Episodio 6. Cazadores... cazando

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Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#31

Mensaje por Voivoda » 17 Feb 2022, 19:43

OFF: Voy tirando con Annelise y Karen aprovechando que tengo un huequecillo esta tarde

Los Toreador se miran entre ellos, cruzando gestos de complicidad que generan una incómoda sensación en Annelise en tanto en cuanto parecen inquietantemente humanos... y al mismo tiempo hay algo en su manera de cruzar miradas que provoca que se pueda imaginar la existencia de los depredadores que habitan en realidad en el interior de sus cuerpos no-muertos. La joven Ventrue cree distinguir una especie de inquietud mal disimulada en Stefan Larsson. Es difícil sacar conclusiones del resto de los presentes, pero el Vástago apuesto de porte rockero se ha quedado ligeramente serio, sin acabar de encontrar una posición natural después de escuchar las palabras de Annelise. La Ventrue piensa si habrá comenzado a caminar sobre un terreno escabroso, pero intenta mantener la compostura. El hombre negro la mira más fijamente que Benedict o que Karen Logstrom, que es quien toma la palabra con naturalidad y sin parecer preocupada.

- Vaya, vaya... veo que eres muy directa -un ligero escalofrío recorre tu espalda. La sonrisa de Karen no tiene por qué ser síntoma de una simpatía sincera- Me temo que no sabemos dónde se encuentra Laurent, es un alma libre, ¿sabes?. No acostumbra a unirse a estos encuentros sociales con el resto de la familia.

Karen no pierde la sonrisa afable en ningún momento. Se te hace difícil no creer sus palabras, no hay resquicio de duda que pueda hacerte pensar que miente. Resulta atractiva, tranquilizante, casi hipnótica. En tu interior se despierta una leve señal de peligro, pero queda casi apagada por la sensación de estar en un lugar seguro que te rodea.

- ¿Falsos rumores? -Karen mira a Benedict, que la observa también sonriente- Menos mal que te llevas bien con Benedict, es todo un especialista en ese tipo de investigaciones -su rostro ahora es más serio- Sí, algo me ha parecido escuchar... algo sobre una inesperada longevidad, ¿cierto?

Los ojos de Karen se entrecierran fijándose en los tuyos. Desaparece la sensación de seguridad que empezabas a tener.

- En estos tiempos hay que tener mucho cuidado con lo que se dice por ahí, quién sabe quién podría verse tentado de ajustar cuentas de tiempos que es mejor olvidar, ¿no?

El recuerdo del artefacto en los bajos del coche vuelve de golpe a tu mente.

--------------------------------------------------- Un ligero brillo carmesí asoma en el lagrimal del ojo izquierdo de Anne. Es apenas un ligero reflejo rojizo a la luz de la moderna chimenea que ilumina aquel salón, quizá el único rincón cálido que queda en medio de una ciudad que cada noche se vuelve más y más gélida. Un ligero brillo carmesí en una mirada que, por muchos esfuerzos que Anne pudiera hacer por ello, ha quedado congelada para siempre en el rictus de una naturaleza que ya no es humana. En esencia, Karen percibe al mirarla la sensación de que estuviera frente a una estatua capaz de recordar los vestigios de una emoción. En ese silencio pasan años enteros de experiencias juntas, pero también de separación, dolor y ansia mutua. En ese silencio se filtra la amargura de que no podréis ser jamás lo que hubierais deseado ser, que el peso del significado de la eternidad es enorme, granítico, insalvable. Es más, esa misma incapacidad para morir hace ese peso permanente, una losa que os entierra a ambas en la comprensión de que nunca la realidad será como la habíais imaginado.

- Si te quedas conmigo, seremos un solo espíritu.

Anne no parpadea. Sus palabras son lo más parecido a la pasión que puede demostrar, y las sientes así, si bien no dejan de ser palabras de un cuerpo muerto. La sensación es extraña. La humanidad se ha escapado de vuestros corazones y es imposible de recuperar. Todo cuanto acompañaba al estado propio de los mortales, sus sentimientos a flor de piel, murió al atravesar el velo de la muerte.

La observas con infinito cariño y con un miedo creciente. Lo que Anne te ofrece es básicamente una traición. Sentir a tu amada Anne como traidora te duele. Traicionar tus principios te duele. La ira de Greta te dolerá.

Escojas lo que escojas, al final sólo habrá dolor.
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LARS OLSEN (Victor_Krugger)
Policía Neonazi

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#32

Mensaje por Victor_Krugger » 27 Feb 2022, 16:00

Asintió con la cabeza cuando Larsen insinuó la verdadera naturaleza de Goldstein. Observa las dos fotos flotantes y rápidamente llegó a la conclusión de que lo sucedido con Lindhart no había sido un simple arrebato o un ajuste de cuentas entre el Toreador y el Malkavian. Si el chiquillo de la anterior Príncipe estaba involucrado, tenía más pinta de un ataque cuidadosamente orquestado. Seguramente los Toreador se estaban reuniendo aquella noche para diseñar un golpe de Estado. Si Stefan estaba involucrado, posiblemente Karen Logstrom estaría detrás de todo o como mínimo era conocedora del ataque y habría dado su permiso a su chiquillo.

Apagó el cigarrillo y miró en silencio durante un par de segundos a Larsen.

-Necesito una copia de este informe.

Alzó su teléfono móvil y deslizó la palma de su mano sobre ambas fotos en dirección a este. Un recuadro con una barra de carga se desplegó en el aire.

-Me has ayudado mucho más de lo que te puedes imaginar, Henrik. Ya sabes, cualquier cosa que necesites, no dudes en pedírmela.

