de mis investigaciones tras tantos años ... Pero aún así percibía acordes que nunca había escuchado , repitiéndose de maneras extrañas , haciéndose más graves o más agudos e incluso rebobinándose para empezar desde el principio , provocando así un colapso en su propia arquitectura musical.

Me froto el ojo izquierdo aún somnolienta mientras observo el reloj: las 4 y veinte de la mañana. Noche cerrada. Finalmente cuando mi mente se termina por centrar , distingo el mensaje escrito en word bajo la fija mirada de Wells desde la ventana. De forma algo boba pero preocupada logré formular una pregunta en el anacrónico teclado "¿Te encuentras bien? ¡¿Estás herido?¡ ¿Necesitas ayuda?" En las afueras resonó el rasgar del velo celeste anunciando una lluvia inminente con el horizonte de la ciudad oscura recortada sobre una tierra en la que las primeras gotas atizaban el exterior. Y sin poder resistir la tentación abrí ligeramente una de las pequeñas ventanitas de la cristalera , recibiéndome , casi en el acto , el suave olor de la tierra húmeda y de la fresca brisa de la madrugada. Pero era una que llevaba arrastrando las últimas palabras de mi compañero , las cuales iban cobrando cada vez mayor sentido. Movida por una sombra de sospecha , mientras esperaba la respuesta de Wells , deslicé mi dedo suavemente por los polvorientos anuarios: ¿Cuál año era el más reciente?

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Re: Prólogo Dorothy

#3

Mensaje por Vytros » 09 Jul 2021, 23:49

La luz de la luna se alza sobre el pequeño jardín de nuestra señora de la piedad, parece un manto de plata sobre la hierba mojada por la suave llovizna que empieza a caer. Es relajante, como una de esas músicas chillout con ruido de lluvia en youtube. Al fondo, entre uno de los tres abetos que conforman la base del jardín en la entrada trasera del antiguo palacio episcopal, te parece ver una sombra blanca. Como el aleteo de una pequeña lechuza que desaparece apenas posas tu mirada en ella. Mientras observas la lluvia te parece descubrir los dibujos fractales de tus ensoñaciones en sus gotas, como si la propia tormenta respondiera a un código no escrito de la propia realidad. Puro, sin alteraciones, sin grandes instituciones que trataran de doblegar la verdad para controlar las masas, cambiando la propia realidad. Solo la lluvia, la hierba, los árboles y la luna plateada rigiendo los cielos. Con la simplicidad y complejidad de un programa fractal.

- Yo estoy bien. Pero me ha costado mucho llegar hasta ti ¿Dónde estamos?

La pantalla se llena de signos de interrogación en ese ordenador que es idéntico al de la sala del periódico escolar que recuerdas. Y sin embargo parece distinta, cuando deslizas tu mano por los anuarios sientes como un destello de recuerdos. Fotografías que se suceden unas a otras hasta que llegas al último. Esta quemado, apenas quedan los restos chamuscados de el. El del año 1964, lo poco que sacas en claro de el.

Observando el resto de la sala, concuerda el marco histórico con la decoración. Y rebuscando entre los demás libros, puedes confirmar en que estas en el despacho del periódico escolar de 1964. Hay multitud de carpesanos, portafolios y fichas de alumnas desperdigadas por el suelo cuando bajas la mirada. Y tienes la extraña sensación que está pasando algo raro.

Sientes un impulso que no habías sentido desde que llegaron hasta ti los primeros indicios de pederastia por parte del padre lorenzo. Un impulso primal que olía a injusticia, a hechos dramáticos y esa sensación de repetición que parecía como un latido constante. Rebuscas en los cuadros y el resto de anuarios. Al parecer una joven directora Kensington ya estaba en el cuadro de profesores, pero en el lugar de director del centro estaba un hombre de mirada severa, cejas pobladas y calva incipiente de pelo cano. una nariz aguileña y cuna media sonrisa que parecía forzada y artificial.

De tus artículos anteriores, recuerdas que fue por esa época que la iglesia decidió dejar la enseñanza y la institución a una fundación privada que acabaron comprando la propiedad a la parroquia en los años noventa. Había muchas incógnitas, y tu compañero seguía agitado preguntando continuamente donde estabais y porque habías despertado ahí.

