[CA] 11pm, baño segundo piso

[Magda Dalmau]

- ¿SEÑORA? - gritó elevando aún más el tono. Miró a Bruno confusa, en su cabeza resonaban las palabras del ghoul " aquí no nos molestará nadie", volvió a mirar a Trías y ni corta ni perezosa caminó tras él a la bañera a coger su vestido - ¿me llama usted señora y cree que la gente fornica solo en habitaciones de hotel?- se puso el vestido mientras seguía gritándole. Los gritos de la vallisoletana no era más que otra forma de reacción a lo ocurrido mezclado con toda la tensión vivida en la noche. La mano derecha en jarras en su cintura, la izquierda tenía el dedo índice apuntándo a Gonçal mientras seguía soltando por la boca - no sé qué pensar, si lo de que se ponga a mear delante mía sin emitir un solo "disculpen, la situación requiere que me salga afuera a esperar MI TURNO, o que realmente no le parece tan raro que se folle en un baño y en realidad le ha jodido no ser usted el que lo está haciendo.

Estaba detrás de Trías mientras le daba la espalda y se subía la cremallera del vestido.

- Te he visto en la fiesta, ahora no me digas que el haber venido aquí es casualidad con todo lo qeu está pasando esta noche- le inquirió. Echó una mirada a Bruno para vigilar si se le estaba pasando el subidón.

[Magda Dalmau]

Gonçal miró de arriba a abajo a la iracunda mujer y escuchó su soliloquio. Ni corto ni perezoso, se subió las gafas y le dijo: - Lo siento, no es usted mi tipo - Y el sonido de la orina cayó sobrel el water, seguido de un cierto suspiro exagerado de alivio.

- Cómo ve soy muy despistado para darme cuenta de que una pareja se daba a los placeres carnales en un baño de una planta atestada de gente... que no pasa nada, se que hay gente que le va ese rollo de mirones, en dos minutos acabo y pueden seguir a lo suyo... cómo para quedarme con "todo lo que está pasando esta noche". Así que si quiere iluminarme durante mi periodo miccional, soy todo oídos, no tengo que hacer otra cosa.

[Magda Dalmau]

- ¿Que no soy tu tipo? jajajajaja - la risa denotaba nerviosismo - curioso, porque lo natural hubiera sido que saliera por patas, pero aquí estás, como si nada. A lo mejor es que sí que eres un mirón y esta situación te gusta para quedarte a verlo.

- Y respecto a lo otro- sigue diciendo ella - no tiene que hacer otra cosa porque seguro que lo que tenía que hacer ya lo ha hecho aquí, no insulte a mi inteligencia...estoy segura de que usted estaba cuando Anna se puso a gritar sobre lo que harán a los que no consigan el Abrazo.

[Magda Dalmau]

Bruno iba a decir algo a Trías, pero cuando ha visto a Blanca enzarzarse ha hecho un mutis por el foro. Con cierto reparo, empezó a subirse los pantalones, mirando no sin cierta tristeza cómo la mujer empezaba a vestirse. Tan cerca...

- Ehm....-dice al fin, acercándose con mucha lentitud a la puerta, como si creyese que Gonçal y Blanca son una suerte de criaturas salvajes a las que hay que hablar con tranquilidad, en tono suave o de lo contrario le saltarán al cuello a uno- Yo casi que...bueno, voy tirando, ¿no?

[Magda Dalmau]

- ¡No te vayas! - ordena ella a Sepúlveda con una voz de jefa de oficina. Y cuando se da cuenta de que ha elevado el tono demasiado, levanta la mano hacia él como si hiciera una petición y le dice - aún hay tiempo, este señor solo tiene que contestar a mi pregunta e irse de aquí.

"Encima de que me ha costado llegar hasta aquí me van a joder el trato. Una mierda" piensa con determinación.

Mira de nuevo a Trías, aunque ni siquiera sabe que se llama así.

- ¿Sabe lo que le estoy diciendo o le hago un croquis?- insiste puntillosa, aún con los nervios a flor de piel.

[Magda Dalmau]

El ruido de la cremallera se entremezcló con el del agua correr tras accionar la cisterna. Muy pulcramente y escuchando a la fornicadora, se dirigió al lavamanos. Miró desde el espejo a la parlante mujer intentando atar todos los cabos posibles. La palabra "Abrazo"... le llamó la atención.

Abrió el grifo de agua y se lavó las manos. - Le repito, señora, que no se de que me habla. Pero si me lo refresca, tal vez pueda responder sus dudas. - Se quitó las gafas y mojó su cara, esperando que al terminar de frotar, todo fuera una pesadilla, y volviése atrás cuando era un triunfador.

