[SGN][001 - 000][Sương] Air Blue - La curiosidad

[Mu_]

Unos golpes de baqueta dieron paso a la primera canción de la noche. Hasta el micrófono se adelantó una mujer negra de dientes blancos, curvas exuberantes, rizos de fantasía y una voz profunda que rasgaba el local. Eclipsados por su llamativa presencia, los miembros de su banda, aparentemente vietnamitas, se afanaban en destacar por el sonido de sus instrumentos. Medio local atendía con interés o curiosidad.

El otro medio seguía a sus cosas, conversando sin preocuparse de lo que ocurría alrededor. En esa parte es donde Sương encontró a Cúc [Crisantemo], vestida de forma masculina como acostumbrada, en una pequeña mesa con una copa encima.

[Espacio por si quieres saludar]

Haciendo una pequeña indicación de esperar, Cúc se levantó un momento y apuntó un nombre, CHRYS, en la pequeña pizarra que había junto a la mesa de billar, bajo el nombre de otras dos personas.

- ¿Qué tal te van las noches, amiga?

[Nyxe]

Unos golpes de baqueta dieron paso a la primera canción de la noche. Hasta el micrófono se adelantó una mujer negra de dientes blancos, curvas exuberantes, rizos de fantasía y una voz profunda que rasgaba el local. Eclipsados por su llamativa presencia, los miembros de su banda, aparentemente vietnamitas, se afanaban en destacar por el sonido de sus instrumentos. Medio local atendía con interés o curiosidad.

El otro medio seguía a sus cosas, conversando sin preocuparse de lo que ocurría alrededor. En esa parte es donde Sương encontró a Cúc [Crisantemo], vestida de forma masculina como acostumbraba, en una pequeña mesa con una copa encima.

Sương la saludó con un ligero movimiento de la mano, casi tímido. Había ido muchas veces al Air Blue, ya fuera a tocar o a alimentarse, y allí había conocido a Cúc, pero esta noche esperaba no llamar la atención en el local. Seguía en su ciclo negro (como de costumbre, a decir verdad) y temía que alguien pudiese notarlo. Allí nunca había pasado nada, las luces del Air Blue no eran muy intensas, pero aquel mortal del funeral de Chuông Lặng [Campana Silenciosa] le había hecho preocuparse.

Haciendo una pequeña indicación de esperar, Cúc se levantó un momento y apuntó un nombre, CHRIS, en la pequeña pizarra que había junto a la mesa de billar, bajo el nombre de otras dos personas. Sương se preguntó si sería el nombre de la cantante que estaba en el escenario.

- ¿Qué tal te van las noches, amiga?

Sương se encogió de hombros. Por lo menos las últimas noches no estaban siendo demasiado buenas. Había tenido pesadillas otra vez, el padre de Midori no parecía contento con lo que ella hacía, y sobretodo, estaba el asunto de ese mortal. Aunque por otro lado, ya habían puesto a buen recaudo la biblioteca de Chuông Lặng y resultó que esta no tenía intencion de suicidarse.

- Supongo que bien -dijo, no muy convencida. -¿Que tal las tuyas?

[Mu_]

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Perdona, se me pasó mencionar que esta escena tomaría lugar en la noche antes del funeral, tras dejar cajas y libros en la casa de Dugu Qiubai.

Había pensando en editar las partes que hacen referencia al funeral, pero es mejor que lo hagas tú para poner los pensamientos de tu personaje

[Nyxe]

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Espera un momento, precisamente una de las cosas que intencion de preguntarle era acerca de que hacer con ese mortal.

[Mu_]

Unos golpes de baqueta dieron paso a la primera canción de la noche. Hasta el micrófono se adelantó una mujer negra de dientes blancos, curvas exuberantes, rizos de fantasía y una voz profunda que rasgaba el local. Eclipsados por su llamativa presencia, los miembros de su banda, aparentemente vietnamitas, se afanaban en destacar por el sonido de sus instrumentos. Medio local atendía con interés o curiosidad.

El otro medio seguía a sus cosas, conversando sin preocuparse de lo que ocurría alrededor. En esa parte es donde Sương encontró a Cúc [Crisantemo], vestida de forma masculina como acostumbraba, en una pequeña mesa con una copa encima.

