[Ayuda] Más allá de la Exclusión
Publicado: 07 Nov 2024, 21:52
Más allá de la exclusión
Por Ralph Murat Young
No todos los enemigos de los Wraiths se encuentran en el Mundo Subterráneo. Algunos se encuentran muy vivos y sanos y quieren la destrucción de los personajes. Este artículo para Wraith: El Olvido introduce una sociedad de mortales pero no muy sanos. De hecho, abrazan el Olvido y ansían consumir toda la vida, especialmente la suya.
La desesperación de la mortalidad
La sociedad odia y teme a la muerte hasta el punto que rechaza cualquier cosa que le recuerde ese terrible estado. Vergonzosamente, el miedo a la muerte a menudo genera prejuicios contra los agonizantes. De forma directa, la mayor parte de la gente sana se siente incómoda en la presencia de los enfermos terminales, aunque no representen una amenaza. El estigma de la muerte cercana a menudo deja a quienes agonizan abandonados y aislados de manera injusta. Los enfermos terminales no sólo se enfrentan a su propio miedo a la muerte, sino también al dolor de la soledad y el sentimiento de ingratitud y traición. Esta condición deja una debilidad que el Olvido puede aprovechar, y precisamente es lo que ha hecho una poderosa Malfea conocida como la Dama Blanca.
Cuando la sociedad cree que un individuo va a morir pronto a menudo lo rechaza del mundo de los “sanos.” Varias salas terminales y hogares de reposo alojan a los enfermos crónicos o discapacitados. Allí, quienes agonizan reciben paz y el único consuelo de las escasas visitas de sus familiares, un puñado de sanitarios y trabajadores sociales, y la mutua compañía. Solos y desposeídos, muchos de estos individuos se vuelven susceptibles a la influencia de cualquiera que les ofrezca esperanza y comunidad. Todo eso lo ofrece la Sociedad de la Exclusión. La sociedad es un culto nihilista dedicado a la adoración del Olvido -y la extinción de la vida.
Filosofía y enseñanzas de la Sociedad de la Exclusión
Una Malfea conocida como la Dama Blanca ha creado un grupo de agentes vivos entre los enfermos terminales. Estos individuos, que a menudo sufren diversos tipos de agonía extrema por sus aflicciones, aprenden que el Olvido es el verdadero camino hacia la paz y el alivio. Sin embargo, sería irresponsable y egoísta aniquilarse de inmediato -los miembros de la sociedad tienen la responsabilidad de enseñar a otros que deben abrazar el Olvido, no temerlo. La mayoría de los los vivos son irracionales y se aferran desesperadamente a la vida. Se deben tomar medidas extremas para mostrar a los demás que dejar de existir es lo deseable. A ojos de los Excluidos, una muerte lenta y agónica es la mejor forma de hacerlo.
Los reclutas veteranos, especialmente los que se encuentran cerca de la muerte, son iniciados en los “misterios superiores”. Los aspectos secretos del culto son revelados en el primer Totentantz (ver a continuación) al que el miembro es invitado. El recluta “baila” con los muertos (Doppelgangers Materializados) y conoce la existencia de la Dama Blanca. Sin embargo, también recibe algo de desinformación: la Malfea es mostrada como la encarnación consciente de la Muerte y el Olvido (una ligera exageración).
Al morir, el alma debe aguardar un tiempo antes de ser liberada de la carga de la existencia. Aunque se dice que al final la Dama Blanca aniquila de manera misericorde a todos los condenados a existir, pide a los muertos más nobles y desinteresados que extiendan la causa sagrada del Olvido. Estos individuos afortunados reciben el nombre de Espectros y tendrán preferencia en la Recompensa Final. Sin embargo, algunos de los muertos se aferran estúpidamente a la existencia y se convierten en Wraiths -enemigos peligrosos y confundidos del Olvido bendito.
Muchos miembros de la Exclusión se convierten en Espectros, sirviendo a la Dama Blanca de inmediato tras la muerte. En su fanatismo raramente se desilusionan, incluso en el más allá, y continúan buscando el Olvido que ansían y al que sirven.
Reclutamiento
Los Doppelgangers al servicio de la Dama Blanca a menudo se infiltran en las operaciones de los Wraiths esclavistas que se encuentran acampados en las cercanías de hospitales, salas terminales, y asilos de ancianos. Los Doppelgangers espían a los pacientes terminales, buscando individuos que estén muriendo poco a poco, y que parezcan especialmente solitarios y desesperados, examinando con cuidado sus auras buscando los elementos apropiados para el culto. Entonces transmiten la información descubierta a los agentes vivos de la Exclusión, normalmente a través de los Umbrales (ver a continuación).
