"Countdown" 3

Avatar de Usuario
Voivoda
Fundador
Fundador
Mensajes: 7449
Registrado: 13 Jul 2019, 17:50
Ubicación: Madrid
Mensajes miarroba: 27.018
Antigüedad: 7 de Agosto de 2004
Contactar:

Re: "Countdown" 3

#41

Mensaje por Voivoda » 27 Feb 2025, 18:47

Imagen

Anthony Pozzi espera sentado en el interior del restaurante, cerrado ya al público por la hora que es, pero abierto para sus asuntos. Tomaba un café y respiraba con dificultad por el sobrepeso evidente que mostraba. Tindalos nunca había terminado de tener del todo claro a quién podría servir dentro de aquel barrio. Se decían todo tipo de cosas de la vida nocturna de Little Italy, pero poco más era demostrable que el hecho de que aquellas calles, cada vez más cercadas por el avance de la vecina Chinatown, tenían sus propias reglas. Y que el antiguo Principado que se enorgullecía de gobernar todo Nueva York lo había dejado a su suerte cuando la Segunda Inquisición comenzó a repartir facturas.

El tipo parecía realmente lo que simulaba ser: el dueño de una trattoria más de las miles de Nueva York. Tindalos sabía que detrás de esa fachada se escondía un auténtico hijo de la gran puta sin escrúpulos, buenos contactos y una proverbial buena suerte. El hecho de que trabajara más de noche que de día aunque aún respiraba le había hecho pensar siempre a la Brujah que estaba bien alimentado por algún Vampiro.

Pozzi sonrió abiertamente al ver aparecer a Tindalos y la invitó a sentarse enfrente. La Brujah lo hizo con calma y mirando aquel mantel de cuadros rojos y blancos que transmitía una peculiar inocencia cuando en realidad todo cuanto se podía tratar aquella noche en aquel lugar seguramente iba a infringir unas cuantas leyes federales.

- Buona notte, tesoro -dice con un acento italiano muy forzado. Por mucho que intentara aferrarse a esa identidad, aquel bastardo se había criado en el Bronx- ¿Habéis dormido bien?

Tindalos conocía aquel protocolo. A tipos como Pozzi les gustaba fingir una supuesta normalidad. Preguntar por la familia, por las últimas vacaciones. Banalidades que seguramente no le importaban lo más mínimo. Pero nunca había que perder las formas. Tras un rato de charla vacua, Pozzi dio un sorbo a su espresso y fue directo al grano.

- ¿Tienes la dirección?


Imagen

Nicole se notaba más centrada. Estar allí encerrada y con aquel teléfono no dejaba de ser un logro. Y había que tener en cuenta las pequeñas victorias. Ahora mismo nadie le pisaba literalmente los talones, aquella antigualla era imposible de rastrear por métodos medianamente modernos, en el restaurante no había nadie... y Tindalos estaba con ella. Valoraba especialmente el compañerismo de la Brujah. Había sido un golpe de suerte toparse con ella justo cuando todo empezaba a torcerse.

La alimentación había ayudado finalmente a su mente a centrarse. La sangre de personas dormidas tenía esa capacidad analgésica. No le inducía a ella ningún tipo de somnolencia, pero sí que le ayudaba a calmar su bucle de pensamientos y centrarse en lo que tocaba en cada momento. Y ahora era particularmente importante mantener la concentración y no dar más pasos en falso.

Al quinto tono, cuando la Malkavian está a punto de perder esa tranquilidad para empezar a ponerse nerviosa, se escucha una voz al otro lado. Es de una mujer y evidentemente Nicole acaba de despertarla, si bien al escuchar el nombre de la señora Chang parece espabilarse.

- Si es usted quien creo que es, se encuentra en busca y captura, no es una buena idea que nos veamos.

Un jarro de agua fría cae sobre la mente de Nicole, quien murmura un improperio que no llega a escuchar su interlocutora.

- Déjeme por escrito qué necesita en el buzón 180 de la oficina de Correos de la 215 Oeste con la 104. Lo recogeré por la mañana y le dejaré respuesta en el mismo lugar. El código del buzón es 1989.

