Interdicta plena: Morte'nte caligine

Desde la pureza del alma hacia la consagración inquisitorial

Moderador: Baudelaire

HERALDO HISTORIADOR (Baudelaire)

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#321

Mensaje por Baudelaire » 07 Ago 2020, 02:01

La generosidad en exceso podría ser un problema, signora Anaís. Si la compota no la has probado, es porque la debes haber repartido a toda la gente de la aldea. Una compota jamás ha sido un desayuno completo.

Con sus ojos fijos en la deliciosa preparación, huele el aroma dulzón con una extraña concentración. Parece ensimismado con aquella última porción del postre y te sigue extrañando su conducta, cuándo escuchas un golpe en el fino cauce. Museo ha dado una patada a un pez que saltaba y, con la mano contraria a la que sostiene el cuenco lo atrapa en pleno vuelo.

Mejor que también haga mi aporte, signora Anaís. Con un poco de leña, podremos calentar el pescado y pasar el frío de la mañana.

El gesto es, sin duda, sorprendente. Eres incapaz de evitar relacionar la visión de los colores con estos nuevos y mejorados reflejos. Aunque, quizás, sea simplemente que el entrenamiento como aprendiz del gremio ha mejorado sus atributos físicos. Más fuerte, más ágil y… quizás no más robusto, porque el frío le ha afectado. Con un par de golpes ya ha aturdido al animal y sacando un pequeño cuchillo de su cinto comienza a cortar la carne.

Tiene el mismo tono blanquecino que mostraba su piel hace un rato. Ya luce algo menos helada, pero concluyes que tiene razón. En un barrido rápido ya has reunido una buena cantidad de madera y la tienes apilada. Un poco de yesca aquí y golpear el pedernal hace aparecer la chispa que enciende el fuego. Un poco de ramas más gruesa y ya está la fogata, que Museo aprovecha con las porciones atravesadas en unas delgadas varillas.

Definitivamente ha mejorado mucho, en comparación con lo ocurrido en la góndola. Lo cuál, definitivamente, te fascina. La satisfacción de ver que tu ayuda ha dado frutos y, gracias a su propio esfuerzo, te llenan el alma de una paz que entibia tu cuerpo mientras compartes el desayuno de pescado y compota. Extraña combinación, pero menos que el asunto de los colores… que se hacen más homogéneos con el Sol ya elevándose.

Está deliciosa, signora Anaís. Dime si te gusta la trucha arcoiris, tiene la carne delicada y no tengo con qué aderezarla. Discúlpame si no está tan sabrosa como debería, pero no sabía que estarías con el estómago vacío…. ¡Ah! Por cierto, me ha llegado carta ayer por la tarde. Solamente quiero que me cuentes como estás y como va todo, mi madre y mi hermana están llenas de preocupación por tu bienestar.

Miras de reojo el sobre, no tiene remitente ni el sello en lacre. Solamente un sutil aroma que proviene del pergamino en el interior te hace intuir de quién viene: la anciana Perséfone de Padua. Museo vuelve a poner sus ojos fijos en su objetivo, como hace un rato con la compota. En esta ocasión, parece que está atento a tus noticias. Mastica con calma y se nota que está listo para escucharte.

Avatar de Usuario
Leohan
Mensajes: 444
Registrado: 16 Abr 2020, 22:57
Mensajes miarroba: 472
Antigüedad: 24 de Enero de 2006

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#322

Mensaje por Leohan » 07 Ago 2020, 18:18

No creía que la habilidad de Museo para la pesca pudiera volverse aún más sorprendente, pero ¡parece que ha aprendido algo! En esta ocasión ni siquiera ha necesitado tocar el agua para atrapar el desayuno.

Considero usar el enorme libro como mesa improvisada para comer, pero decido que es demasiado valioso como para arriesgar a que se manche. Debería guardarlo, aunque inmediatamente me doy cuenta de mi error: ¡es demasiado grande para mi morral! Supongo que deberé llevarlo bajo el brazo. A falta de mesa, nos vemos obligados a pasarnos la comida de mano en mano para compartirla, turnándonos entre la carne y la preparación de manzana.