La barra de carga se llenó y el cuadro de mandos de la carga desapareció.

-Tengo que irme, esta noche tiene pinta de que va a ser extremadamente larga.

Mientras salía, pidió a través de su teléfono un taxi. Tenía que ir hasta Annelise, temía que estuviera en la boca el lobo y sólo él podía ayudarla a salir de allí. Mientra esperaba a la llegada del taxi envió el informe a Karen.

Annelise Niemi (Nyxe)
Genetista

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#33

Mensaje por Nyxe » 16 Mar 2022, 14:28

Annelise tardó un segundo de más en prestar más atención a esa parte instintiva de ella, a la Bestia, que a su lado más emocional. Por un segundo, creyó que realmente estaban todos juntos en aquel barco y que los Toreador genuinamente buscaban lo mejor para toda la Estirpe.

Solo por un segundo.

¡¿De verdad aquellos degenerados habían intentado Fascinarla!? ¡Y ella casi se lo había tragado! Segía notando el efecto mental, pero era facil de ignorar una vez reconocida la fuente. Mierda, se acababa de meter en la boca del lobo, y ahora tenía que pensar en una manera de salir de ahí cuanto antes.

-Ojalá -dijo Annelise con un suspiro, tratando de disimular que había descubierto lo que intentaban. -Pero Benedict me conoció cuando aún era humana, y todavía me recuerdan en la universidad y en más sitios. Y tengo fotos de no hace tanto bajo la luz del Sol ahora que lo pienso, así que no creo que sea muy dificil desmentirlos. En fin -dijo encogiendose de hombros-, lamento lo de Malalt, pero mil gracias por su hospitalidad de todas formas. Voy a llamar a Lars para que no se preocupe por mí -dijo como si estuviese más en presencia de viejos amigos de la familia que de vampiros con siglos de existencia. El efecto de la Presencia invitaba eso de todas formas.

Annelise se alejó unos pasos mientras trataba de analizar la situación. Estaba rodeada de Toreador, y en caso de que llegasen a un enfrentamiento violento no había nada a lo que pudiese recurrir. Eran más que ella, tenían ghouls con más armas, y además eran muchísimo más rápidos que ella, a juzgar por lo que había estudiado sobre las especializaciones de cada Clan. Tampoco le iba a ser nada fácil escabullirse, pues seguramente fueran más perceptivos que ella. Necesitaba algo de tiempo para pensar en una estrategia adecuada, y en aquel momento sólo se le ocurría una baza a la que recurrir.

-Lars, estoy con el Clan de la Rosa, te mando ahora la dirección -le dijo enviándole un audio. Habló en voz baja, como si tratase de no molestar, a pesar de que contaba que la oirían-. Por ahora estamos todos bien aquí y están bastante preparados, así que confío en que todo irá bien. Por favor, tú ten cuidado.

Ahora que Lars sabía dónde estaban, y por tanto el resto de los Ventrue, contaba con que no pudieran hacerla nada sin por lo menos iniciar un conflicto diplomático, y se aseguraba de que por lo menos estaba protegida por la Sexta Tradición. Puede que los Toreador decidiesen violar dicha tradicion igualmente, pero confiaba en ganar un poco de tiempo mientras valoraban si realmente les compensaba o no. Entonces le escribió rápidamente a Lars la dirección del hotel, y le dijo un par de cosas más que no quería que los Toreador oyesen.

Han intentado Fascinarme, no me fío de ellos
Tampoco han querido decirme nada sobre Malalt, pero sospecho que saben más de lo que cuentan
Tengo el presentimiento de que Malalt no se ha movido tan a la espalda de su Clan. Eso cambia un poco el panorama


Annelise esperaba realmente que lo de la bomba no fuese cosa suya, porque si era el caso, estaba bien jodida. Pero todavía podía salir bien parada de la situación. Sólo había una capacidad en la que podía contar con superar a los Toreador, y era la Dominación. Pero eran demasiados para hacerlo abiertamente, y era probable que al menos tres de los presentes pudiesen resistirla. Además, para asegurarse de que no la escucharan tendría que por lo menos irse a otra habitación. No podía contar simplemente con susurrar en una esquina del salón de actos. Pero por suerte, ahí había guardaespaldas humanos, tal vez podría convencer a alguno de que la escoltara fuera. Sí, seguramente pudieran irse en algun coche sin llamar mucho la atención y estar lo bastante lejos antes de que se dieran cuenta. Sólo tenía que moverse con cuidado y hacerse la inocente entre tanto.

-Vale Benedict -dijo regresando junto a él-, pues ya he avisado a mi sire. Así que, ¿me puedes ayudar entonces con lo de las redes? -le preguntó, juntando las puntas de los índices en un gesto casi infantil-. ¿O estas ocupado ahora?

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Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#34

Mensaje por Voivoda » 20 Mar 2022, 19:01

OFF: Sigo avanzando con Annelise y Lars

"Joder". Lars escuchó el audio primero y leyó después el texto que le mandaba Annelise. Sus peores temores se confirmaron. Con su mezcla de diplomacia, supuesta simpatía, sonrisas y palabrería hueca los Toreador se habían juntado como las sutiles arañas que eran y habían tejido su red de modo que su propia chiquilla estaba dentro de ella. La analogía le venía bien a cuento, porque un mal movimiento podría hacer que la dueña de la telaraña se moviera buscando a su presa. Y Karen Logstrom no era una araña cualquiera.

El policía se quedó pensativo mientras le pedía al taxista que circulara más despacio en las calles cercanas al hotel cuya localización acababa de recibir. No terminaba de fiarse del todo. Era difícil que una comunicación como aquella le llegara con esa facilidad. ¿Annelise habría sorteado a los Toreador... o a los Toreador no les importaba lo más mínimo que informara al exterior?, ¿era en realidad una manera por parte de los Artesanos de enviar una advertencia del tipo "venid si os atreveis"?

