Jugador: Pilgernd
Crónica: Un juego de Niños
Naturaleza: Juez
Conducta: Solitario
Edad: por decidir.
Atributos
Físicos
Fuerza: 00
Destreza: 000
Resistencia: 00
Sociales
Carisma: 0
Manipulación: 000
Apariencia: 000
Mentales
Percepción: 000
Inteligencia: 00
Astucia: 0000
Habilidades
Talentos
Alerta:
Atletismo: 00
Callejeo:
Inocencia: 0
Empatía: 0
Expresión: 000
Intimidación: 0
Liderazgo:
Pelea: 0
Subterfugio: 000
Técnicas
Armas de Fuego:
Artesanía:
Conducir:
Etiqueta:
Interpretación: 0
Latrocinio:
Pelea con Armas: 0
Sigilo: 00
Supervivencia: 0
Trato con Animales:
Conocimientos:
Academicismo: 0
Ciencias:
Finanzas:
Informática: 0
Investigación: 0
Leyes:
Medicina:
Ocultismo: 000
Política:
Tecnología: 0
Ventajas
Fuerza de Voluntad
5
Méritos y Defectos
Concentración (1 punto)
Lingüista Natural (2 puntos)
Idioma (Español/Alemán - 1 punto)
Aspecto
Ojos: Castaños claros (con luz solar o bajo ciertas condiciones pueden tomar tonos verdosos)
Pelo: Castaño oscuro
Complexión y forma física: Delgada, pero no está en forma.
Procedencia: Española/Irlandesa
Apariencia/Aspecto:
Personalidad/Lenguaje gestual: Me cuesta comenzar las conversaciones, pero no niego a la palabra a quien me la dirige. Suelo observar atento a los demás y eso puede alejarlos de mí, aunque no me incomoda aquello prefiero mantenerlos alejados de vez en cuando.
Al hablar gesticulo con las manos, y aparte de cierta melancolía que me embarga, la mayoría podría pensar que soy serio, pero los que me conocen pueden pensar todo lo contrario.
Ropa: Mi familia es modesta, pero tampoco vivimos en la mísera. Mi ropa suele tener colores oscuros, aunque de vez en cuando mis padres intentan incentivarme enviándome una prenda de color, que suelo ocupar poco. Los colores negros, grises y azules son los predominantes, la mayoría de las poleras son de bandas de metal y una que otra de alguna serie, pocas son totalmente lisas (comúnmente negras)
Peculiaridades/Gustos/Manías...: Me encanta la ufología, la criptozoología, lo oculto y misterioso del mundo, aunque nunca he tenido contacto directo con ello. Siempre he escuchado o leído las historias de otros, me fascina pensar que en este mundo hay algo más de lo que se ve, aunque a veces eso me aterra al leer los casos más espeluznantes.
Me gusta la Quiromancia, he estudiado varios libros al respecto, pero nunca lo he puesto en práctica, supongo que algo me dice en mi interior que no tengo el don. Así también el péndulo es una herramienta que llevo conmigo, colgado en mi cuello usualmente, aunque a veces lo uso como pulsera. Es un guía en mis dudas, y más de una vez realmente ha funcionado para darme lo que requiero (aunque una vez me metí en problemas por usarlo en una prueba y casi lo perdí. Desde que lo recupere no lo he vuelto a ocupar para ello al menos en las pruebas)
Tengo una afinidad hacia lo oscuro, me gusta recorrer los pasillos de noche, aunque hay días que no puedo salir de la habitación, como si cierto miedo me apresara ahí evitándome arriesgarme afuera.
Mis otras aficiones son tocar el bajo (uno eléctrico que me regalo mi tío) leer libros y de vez en cuando escribir lo que pienso en una libreta o bocetos de historias, e incluso personajes. Y siento interés en los idiomas, especialmente el inglés y alemán, probablemente motivado por las bandas que escucho. También puedo distraerme en mi imaginación, abstraerme en ella, incluso en medio de una conversación, lo que a veces me ha hecho ofender a otros.
Equipo: Celular con varias canciones de Metal, audífonos, péndulo y siempre un libro (puede ser de ciencia ficción, algún libro juvenil y de vez en cuando cosas relacionadas con las religiones o de los temas que me gustan)
Historia
Mi padre es español y mi madre irlandesa. Él es severo, ella es amable, pero estricta cuando debe serlo. Mi padre puede ser bastante serio, pero no puedo decir que no me quiera, el comúnmente me sacaba a pasear para que mi madre pudiese limpiar la casa tranquila. En estos paseos íbamos a plazas cercanas y a medida que iba creciendo nos adentrábamos al bosque, donde mi padre me contaba las historias que iba escuchando, y cuando estábamos solos me hablaba en español. Me insistía que debía aprenderlo, ya que parte de mi era español, pero en casa no se pronunciaba nada, se hablaba el irlandés, lengua nativa de mi madre y no entiendo como mi padre lo llego aprender en su tiempo.
Mis salidas con mi padre eran principalmente para forjarme como hombre me decía. Más de una vez salimos de acampada, e incluso estuve un par de años en boy scout. Esto me permitió conocer el bosque y algunos trucos para vivir de este, también muy a mi pesar me enseñó a defenderme, de ciertas agresiones aunque llegado el momento, no pude ponerlos en práctica.
No sé bien que habrá llevado a mis padres a esta decisión, pero poco a poco ambas lenguas comenzaron a convivir en nuestro hogar, aunque no de una manera muy agradable. Las peleas, a pesar de no ser el pan de cada día, si eran fuertes y duraderas. No vi violencia por parte de ambos, pero si enojo, frustración y lágrimas. Lo que sea que haya sido, creo que vieron necesario que yo no estuviese ahí y solicitaron integrarme a la escuela como interno, ya no volvería a casa por las tardes. Esto me aterro a pesar de no haberles dicho a mis padres, tenía compañeros que me molestaban día a día, y mi único refugio verdadero era mi hogar, donde me sentía seguro y podía ser yo sin miedo a prejuicios (al menos eso siempre he creído, pero ahora que he podido pensar puede ser que yo sea el motivo intento no pensar tanto en ello) Sin embargo, para mi alivio, me ha llegado el rumor de que han sido retirado de la escuela espero que la vida los trate como me han tratado.
He pasado gran parte del verano en la escuela, aunque pude ir a casa de vez en cuando, mi estadía no ha sido muy extensa (un par de días) y el ambiente se siente extraño, aunque todo parece normal y mis padres afectivos, tanto conmigo como entre ellos. No sé qué pensar, pero me siento más a gusto en la escuela por ahora.
Puntos Gratuitos Gastados
10 puntos (4 Méritos, 2 en FdV, Interpretación 2 y Subterfugio 2)