Éso no me molesta.

La hice para compartirla, así que no creo que sea un problema, le respondo. Él está equivocado, por supuesto. Fue por generosidad desinteresada que pude salvar a Museo y a su hermana. E hice éso sólo porque Museo fue generoso conmigo cuando compartió su comida. Mi generosidad con la banda de Angelino, al liberarlos, me permitió pedir su ayuda luego para rescatar a Museo. El otro Angelino, aquél de Padua, fue generoso conmigo cuando me rescató y yo le devolví su generosidad al llevarlo a su casa… allí dónde pude conocer a la extraordinaria Perséfone.

¿Cómo es que había dicho?... ¡Ah, cierto! Mi único poder es la generosidad de la gente que me ama. La verdadera generosidad desconoce cualquier límite.


Lo que Museo dice y pregunta me toma por sorpresa. Miro el sobre… ¿cómo es que ha llegado a manos de Museo? Por supuesto, yo había indicado mi nueva dirección a Perséfone, por lo cuál tendría sentido que la haya llevado hasta mí. Pero más que éso, si hubiera decidido seguir enviando cartas a la mansión Perugi... pues, habría sido Elizabeta quien las recibiría, no Museo.

Antes de tomarla, decido responderle.

Estoy bien, digo. Tan bien como podría estar. Es decir, la vida rural me sienta bien. Estoy haciendo amigos. En mi condición anterior, pues… tenía que mentir. O fingir, por lo menos, cada vez que conocía a alguien. Existía una forma "correcta" de hablar. Ahora puedo ser yo misma. Me gusta éso. Estuve obligada a salir de Venecia, por supuesto... pero creo que incluso pudiendo haber elegido, eligiría ésto. Ya lo había pensado antes: seguir viviendo en la mansión sólo me traería bellos, dolorosos recuerdos.

Los extraño, por supuesto, digo cabizbaja. A ustedes, y tambien a mi padre y mi madre. Tú no la conoces, pero era una mujer extraordinaria. Tenía sus fallas, pero ahora más que nunca entiendo que sólo me estaba cuidando... Incluso aunque no esté de acuerdo con la manera en que lo hacía. Trago saliva, consciente de que estoy a segundos de comenzar a llorar.

No es que me interese contenerme ahora.

Sólo estoy tan feliz de que ustedes estén bien, digo. Después de tanta pérdida, no podría perderlos también a ustedes. Entre lágrimas, le sonrío. Mientras las cosas sigan así, tengo la certeza que no ha sido en vano.

¿Cómo te está yendo? ¿Has aprendido mucho con el director?

HERALDO HISTORIADOR (Baudelaire)

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#323

Mensaje por Baudelaire » 08 Ago 2020, 07:28

Compartir es lo mejor, signora Anaís. No entiendo como dices que estás feliz y te pones a llorar.

Museo simplemente abraza y te acaricia suavemente la cabeza, mientras sigue hablando.

Eres una buona signora, Anaís. No entiendo porque ocultas tu pena. Hay, en realidad, muchas cosas que algún día podré entender. Por ahora, quizás te ayude con tus lágrimas si te comento que me adelantaron el examen. En un momento más, al comenzar la jornada de hoy, van a darme el resultado. Si todo ha ido bien, me convertiré en oficial. El primero en décadas, parece que es algo importante, pero tampoco lo entiendo mucho.

Al cariño que hay en la mano sobre tu cabello le agrega un pañuelo con el que va secándote las lágrimas.

Sí, sí. Ya sé, no debería haberlo tomado. Pero fue imposible evitarlo, mi madre fue a ver a la tuya y ella se lo había entregado. Pensé que lo necesitarías… no sé, me regañarán, pero no me importa. Hay cosas que la gente adulta no entiende… ¿qué se siente ser adulta, signora Anaís? porque mi niñez está pasando muy rápido.