Karen no contestaba y eso sólo aumentaba su intranquilidad. No le gustaba reconocerlo, pero cuando estaban los tres separados... eran más débiles. Tenía la desagradable sensación de que al dividir fuerzas quedaban expuestas sus fragilidades; odiaba no tener el control de la situación, al menos la sensación de tener las espaldas cubiertas y poder cubrir las de los dos seres por los que, Greta aparte, aún sentía algo que iba más allá de las cenicientas emociones que provocaba la Bestia.

El taxi se detuvo a las puertas del hotel. A pesar de la gélida noche, se veía una cierta actividad en el hall y al alzar la vista se podía distinguir un mosaico de ventanas con las luces encendidas y una iluminación constante en las plantas más altas. Los Toreador no se escondían.

------

Annelise fue consciente de golpe del peligro del lugar en el que se encontraba. Su propia Bestia asomaba en lo profundo de su garganta, provocándole una incómoda ansiedad desde el momento en que se dio cuenta de que Karen Logstrom intentaba usar sus artes con ella. Los Toreador eran capaces de provocar otro tipo de terror: no era el de la violencia y la sangre, sino el de crear falsos teatros como el de esta noche. Una reunión supuestamente amistosa en la que en apariencia no había nada que temer y en la que sin embargo utilizaban otras armas que los hacían temibles y siniestros.

Benedict sonríe como si nada pasara y se excusa ante sus compañeros de Clan mientras os alejáis unos pasos más. El aparentemente joven y popular Vástago te hace algunos comentarios sobre lo seria que es Karen, lo estirado que es Stefan o lo callado que es el tal David Hawkins. Benedict es dicharachero, irónico y directo, le resta importancia a los chismorreos a los que no terminas de acostumbrarte.

Tus peores presentimientos se acrecientan y la Bestia se pone aún más en guardia cuando Benedict te invita a salir del salón por una puerta que conduce a un impoluto pasillo de hotel. En ese pasillo hay empleados de seguridad vestidos con traje y con pinganillos de comunicación interna que saludan educadamente a Benedict. También una mujer que lleva un carrito de la limpieza y una pareja de jóvenes que sale de una habitación con sonrisas cómplices.

Todos le conocen.

O, lo que es lo mismo, los Toreador controlan absolutamente todo cuanto se mueve en esa planta.

Apenas disimulas el temor creciente que se va apoderando de ti cuando Benedict conecta un ordenador portátil de última generación en una habitación en la que no hay ni un solo pliegue de una sábana fuera de su sitio. Huele a perfume, hay un levísimo y agradable hilo musical con notas de jazz y se escucha a lo lejos el murmullo del salón principal. Benedict te invita a sentarte a su lado en el escritorio de la habitación, enciende una luz ambiental cálida y agradable y empieza a navegar por Bloodpost.

- Guau.

Su expresión tampoco trae buenos augurios. Vuestra foto se ha viralizado completamente, así como todo tipo de comentarios. Aunque por las redes corren otros temas que también son tendencia entre los Vástagos de Copenhague (principalmente el incidente en la casa de Lindhart), se cotillea también bastante sobre vosotros. Benedict te mira un momento apartando los ojos de la pantalla.

- Al igual que yo, eres lo suficientemente joven para saber que cuando algo así corre por la Red es imposible borrarlo. O que es peor incluso intentarlo porque entonces se convierte en el doble de interesante y vuelve con más fuerza. - Benedict se calla durante unos segundos antes de proseguir- - Solo se me ocurre que podamos protegeros de alguna manera, Annelise. Tenemos alguna manera de introducir... tendencias de opinión en las redes, ¿sabes?. Podemos crear alguna que os proteja, pero para ello me temo que no os ayuda que parezca que venís de la época de la invasión nazi... o que aún la apoyáis, ¿me entiendes?

Tu nivel de alerta es máximo, como si pudieras notar cómo poco a poco se va tensando una cuerda alrededor de tu cuello. En el ofrecimiento de Benedict hay quizá una advertencia. Y sabes de sobra lo que Lars o Karen opinarían de este asunto.

- Quizá podamos decir que en aquella época fuisteis espías para la Camarilla y que ahora habéis estado infiltrados entre los Verdaderos Daneses... por el bien de la estabilidad de la ciudad, tan amenazada en estos tiempos en los que nos gobiernan Vástagos... con cierta inestabilidad a la hora de tomar decisiones - Benedict te mira con unos ojos que parecen haber tomado un aspecto más intenso y animal- Así quizá ganaríamos todos. Nosotros unos valiosos aliados y vosotros no tenéis que preocuparos más por las habladurías. La mitad se convertirían en admiración y la otra mitad se lo pensarán mucho antes de intentar haceros nada si saben que se enfrentarían a la fuerza de la Camarilla.


OFF

Karen -3 Puntos de Sangre. FV llena.
Lars. -6 Puntos de Sangre.
Annelise -9 puntos de Sangre (quedan 5 en el organismo). -1 FV
Imagen

Karen Klausen (Corso)
Juez (Tradicionalista)

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#35

Mensaje por Corso » 27 Mar 2022, 11:08

Karen apenas era capaz de apartar la mirada de Anne. La ventrue le estaba poniendo una manzana envenenada al alcance de la mano, y qué difícil le estaba siendo resistirse a morder de aquel fruto prohibido. Desde que se conocían, había fantaseado en sueños con compartir con ella la alta nobleza de la que provenía. Incluso, a veces, pensaba que era algo que también le pertenecía. «Un derecho de nacimiento, de cuna», solía repetirse al despertar turbada. Solo el caprichoso destino se les había puesto por delante, aunque en realidad y siendo justa sabía que había sido Greta - y no el azar- quien se les había adelantado a las dos.