La abogada de la señora Chang no da opciones a más conversación, ya que Nicole escucha cómo cuelga. El improperio lo suelta ahora en voz alta.
Imagen

Nicole Peralta (Nyxe)
Trabajadora Social

Re: "Countdown" 3

#42

Mensaje por Nyxe » 05 Mar 2025, 19:11

Si no fuera por la Ofuscacion, la retahila de palabrotas que estoy soltando en español se escucharía en todo el restaurante. ¿No podía salirme NADA bien? ¿No podía simplemente no haber visto el video, o no haber hecho la conexión? Estoy a punto de estrellar el móvil contra el suelo y comprobar si de verdad es tan indestructible como decían, pero una decima de segundo antes consigo contenerme y darle una patada a la pared.

-¡La puta que los parió!
-digo justo antes de dejarme caer sobre la taza cerrada del váter.

No sé cuánto saben, o cuánto han investigado durante el día. ¿Tienen mi nombre? ¿Se veía en el video que una bala me había atravesado el estómago y había salido por el otro lado? ¿Había alguna posibilidad de que tuviesen la más mínima sospecha sobre mi naturaleza? Entierro la cabeza en mis manos. ¿Que qué necesitaba? ¡Hablar con ellas! ¡Que nos mirasen a los ojos! Que bebieran mi sangre... ¡Contactar con ellas por correo no ne servía de nada! Con un intercambio cada noche, ¡no tenía tiempo suficiente para conseguir nada de ellas!

Trato de tranquilizarme y de sacar al menos algo positivo de esto. No me habían cerrado la puerta, sólo iba a ser más complicado entrar. Tenía toda la noche para pensar qué escribirle. Hope quería entrar a su red interna, ¿no? Quizá podía empezar tirando por ahí. Y no me había dejado oportunidad de decirle que se equivocaba, pero ya teníamos pensada una manera de "demostrar" que no era quien ella creía.

No puedo venirme abajo tan rápido. Aún me quedaban llamadas por hacer esta noche. Agarro el móvil otra vez y marco el número de Leah.

-Hola Leah, soy Nicole. ¿Como estas? ¿Te pillo en mal momento?


No es que Leah pudiese tirarse un rato largo hablando en el trabajo. Pero sé que a poco tranquila que sea la noche, no van a decirle nada por perder unos minutos al teléfono.

Necesito pedirte ayuda... a ver cómo te lo puedo resumir. Hay un traficante que está dispuesto a confesar y destapar una trama importante, pero tiene una condición. Al parecer su novia murió hace poco, y quiere enterrarla él. Pero no se fía de la policía... y no te voy a mentir, me parece que con razón. Por lo que me ha dicho, no tenía familia, ni gente más cercana, así que debería estar entre los cadáveres no reclamados. Sé que esto es totalmente extraoficial, pero, ¿me podrías ayudar a comprobar al menos que está en una morgue?

En otra situación me dolería tener que soltarle una mentira tan gorda, pero ahora mismo me parecía el menor de todos los males posibles. Me miro en el reflejo del espejo.

Es una chica de veintipico, mas bien delgada y tirando a alta. Me dijo que la llamaba Lily pero que casi seguro que no era su nombre real. Y que tenía la piel clara pero que era más latina o italiana, con el pelo y los ojos oscuros.

Tadd (Dava)
Detective Privado

Re: "Countdown" 3

#43

Mensaje por Dava » 06 Mar 2025, 11:31


-Lo tengo en cuenta, Louise. Gracias

Me dirigí directamente hacia Pápa y tras dedicarle un asentimiento me fundí en un generoso abrazo con él antes de besarle la mano como correspondía a su posición. La comparativa de tamaños entre ambos es ridícula. Pozzi ya no era el patriarca de la Familia, se había jubilado y era otro nombre el que se relacionaba con las actividades de la Familia directamente, peor cualquiera que conociera el funcionamiento de Little Italy, sabia de sobra que el seguía gobernando en la sombras: Tenia los contactos, los recursos y de paso hacia que el nuevo Representase tuviera las manos limpias y fuera políticamente correcto, con un reputación casi intachable.

-Como un bebe, Pápa. Muchas gracias por tu hospitalidad, ¿Qué te debo?

Me adelanto a su oferta lo que seguro le alegra la noche, se de sobra que no le gustan los rodeos. Negocios son Negocios. Que ambos tengamos clara esa premisa es base de nuestra buena relación “comercial” y no soy yo quien piensa en tirar por la borda una simbiosis comercial tan beneficiosa para ambos. El consigue que sus enemigos desaparezcan y se larguen y yo un aperitivo gratis.