Dorothy Williams (elpajarometalico)
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Re: Prólogo Dorothy

#4

Mensaje por elpajarometalico » 20 Jul 2021, 00:44

Miro en torno mía para ver como las diversas pistas se van acumulando en torno mía y era urgente realizar , al menos , un esquema mental del mapa antes de que este fuese engullido por la tinieblas. Y es cierto que es algo bastante angustiante , sin embargo , los susurros de los arboles cercanos mecidos por el viento y su silueta dibujada en plata por la Luna me serenan un momento dado. Sin embargo arqueé una ceja , el colegio se hallaba en una ubicación distinta ahora este se encontraba a las afueras de la ciudad rodeado por una extensa pradera verde , ni rastro había de las bocaterías , librerías o demás tiendas de ultramarinos. Fue entonces al intentar adivinar el horizonte , que pude ver un suave aleteo entre los pinos. Ahí se encontraba la lechuza o , bueno , como lo decía Emily , mi avatar. Me estaba indicando mis próximos pasos , pero antes debía construirme el camino ya que al girar la cabeza pude ver los dibujos de las gotitas de agua , escritos en un lenguaje geométrico , saque una foto con mi vieja e inseparable cámara. Las energías parecían fluir de maneras extrañas , casi parecía como si alguien dibujase los patrones con un dedo.

Necesitaba conocer las respuestas a este rompecabezas. Y al pasar el dedo por la fila de anuarios , sentí escalofrío por la espalda , pasaron por mi mente numerosas imágenes de tiempos pasados , el lento pero rápido avance de los rostros hasta que de repente como en una tira de película ardiendo se funde todo. El anuario de 1964 era ahora una pira marchita recién quemada ¿Sería debido a las leyes de la física quizás? Creo recordar que dos mismos objetos no podían coexistir en una misma línea temporal, quizás la propia paradoja destruyó el anuario original y solo quedaba el moderno. Sustituí el manual "viejo" por el nuevo y lo abrí intentando adivinar algo en él , mientras me sentaba al ordenador. El fuego o lo que fuera lo habían dejado indescifrable.

Parecía que Wells estaba al borde de un ataque de ansiedad , así que le escribí- Sssh , tranquilo , Wells. Respira , lo peor que podemos hacer es dejar llevarnos por el pánico. Creo que has acertado de lleno en tu mensaje anterior. Esta no es nuestra línea temporal , nos hallamos unos 62 años en el pasado , así que debemos intentar tener cuidado. No estamos en casa y hay otras normas :S Acarició la tapa del anuario ahora en mi regazo , era posible que esto no fuera más que un aviso y pudiese haber sucesos peores si no se tomaban las precauciones adecuadas ¡Por cierto , estoy muy orgullosa de ti¡ Por fin el entrenamiento ha dado sus frutos¡ :) Has podido conectarte a otro equipo ¿Sabes el gran paso que es eso? ¿Y encima en una terminal ubicada en 1964? ¡Eso no es nada fácil¡ ¿Lo sabes no? ¿Dime como has logrado saber que me hallaba aquí? Es más ¿Qué paso cuando me fui de casa la mañana del 06 de julio? Es importante , no recuerdo que hago aquí. Si Emily lo supiera , menuda sorpresa se habría llevado. Siempre iba diciendo que me merecía un compañero mejor , pero siempre tenía el presentimiento de que Wells era capaz de hacer cosas mejores incluso que las que Emily podía haber pensado en un inicio , o por lo menos siempre me podría quedar con su forma de ser. De todas formas ahora había algo más , estaba comenzando a mostrar su potencial.
Última edición por elpajarometalico el 05 Ago 2021, 16:33, editado 1 vez en total.

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Re: Prólogo Dorothy

#5

Mensaje por Vytros » 21 Jul 2021, 02:24

Wells empieza a llenar de interrogantes la pantalla uno tras otro. Formando una espiral que de repente empieza a caer como la pintura descascarillada de una pared vieja. Aparece de nuevo su contorno, la primera imagen que diseñaste para el. La idea original.

- No lo entiendo, yo estoy en casa. Es decir.. sentí tu llamada y vine. Pero no me he movido de tu ordenador, como bien dices.. no podría.

Un destello verde y de repente la pantalla se funde en negro, reemplazando las estilizadas líneas de los monitores modernos por la figura achaparrada y contundente de los antiguos pcs. En blanco crudo, algo lleno de polvo. Y un negro infinito en su interior con la realidad recomponiéndose a su alrededor. Tapándolo todo. Como siempre hacían los poderosos.