Era en esos momentos cuando sentía que, aunque fuese a través del subsconciente, estaba traicionando de alguna manera a su sire. La sensación de culpabilidad le quemaba, pero de una manera equiparable al ansía por dar ese salto al vacío. Como si estuviese cubierta por una sábana con cada una de ellas tirando de un extremo y no consiguiese mantener la cabeza y los pies tapados al mismo tiempo.

La danesa la atraía como un imán y no podía luchar contra eso, pero a su vez la sucinta traición para con la alemana que encerraba con sus susurros le repelía. Era como tener una llaga en el cielo de la boca, una que por mucho que le escociese no podía dejar de lamer, hasta ahora; pues la balanza que se había mantenido siempre en un precario equilibrio estaba a punto de desplomarse hacia uno de los lados.

Ensimismada en Anne, y en sus propios deseos y temores, no fue ella misma quien alivio el momento de tensión, anhelo y culpa, sino Lars. Su hermano de sangre la arrancó del huracán emocional que bramaba en su interior seguramente sin pretenderlo, algo que Karen no sabía si agradecer o maldecir. Levantó tímidamente un dedo excusándose, casi pidiendo permiso para atender la abrupta vibración de su dispositivo móvil en mitad del íntimo silencio que se había creado y entonces, cuando leyó el informe, un torrente de imágenes sacudieron su cabeza. Esto no enfrió su ánimo, pero introdujo un evidente resquemor en la suite. Volvió a mirar a Anne, y por primera vez desde que se conocían lo hizo sin miedo, casi de igual a igual, con la certeza de que esa noche iban a cambiar tantas cosas que era aceptable la idea de afrontarla con el ánimo de no tener nada que perder. « Si escoja lo que escoja, habrá dolor....apostaré solo por mi, hasta el final», pensó. Ese pensamiento, apostar de forma conscientemente egoísta quizá fuese un nuevo paso que la acercaba a convertirse en algo parecido al ser carente de emociones visibles que tenía enfrente. La manera en la que los vástagos iban perdiendo, casi sin darse cuenta y de forma irrevocable, su humanidad en favor de la bestia; aunque ella no pudiese saberlo. La metamorfosis hasta llegar a ser seres solitarios, pendencieros, ególatras y apátridas. Monstruos.

- Un solo espíritu. Noble, fuerte y decidido a salvaguardar las tradiciones de la Camarilla. Regio y justo, pero implacable cuando deba actuar con mano de hierro. En el fondo tú también sabes que las cosas deberán ser así - hizo una breve pausa para que ambas tomasen consciencia de lo que estaban dispuestas a ganar, pero también a perder - Anne, deseo con fervor ese gobierno junto a ti, pero el «éxodo sin retorno» que me pides exigirá de sacrificios. Greta pedirá el mío, y también el tuyo...

Ese negro presagio cubrió de tensión la suite durante unos segundos, en los que ambas permanecieron en un silencio de ultratumba, antes de que Karen continuase.

- Seguramente tendremos que enfrentarnos a muchos de los Verdaderos Daneses. También a Lars, puede que incluso a Annelise. En el mejor de los casos les perderé a los dos, no volveré a verlos y en el peor... - sus dos rostros se le proyectaron en la mente y el pinchazo de dolor que sintió en el pecho impidió que continuase, aunque tampoco hacía falta.

-Aún así, la promesa de ser una contigo y del futuro que podríamos compartir me empuja hacia ti...- volvió a tomar aquella mano inerte con dulzura, con una levisima sonrisa apasionada - acaso extrañamente esperanzada-. Ésta solo estaba dibujada en sus labios, pues el brillo petrificado de sus ojos, perdidos en el tiempo e igualmente carentes de vida, como los de una muñeca, reflejaban las llamas de la venganza.

-...me impele a cruzar ese umbral e instaurar una nueva era como embajadoras de los nuevos tiempos. Podría llegar a alejarme y protegerme junto a ti de todos ellos durante siglos, querida mía. Podría llegar a destruir esos routers para mantener el orden establecido. También podría pasar la eternidad a tu lado, aunque tuviésemos que fingir ser aquello que no hemos sido nunca.

- Pero lo que jamás podría hacer sería perdonar que hayan intentado acabar con nosotros. Lars, Annie, yo misma. Mi coterie. Nuestro clan. Porque los puentes que sugieres también exigen de los sacrificios de los demás - su mirada se endureció, y la mayor de las dos ventrue asistió al orgullo y nobleza enterrado por mucho tiempo, quizá demasiado, en la sangre Klausen. Aquel que atrajo a su propio hermano. Un orgulloso y vetusto linaje mortal que había trascendido con Karen a la muerte, y que tras su velo se manifestaba con una fuerza y voluntad infinitamente mayores, al punto de otorgarle un mar de posibilidades a la joven patricia.

- Si los Giovanni y los Toreador quieren formar parte del nuevo orden y empezar a construir esos puentes, habrán de pagar sus afrentas como puede que nosotras paguemos las nuestras. Empezando por las cabezas de König, Goldstein y Laurent Malalt. Será una forma de que sus clanes nos demuestren su...compromiso en futuras alianzas. Y también un presente que aplaque parte de la ira de aquellos que pensarán que me he tirado a los pies de sus caballos.