Dos noticias sumamente contundentes, Museo podría ya ser oficial y se ha robado un pañuelo que tu madre le dio a la suya. Nada menciona del director, lo que te hace preguntarte si todavía sigue bajo su tutela.

Avatar de Usuario
Leohan
Mensajes: 444
Registrado: 16 Abr 2020, 22:57
Mensajes miarroba: 472
Antigüedad: 24 de Enero de 2006

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#324

Mensaje por Leohan » 08 Ago 2020, 22:31

No, en realidad estoy feliz, digo. Lo siento, me distraje en divagaciones… ¿Un oficial del gremio a tu edad? éso sí que es impresionante. Ser oficial significa que dejarías de ser considerado un aprendiz, lo cual te otorgaría más prestigio y un sueldo propio. Literalmente, tendrás un oficio, comienzo a explicar. Si como oficial logras destacar lo suficiente, luego podrías convertirte en un maestro, lo cual te habilitaría a tener tus propios aprendices. No cualquiera puede ser un maestro, pero con paciencia podrías lograrlo: entonces sí que tendrías suficiente dinero como para pagar las mejores clases de canto en Venecia.

Observo el pañuelo ¿Realmente mi enloquecida madre se lo habría entregado a Calíope? ¿la mujer cuya presencia había provocado su locura en primer lugar?

Algo aquí es sospechoso. Sin embargo, tomo el pedazo de tela para secarme.

No existe un momento exacto en el cuál alguien empieza a considerarse una persona adulta, respondo. Es más bien una cuestión de cómo te perciben los demás. Yo me volví adulta cuando me convertí en oficial de cerrajería, pero en mi caso ya tenía once años. Me pongo a pensar. Tienes razón en que tu niñez está pasando rápido. Sabrás que eres adulto cuando la gente empezará a hablarte seriamente de casamiento con sus hijas, supongo. Pero no significa que debas cambiar o dejar de entender ciertas cosas.

Es cierto que, como el único proveedor de su hogar, en ciertos sentidos Museo se ha visto obligado a crecer rápido. Tomar responsabilidades y decisiones propias de un hombre adulto. Y aunque éso lo haga extraordinario, lo que lo vuelve realmente encantador es su niñez: su inocencia e imaginación, junto con su improvisación y sentido de la aventura. El no tomar decisiones por conveniencia, sino porque es lo correcto.

Perder todo éso antes de su debido tiempo sería una verdadera tragedia.


A propósito, , digo aún curiosa ¿Qué ha ocurrido con tu pelo y tus ojos? Te ves diferente.

HERALDO HISTORIADOR (Baudelaire)

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#325

Mensaje por Baudelaire » 09 Ago 2020, 01:44

Museo te escucha atentamente sin evitar mostrar un montón de dudas, con gestos evidentes, mientras le explicas lo de la felicidad y la adultez. Por el contrario, el relato de su hazaña de convertirse en un oficial a tan corta edad, le llena de colores el rostro… pero sin cambiar un ápice su cabello o sus ojos.

Al recibir tu pregunta al respecto, se acerca a mirarse en un pequeño pozón-espejo de agua quieta que forma un brazo del arroyo. Mete sus dedos entre sus mechones para sacar ramitas y hojas, para luego humedecer sus manos y limpiarse directamente el blanco de sus globos… abriendo los párpados con una mano y arrojando agua con la otra.

Si ya te ha hecho dudar el pañuelo, esta conducta bordea el límite de tu comprensión… ¿qué está haciendo? ¿acaso piensa que está sucio y que debe verse bien compuesto para ti? ¿algo le ha afectado, indirectamente, del encuentro de su madre con la tuya? ¿algo le han dicho el resto de aprendices del gremio? Ni idea, pero esta muestra de aseo compulsivo te ha tomado por sorpresa. Y es, sin duda, una enorme.

