Los GremiosCompartimos una serie de artes que nos dan el nombre de Monitores, pero existen otros muchos Gremios, surgidos en torno a la práctica de otros Arcanoi, con los que colaboramos y competimos según las circunstancias. Desde la Ruptura, procuramos mantener un mínimo de tolerancia entre nosotros, aunque eso no impide ocasionales conflictos. No debemos considerarnos mejores ni peores que ellos. Sus artes y especialidades pueden resultar muy útiles y necesarias, y la cooperación debería ser la norma, aunque no hay que dudar en recurrir a la guerra cuando nuestros intereses se ven amenazados. Aún así, existen Gremios con los que mantenemos mejores relaciones que con otros, debido a razones históricas, que compartimos intereses en común...o rivalizamos por un mismo territorio.
Los Gremios de Caronte
Estos Gremios surgieron relativamente bien parados tras la Ruptura, y Caronte no se mostró demasiado duro con ellos. Sus habilidades se consideraron demasiado valiosas para el funcionamiento de Estigia, así que si bien han sido “prohibidos,” en la práctica continúan con sus actividades, y las Legiones suelen mirar hacia otro lado mientras no destaquen demasiado o se vuelvan demasiado atrevidos.
Los Artesanos fueron nuestros primeros adversarios cuando se fundó el Gremio de Tejedores. Su intención de alcanzar la supremacía entre los demás Gremios se encontró con nuestra oposición, y luchamos contra ellos hasta que se alcanzó un acuerdo, no del todo satisfactorio, pero que al menos permitió que cooperáramos. De esta colaboración surgiría la facción de los Orfebres.
Los Artesanos tienen un Arcanos útil, que da forma a muchos de los objetos que utilizamos en el Mundo Subterráneo, y también tienen fuerza política, aunque por lo general no son demasiado sutiles a la hora de utilizarla. Ésa es nuestra ventaja, y por lo tanto, estamos encantados de que tomen la iniciativa y ocupen la línea del frente. Hemos aprendido que siempre nos resulta útil que sean otros los que comprueben el terreno antes que asumir riesgos innecesarios. Les ayudaremos a celebrar sus triunfos y nos quedaremos en nuestro lugar cuando haya que buscar responsables por el fracaso.
A la hora de huir de la persecución de la Jerarquía, colaborar con los Heraldos resultó en un acuerdo beneficioso para ambas partes. A cambio de cuidar de sus Grilletes, nos ayudaron a escapar lejos de la atención de los Legiones. A menudo las tripulaciones de los barcos y vehículos del Gremio cuentan con asistentes Monitores que les prestan su servicios. Conocen como nadie los Derroteros y caminos de la Tempestad, y no les viene mal saber que tendrán sus Grilletes a salvo cuando vuelven a casa. En conjunto, tenemos intereses distintos y no competimos entre nosotros, y además nos han permitido llegar a otros mercados. Los Tsuchigumo son quienes con más frecuencia colaboran con los Heraldos, especialmente las bandas nómadas que pasan la mayor parte del tiempo viajando de un lugar a otro.
Tras la Ruptura de los Gremios fuimos conscientes de las manipulaciones de los Oráculos. Son quizás uno de los Gremios más sutiles, actuando desde las sombras, aconsejando a Caronte, y saliendo de la Ruptura como si hubieran caído en un lecho de rosas. No tenemos pruebas, pero posiblemente fuesen los artífices del fracaso de nuestra rebelión. En cierto sentido, se parecen a nosotros: Nosotros tejemos la Red Vital, ellos tejen la Red del Destino.
Desde entonces, actuamos con cautela frente a ellos. Resulta difícil oponerse a alguien que conoce con antelación cuáles serán tus intenciones, aunque ni siquiera tú las sepas, pero con el tiempo hemos aprendido varias estrategias. Tener un pie en cada bando suele resultar útil, y por otra parte, aunque las artes de Fatalismo suelen ser bastante útiles entre los muertos, no lo son tanto en lo que se refiere a los vivos. Conspirar desde las Tierras de la Piel suele ser adecuado para dar a los Oráculos sorpresas inesperadas. Y recuerda, hasta ellos tienen Grilletes que cuidar y proteger.
Desde el principio hemos mantenido buenas relaciones con los Perdonadores. Son gente honesta y sincera, realmente dedicados a su oficio. Por supuesto, tienen sus secretos sucios y manzanas podridas, pero el Gremio en conjunto en verdad se preocupa del bienestar de las almas del Mundo Subterráneo. Su Arcanos es una bendición para soportar los estragos de la Sombra, y si alguna vez requieren nuestra ayuda, debemos ser generosos.