Sujetando aún la mano de Anne, se mordió muy levemente el labio como muestra única de la determinación subyacente en su análisis; esperando a partes iguales de arrojo, deseo y temor sus siguientes palabras.

Annelise Niemi (Nyxe)
Genetista

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#36

Mensaje por Nyxe » 28 Mar 2022, 14:29

-Espera espera espera -dijo Annelise al darse cuenta de lo que Benedict le estaba sugiriendo. -Eso solucionaría el que nos vinculen con los nazis, pero no el que nos consideren mucho mas antiguos de lo que realmente somos... Quiero decir, mira estos comentarios -dijo Annelise señalando los más inquietantes-. Estos no hablan de política, hablan de diablerie...

Puede que Annelise no coincidiera con varias de las ideas de la mayoría de su clan -probablemente todos los Neonatos pensaran que sus Antiguos eran demasiado conservadores- pero de ahí a traicionarlos había un trecho. Ultimamente además tenía serias dudas sobre lo que significaba esa palabra. Siempre había visto a los diferentes clanes del Parlamento como rivales, más que como enemigos. Pero aquella última noche no sabía qué pensar.

-La verdad Benedict, yo estaba más preocupada por lo de la edad que por la vinculación nazi. Quiero decir -se apresuró a añadir al darse cuenta de cómo sonaba lo que había dicho- es una palabra que se usa con mucha facilidad útlimamente, y creo que aunque pocos lo digan abiertamente, todos los Antiguos se implicaron con el nazismo de un modo u otro. Pero lo que me dibuja una diana en la garganta es que digan que tengo dos siglos. Yo había pensado más bien en más que borrarlo, simplemente tratar de desmentirlo -explicó-. Tengo guardado en el ordenador mi título universitario, las fotos de la orla, y fotos mías de día de hace unos años. Y me preguntaba si me podías ayudar a que se extendiera compartiendolo, o que me dijeras con qué tono era más facil que la réplica se volviera viral...

Sin embargo, Annelise reconocía que aunque fuera la respuesta más natural, Bennedict controlaba muchísimo más que ella en las redes. Quizá fuese demasiado inocente pensar que aquello podía funcionar, así que consideró lo que implicaba la propuesta de Bennedict. Aunque en principio le sonó fatal, en realidad posiblemente no tuviese tampoco mucha trascendencia. Mimi ya se solía relacionar con christianos, era simplemente extender el personaje un poco más. Le sorprendería mucho que Greta y los otros consultasen Bloodpost a menudo, así que tenía tiempo de sobra para explicarles la situación y que no se lo tomaran mal. Lo único que implicaría realmente es que tendría que distanciarse un poco publicamente de el grueso de su clan. Pero sólo públicamente.

-A ver, tú eres el que más entiende de estas cosas -dijo encogiéndose de hombros-. Si me dices que es lo mejor... pero en todo caso tengo que hablarlo primero con Lars y con Karen. Él es policía, ella es juez, y yo soy científica. Los tres nos esforzamos por ser neutrales -dijo Annelise, consciente de que no era cierto aunque debieran- y eso es posicionarnos políticamente de forma muy clara. Además -añadió- si se supone que somos espías, ¿anunciarlo públicamente no es como lo peor que podemos hacer?

LARS OLSEN (Victor_Krugger)
Policía Neonazi

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#37

Mensaje por Victor_Krugger » 05 Abr 2022, 11:54

-Mantén el motor en marcha. -Dijo al taxista. - No tardaremos mucho en irnos.

Lars sentía que la situación se le escapaba de las manos, todos sus temores se habían hecho realidad. Annie estaba en la boca del lobo y sacarla de allí era su prioridad. Además, tenía a los Toreador juntos en un mismo sitio, era una oportunidad que no podía dejar pasar.
Sacó su teléfono y decidió entrar en Bloodspot. Buscó el hilo dónde se hablaba de ellos y su foto. “Putamierda”, pensó al ver todo el revuelo que se había formado con el tema de su foto. Buscó al usuario que publicó la foto, pinchó sobre el link de su nick y presionó en la opción de mensaje privado.

Hijo_de_Odín: Creo que ya te has divertido lo suficiente. Si tienes el valor de subir esa foto falsa, quizá también tengas el valor de venir a verme cara a cara. La sorpresa de mi BMW no te salió bien, pero si quieres podemos arreglar cuentas en persona. Estoy aquí y ahora.
Hijo_de_Odín: Enviando ubicación...
Hijo_de_Odín: Te espero dentro. Búscame si te atreves.

No sabía si realmente había sido Eriksen el que subió la foto así que se le ocurrió otra manera de contactar con él. Cómo se solía decir, no era oportuno poner todos los huevos en la misma cesta. Buscó el teléfono del Jazzhus Montmartre. Presionó el botón de llamar con la esperanza de que un camarero o el dueño del local cogiera el teléfono.

-Buenas, si Eriksen está por ahí tengo un mensaje para él. Dile que su amigo el estirado que tenía un BMW le está esperando en el hotel * OffRol: Le doy la dirección del hotel de los Toreador.

No había terminado aún con su teléfono. Primero escribió a Annelise.

Mensaje enviado, Lars: Estoy en la puerta del hotel, por favor, haz lo que sea para salir de ahí.
Mensaje enviado, Lars: Malalt no trabajaba solo, Stefan Larsson también está involucrado.

Tras esto, decidió compartir con Karen la situación.