Es el viaje, signora Anaís. De noche hay que pasar arbustos bajos y zonas de sotobosque denso, ya veo que estaba hecho un guiñapo y no me había dado cuenta. Mi madre me dice que debo lucir bien para mis pretendientes. Hay dos niñas, algo mayores que yo, que también son aprendices. Deben tener un par de años menos que tú, signora Anaís. Las dos se me quedan mirando cuándo me quito la camisa para lanzarme a los canales. No sé porqué lo hacen, pero después cuchichean entre ellas. Parece que me odian o es que soy muy feo y se burlan. Me importa poco, sabes, porque yo seré oficial y ellas no.

¡¿Cómo es que se considera poco atractivo!? Esas niñas mayores están simplemente viendo un futuro marido, para ti está muy claro. Y, uno bastante atractivo, pero no tanto como Orfeo. Tu primo es un bombón, cariñoso e inteligente, lleno de generosidad y atento. Por supuesto, es ingenuo y manipulable, sin darse cuenta ya está preocupándose de su aspecto solamente con tu pregunta.

Pero todo aquéllo en nada se compara con ese atisbo de orgullo: seré oficial y ellas no. Si sigue así terminará por infatuarse y arruinará su carrera que va tan bien.

Aunque, ¿qué podrías decirle? Te sientes como una niña hablando con su hermanito pequeño, nada sabes del gremio de pescadores ni de estas chiquillas fisgonas. Además que, Museo, podría estar confundiendo las cosas y que ellas nunca han sido aprendices… ¿mujeres pescando? Te detienes en seco, las mujeres pueden ser lo que quieran, tú eres oficial cerrajera… y hasta antes de esa Elizabeta, eras la directora. Aunque todo el mundo podría haberlo atribuído a tu viudez.

¿Esas niñas un poco mayores ya eran viudas?

Avatar de Usuario
Leohan
Mensajes: 444
Registrado: 16 Abr 2020, 22:57
Mensajes miarroba: 472
Antigüedad: 24 de Enero de 2006

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#326

Mensaje por Leohan » 09 Ago 2020, 22:25

¿Ramas y hojas? ¿en serio era solamente éso? No puede ser, ¿cómo le podrían haber cambiado el color de los ojos?

Probablemente esas niñas sigan siendo aprendices. E incluso si no... pues, yo misma era oficial antes de casarme con Orfeo, incluso aunque fue su muerte lo que me catapultó al puesto de directora ¿Con suficiente talento quizás las muchachas podrían lograrlo en un gremio más abarcativo, como el de la pesca? Les sería mucho más difícil destacar, sin embargo.


Bueno, no sé si lo has considerado, digo a mi primo, sonriente, pero sé de buena fuente que varias jóvenes disfrutan de ver cuando un apuesto muchacho se saca su camisa ¿No estarían quizás cuchicheando acerca de éso? Coloco la carta, que llevaba cambiando de mano a mano por un rato, dentro del libro ¡Te veo confiado respecto a tu examen! Éso es bueno. Y ya había reconocido el director tu talento. Te daré un consejo, sin embargo: si te volvieres oficial, estarás en varios sentidos por tu cuenta. Y, podría haber gente, que querrá aprovecharse de tu falta de experiencia, en cuestión de negocios. Ciertamente, es muy diferente tener un talento extraordinario como el suyo a ser bueno en los negocios. Ciertamente, la ingenuidad de Museo podría causarle problemas… Aunque supongo que para detectar a ese tipo de personas tienes a Eurídice. Es un hecho que, desde hace tiempo, creo que esa ave se da cuenta de muchas cosas que los humanos pasan por alto. No conozco el origen de sus extraordinarios instintos, pero ya lo he presenciado suficientes veces como para empezar a dudarlo ahora.

Sin poder contenerme, observo a los árboles, buscándola.

HERALDO HISTORIADOR (Baudelaire)

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#327

Mensaje por Baudelaire » 10 Ago 2020, 00:06

Museo hace una mueca al escuchar lo de las chicas gustan de hombres guapos sin camisa. Después, al mencionarle a su amiga la gaviota, su rostro muestra un aspecto descompuesto. Sus ojos como encendidos y casi del tono que habías visto inicialmente, su cabello ensortijado y brillante… también algo cercano a su color cambiado. Pero nada de eso ocurre en realidad, pues al mirar con atención notas que se trata de rabia contenida… ¿o quizás si ha habido algo mágico aquí?