-No estaría de más que me des la dirección, creo que cambio de domicilio recientemente. Solo dime cuanto tiempo tengo para hacerlo y como quieres que se haga, Pápa. Personalmente preferiría hacerlo por las “buenas”. Es posible que encuentre un modo de desacreditarla, si con eso basta.

Le dejo pensarse la respuesta sin ninguna prisa mientras Nicole habla por teléfono mientras reviso mentalmente toda la información que tengo de la doctora Akiva. Tiene que haber un modo de sacarla del camino de Pozzi antes de que la única solución se hacerla desaparecer. Si Pápa me ha llamado es por cortesía profesional. En cualquier otra situación habría mandado a un sicario y al día siguiente estaría en las esquelas.

-Por cierto, Pápa. Mi último trabajo me dirige al Hotel W y la Sra. Chang, ¿Algo que deba de saber? No me gustaría meterme en el camino de los planes de Little Italy a largo plazo… o perder una oportunidad de ayudar a la familia cuando pase por allí…


Lo dejo caer con una sutileza sibilina mientras le dedico mi mejor sonrisa

Avatar de Usuario
Voivoda
Fundador
Fundador
Mensajes: 7449
Registrado: 13 Jul 2019, 17:50
Ubicación: Madrid
Mensajes miarroba: 27.018
Antigüedad: 7 de Agosto de 2004
Contactar:

Re: "Countdown" 3

#44

Mensaje por Voivoda » 09 Mar 2025, 19:40

Imagen

- Nicole, ¿estás bien?

La voz de Leah sonaba francamente preocupada. Nicole se llevó la mano libre a su frente y al pelo mientras entrecerraba los ojos y suspiró en voz baja. La frustración se abría paso en su interior, pero no podía culpar a Leah de su reacción. Era madrugada, no es que hablara con ella a diario y le estaba pidiendo poner en riesgo su propio trabajo para identificar a un cadáver. Preocupación era lo mínimo que podía sentir aquella mujer que, desde que Nicole la vio por primera vez, era la viva imagen de la entrega a los demás.

- ¿Qué haces llamándome a estas horas para hablarme de narcotraficantes y cadáveres? -un silencio sigue a sus palabras- ¿Necesitas ayuda?, ¿Dónde estás? Puedo intentar hacer un hueco e ir a buscarte si me necesitas.


Imagen

- Creo que no me has entendido.

Pozzi tiene una voz suave, como de viejo cantante operístico que procurara no quedarse afónico. No obstante, su actitud casi hogareña y calmada era una tapadera. Todo el mundo temía sus decisiones cuando algo le contrariaba. Tadd se sentía lo suficientemente segura de sí misma para llegar a la conclusión de que tendría bastante opciones de escapar en caso de un enfrentamiento, pero eso no quitaba que un ligero escalofrío recorriera su cuerpo no-muerto.

- Eres tú quien va a darme esa dirección, amore. Y a partir de ahí ya nos encargaremos nosotros del asunto -te mira casi con ojos paternales- No quisiera que te vieras envuelta en problemas por mi culpa, querida.

La Brujah sopesó sus opciones. Pozzi no iba a dejar que se entrometiera en sus decisiones de ninguna manera, lo que la dejaba fuera de la ecuación y a la doctora en una situación potencialmente mortal si proporcionaba la información de su paradero. No hacerlo, sin embargo, le traería problemas directos a ella. Tadd se preguntó cómo no habían acudido directamente al lugar de trabajo de la doctora. Probablemente querían darle un toque más personal.

Mientras Pozzi deja que asumas su respuesta, contesta a la siguiente pregunta.

- ¿Chang? No te recomiendo decir un apellido así en estas calles en voz alta o alguien hará que tragues la lengua -Pozzi bromea con la rivalidad entre los grupos dominantes de Little Italy y la vecina Chinatown. No te da la sensación de que la señora Chang tenga que ver con el barrio chino, pero es probable que los sicarios a sueldo de Pozzi no distingan los matices de la genealogía asiática- Nosotros no tenemos nada que ver con esos negocios, querida. Esa tipa es una de las impulsoras de la gentrificación de esta ciudad, pero en nuestra pequeña comunidad no dejamos que nos metan hoteles de esos por el barrio...

Pozzi parece recordar algo.