Sương la saludó con un ligero movimiento de la mano, casi tímido. Había ido muchas veces al Air Blue, ya fuera a tocar o a alimentarse, y allí había conocido a Cúc, pero esta noche esperaba no llamar la atención en el local. Seguía en su ciclo negro (como de costumbre, a decir verdad) y temía que alguien pudiese notarlo. Allí nunca había pasado nada, las luces del Air Blue no eran muy intensas, pero aquel mortal del funeral de Chuông Lặng [Campana Silenciosa] le había hecho preocuparse.

Haciendo una pequeña indicación de esperar, Cúc se levantó un momento y apuntó un nombre, CHRIS, en la pequeña pizarra que había junto a la mesa de billar, bajo el nombre de otras dos personas. Parece que tenía pensada echar una partida después, Sương había visto el sistema en la cafetería del conservatorio, aunque nunca había visto antes el sobrenombre de su amiga, lo dedujo rápidamente.

- ¿Qué tal te van las noches, amiga?

Sương se encogió de hombros. Por lo menos las últimas noches no estaban siendo demasiado buenas. Había tenido pesadillas otra vez, el padre de Midori no parecía contento con lo que ella hacía, y sobretodo, estaba el asunto de ese mortal. Aunque por otro lado, ya habían puesto a buen recaudo la biblioteca de Chuông Lặng y resultó que esta no tenía intencion de suicidarse.

- Supongo que bien -dijo, no muy convencida. -¿Que tal las tuyas?


- Supongo que bien -dijo medio burlona-. Dicen que dos Penanggalan han escenificado verbalmente su enfrentamiento, y que podrían llegar a las manos. Pero también dicen que es todo postureo y que ninguna puede permitirse una guerra. Yo no lo sé bien, la verdad, no estoy tan metida en su sociedad.

Mientras hablaba, su voz titubeaba levemente y con sus dedo recorría el borde de su vaso. Ponderaba si contar alguna cosa, pero aún no se sentía cómoda para hablar de temas personales. Simplemente la relación entre las dos vampiras no era tan estrecha.

La camarera salió de la barra para poner sobre la mesa una bandeja con fruta recién cortada. Sương no tenía hambre, pero también es cierto que nunca sentía hambre por la comida, y a pesar de ello era capaz de comerla, como todos los người ma.

- ¿Qué quieres beber - preguntó Cúc antes de que la camarera se fuera-?

- Pero, en fin... me dijiste que querías hablar de algo.[/purple]

[Mu_]

Estado

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Salud: Intacta
Ying: 5
Yang: 4
Pò: 3
FdV: 5
[/offtopic]

[Mu_]

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Espera un momento, precisamente una de las cosas que intencion de preguntarle era acerca de que hacer con ese mortal.

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Ostras, ahora te acabo de entender.

Pensaba que era una trama distinta inventada. Pero te refieres a lo del PJ de Galeorn. ¿No?

[Mu_]

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Continúa la escena escena entonces

[Nyxe]

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Sí, hablaba del personaje de Galeorn. Por cierto, no se que se suele beber ahí (¿se encuentra lo mismo que aquí?). ¿Y người ma es la palabra que usan los Kuei-Jin en Vietnam o significa algo más?

Unos golpes de baqueta dieron paso a la primera canción de la noche. Hasta el micrófono se adelantó una mujer negra de dientes blancos, curvas exuberantes, rizos de fantasía y una voz profunda que rasgaba el local. Eclipsados por su llamativa presencia, los miembros de su banda, aparentemente vietnamitas, se afanaban en destacar por el sonido de sus instrumentos. Medio local atendía con interés o curiosidad.

El otro medio seguía a sus cosas, conversando sin preocuparse de lo que ocurría alrededor. En esa parte es donde Sương encontró a Cúc [Crisantemo], vestida de forma masculina como acostumbraba, en una pequeña mesa con una copa encima.

Sương la saludó con un ligero movimiento de la mano, casi tímido. Había ido muchas veces al Air Blue, ya fuera a tocar o a alimentarse, y allí había conocido a Cúc, pero esta noche esperaba no llamar la atención en el local. Seguía en su ciclo negro (como de costumbre, a decir verdad) y temía que alguien pudiese notarlo. Allí nunca había pasado nada, las luces del Air Blue no eran muy intensas, pero aquel mortal del funeral de Chuông Lặng [Campana Silenciosa] le había hecho preocuparse.