Llevas tu mirada al diario y observas las caras, los peinados, los uniformes anticuados de las animadoras y los jugadores del equipo de futbol. Eran antiguas, con los peinados de media melena y largos recogidos con diademas de flores. Aunque lo que te llama la atención de un colegio con más árboles y menos cemento, que coincide con las vistas que se filtran por los enormes ventanales de estilo neoclásico, son las fotos del gimnasio. Se alzan donde en tus recuerdos se encuentra el ala nueva de ladrillo rojo, y el jardín que se ve desde las ventanas hasta el vallado es donde se erige la figura gris y sólida del Gimnasio, con sus duchas, vestidores y el campo de juego de por medio.

Las fotos muestran a los equipos de animadores en medio de un salto, con los pompones en la foto de blanco y negro brillando al sol de la mañana contra un edificio alto de madera pintada en gris y blanco con el logo del colegio. Algo mucho más modesto y sencillo que la enorme nave actual. Por un momento ambos se superponen y notas esa presión de la realidad por mantener a las masas inconscientes. Por llenar de grises y planos una realidad llena de colores y aristas. Pero está allí, el antiguo gimnasio que te llama la atención, con esa extraña sensación de quien intenta ocultar algo. Patrones que se descomponen y son substituidos por una gruesa capa de pintura. Para acallar a las masas y dirigirlas como a ganado. Una red de mentiras que conforman la cueva que han preparado los poderosos para mantener encadenados a los humildes, un teatro de sombras.

De repente los truenos resuenan en el cielo nocturno destellando con luz blanca que se refleja en la pantalla, ahora vacía. Los ventanales se abren de golpe por el fuerte viento y empieza a entrar la lluvia por el ventanal. Con más fuerza que antes. Un frío te atenaza y la sensación de peligro empieza a ser más fuerte. El olor a hierba y tierra mojada se hace presente en la pequeña habitación y las luces empiezan a parpadear, hasta que se apagan por completo. El pasillo está a oscuras y el viento cierra la puerta de un golpe que resuena con fuerza tirando los anuarios de la estantería por el suelo. Estas completamente sola.

Dorothy Williams (elpajarometalico)
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Re: Prólogo Dorothy

#6

Mensaje por elpajarometalico » 09 Ago 2021, 23:22

Aquellos rostros de 1964 con sus miradas brillantes y sonrisas eternas parecían llamar a un pasado remoto , aquel cuando iba con mis padres a casa de mi abuela paterna ubicada en un pequeño pueblecito a las afueras , casi discernible en estos momentos por el gran ventanal . Aquellas faces vestidas en la mortaja de un cristal polvoriento observando los anacrónicos salones de la casa familiar. Retratos de primos terceros , jóvenes tíos segundos , otros quizás más cercanos en el arbol familiar pero que decidieron partir en busca de un nuevo destino en algún punto del horizonte. Semblantes y virretes que parecían presagiar el futuro de aquella niña de tres años que se les aparecía reflejada al son de los valses , cortesía de un viejo gramófono para recibir con alegría al año siguiente. Casi personificado , en una especie de ofrenda a dioses extraños y desconocidos , en dulces de todo tipo con sus azucaradas montañas coronadas en un dorado sirope o un oscuro chocolate. Y en el centro una elegante y delgada anciana con aquellos pendientes de color turquesa que casi le llegaban al hombro y de un pelo ceniciento a la usanza del maquillaje de los borradores. Pero mi mente infantil siempre terminaba yendo a ... Bongo.

El gato negro que me temía ya que le tiraba de la cola , era nada más sentir mis pasos y dirigirse hacia el pasillo que unía todas las estancias , un pasillo oscuro y eterno , en el cual se perdía el brillo de sus ojos en la lejanía. En aquel entonces me agarraba a las piernas de mi padre asustada por la oscuridad. Me daba miedo ir detrás del gato y acabar en algún lugar extraño , como el País de las Maravillas ,del cual , quizás, no sabría regresar. Los reinos extraños y oníricos de Bongo.

Y sin embargo a pesar de no ser tan dada a los cuentos de hadas ahora , no puedo más que sentirme perdida en un extraño reino del cual dudo mucho que ni siquiera con el choque de mis zapatos podría volver a casa. Si bien quizás esa misma casa se la hubiera llevando volando el tornado hace tiempo solo dejando unas pocas piedras encima de otras

Los ecos del agua al chocar contra el pavimento parecían componer una tétrica carcajada que se perdía entre la oscuridad para acariciarme poco después con su gélida lengua. Estaba asustada , mirando a donde debería estar el ordenador , ahora indistinguible en medio de la oscuridad. Me da ansiedad la pregunta que sobrevuela por mi cabeza , adivinando siniestras posibilidades ¿Y qué pasará si yo también estoy yendo hacia atrás? ¿Me quedaré convertida en un pequeño charco de sangre que se consume a sí mismo?