- ¿Está bien tu amiga?
Imagen

Nicole Peralta (Nyxe)
Trabajadora Social

Re: "Countdown" 3

#45

Mensaje por Nyxe » 10 Mar 2025, 11:38

Me quedo bloqueada por un segundo. Se nota que estoy nerviosa, y se lo he soltado todo tan rápido que es normal que se preocupe.

-Si... Si, estoy bien, ¿por que lo... -le pregunto haciéndome la extrañada, y finjo que un bostezo me interrumpe la frase-...preguntas?

Hago como si hubiese encontrado la respuesta yo sola.

-Si, perdona, la verdad es que estoy un poco cansada. Ha sido una noche...
-suspiro- complicada.

Se me escapa una sonrisa irónica. Eso no era mentira.

El ofrecimiento de Leah me tienta. Mucho. Igual era más fácil que la enorme bola de nieve que estaba montando. Igual podía pedirle que me llevase a casa de Ruth. Tal vez lo mejor fuera que se lo explicase todo a ella, y que me escondiera en un cajon al que no le diera la luz durante unos años. Lo suficiente como para que dejaran de perseguirme, o al menos que nos pudieramos ir de la ciudad sin que nos siguieran. Así dejaba de causarle problemas a Tindalos y a los demás.

Pero no podía. Sería ponerla más en peligro a ella. A las dos de hecho. Tenía que resolver esto yo sola, o por lo menos intentarlo.

-No, no te preocupes, de verdad. Me queda un rato largo aquí- trato de decirle con la voz más tranquila que puedo-. Pero sí, tienes razón, esto es raro y no sabemos bien como reaccionar. ¿Tienes un hueco ahora y te lo explico desde el principio? Es que no se cuándo vamos a coincidir despiertas otra vez.

Nicole Peralta (Nyxe)
Trabajadora Social

Re: "Countdown" 3

#46

Mensaje por Nyxe » 15 Mar 2025, 19:50

-Vale, a ver, tu sabes que a lo que yo me dedico es a la reinserción social, ¿verdad? Es decir, ayudar a gente sin techo, que sufre de adicciones, que ha sido victima de la prostitución, y así, a conseguir los recursos para encontrar un trabajo, rehacer lazos sociales, y volver a integrarse en la comunidad. Vamos, a salir de la calle. Y muchas veces ayudamos tambien a expresidiarios y a gente que... está comprando todas las papeletas para entrar a la cárcel.

No me estoy inventando la historia desde cero. Había tenido tiempo de ir dándole algunas vueltas desde que se me ocurrió pedirle ayuda a Leah. Pero aún así, tengo que ir con cuidado de no entrar en contradicciones.

-Pues hace un rato nos ha llegado un chico llorando y casi balbuceando, pidiendonos ayuda porque "habían matado a su novia". Algo se ha metido así que nos ha costado mucho tranquilizarle y que nos explicara qué ocurría. Y... -me detengo un segundo, pensando en qué contarle primero. Me doy cuenta de que me va a pasar más de una vez, así que, como si me hubiera costado darle sentido a lo que el chico contaba, le digo -voy a intentar ordenartelo. Hasta aquí me vas siguiendo, ¿no?

-Vale -continúo tras el asentimiento de Leah- pues el chico se dedica a pasar droga. Y tiene, o tenía, una novia... pues del mismo ambiente -digo con un suspiro de fingida resignación-. La cosa es que ha tenido esta tarde un encontronazo con unos de otra banda, y le han dicho que "suerte que tu novia ha muerto a tiempo para no ver lo que os vamos a hacer". Y ha entrado en pánico, porque llevaba varios días sin poder contactar con ella y está convencido de que le ha pasado algo. Porque por lo que nos cuenta, además esta sola, no tiene familia ni amigos más cercanos que él. Y como sabía que nosotros ayudabamos a la gente, pues se le ocurrió venir aquí.

Estoy estirando la historia al límite de la plausibilidad. Hay una cosa de mi trabajo que me exasperaba antes de mi Abrazo pero que ahora aprecio, y es que muy poca gente sabe en qué consiste realmente. Me sirve para justificar un montón de cosas desde horarios raros a contactar con según qué gente. Mientras que en un hospital la gente sabe que no es lo mismo un cirujano que un celador, yo puedo tirar de historias de varios sitios en los que he estado como si todo ocurriera a la vez, y a nadie se le suele hacer raro. No tratabamos con expresidiarios en el mismo centro en el que acogíamos a personas sin techo. Así que aunque no era imposible, lo más probable es que este supuesto chico hubiese ido a otro sitio. Pero decido tirar con eso.