Mensaje enviado, Lars: Hola, hermanita.
Mensaje enviado, Lars: Estoy en la puerta del hotel de los Toreador.
Mensaje enviado, Lars: He venido a sacar a Annie de la trampa en la que se encuentra.
Mensaje enviado, Lars: El francés no actuó por su cuenta. Stefan Larsson, estaba con él cuando pasó lo de Lindhart.
Mensaje enviado, Lars: Es fácil sumar 2+2 y saber que los de la Rosa orquestaron todo.
Mensaje enviado, Lars: Si Annie no sale pronto, voy a tener que entrar.
Mensaje enviado, Lars: He intentado contactar con Goldstein, no sé si morderá el anzuelo para que venga aquí.
Mensaje enviado, Lars: Sólo espero estar lejos si el tipo decide venir aquí.
Mensaje enviado, Lars: Enviando ubicación...

Por último, pensó que era conveniente informar a Greta. Aunque supuso que ella ya estaría al tanto de casi todo.

Mensaje enviado, Lars: Gute Nacht mein Liebling
Mensaje enviado, Lars: Ich stehe an der Tür eines Hotels voller Toreador
Mensaje enviado, Lars: Enviando ubicación...
Mensaje enviado, Lars: Annie ist da, und ich komme, um sie rauszuholen
Mensaje enviado, Lars: Der Franzose handelte nicht allein, Longstrom Junge half ihm
Mensaje enviado, Lars: Ich hatte gedacht, dass vielleicht Thorvald und seine Jungs vorbeikommen könnten, um ihnen ein Geschenk zu hinterlassen, das Boom machen würde.
Mensaje enviado, Lars: Ich weiß nicht, es ist nur eine Idee

Se quedó pensativo, a lo mejor, enviar al Gangrel abiertamente era algo demasiado drástico. Pero la situación demandaba ese tipo de acciones. Confiaba en que si Greta sabía que Stefan Larsson estaba también metido en el ajo sabría qué hacer. Tener a todos los Toreador juntos en un sitio era todo un caramelo. Tenían que dar un golpe sobre la mesa y sentía que ese era el momento.

Se quedó pensativo observando fijamente la puerta del hotel. Si su chiquilla no aparecía en unos minutos, él mismo entraría para sacarla de ese nido de arañas. Aunque le costase la existencia.


=========
OffROl:
Traducción de los mensajes enviados a Greta:
Buenas noches, querida
Estoy esperando en la puerta de un hotel lleno de Toreador
Enviando localización.
Annie está aquí y voy a sacarla
El francés no actuó solo, el chiquillo de Longstrom lo ayudó
Estaba pensando que tal vez Thorvald y sus muchachos podrían pasar y dejarles un regalo de los que hacen Boom.
No sé, es solo una idea

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Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#38

Mensaje por Voivoda » 17 Abr 2022, 13:41

Anne muestra una sonrisa que a Karen le transmite una sensación de tristeza. Los gestos y maneras de la Ventrue eran suaves, alejados de la determinación sin fisuras que mostraba Greta. Karen siempre había pensado que eran dos caras de la misma moneda dentro del Clan: una decidida, directa y casi agresiva; la otra suave, paciente y dialogante. Pero ambas inflexibles. Karen sabía bien que ambas creían estar siempre en posesión de la verdad, aunque defendieran ese postulado de modo bien diferente.

Karen intentó mantener la calma mientras esperaba la respuesta de Anne y mientras los mensajes de Lars aún revoloteaban en su mente. Conocía bien a su hermano y su sentido de la responsabilidad. Era consciente de que sería capaz de ponerse en un peligro definitivo por sacar a Annelise de cualquier tipo de riesgo. Por un instante Karen tuvo una sensación que casi desconocía: tuvo miedo. Miedo a perder lo que siempre había considerado una realidad inmutable: que estaría acompañada en la eternidad por Lars y por Annelise. Que no se quedaría sola en un océano de vacío, que al final era lo que, aunque intentara negarlo, sentía que terminaba siendo la eternidad.

La voz de Anne le sacó de su ensimismamiento.

- Habrá que hacer ajustes, evidentemente, aunque necesitaremos un pacto de no agresión con los Toreador. Al menos con Logstrom -dijo con toda serenidad, casi sin emoción alguna- Pero tu Coterie estará a salvo, tienes mi palabra.

Una sensación de alivio, de calidez, asoma en el interior de Karen que, no obstante, casi se desvanece con las siguientes palabras que dice Anne, expresadas apenas como un susurro, con la suavidad y la determinación con las que un cuchillo corta la mantequilla.

- Pero esto sólo funcionará si los lazos de nuestro Clan con el extremismo son cortados de raíz.

Un tenso silencio sigue a sus palabras.

- SI presentamos la cabeza de Greta y desmontamos la red de demencia infinita de los Malkavian, la ciudad será nuestra.

Karen comprendió que no había marcha atrás. Si dejaba sin respuesta esa evidente llamada a la traición, ya era una traidora. Si en cambio ejecutaba la traición, su no-vida cambiaría para siempre.
-------------------------
Annelise miró de reojo su teléfono mientras esperaba la respuesta de Benedict. Saber que Lars estaba en la puerta del hotel le generaba una sensación contradictoria. Por un lado se sentía de nuevo respaldada. Por otro lado, la actuación de su Sire le hacía pensar que estaba en un peligro real dentro de ese hotel en el que todo parecía calidez, conversación y un agradable hilo musical. Su sentido de la alerta se alteró ligeramente aunque intentó mantener la compostura y seguir siendo pragmática con Dubois. Tenía entre manos una negociación de la que podía depender no estar en el punto de mira durante varios días más y eso era lo más urgente.

- ¿Neutrales?

Benedict sonríe como lo haría una hiena y te recorre un escalofrío.

- Venga, Annelise, eres una chica inteligente y de este tiempo... Tu Sire y tu amiga son dos vestigios del pasado. Son unos nazis con todas las letras.