Haciendo una pequeña indicación de esperar, Cúc se levantó un momento y apuntó un nombre, CHRIS, en la pequeña pizarra que había junto a la mesa de billar, bajo el nombre de otras dos personas. Parece que tenía pensada echar una partida después, Sương había visto el sistema en la cafetería del conservatorio, aunque nunca había visto antes el sobrenombre de su amiga, lo dedujo rápidamente.

- ¿Qué tal te van las noches, amiga?

Sương se encogió de hombros. Por lo menos las últimas noches no estaban siendo demasiado buenas. Había tenido pesadillas otra vez, el padre de Midori no parecía contento con lo que ella hacía, y sobretodo, estaba el asunto de ese mortal. Aunque por otro lado, ya habían puesto a buen recaudo la biblioteca de Chuông Lặng y resultó que esta no tenía intencion de suicidarse.

- Supongo que bien -dijo, no muy convencida. -¿Que tal las tuyas?

- Supongo que bien -dijo medio burlona-. Dicen que dos Penanggalan han escenificado verbalmente su enfrentamiento, y que podrían llegar a las manos. Pero también dicen que es todo postureo y que ninguna puede permitirse una guerra. Yo no lo sé bien, la verdad, no estoy tan metida en su sociedad.

Mientras hablaba, su voz titubeaba levemente y con sus dedo recorría el borde de su vaso. Ponderaba si contar alguna cosa, pero aún no se sentía cómoda para hablar de temas personales. Simplemente la relación entre las dos vampiras no era tan estrecha, y aunque a Sương le sorprendió el último comentario, tampoco se atrevía a preguntarle.

La camarera salió de la barra para poner sobre la mesa una bandeja con fruta recién cortada. Sương no tenía hambre, pero también es cierto que nunca sentía hambre por la comida, y a pesar de ello era capaz de comerla, como todos los người ma.

-¿Qué quieres beber? -preguntó Cúc antes de que la camarera se fuera. Sương dudó un momento. No tenía más ganas de beber que de comer, y en el fondo el alcohol nunca le había gustado. Menos aún ahora que no se podía emborrachar. -Un [algo dulce], por favor -le pidió a la camarera.

-Pero, en fin... me dijiste que querías hablar de algo -comentó Cúc, y Sương asintió con la cabeza.

-A lo mejor es una tontería pero es que me estoy rayando -respondió bajando la voz, pensando en por donde empezar-. Anoche fingió su funeral una mentora mía. Pero apareció un... mortal -todavía no se acostumbraba a usar esa palabra- que creo que estaba preguntando demasiado. Tenía una foto suya pero de hace decadas, y decía que eran familia y que la estaba buscando. No se -Sương se encogió de hombros-, me preocupa un poco que termine descubriendo algo que no debe. Pero no se si debería hacer algo.

[Mu_]

-¿Qué quieres beber? -preguntó Cúc antes de que la camarera se fuera. Sương dudó un momento. No tenía más ganas de beber que de comer, y en el fondo el alcohol nunca le había gustado. Menos aún ahora que no se podía emborrachar. -Un zumo de fruta de la pasión [eso es sin alcohol, ¿o finalmente querías alcohol aunque no te apeteciera?], por favor -le pidió a la camarera.

-Pero, en fin... me dijiste que querías hablar de algo -comentó Cúc, y Sương asintió con la cabeza.

-A lo mejor es una tontería pero es que me estoy rayando -respondió bajando la voz, pensando en por donde empezar-. Anoche fingió su funeral una mentora mía. Pero apareció un... mortal -todavía no se acostumbraba a usar esa palabra- que creo que estaba preguntando demasiado. Tenía una foto suya pero de hace decadas, y decía que eran familia y que la estaba buscando. No se -Sương se encogió de hombros-, me preocupa un poco que termine descubriendo algo que no debe. Pero no se si debería hacer algo.


- Pero eso es problema suyo, ¿no? De tu mentora. Que lo arregle ella. ¿O es que quieres congraciarte con ella solucionándole la papeleta?