Y sí, puede que algún Monitor considere que son fáciles de embaucar y engañar, pero hacerlo iría en contra de nuestros intereses. Son un Gremio realmente comprometido en la guerra contra el Olvido, y sólo por eso debería dejárseles en paz.
Fue toda una sorpresa que los Usureros fueran los primeros en desertar cuando se produjo la Revuelta de los Gremios, adelantándose a nosotros. O lo habían previsto, o fueron advertidos, pero el caso es que su movimiento nos dejó sorprendidos al resto, y fue el detonante que provocó que otros Gremios siguieran su estela e hicieran fracasar la revuelta. Sólo por eso, cuentan con nuestro resentimiento, y aunque no hemos llegado al punto de considerarlos enemigos, de vez en cuando procuramos frustrar sus planes, simplemente para que recuerden que no hemos olvidado.
Los Gremios “Artísticos”
Existen otros Gremios que ofrecen servicios que no son tan necesarios como los de los Gremios de Caronte. Sin embargo, todavía siguen siendo frecuentados por otros Wraiths, al no carecer de utilidad. De la misma forma, mientras no llamen demasiado la atención, suelen ser tolerados, aunque los Legionarios desconfían de sus motivaciones, y en este caso hasta tienen razón. Estos Gremios también tienen sus propias agendas e intereses ocultos, y no son tan “inofensivos” como muchos Wraiths creen.
Los Juglares son un grupo de artistas pagados de sí mismos. En el pasado eran respetados en las cortes de la aristocracia fantasmal, y todavía reciben ciertos encargos. Sin embargo, la Ruptura de los Gremios les afectó profundamente, y ahora son un grupo de artistas resentidos. No hay que creer que no son una amenaza, pues bajo su arte se esconde un rencor vengativo que esperemos dirijan hacia los Señores de la Muerte.
Con frecuencia recurren a nuestro servicio, y por lo que he oído, alcanzan bastantes acuerdos con los Mármaras, a menudo con la intención de hundir la carrera política de uno u otro Jerarca, y en ocasiones para acabar con sus rivales. Mientras paguen bien, no tengo ningún problema con ellos.
La amenaza que representan las Máscaras no resulta tan evidente. Aunque muchos dirían que son un grupo de artistas y cortesanos que se preocupan sólo de satisfacer sus sensibilidades artísticas, bajo esta fachada se encuentra un Gremio bien organizado e implacable, que además de ser sutiles manipuladores, son hábiles en el arte del asesinato, vendiendo sus servicios a los mejores postores.
Es necesario reconocer que son auténticos profesionales, y por otra parte, si no puedes recurrir a los servicios de los Artesanos, las Máscaras son una buena alternativa a la hora de conseguir armamento u objetos elaborados.
Los Soñadores parecen verdaderamente dramaturgos y artistas dedicados a su arte de crear obras teatrales y escenarios surgidos de la materia de los sueños. En verdad no nos han dado motivos para desconfiar de ellos, pues parecen conformarse con evitar los enredos políticos que amenazan a otros Gremios, pero yo desconfiaría. O en verdad no tienen nada que ocultar o son tan sutiles en sus engaños que todavía no hemos conseguido descubrir qué es lo que ocultan.
Los Gremios “criminales”
En teoría hemos sido englobados en esta categoría, la de los Gremios que debido a sus intereses y actividades, rompen el Dictum Mortuum al interferir en las Tierras de la Piel, y por lo tanto, los que más hemos sufrido la persecución de la Jerarquía tras la Ruptura de los Gremios. En cierto sentido, nuestro oficio nos ha empujado a la clandestinidad, simplemente porque nadie reconoce que nuestros servicios también son necesarios. Todos los Wraiths, por lo menos al principio, necesitan proteger sus Grilletes y solucionar sus asuntos en las Tierras de la Piel antes de seguir avanzando, y a veces, cuando un Pálido especialmente antiguo ha perdido todos sus Grilletes, puede tener la necesidad de reconectar con las Tierras de la Piel, simplemente por puro deseo estético, o simplemente como una forma de vigilar los manejos de sus rivales. Por supuesto que se producen abusos, pero se podría extender a muchos Wraiths que no utilizan nuestros Arcanoi. Si los Señores de la Muerte no nos escuchan, los obligaremos a escucharnos.