-Claro, como te imaginarás -continúo-, le hemos intentado decir que lo mejor que puede hacer, si tiene miedo de que le pueda pasar algo a él, de que le haya pasado algo a ella, y si se siente mal porque se ha dado cuenta del daño que puede hacer lo que está vendiendo, es ir a la policía. Que es a quien tiene que ir. ¡Coño! Si nos está contando que va a haber una guerra de bandas por aquí, ¿que le vamos a decir, no? -le digo, intentando demostrarle que no he perdido la cabeza del todo y que me doy cuenta de que la situación es grave.

-Y aquí la cosa se ha puesto complicada. Pues porque de la policía no se fía. -Por algún motivo me estaba imaginando al chico con la cara de Tindalos- Y sí ha tenido la... entereza de decidir entregarse y acabar con la situación. Pero acto seguido se ha venido abajo porque al parecer Lily quería que la enterraran y tenía mucho miedo de que la convirtieran en cenizas -jejé- y cree que la policía es capaz de decirle que sigue viva y que la tienen encerrada para que confiese lo que sea. O que simplemente van a pasar de lo que les diga y van a tirar su cuerpo a la incineradora. Y de verdad te digo, no me extrañaría tampoco. He visto a la policía jugar muy sucio con estas cosas. A veces parece que se les olvida que ellos tienen que ser los buenos.

Se me escapa un suspiro. Es de lo poco que le he dicho a Leah esta noche que no es mentira. Y no tiene que ver con la Segunda Inquisición. Ya antes de mi Abrazo la policía me había decepcionado montones de veces al ver cómo trataban a inmigrantes, gente racializada y... vaya, casi cualquier colectivo al que intentáramos ayudar.

-Así que le hemos dicho que simplemente podemos llamar al hospital primero. Y cuando hemos empezado a coger los datos para preguntar, se ha dado cuenta de que en realidad tiene muy pocos. Porque Lily no quería hablar de su pasado, y en realidad, tampoco tiene claro que la hayan matado ellos. Nos ha dicho que no sería la primera vez que se intenta suicidar o que no controla lo que se mete. -Hago una pequeña pausa. -Esto no me parece tan raro como pudiera sonar. Hay mucha gente que se larga a otro sitio para empezar de cero y empieza a dar otro nombre pero no llega nunca a cambiarse los papeles.

Pongo los ojos en blanco. Ya, ya. Me ha quedado clara la lección.

-Pero el chico se ha echado a llorar -continúo-, porque ha pensado que con lo que tiene no la iba a encontrar nunca. Y antes de que volviera a venirse abajo me he acordado de ti, y sin pensar le he dicho "Oye, tengo una amiga que ha trabajado en varios hospitales. Igual nos puede ayudar a encontrarla con eso". Y por eso te he llamado corriendo. De verdad, perdona por... -¿asustarte? ¿mentirte? ¿implicarte en un delito? -pedirtelo de esta manera.

Hace años que la expresión "contener la respiración" perdió el significado para mí, pero estoy mordiéndome el labio por dentro y apretando el móvil tan fuerte que si fuera un modelo más moderno tendría miedo por la pantalla. Me la estaba jugando todo a esa mentira y a que la compasión de Leah la impulsase a ayudarnos antes que a indagar más. Si no se lo creía, era posible que tuviese que cortar el contacto con ella completamente.

Quizá tuviese que hacerlo incluso si funcionaba lo que Tindalos y yo estábamos planeando.

Tadd (Dava)
Detective Privado

Re: "Countdown" 3

#47

Mensaje por Dava » 17 Mar 2025, 19:28


Tratar con la “Familia” es como tratar con una serpiente de cascabel. Todo va de puta madre hasta que te quedas sin comida que ofrecerles. Y me estaba pidiendo a la Dra. Akiva. La diferencia entre el Ministerio y Little Italy, es que estos últimos no atacaban a los suyos ni los abandonaban a la primera de cambio. Había intentado proteger a la doctora desde el minuto uno, manteniéndola alejada del mundo en el me haya envuelta. Tanto me había esforzado en que permaneciera lejos de la influencia de los vástagos que había perdido de pista las amenazas mundanas. Y que Akiva fuera una mujer de principios la había metido en el camino de Pozzi.

