- ¿Eso has escuchado?... ¿que yo le metí en problemas a ella?... jajaja - Inconscientemente el brujo le había sacado una risa al patricio. Una risa que le devolvería el confort necesario a Cesc para confesarse. No había sido un comentario hecho a posta para generar dicha situación, pero así había sido... fruto de la casualidad... como tantas cosas en esta distópica Barcelona.
- La chiquilla de Socías forma parte ahora de la Espada... no sé si eso lo sabías... - indagó con la mirada la reacción del bibliotecario - Daren... me gustaría poder expresarte mis sentimientos, más allá que de colega a colega... me niego a pensar que estoy ante mi confesión final... y aún a riesgo de que seas tú y no ese gordo fantasma, mi verdugo final, he de confesarte una cosa. - La tensión volvió a su rostro, cómo si estuviera enfrente de una bomba nuclear y sus temblorosas manos sostuvieran unos alicates con los que cortar el cable correcto... - Si juntara todo el amor que tuve en mi vida mortal... no llegaría ni siquiera a una décima parte de lo que siento por esa chiquilla malcriada... Daren, estoy profundamente enamorado de ella...
{ https://www.youtube.com/watch?v=481GuSgiyI4 - The miracle of love by Eurythmics }
El momento para que Daren recibiera el impacto de la noticia se hizo eterno. Un tiempo en que la mente de Cesc se vio invadida por recuerdos... recuerdos que luchaban contra la mente cabal de Fornals, que le pedía a gritos que se olvidara de ella... Pero hasta en un no muerto como Cesc Fornals, el corazón podía a la cabeza.
How many sorrows
Do you try to hide
In a world of illusion
That's covering your mind?
En su mente, pasaron las imagenes de su puesta en sociedad. Las miradas cruzadas entre las cabezas de la gente. El soslayo de un coqueteo continuo e insano. Luego el encuentro en el pub irlandés cerca del Paseo de Colón y la primera conversación. Recordó aquellos labios que pasaron a ser la obsesión de Cesc durante los siguientes años.
I'll show you something good
Oh I'll show you something good.
When you open your mind
You'll discover the sign
That there's something
You're longing to find
Su mente fue invadida por los recuerdos de Verónica cabalgándole frenéticamente, mientrás las letras rojas del neón de Mapfre se reflejaban en sus gafas de sol, mientras era invadida por el orgasmo más furtivo y una turista asiática permanecía desmayada al lado de ellos. Así era Verónica Soldevilla, capaz de follar enfrente del refugio Ventrue solo por el morbo de poner en peligro al enamoradizo patricio. Una marioneta en sus manos.
Cruel is the night
That covers up your fears.
Tender is the one
That wipes away your tears.
There must be a bitter breeze
To make you sting so viciously
They say the greatest coward
Can hurt the most ferociously
Las citas furtivas, las risas complices, los polvos salvajes, las noches eternas en el "Sweet Dreams"... ¿como no fue capaz de pararlo?... ¿por qué quedó invadido por su veneno?... Aún a sabiendas de la espiral en la que estaba descendiendo, aunque ignoto de la profundidad real del agujero, la personalidad cabal de Cesc no fue capaz de sacarlo de allí, y creyó poder comerse el mundo con ella...
If you open your heart
You can make a start
When your crumbling world falls apart.
Y ahora, la escena del cementerio se le volvía de nuevo a la cabeza... destrozándolo todo como un huracán. Los recuerdos reales, los no reales, los inventados, los añadidos, los modificados... creaban un batiburrillo que le generaba un pinchazo en la parte trasera de la nuca. Un dolor generado por la duda y por la desesperanza.
Las dudas, que se antojaban dobles o triples... ¿cuales eran los recuerdos reales?... ¿por qué lo haría Paula?... ¿para protegerlo o para que cayera en desgracia...?... ¿Y por qué Verónica lo había vendido?... ¿es que su amor no fue tan real?... ¿estuvo siempre por encima el interés que el amor?... ¿o vino a posteriori?...
The miracle of love
Will take away your pain
When the miracle of love
Comes your way again.
Finalmente su rostro y su voz se le aparecieron frescas en la memoria. Sintiendo su aroma, sus labios, su pelo. Notando su tacto frío, su ironía anodina, su sonrisa casi macábra, su voz de soprano cantando por el cambio... Sintió a Verónica Soldevilla, y no pudo evitar derrumbarse, y romper en un llanto de sangre.
Sin consuelo, y sin importarle realmente, si la daga de Daren acababa en su espalda, buscó el abrazo íntimo del tanzano, intentando colocar su mejilla en el hombro clemente de Daren.