Los Trasgos tienen un plan a largo plazo: derribar la barrera entre vivos y muertos. Hay que reconocer su tenacidad, pero con el paso del tiempo no es que hayan avanzado mucho. Hemos colaborado ocasionalmente con ellos en el negocio de proteger Grilletes y Moradas, pero son demasiado inestables para establecer alianzas a largo plazo. Por lo menos no suelen ser una competencia indeseable, y hay que reconocer que cuando tenemos alianzas en común son buenos aliados.
Mantenemos una posición similar con los Vigilantes, aunque su idealismo suele resultar ser un obstáculo. Suelen llevarse mejor con nuestro Gremio de Mentores, pero por lo menos parecen concentrados en sus asuntos en las Tierras de la Piel. Hemos tratado de aliarnos con ellos en ocasiones, pero cuando hemos tratado de forzar esa alianza, sólo hemos conseguido distanciarlos de nosotros. Por ahora, quizás sea mejor dejar las cosas como están.
De todos los Gremios “criminales,” posiblemente los Vigilantes sean los que han encontrado la mejor solución para interactuar con las Tierras de la Piel, si bien no es fácil. Algunos utilizan sus dones para aprovecharse de los mortales, otros para protegerlos como ángeles guardianes, y otros para disfrutar su hedonismo. Se rumorea que los Maestros del Gremio más poderosos han encontrado la puerta definitiva para volver a la mortalidad: la reencarnación, pero no me he encontrado con ninguno que haya afirmado que ha vuelto a nacer y regresado.
Nuestros aliados: Los Titiriteros
La formación del Gremio de Titiriteros no estuvo exenta de polémicas. De hecho, posiblemente estuviera a punto de pasar a formar parte de los Gremios prohibidos, de no ser porque quizás a Caronte o a alguien se le ocurrió que quizás sería mejor crear una organización para tenerlos controlados y justificar la persecución del Gremio. En cualquier caso, en sus inicios el Gremio de Titiriteros mantuvo una actitud tibia y seguidista de las políticas de Caronte, algo que causaba descontentos entre muchos de sus miembros.
Fue entonces cuando el viejo Gremio de Tejedores, que por una parte buscaba aliados en contra de los Artesanos, y por otra trataba de crear una alianza de los Gremios con actividades en las Tierras de la Piel, se aproximó a los Titiriteros descontentos y les ofreció su ayuda para participar en política. Fue el principio de una hermosa y productiva amistad.
Combinando nuestros Arcanoi nos convertimos en la principal facción en el negocio de la protección de Grilletes. Nosotros solíamos dirigir a los Titiriteros y ellos se convertían en nuestro puño contra nuestros enemigos mutuos. Pero más allá de eso, también colaboramos en nuestros enfrentamientos contra las Legiones y sufrimos juntos en la persecución que siguió a la Ruptura de los Gremios, cuando los Círculos en los que Titiriteros y Monitores se mezclaban se convirtieron en una visión común, prosperando a través de negocios clandestinos relacionados con las Tierras de la Piel.
Por supuesto, aún siendo nuestros aliados, los Titiriteros también tienen sus propios intereses y proyectos personales. El principal de ellos es la creación de Resucitados. Si bien son criaturas con un gran potencial, no son tan estables como quisiéramos, aunque debemos reconocer que la destrucción que causan a su paso puede resultar útil. En cualquier caso, preferimos dejar las cuestiones de los Resucitados en manos de los Titiriteros, aunque cuentan con nuestro apoyo siempre que lo solicitan.
Nuestra alianza ha sido duradera y continúa en estos días, y varios en nuestros Gremios creen que deberíamos extenderla a otras facciones, como los Trasgos y Vigilantes, aunque por el momento, no ha sido posible. Quienes creen que deberíamos asumir el liderazgo de los Titiriteros y absorberlos en nuestros negocios no hacen más que arriesgarse a destruir aquello que hemos construido juntos. Titiriteros y Monitores hemos sabido conciliar nuestros intereses desde la época en la que éramos Gremios aceptados en la sociedad de Estigia, y creo que es el ejemplo que deberíamos seguir en nuestros tratos con los demás.
Nuestros enemigos: Las Furias
Contemplamos los comienzos de las Furias cuando se escindieron de los Trasgos. Creo que en aquel tiempo cometimos un error de cálculo al minusvalorarlos. El líder del viejo Gremio de Tejedores se aproximó a ellos y les ofreció su protección, ambicionando convertir a las Furias en su ejército personal contra los Artesanos. Pero las Furias no se habían separado de los Trasgos para someterse a nadie, y finalmente fueron nuestros rivales los Artesanos quienes se ganaron su confianza al legitimarlos como Gremio. Los Monitores aceptaron ese rechazo y buscaron otros aliados.
