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Los buleros o perdonadores, una traducción muy literal diría yo, fueron publicados junto a los titiriteros en 1997 en un libro de gremio compartido. El libro de los perdonadores, el más largo hasta la fecha, fue escrito por Jackie Cassada y Nicky Rea.

Ilustración de Pietro Antognioni

Un video sobre el Gremio: https://www.youtube.com/watch?v=Ujj0v-gHbqo

Secretos sucios de los Perdonadores: viewtopic.php?p=16741

EL JURAMENTO DE LOS PERDONADORES El siguiente juramento fue escrito por Hipócrates, conocido entre sus compañeros Perdonadores como Padre Compasivo. Jurado por todos los miembros del Gremio, el juramento también se requiere a cualquiera que reciba enseñanza de las artes de Castigar. Aunque ha sido alterado ligeramente a lo largo del tiempo para reflejar los cambios en el inframundo (como la sustitución de Apolo por Dios o los Santos, cuando era jurado por los seguidores de la herejía de los Pescadores), esta versión del juramento abarca todos los principios del original.

El juramento
Juro por Apolo Médico y Asclepios, y todos los dioses y diosas que sean mis testigos, que cumpliré de acuerdo con mi mejor habilidad y juicio este juramento y esta promesa:
Trataré a quienes me han enseñado este arte como si fueran mis padres, y compartiré todo lo que tengo con ellos si lo necesitan. Trataré a sus compañeros como mis compañeros y les enseñaré este arte si desean aprenderlo. No lo enseñaré a quienes no hayan realizado este juramento ni aceptado nuestra compañía, y que nuestro arte no será utilizado para engrandecimiento propio, beneficio o cualquier otro propósito deshonesto.
Usaré mi conocimiento para el beneficio de los suplicantes, según mi habilidad y juicio; los protegeré de cualquier daño salvo el necesario para purificar la oscuridad de su interior. Acepto tomar todas las precauciones para que mi tratamiento sea beneficioso y no cause un daño duradero; no acosaré a la Sombra hasta el punto que resulte en la destrucción de la Psique.
Dondequiera que ofrezca mi Castigo, será para el beneficio del doliente, sin ninguna injusticia intencionada, ningún engaño deliberado, ni ningún tipo de daño ni prejuicio preconcebido a quien sea, Siervo, Legionario, Liberto o Señor.
Lo que pueda oír o ver en el curso de mi ministerio en lo que se refiera a asuntos privados, debilidades personales o secretos ocultos que no deberían ser extendidos, los guardaré para mí solo y no hablaré de cosas vergonzosas.
Si cumplo este juramento y no lo violo, que disfrute de fama y honor entre todos los Sin reposo en los tiempos venideros; si lo rompo y juro falsamente, que mis compañeros Perdonadores me repudien y me juzguen de cualquiera manera que consideren acorde con mis crímenes.
Bajo estos límites y promesas, lo juro.