
El Hombre Terrible se encaminó hacia la casa. Había sido una noche ajetreada, sembrando el terror en el vecindario. Algunos vecinos de la pequeña ciudad la recordarían sin duda. Persianas sacudidas sin razón alguna, bramidos de una bestia desconocida, sonidos de pasos en los tejados, primero silenciosas y después innegables.
¿Y qué decir de la figura del hombre bestia con cuernos que se dibujó ante la luna delante de una pareja de enamorados incautos? Cuando dirigió su mirada hacia ellos, y las cuencas de sus ojos brillaron. Habían encendido el coche y acelerado todo lo posible, mientras el monstruo los seguía en silencio, atronando el suelo con sus pezuñas. No los alcanzó, pero recordarían esa noche.
¿Y el niño que se levantó por la noche a beber agua y se encontró con una cabeza hirsuta y con cuernos mirándole desde la ventana? Había soltado el vaso y se había quedado paralizado, y tras soltar un grito, sus padres acudieron y vieron que no había nadie en la ventana.
Ivana salía una noche cada mes, cuando la luna llena acompañaba sus andanzas. No sólo lo hacía por diversión, sino para dar vida a la leyenda. Cuando había llegado a la ciudad había escuchado la leyenda del Hombre Terrible, una criatura de los bosques enfurecida por la invasión de la ciudad en sus terrenos, que salía por las noches en busca de presas. Por supuesto, la leyenda no era real, pero Ivana estaba dispuesta a hacerla realidad.
Entró en su habitación acompañada por los primeros rayos del sol. Se miró en el espejo, y en verdad parecía un Hombre Terrible, con su cuerpo recubierto de barro, sus patas peludas con pezuñas de cabra, su larga melena rizada y ensortijada con hiedra, y un toque de fantasía para un aspecto amenazador.
Se metió en la ducha y escuchó a su madre levantarse para hacer el desayuno.
-No tardes mucho cariño, o llegarás tarde al instituto.
-Sí, mamá.
Aunque había estado en vela toda la noche, apenas notaba el cansancio. Se relajó en la ducha, pensando en las anécdotas que sin duda escucharía en clase, y de esa manera la historia del Hombre Terrible seguiría viva.