Me hace sentir intranquila tras ver los efectos de los poderosos , señores que controlan el tiempo para construir un presente en el cual puedan existir ... Ya que la misma sustancia del tiempo es variable y relativa a pesar de sus propias normas. Pero puede ser que ni siquiera ellos mismos sepan que yo estoy aquí , debía ser discreta entonces y no llamar la atención. Y así poder entrever la verdad detrás del telón porque no me quedaría tranquila hasta lograr ver sus zapatos negros arañando por detrás las tablas del escenario y mostrarles sus actos al público... y poder descubrir la verdad.

Cerré los ventanales y tanteé suavemente las paredes. Me pareció distinguir antes la existencia de un paragüero cercano. Voy a salir en busca de mis propias respuestas. Iría a desvelar los misterios, de las cartas puestas boca abajo sobre la mesa por la lechuza. Y daría pie a la aventura que siempre me espero en aquellos pasillos oscuros cuyas tinieblas jamás me atreví a desafiar.

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Re: Prólogo Dorothy

#7

Mensaje por Vytros » 18 Ago 2021, 00:08

La tormenta parecía entestarse en irrumpir en escena, llevada por la furia de las nubes que amenazaban con sepultar la luna y las estrellas bajo su oscuro manto. La luz de los relámpagos ofrecía tétricos fotogramas que iluminaban por unos segundos la biblioteca. En el silencio interrumpido por el rugir de los truenos y el viento contra las ventanas. Tomando un paraguas Dorothy decidió salir a los largos pasillos, que sin luz alguna más que los fugaces relámpagos serpenteaban por la antigua estructura.

Los mosaicos parecían más limpios, la pintura sin embargo se notaba vieja y cenicienta cuando atravesando las puertas del patio trasero apareció ante ella el gimnasio. Una alta estructura de madera, que recordaba los altos graneros. Pintada en gris, frente a las rejas que circundaban el edificio. Rodeada de árboles, plantas de regaliz crecían en sus márgenes, confiriendo al olor de la tierra mojada y la lluvia fresca un matiz terroso e intenso. Cuando estaba ante sus puertas el relámpago deslumbró de nuevo cayendo sobre el techo en un impacto que lanzó a Dorothy por los suelos.

Una figura parecía mecerse entre el humo y el fuego mientras las llamas desafiaban a la tormenta. Lamiendo la la madera y acariciando el techo del gimnasio mientras un coro de gritos desesperados salía de sus entrañas. El humo se hacía más espeso y apenas se podían distinguir los cuerpos entre la pesada cortina de algodón ceniciento. Tan rápido como letal, el fuego se extinguió ante sus ojos mientras las imágenes se sucedían difusas como si de un sueño se tratara. una capa sobre otra de imágenes, una capa superpuesta por aquellos que enterraron un pasado incómodo.

Donde hace unos instantes había un gimnasio de madera gris, ahora se alza un patio de cemento, donde pronto construirán un ala de ladrillo rojo para ampliar las aulas de la institución. Casi como si viera las imágenes a través de un antiguo visor. El humo, el fuego, la ceniza.

Dorothy despierta en su cama, ante su ordenador y con los posters de siempre observándola silenciosos desde la pared, clavados con chinchetas. Y sin embargo aún puede sentir el olor a humo en su habitación, mezclado con el aroma de la tierra mojada y el sabor de regaliz en la boca. Todo había sido un sueño.

- Por fin despiertas ¿Qué era eso? ¿Parecía la escuela pero no de hoy, es decir de otro tiempo. Pero había cosas que no cuadran. Es como si hubiera habido un backup que deleteara el original por otra ¿Dorothy qué ha pasado? por cierto en dos minutos y treinta segundos darán las siete y media. Deberías darte prisa si quieres llegar a tiempo a tu primer día de clases.

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Siento lo corto del prólogo pero para poner en común todos los elementos previos al inicio de la partida. Y debido al giro argumental prefiero cerrarlos al mismo tiempo. Si todo va bien en septiembre iniciamos la partida

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