No sé si me miran y se burlan o si de verdad soy guapo… lo que sí sé, es que Eurídice no ha querido acompañarme. Desde ayer que estaba juntando con ellas y, al principio, me parecía poco importante. Ahora, lo entiendo, quieren hacer que pierda la compostura… ¡y lo están consiguiendo! Ya verán quién pescará más está semana, quién será el mejor oficial pesquero de toda Venecia.

Con o sin tus persistentes dudas sobre la alteración de sus ojos y su cabello, la rabia que muestra viene de un orgullo intenso. Te recuerda al qué tú misma tenías en algún momento y que, por suponer tu infalibilidad, te hizo ciega a los horribles errores que te han perseguido con todas las consecuencias que vives ahora. Si Museo sigue así, terminará tentando por lo que pudiere ofrecerle Elizabeta. Faltaba más, entre gente orgullosa solamente se producen secuencias nefastas de problemas.

Lo cierto es que llevan demasiado tiempo conversando y, él, ya debería estar en camino a los muelles para sus labores de hoy. Sea como fuere, te parece que estará llegando muy atrasado. Y, entonces, tendrá graves problemas. Más que de personas que podrían aprovecharse de su inocencia y su… ¡orgullo!

Dime, por favor, la verdad… ¿soy muy feo, signora Anaís, cierto?

Menuda insistencia con dicha pregunta, ya habiéndole dicho que es muy guapo. Si como querubín chapoteando en el primer encuentro, ya se veía muy lindo. Ni pensar en lo atractivo que se ha convertido para esas niñas. Que ellas se aprovechen de él es nada, nada comparado con lo que podría hacer Elizabeta o alguien de su círculo.

¿Cómo hacer para ayudarle… sin ir a Venecia a confrontarla? Parece que el orgullo es contagioso y tienes más cosas que atender o decidir como hacer algo para que Museo llegue más rápido a su trabajo. O, quizás, simplemente dejar que se equivoque como tú lo has hecho… así aprenderá por su propia cuenta.

Avatar de Usuario
Leohan
Mensajes: 444
Registrado: 16 Abr 2020, 22:57
Mensajes miarroba: 472
Antigüedad: 24 de Enero de 2006

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#328

Mensaje por Leohan » 10 Ago 2020, 04:49

En lo absoluto, respondo seriamente y de inmediato. Es verdad: ésa es la clase de dudas que pueden llevar al desastre. Aunque no tengo motivos para pensar que Museo tiene ese tipo de enemigos, entrar en el mundo adulto tan temprano tiene sus peligros, los cuales son mucho mayores si uno se deja dominar tan profundamente por las opiniones ajenas. Tienes una sonrisa realmente encantadora, resaltada por tus ojos brillantes. Eres alto para tu edad, y gracias a haberte acostumbrado a nadar tanto, ya has empezado a desarrollar musculatura. Si mi hipótesis acerca de Angelino es correcta, quizás es de familia. Pero a diferencia del gigante, Museo tiene una forma más proporcionada. Tus movimientos también tienen mucha gracia. Inevitablemente logras capturar la atención ajena, en el mejor de los sentidos.

Más allá de tu apariencia,
agrego, tienes otros encantos: eres educado y generoso. Tienes el don de la oratoria y, además de éso, también sabes cantar: habilidades acentuadas por tu carisma y encanto.

Me detengo un momento antes de concluir.

Sabes que yo no te mentiría ¿cierto? Tengo buen ojo para estas cosas.

Todo es verdad. Aún recuerdo nuestra primera interacción, y cómo el joven me atrajo con tan facilidad… y sin siquiera intentarlo. Si fuere a aplicar esos encantos a la búsqueda de pretendientes, en el futuro, pues Museo no tendrá límites.