No podía haberse cruzado en el camino de otro, que va, eso habría sido demasiado fácil. Podría haber lanzado a Pozzi y sus chicos sobre quien amenazaba a mía doctora, pero no, tenía que hacerlo en el de Pápa. Por suerte para mí, me quedaba una carta que jugar, pero debía de ser cuidadosa y no desvelar mi mano ante la persona que me había enseñado todo lo que se de los bajos fondos. Tomé una servilleta de papel de la mesa y apoyé mi bolígrafo sobre la misma.

- Me gustaría hacerte una petición a este respecto, Pápa -dije con todo el encanto posible, sin apartar mis ojos marrones de su mirada de chacal haciendo hincapié en que era una petición personal y no a la familia-. Si ella, aun pagando el precio que desees, pudiera salir integra de toda esta mierda en la que ha decidido meterse la muy cabezona -le dedique una sonrisa de negocios-, digamos que te debería un nombre a cambio…

Dejé la frase muerta en el aire mientras terminaba de escribir su dirección sin que pareciese que dudaba un segundo. Cuando termine, le di la vuelta a la servilleta y se la deslice sobre la mesa sin apartar los dedos de la misma. Cuando él puso los dedos sobre la misma la retuve un par de segundos con un gesto profesional para liberarla sin apartarle la mirada. Sabía que hiciera lo que hiciera, iba a ser llamativo. Un ejemplo para todo aquel que se cruzase en su camino. Ya cuando tuvo la servilleta en su mano, procedí a contestar a su otra pregunta.

- Si, esta bien -me encogí de hombros-, todo lo bien que se puede estar cuando te joden, pero bien y te meten en la lista de los mas buscados sin tener porqué. Pero ya esta “parcheado” de momento. En 72 horas lo tendré todo completamente arreglado -arqueo una ceja dubitativa- ¿Cómo os enterasteis vosotros? ¿Por qué canal os llego la información?

Avatar de Usuario
Voivoda
Fundador
Fundador
Mensajes: 7449
Registrado: 13 Jul 2019, 17:50
Ubicación: Madrid
Mensajes miarroba: 27.018
Antigüedad: 7 de Agosto de 2004
Contactar:

Re: "Countdown" 3

#48

Mensaje por Voivoda » 23 Mar 2025, 17:58

Imagen

Unos segundos de silencio siguen a las palabras de Nicole. Por un momento Nicole teme que Leah no se haya creído una sola palabra de cuanto le ha dicho. En todo caso, puede oír la respiración de su amiga al otro lado de la línea, lo que significa que probablemente esté pensando qué responder. La Malkavian no puede culparle por las dudas. Que alguien te llame en mitad de la noche para contarte una historia de muertes y morgues no es probablemente lo que más confianza puede inspirar en una persona. Nicole no puede dejar de temer por un momento que pueda perder el vínculo que le une a Leah, ya que es mucho más importante para su estabilidad de lo que ella misma se reconoce a veces.

Finalmente, vuelve a escuchar la voz de Leah al otro lado.

- Bueno, no sé, Nicole, francamente... -la Malkavian escucha un ligero suspiro. Sospecha que no ha terminado de convencer a su amiga, o bien que pesa más la preocupación de Leah por su estabilidad mental- Ok, mira, preguntaré, ¿vale?. Veré si alguien con esta historia o ese nombre ha pasado por el hospital... Tú descansa, te llamaré cuando sepa algo.

Nicole mira un momento el techo de aquel cuarto de baño. Las posibilidades de que la historia que se había inventado tuvieran algún tipo de parecido con la realidad eran muy remotas. Pero al menos Leah había acabado cediendo. Sabía que su amiga tenía buen corazón y mejor voluntad, siempre estaba dispuesta a ayudar a quien lo necesitara.

En ese momento, la Malkavian pudo ver la sombra de unos zapatos dibujándose por debajo de la puerta. Aunque esperaba no haber sido oída, sospechaba que alguno de los hombres del italoamericano amigo de Tindalos estuviera fisgoneando debido a que empezaba a tardar demasiado en salir del cuarto de baño.