Un ligero bufido asoma entre tus colmillos. Sabes que Benedict tiene razón, siempre has intentado minimizar ciertos excesos ideológicos de tus compañeros de Coterie, pero aún así tu sentido de protección es demasiado grande como para no avisar a Dubois de que no siga por ese camino.

- Bueno, no te pongas así -añade con cierta sorna, pero cuidando de no pasarse con el tono para no alterar más a tu Bestia- Me temo que borrar algo de Internet es como ponerle una verja al mar, Anne -Benedict se encoge de hombros- Lo que te propongo es la mejor solución. No hará mucha gracia a los nazis que os han protegido hasta ahora, pero bueno, se quedarán aislados y vosotros salvaréis esta jugada.


Dubois cierra la ventana del navegador y te mira con gesto amistoso.

- Pero me parece bien que se lo comentes a Lars y a Karen. Que vengan aquí si quieren, estarán seguros mientras estén en este hotel.
-------------------------
Es una solución un tanto drástica, ¿no crees? , escribe Greta añadiendo un par de emoticonos. A pesar de la tensión del momento, la respuesta hace que se esboce una sonrisa amarga en el rostro de Lars. Volar por los aires a los Toreador sería una monumental declaración de guerra, por no hablar del daño que podría sufrir la Mascarada con un incidente así. No obstante, el policía seguía preguntándose si el fin podría justificar los medios. A los Malkavian les quedaba poco respaldo, los Ventrue demostrarían su fuerza y, de paso, ¿qué importaría ya que pensaran que sois más antiguos de lo que sois?. Joder, si podéis imponeros por la fuerza, qué coño importaba cuándo se supusiera que os hubieran Abrazado.

Lars se preguntó si era su propia Bestia la que imponía esos pensamientos en su mente. Siempre pendía esa duda, pero en el fondo no dejaba de estar convencido de que un movimiento directo y contundente era la mejor manera de imponerse en la jungla. Y era evidente que la noche de Copenhague se había convertido en un territorio salvaje.

Ni Karen ni Annelise contestaron inmediatamente, lo que sumía al policía en una inquietud mayor. No obstante, ya en su vida mortal había aprendido a ser paciente a pesar de ser exigente con las soluciones. Confiaba en ellas, aunque ansiaba el momento de volver a estar los tres juntos.

Una voz femenina cogió el recado en el club de jazz. No pareció sorprenderse al nombrar a Eriksen, si bien te dijo que no estaba allí en ese momento. Tomaba nota del mensaje y se lo transmitiría cuando le viera. Colgaste la llamada con un ligero gruñido de impaciencia. Tus ojos se fijaron en los números rojos que se dibujaban en el espejo interior del taxi. El taxímetro sumaba coronas lentamente. Podías notar la intranquilidad del taxista, cuyos dedos tamborileaban ligeramente sobre la parte superior del volante. Estaba claro que la situación no le resultaba nada cómoda, pero no hacía comentario ni pregunta alguna, quizá notando de manera inconsciente la cercanía de tu propia Bestia.

Una ligera vibración en el teléfono indicaba una notificación en Bloodspot, una contestación a tu proposición de encontrarte en el hotel con vuestro propio perseguidor. No obstante, el nick utilizado no lo habías visto antes.

Szpilman: Será un placer, nazi de mierda.
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Annelise Niemi (Nyxe)
Genetista

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#39

Mensaje por Nyxe » 20 Abr 2022, 15:49

-Todos tenemos sesgos, Benedict -dijo Annelise, seria-. La cuestión es saber apartarlos para ejercer nuestro trabajo.

Annelise no podía negar que Lars y Karen eran bastante racistas. Especialmente Lars, Karen por lo menos se esforzaba en disimularlo. Pero podía entenderlo por la época en la que se habían criado. No creía que una vez superados los estereotipos, Lars y Karen fueran incapaces de ver a negros, arabes o gitanos como personas, en cuanto los conocían individualmente. Joder, si Lars le había ayudado a vengarse de los que mataron a Halil. Annelise confiaba en que serían capaces de superar esas ideas con el tiempo. Aunque quizá ella misma se había callado demasiadas veces. Ahí no le faltaba razón a Benedict.

Ahora, no le veía el sentido a criticar que se aliasen con nazis, y que ahora mismo mantuviesen influencia en grupos de extrema derecha. Cada cual encontraba aliados donde podía. Historicamente los Ventrue se aliaron con el poder hegemónico y hoy conservaban dichas alianzas. Teniendo en cuenta cómo se estaban portando los clanes esta noche, no creía que ninguno de ellos estuviese en la posición moral de criticar a los demás. Al menos, los Ventrue se esforzaban en inculcar a su familia el sentido de la responsabilidad y el deber, cosa que dudaba que el resto pudieran decir.

-Aun así, tienes razón, -reconoció- hay gente de mi clan a la que no voy a defender publicamente, porque no me gusta nada lo que están haciendo. Así que dame un segundo sólo.

Annelise volvió a coger su móvil y le escribió a Lars:

-Un momento, estoy con Benedict, me dice que puede solucionar lo de los rumores en la red.
-El resumen es que puede extender el contrarrumor de que fuimos espías contra los nazis.
-Lo malo es que de cara al público vamos a tener que distanciarnos de los Verdaderos Daneses durante una temporada.
-Puedo decirle ahora mismo que vale.
-Y no entres todavía. Dicen que te invitan a que vengas, pero me quedo más tranquila sabiendo que estás en la puerta.


Annelise estaba intentando cuadrar su mapa de alianzas en la cabeza. Se consideraba inteligente, pero la velocidad de los últimos acontecimientos la había dejado bastante desubicada.