Los agentes de la Exclusión se aproximan a un recluta potencial, informándole de la existencia de una institución sanitaria de clase alta especialmente adecuada para lo que necesitan. El recluta también es informado de que ese lugar está dirigido por una organización filantrópica que lo admitirá por un precio especialmente bajo -mucho más reducido que el del lugar en el que se encuentra.
Los Excluidos disponen de muchas instalaciones, todas con una brillante reputación y la acreditación de importantes agencias federales sanitarias y seguros de salud. También, casualmente, se encuentran aisladas de una forma especial que sólo permite la entrada a los Espectros o los Wraiths dominados por sus Sombras, pero niega la entrada de otros Wraiths. Tanto los pacientes como los trabajadores de estas instalaciones exclusivas son miembros de la Exclusión; los nuevos reclutas poco a poco son puestos a prueba y reciben un “lavado de cerebro” (mediante la privación del sueño y un continuo refuerzo positivo) para que adopten la filosofía de la Exclusión. Acompañados por cultistas cariñosos y activos con los que pueden empatizar, normalmente los reclutas se convierten en fanáticos por sí solos.
No todos los nuevos reclutas son enfermos terminales. La Exclusión y sus Espectros asociados también buscan reclutas entre los mortales sanos. La Exclusión dispone de una línea de atención al suicidio y servicios de consejería. Los individuos que busquen ayuda urgente reciben consejos simples e inútiles; a los más “prometedores” se los anota para un futuro reclutamiento (la conexión entre la línea telefónica y el reclutamiento sólo se revela a los miembros más elevados de la sociedad). También se realizan intentos para atraer al culto a muchos trabajadores sanitarios y otros profesionales útiles con una mentalidad adecuada. Los mecenas Espectrales de la Exclusión a menudo provocan una serie de desastres personales a esos reclutas potenciales para prepararles con un estado mental y emocional apropiado.
Antes de que comience el adoctrinamiento en los secretos más básicos de la Exclusión, el recluta debe encontrarse enfermo en estado terminal -diagnosticado con una elevada probabilidad de muerte. Sólo se admite a individuos que muestren Marcas de Muerte en las Tierras de las Sombras. Los reclutas sanos deben provocarse de forma voluntaria una enfermedad terminal antes de ser aceptados en el culto. Algunos ejemplos de este tipo de iniciación incluyen la inyección de sangre contaminada con SIDA, la inhalación de fibras de amianto, o la exposición a radiación letal. Sólo cuando un individuo es diagnosticado como terminal comenzará la revelación de los secretos del culto.
Finanzas y actividades
La mayoría de los nuevos reclutas con algún tipo de recurso financiero son animados a dejar todo o la mayor parte a instituciones de caridad que proporcionan cuidados a los enfermos terminales. Estas instituciones son controladas por la Sociedad de la Exclusión, y proporcionan los fundamentos financieros para sus operaciones. Los fondos que se reúnen son invertidos; los Doppelgangers de la Dama Blanca manipulan cuidadosamente el mercado de valores mediante sus Arcanoi para que sus inversiones florezcan.
Además de la buscar nuevos miembros y fomentar en la sociedad una visión fatalista y a favor del Olvido, los Excluidos a menudo actúan para provocar unos pocos desastres a gran escala -estos agentes actúan siempre con la seguridad de que no podrán ser incriminados. Esas “misiones sagradas” traen el bendito Olvido a los pobres miserables ignorantes que no son capaces de buscarlo por sí mismos.
Por último, los Excluidos guardan los Grilletes de muchos de los Espectros al servicio de la Dama Blanca. Los miembros más elevados de la sociedad conocen la importancia de esos objetos, pero la mayoría de los cultistas que los vigilan y guardan realizan su cometido en la ignorancia. Por lo general son tan fanáticos que no cuestionan las órdenes.
Los Umbrales
Obviamente, los cultistas vivos de la Sociedad de la Exclusión cambian con rapidez. La mayoría de las decisiones políticas las toman los Doppelgangers del culto o la propia Dama Blanca. Estas decisiones son transmitidas a las filas de los mortales a través de los Umbrales.