Pero desde sus inicios, las Furias se ha convertido en una creciente molestia. Han competido y compiten con nosotros en el negocio de la protección de Grilletes, oponiéndose a nuestros esfuerzos y arrebatándonos potenciales clientes. Cuando intentamos presionar a Caronte tras la proclamación del Dictum Mortuum, las Furias se adelantaron y ofrecieron sus servicios a los Señores de la Muerte, arrebatándonos gran parte del mercado.
Colaboramos en la revuelta de los Gremios, pero nos traicionaron, y desde entonces, en la clandestinidad, nos hemos enfrentado. Una de las razones de la formación de los Tsuchigumo fue la necesidad de un ejército que hiciera frente a sus bandas de pandilleros y matones. Este enfrentamiento ha continuado hasta el día de hoy, compitiendo por territorios y negocios.
Aunque entre las Furias hay idealistas, especialmente la facción de los Salvavidas, los últimos siglos han dado lugar a un nuevo tipo de Furias más cínicas e implacables, lo que las hace más peligrosas. El enfrentamiento entre estas facciones podría terminar provocando un conflicto en el interior del Gremio, y creo que es un punto débil que deberíamos aprovechar. Ahora bien, debemos tener cuidado, pues si las llamadas Bandas Grises asumen el mando de las Furias, el Gremio podría terminan resultando un enemigo todavía más poderoso.
Los Gremios prohibidos
Hubo una serie de Gremios que debido a sus peligrosas actividades o su corrupción, terminaron marginados del Tratado de los Gremios y pasaron a la clandestinidad, donde terminaríamos encontrándonos siglos después. Libres de las restricciones de la Jerarquía hemos podido hacer tratos con ellos, aunque estos acuerdos no están exentos de sus propios peligros. Precaución es el mejor consejo a la hora de negociar con estos Gremios, pues nos arriesgamos a quedar atrapados en su corrupción o ser acusados de complicidad en sus crímenes.
En cierto sentido, los Alquimistas son una especialización de los Artesanos, y a menudo ha existido fricción entre ambos. Durante la guerra entre los Gremios, los viejos Tejedores realizaron alianzas con los Alquimistas, para evitar depender tanto del trabajo de los Artesanos, y aunque no tan extensa como la alianza con los Titiriteros, esta alianza se ha mantenido con altibajos hasta hoy. El Gremio de Orfebres era el que más tratos mantenía con los Alquimistas, y como resultado, consiguieron crear reliquias y artefactos para los Monitores.
En contraste, los Mnemoi son mucho más peligrosos. A lo largo de la historia de Estigia existen lagunas y extraños vacíos, y sin duda este Gremio es el responsable de gran parte. Historiadores e investigadores, los Mnemoi se corrompieron y comenzaron a robar recuerdos y secretos que utilizaban para el chantaje o simplemente para la venta. A tal punto llegaron sus crímenes, que el propio Caronte ordenó su disolución y persecución siglos antes de la Ruptura.
El potencial de que un Wraith se olvide de sus Grilletes resulta tentador, pero aproximarse a los Mnemoi es una opción muy arriesgada. Se rumorea que en alguna ocasión hemos alcanzado acuerdos puntuales con ellos a cambio de protección frente a la persecución de la Jerarquía, pero en conjunto, nuestros Gremios se mantienen separados. Otros dicen que algunos Mnemoi han huido de la persecución de la Jerarquía infiltrándose entre nosotros, pero no podría decirlo con seguridad.
Se dice que los Solicitadores surgieron de los Perdonadores, o quizás fue al revés. Este Gremio se basaba en la manipulación de las Pasiones de los Wraiths, avivándolas o atrofiándolas según fuese necesario. Sin embargo, como ocurrió con los Mnemoi, terminaron volviéndose demasiado arrogantes y corrompiéndose en el uso de poder. Se dice que servían como saboteadores, espías y policía secreta para Caronte, pero que intentaron un golpe de estado que fue descubierto y desarticulado en secreto, y los escasos supervivientes del Gremio se dispersaron.
En la clandestinidad, hemos alcanzado acuerdos con los Solicitadores, especialmente desde el Gremio de los Mármaras, aunque muchos de los planes y proyectos conjuntos han terminado arruinados por las frecuentes traiciones y puñaladas por la espalda.