Me llama la atención el comentario acerca de Eurídice. Casi parecería enojado. No lo imaginaba, considerando que ayer por la tarde la gaviota estaba trayéndome su mensaje. Quizás la imaginación hiperactiva le esté jugando en contra, y esté confundiendo la cercanía de Eurídice a ésas jóvenes como una conspiración. Bueno, mejor no tocar el tema, de momento.

HERALDO HISTORIADOR (Baudelaire)

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#329

Mensaje por Baudelaire » 10 Ago 2020, 11:21

Museo asiente y mira al cielo, escrutando la altura del Sol para determinar qué tan avanzada está la mañana. Se sobresalta y, en un movimiento sumamente ágil, enrolla la manta con rapidez. Instantes después cuelga con un trozo de cuero de sus hombros.

Ha sido un gusto encontrarte, signora Anaís. Al principio no estaba seguro si recibirías mi carta, pero he rezado mucho porque estés bien. Mis plegarias han sido escuchadas e, incluso, he podido disfrutar la deliciosa compota que has preparado. Ahora debo marcharme, de prisa, porque sino llegaré muy tarde a mi trabajo.

Te abraza dulcemente y parte a toda carrera sin que puedas alcanzar a decirle algo más. Nuevamente te quedas sola, salvo que un eco a la distancia te indica que Museo se ha ido cantando. Por un momento su voz resuena casi tanto como la de tu madre.

Miras el pañuelo y, con mejor luz, compruebas que es el diseño y la manufactura que ella amaba. Solamente en ese taller y con ese sastre, ella encargaba todo lo que se fabricara de tela. Cuándo se desvanece, como un murmullo, el aria del querubín casi ángel… vuelves a escuchar el rumor del arrollo. El agua escurre brindándote un momento de calma, un paréntesis en esta mañana inesperada. Por unos instantes, recuerdas el reflejo de Museo y ese brillo de sus ojos con colores inciertos. Lo mismo, para su cabello, pero te resignas a suponer que ha sido simplemente tu ansiedad.

Quizás Venecia no esté lista para recibirte otra vez, pero hacia el otro sentido del camino… esta Florencia, que espera como novia en el altar, por tu sentido de justicia. Ése que Elizabeta jamás ha conocido y que te gustaría enseñarle. No, otra vez el orgullo… debes hacer que ella misma lo aprenda, demostrarle que la humildad corre por tus venas.

Junto a una pequeña cama de hojas, queda la piel y los huesos del pescado, junto a unos pequeños trocitos de su carne. Un destello blanco cruza el cielo y ahí está: Eurídice buscando a Museo. Picotea con cierta displicencia los restos de comida, mientras te mira. Su pupilas adquieren, por unos segundos, en el color de los ojos del futuro oficial pesquero que imaginas avanza vertiginosamente a través de la espesura con rumbo a la ciudad. Unas pocas plumas níveas muestran, igualmente, el color del cabello.

La gaviota termina su desayuno y, en lugar de montar el vuelo, se pone a darle suaves cabezazos al grueso tomo de Eyzaguirre.

Avatar de Usuario
Leohan
Mensajes: 444
Registrado: 16 Abr 2020, 22:57
Mensajes miarroba: 472
Antigüedad: 24 de Enero de 2006

Re: Interdicta plena: Morte'nte caligine

#330

Mensaje por Leohan » 11 Ago 2020, 15:20

Cosa succede, piccolina? pregunto al ave, viéndola golpear su cabeza contra el libro ¿Por qué es que ha venido aquí cuando Museo se retiró? ¿Es cierta, acaso, su impresión de que está evitándolo? Parece imposible de imaginar, conociendo su relación.

¿Quieres que abra el libro?

Hago lo mismo, abriendo en la página donde coloqué el sobre con la carta. Lentamente comienzo a romper uno de los bordes, usando una de mis uñas como abridor. Mientras tanto, observo al ave, midiendo su reacción.

Editor completo

Volver a “Preludio”