Hasta donde alcanzaba a vislumbrar, los Toreador habían utilizado a los anarquistas, (Larson y Malalt mediante) para atacar a los Verdaderos Daneses. Sin embargo ellos no eran el objetivo principal, probablemente por eso los Toreador les estaban invitando a su Refugio (aunque tuvieran intención de manipularlos). No tenía muy claro si Benedict estaba en el ajo o no, pero de estarlo, básicamente le estaba diciendo que podían apartarse del camino de los Toreador.

La cuestión era si estaba dispuesta a traicionar a su Clan, aunque sólo fuera de puertas para afuera. Al fin y al cabo su laboratorio (e indirectamente su alimentación) dependía de sus fondos. Y era consciente de que socialmente era dificil moverse por la sociedad de los vampiros. sin el apoyo de un clan. Annelise notaba el cambio en el trato cuando se presentaba como Mimi. Tal vez se estuviese arriesgando demasiado a morder la mano que le daba de comer.

Annelise fue a escribirle a Karen pero se dio cuenta de que no le habían llegado los mensajes anteriores, así que decidió llamarla directamente.

-Hola Karen, estoy en el refugio de los Toreador. Benedict Dubois me ha propuesto una solución para los rumores por internet. Que es basicamente extender otro rumor, que estabamos espiando a los nazis. La verdad es que es fácil que funcione, aunque tendríamos que distanciarnos de los Verdaderos Daneses, al menos públicamente.

LARS OLSEN (Victor_Krugger)
Policía Neonazi

Re: Episodio 6. Cazadores... cazando

#40

Mensaje por Victor_Krugger » 01 Jun 2022, 00:11

La sonrisa amarga de Lars reflejó cierta decepción al leer el mensaje de Greta. Ambos querían y deseaban lo mismo, pero era evidente que divergían en cuestiones metodológicas. Ella había pedido un golpe de autoridad fuerte y se lo estaba sirviendo en una bandeja de plata. Era drástico, por supuesto. Pero el precio a pagar por hacerse con el poder.

Mensaje enviado, Lars: Sie kennen das Sprichwort: Für große Übel große Heilmittel 😊

Aún con el teléfono en la mano, apoyó el codo sobre el posabrazos de la puerta del taxi y como si de una estatua de cera se tratase centro su mirada en la puerta del hotel. Se preguntaba que era lo que retenía Annie dentro. ¿Acaso la estaban reteniendo en contra de su voluntad? ¿La estarían usando de cebo para atrapar al resto de la coterie? ¿Qué debía hacer? ¿Entrar al hotel? ¿Llamarla por teléfono?... Lars negó súbitamente con la cabeza y se despojó de esos pensamientos que obnubilaban su mente. Annelise era inteligente y sabía como apañárselas. Debía darle su propio espacio.

¿Y Karen? No solía tardar tanto en contestar a sus mensajes, teniendo en cuenta su actitud las pasadas noches empezó a pensar que quizá debería preocuparse más por su hermana que por su chiquilla. “Paciencia” se dijo a sí mismo.

A pesar del intenso debate que se había desatado en su fuero interno, toda su anatomía permanecía impasible. Su pose era del todo antinatural dado que ni pestañeaba.

Se fijó en el taxímetro y en como el taxista empezaba a perder los nervios. La llamada al pub no había sido satisfactoria, pero tenía que intentarlo.

Lars se incorporó y asentó el brazo sobre la mampara de metacrilato que lo separaba del habitáculo del conductor y lo miró fijamente.

-Tranquilo, amigo. Sea cual sea el precio que marque el taxímetro, pagaré. - Dejó el móvil sobre el asiento y sacó su placa policial de dentro de su americana mostrándosela al taxista. – Es un asunto policial. Estoy esperando a una informante, debe estar al caer.

El teléfono vibró sobre la moqueta del asiento. Lars comprobó que había recibido una notificación Bloodspot. Szpilman: Será un placer, nazi de mierda.

Volvió a recostarse en su asiento mirando a la entrada del hotel. El judío había mordido el anzuelo. El Ventrue no sabía hasta que punto su jugada iba a salir bien. Si Goldstein entraba directamente al hotel a buscarlo podía tener la fortuna de encontrarse con los chupapollas de la rosa y a lo mejor se montaba un circo. Pero para que su plan saliera bien, Annelise tenía que haber salido del hotel.

Edit:
-Un momento, estoy con Benedict, me dice que puede solucionar lo de los rumores en la red.
-El resumen es que puede extender el contrarrumor de que fuimos espías contra los nazis.
-Lo malo es que de cara al público vamos a tener que distanciarnos de los Verdaderos Daneses durante una temporada.
-Puedo decirle ahora mismo que vale.
-Y no entres todavía. Dicen que te invitan a que vengas, pero me quedo más tranquila sabiendo que estás en la puerta.


Leyó el mensaje y estuvo a punto de soltar una carcajada de incredulidad.

Mensaje enviado, Lars: Ni hablar.
Mensaje enviado, Lars: Los Verdaderos Daneses son mi vida.
Mensaje enviado, Lars: Realmente creo en su agenda. No es una pose y lo sabes de sobra.
Mensaje enviado, Lars: No pienso traicionar a la causa.
Mensaje enviado, Lars: He invitado a Goldstein a tomarse un café conmigo en el hotel y no se como se va a tomar que no me presente a nuestra primera cita.
Mensaje enviado, Lars: Sal ya.


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OffRol:
Mensaje a Greta: Ya sabes como dice el refrán: A grandes males, grandes remedios 😊


Edito porque acabo de leer el post de Nyxe.

Cerrado

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