[Magda Dalmau]

- ¿Que se lo refresque? ¿tengo cara de periodista?- el tono de la vallisoletana se había elevado un pelín más - ¿usted sabe a qué ha venido esta noche?¿realmente sabe a qué se arriesga o su tono de condescendencia es porque ya tiene comprado su billete de salida? Mira, de verdad- y cambia el tono al tuteo- entras aquí sin llamar, te pones a mear delante nuestra, me quieres tomar por tonta...no tengo ni idea de quién eres ...-levanta las manos con fastidio y aprieta los labios - que te den por culo, algún día pagarás tu desfachatez, imbécil.

Se acerca hacia Sepúlveda, le coge de la mano y sale del baño dando un portazo. Afuera le dice a Bruno.

- Me dijiste que no nos molestarían aquí, yo he accedido a lo que has pedido. Si quieres que terminemos la transacción piensa un sitio en el que podamos cerrar la puerta. O cuentame lo que sabes y ajustamos cuentas después - dijo con un tono firme.

[Wadabadah]

Tras cerrar las puertas del despacho, inspecciono con cuidado los pasillos accesibles de la segunda planta, sin serme imposible ignorar aquella conferencia en Ginebra. Por suerte no son tan laberínticos, y los ruidos tan evidentes como la podredumbre que habita en este lugar de paredes aseadas. Me detengo en una esquina justo cuando confirmo mis sospechas.

"¿Es su voz? Me temo que si, debo darme prisa"

Me acerco controlando cada paso, pero los murmullos no se corresponden con lo que me temía. Parece que hay más compañía. En mi estado no puedo pretender pelear, incluso una llave o la presión apropiada para dejar a alguien inconsciente podría acabar conmigo y dejar una escena absurda. Finalmente, pongo la mano sobre el pomo, no lo giro. Trago aire, noto el pulso cada vez más acelerado, la saliva se seca y casi puedo oír un pitido anunciando una descarga súbita de adrenalina. A partir de aquí se que puede pasar cualquier cosa contemplada en la literatura académica; desde una micción vergonzosa, un desmayo o incluso quedarme completamente paralizado. No tengo nada a mi favor.

"Nunca tomamos decisiones de forma racional e independiente a nuestras circunstancias, papá."

-Lo se, Elena, lo se.

Sostengo con miedo el pomo, pero para mi sorpresa este se gira bruscamente. Doy un primer paso paso atrás, luego otro y pestañeo incrédulo. Observo la escena pero no se asemeja a nada de lo que esperaba. Como me temía, no soy capaz de pronunciar palabra alguna, en su lugar mantengo una mirada silenciosa de consternación dirigida hacia Blanca y Sepúlveda.

[Magda Dalmau]

Bruno se ha convertido en un corderito obediente. No es que sea precisamente una persona de naturaleza rebelde, pero por lo menos en la sala principal parecía conocer dónde y cómo podía tener cierto poder sobre la situación a su favor. Pero ha sido recibir una órden clara de Blanca bajo una situación vergonzosa y el hombre no sabe ni cómo se pronuncia "no".

Asiente con la cabeza y se deja guiar por ella, evitando cruzar miradas con Gonçal. Si hasta está a punto de decirle "disculpe, buenas tardes" cuando pasa por su lado.

- Eh...yo no sabía que nos seguirían -dice, intentando recuperar cierta dignidad- A ver, este baño siempre ha estado abandonado. Aquí venía a fumar hace tiempo. Joder, si creo que el agua sigue corriendo por inercia, pero es que...que en fin, que no sabía que nos iban a interrumpir. Pero oye, yo ahora, como que....que bueno, que no sé si...

Se atraganta, viendo que mantener el asunto a flote no está siendo sencillo.

- Has accedido a tu parte, si. Puedo ir a Miguel y decirle que...¡Joder! -Bruno lanza una exclamación de sorpresa al ver a Luis, demasiado afectado como para fingir- ¿Qué haces tu aquí?

[Victoria_Rain]

La cara de la vallisoletana se puso tan blanca como su propio nombre cuando al abrir la puerta se topó con Luis frente a frente.

Lo mira a los ojos. Los primeros segundos son de una expresión de sorpresa y el médico puede ver perfectamente en su pupila la dilatación propia del subidón de adrenalina que le anuncia el estado de nervios e ira que viene a continuación.

- ¿Qué haces aquí? Creía que el Regente te tendría suficientemente ocupado...- la frase la dice con con un tono áspero. Mira hacia atrás a Trías y suelta para acabar - qué casualidad que nos haya dado el apretón a todos en el mismo momento - vuelve a mirar a Luis y le ordena - déjame pasar.