La mayoría de la gente considera la muerte una línea divisoria: en un momento está la vida, y al siguiente se encuentra la muerte. En realidad, la muerte es un proceso muy complejo que requiere el cese sistemático del funcionamiento de los órganos internos, el desgaste celular, y la separación del alma de la cáscara inerte del cuerpo. Habitualmente, un paciente terminal llega a un punto en que sus sistemas vitales alcanzan un nivel crítico, provocando una reacción entrópica en cadena de fallos en todos sus sistemas. Esta reacción en cadena normalmente convierte la vida en muerte en cuestión de segundos.
Los Excluídos, utilizando una combinación de tecnología médica moderna y magia ritual estática, pueden reducir esta reacción en cadena hasta el punto de un estado casi de hibernación. Los rituales mágicos utilizados, realizados de manera semanal “sangran” la entropía que afecta al cuerpo del paciente hasta el punto de la muerte y la trasladan a un recipiente, normalmente un miembro del culto; la propia condición terminal del recipiente se acelera de manera temporal, pero el proceso de la muerte del paciente afectado con los rituales se detiene. De esta manera, los Excluidos pueden pueden mantener a un miembro vivo y en el “umbral” de la muerte durante más de un año.
En su condición de Umbral, un sujeto se encuentra casi inmovilizado. Su corazón deja de latir y sus células nerviosas se mueven con una lentitud agónica. Los pulmones de un Umbral no pueden funcionar solos. Los Umbrales son mantenidos con respiradores artificiales que les permiten comunicarse mediante susurros. La condición es muy desagradable, incluso para los Excluidos. Pedirle a alguien que asuma ese deber se considera un gran honor y se reserva sólo a los miembros más desinteresados; quienes la aceptan reciben un gran respeto de sus compañeros. Los Umbrales adquieren la Visión de la Muerte y la Visión de la Vida de los Wraiths y pueden ver y oír tanto en las Tierras de la Piel como en las Tierras de las Sombras. Por lo tanto, constituyen un medio de comunicación conveniente entre los Excluidos y sus amos Espectrales.
Totentatz
Los Excluidos disponen de un ritual de magia estática que utilizan para iniciar a sus miembros en sus secretos ocultos. Es la Totentatz o Danza de la Muerte. Se tira un dado por cada cinco cultistas mortales que participen. La dificultad es la puntuación de la Mortaja local. Por cada éxito conseguido, la Mortaja se reduce en un punto en las inmediaciones. Esto facilita la Materialización de los Espectros de la Dama Blanca. Los miembros vivos de la sociedad también pueden ver a los amigos que han muerto unirse a la danza y saber que el final de sus vidas no tiene por qué ser el fin de su servicio glorioso al Olvido.
La Totentatz tiene otro efecto: cada vez que alguien participa en una danza con éxito (la Mortaja se reduce), un danzante puede añadir un dado a su Fuerza de Voluntad para resistirse a los efectos del Arcanos de Títeres. Se trata de un efecto acumulativo. Después de unas pocas danzas, el mortal se vuelven inmune a ese Arcanos.
Aliados y enemigos
Hace poco la Jerarquía de los Muertos ha comenzado a sospechar la existencia de los Excluidos, en gran parte debido a la existencia de sus instalaciones sanitarias para los enfermos terminales donde los segadores y esclavistas no pueden entrar.
La Sociedad de la Exclusión es muy aislacionista; el culto no está aliado con ninguna otra facción oculta del Mundo de Tinieblas. Las similitudes entre los métodos de los Excluidos y Pentex han terminado provocando el contacto entre agentes de ambas organizaciones, pero ninguna es realmente consciente de la existencia de la otra.
La manipulación del mercado de valores por parte de los Espectros al servicio de la Dama Blanca no ha pasado desapercibida. Vampiros del clan Giovanni, hombres lobo de los Moradores del Cristal y magos del Sindicato han descubierto la influencia del culto, pero cuánto saben o sospechan es incierto. Ninguna de esas facciones ha actuado a favor o en contra de los Excluidos.
Varios magos veteranos de la Tradición Euthanatoi conocen la existencia de los Excluidos y sus conexiones fantasmales. La mayoría detestan el culto. Estos magos pueden simpatizar con parte de la filosofía de los Excluidos, pero mientras que los Euthanatoi prefieren actuar de forma puntual y selecta entre la humanidad, los métodos de la Sociedad de la Exclusión equivalen a rociar con herbicida todas las plantas del jardín. De todas formas, en ocasiones un Eutánatos barabbus podría aparecer en compañía de los Excluidos, formando parte del culto o como un aliado distinguido.
