- En esto estamos de acuerdo, tanto Angela como yo.
Una sensación de cierto alivio recorre tu cuerpo no-muerto. Aunque tu Sire y Brunhilda mantienen una relación cordial, la tensión que provoca tus lazos con la Nosferatu enturbian todo asunto que termina siendo competencia de ambas. Respetas y obedeces en la mayor parte de decisiones a tu Sire, que te ha tratado al menos con justicia. Sin un gran afecto, pero sin ningún abuso. Y mantienes una relación de absoluta devoción por Brunhilda. Sabes que esa sensación quizá no sea del todo natural, pero aún así es agradable y, sobre todo, inevitable. Tienes la impresión de que siempre va un paso por delante, de que su sabiduría y su templanza son un camino a seguir para la no-vida. Te gustaría no tener una admiración tan profunda, ser un poco más crítico, pero lo cierto es que aún no has encontrado grietas en las decisiones de la Nosferatu.
Aún así, es mejor que estén de acuerdo entre ellas. Allana mucho el camino. Quieres ser útil a la causa, a la ciudad y a la Secta. Y también quieres ser coherente con tus principios y tus sentimientos. Equilibrio y justicia.
Pides permiso para encender un cigarrillo y Brunhilda, que ha escogido para esta noche uno de sus múltiples rostros de una mujer mayor con el que esconde su verdadero rostro putrefacto, asiente ligeramente. Por los ventanales del piso no demasiado lujoso en el que te ha citado puedes ver una neblina helada que cubre los tejados de Copenhague, haciendo que sólo se distingan destellos de luces de los edificios más altos. La imagen a través de los ventanales es la de un paisaje espectral e irreal.
Observas la carpeta que Brunhilda ha dejado delante de ti. Dentro hay un informe que lleva el sello de la policía de Dinamarca. Angela te había puesto en antecedentes las noches anteriores, explicándote que al parecer el Natlige estaba preocupado por una sucesión de crímenes extraños. No le habías prestado demasiada atención, ya que Copenhague era un hervidero de violencia y protestas sociales en los últimos meses. Un reciente atentado yihadista en un hangar en el aeropuerto de la capital que había dejado una decena de muertos había servido como guinda para convertir la apacible capital danesa en una olla a presión. Una sucesión de crímenes sólo parecía un capítulo más de una oleada creciente de violencia.
Pero por lo que fuera, esos crímenes eran particularmente relevantes para el Parlamento Nocturno. El informe que tienes delante detalla la aparición del cuerpo de un adolescente tirado en el puente de Oresund, justo en la frontera entre Dinamarca y Suecia. Las pesquisas de momento no habían avanzado demasiado, era un informe extraordinariamente básico. Además, había varios recortes de periódico relatando un caso de corrupción relacionado con la ampliación de las instalaciones subterráneas (y subacuáticas) del puente en el que estaban involucrados varios políticos locales y la empresa que había ganado la adjudicación de esas obras de ampliación: MT Hojgaard. Al parecer, el cuerpo había sido localizado cerca de una puerta que servía como vía de salida de emergencia a través del interior de una de las pilastras del puente.
- ¿Quién investiga este caso?
- Los Tremere.
La respuesta de Brunhilda hace que contestes con un ligero respingo. No te emocionan los Brujos por los rumores que hay sobre ellos, aunque lo cierto es que nunca has tratado con ninguno más allá de un "buenas noches" derivado de que Angela te haya presentado alguno. Ahora parece que tu Sire y Brunhilda estaban de acuerdo en que te unieras a esa investigación. Interesaba por tanto al Natlige, a la propia estabilidad de la ciudad y de la Camarilla.
- Irás en las próximas noches con Angela al Elíseo. Una Vampira de la Capilla es bastante asidua al lugar, tarde o temprano os encontraréis con ella. Y entonces tu Sire hará las presentaciones oportunas.
La niebla en el exterior parecía aún más espesa.