Imagen

Pozzi coge la servilleta y se la guarda sin mirar el contenido. Por la cabeza del italoamericano no pasaba ni por un segundo que Tadd hubiera mentido o no hubiera escrito lo que se le pedía. El honor y la sinceridad eran pilares de cualquier tipo de relación de confianza en la que estuviera Pozzi involucrado. Y si no se daban esos principios, entonces eran las pistolas Beretta las que hablaban.

- Comprenderás, cara amica, que la doctora no puede seguir con su carrera en Nueva York. No podemos estar siempre pendientes de cuándo le apetezca dar entrevistas, ¿capisci?

Tadd comprendió, y una punzada de amargura surgió en su interior. La Bestia se revolvió inquieta. El trato era justo a ojos de Pozzi, pero quizá demasiado caro para la Brujah. Lograría salvar la vida de la doctora Akiva, pero que su vida de repente se hundiera y que se alejara de la ciudad le revolvía las entrañas. La doctora no es más que una víctima colateral inocente... y Tadd sentía que la estaba traicionando de una manera horrible. ¿Era acaso mejor que el bastardo de su Sire?

Pozzi no pareció prestar más atención a la reacción de Tadd y, después de comprobar que la servilleta queda bien guardada en el bolsillo delantero de su camisa, contesta con suavidad a la pregunta de la Vampira.

- ¿Por qué canal no llegó? Hay vídeos en redes y está en la lista de los más buscados de la policía de Nueva York -Pozzi adopta un tono paternal- Cara mia, ¿no has visto que la ciudad está militarizada? No es buena compañía esa muchacha, tarde o temprano la van a cazar como a un ratoncito.

Pozzi utiliza la palabra "cazar" sin ser consciente del significado que tiene en realidad para un vampiro. A Tadd no le pasa desapercibido. Por un momento su instinto de supervivencia le invita a dejar a Nicole a su suerte en aquel cuarto de baño en el que está. Por otro lado, traicionar a dos contactos cercanos en la misma noche era más de lo que su conciencia podría soportar. Nicole no era técnicamente inocente, pero Tadd tenía claro que no se merecía ser el objetivo de una cacería inquisitorial.



OFF: Tadd Ansia 1 y 2 daños superficiales a la FV. Debes hacer una tirada de Remordimiento porque el precio del éxito de tu tirada relacionada con la Dra. Akiva es una Mácula (tienes 3 dados para esa tirada, los espacios que quedan entre la Mácula y tus 6 puntos de Humanidad)

Nicole, Ansia 2, 1 daño superficial a la FV
Imagen

Nicole Peralta (Nyxe)
Trabajadora Social

Re: "Countdown" 3

#49

Mensaje por Nyxe » 29 Mar 2025, 08:07

-Muchísimas gracias Leah. De verdad.

El alivio no me lleva a soltar un suspiro, pero trato de imitar uno de cansancio.

-Lo haré, tranquila
-miento, intentando quitarle un poco de preocupación-. Cuidate tu tambien, ¿vale?

Me despido de Leah en cuanto siento al hombre al lado de la puerta. Compruebo la hora. Tenía intención de hacer una llamada más pero me doy cuenta de que voy a tener que esperar a que amanezca. Detengo la Ofuscación para que se escuche que tiro de la cadena y me dirijo a la puerta del baño. Justo antes de hacerlo, cruza por mi mente el recuerdo de un miedo que tenía antes de mi Abrazo, así que compruebo que sigo teniendo mi navaja en el bolsillo. Hacía tiempo que no me preocupaba que un hombre me estuviese esperando detrás de una puerta, pero quizá debiera volver a hacerlo.

-Buenas -digo cubriendome la boca con la mano fingiendo un bostezo. Trato de examinar disimuladamente a aquel hombre -y a su olor- para intentar calibrar cuánto cuidado tengo que tener con él. Por descracia, los olores del restaurante son bastante fuertes y no me dejan captar muchos detalles.

Un segundo después se me ocurre una idea.

¡Hey! ¿Trabajas aquí?
-le pregunto, haciendome la simpática y confiada. O la despistada-. ¿Te puedo hacer una pregunta un poco rara?

Después de inventarme toda la historia del cadáver, no me quedan neuronas para intentar justificarme.

-De todo lo que se cocina aquí, ¿de qué dirías que es más difícil quitarse el olor de encima?

Tadd (Dava)
Detective Privado

Re: "Countdown" 3

#50

Mensaje por Dava » 02 Abr 2025, 11:02


Siento alivio al oír las palabras de Pozzi. Sabía que tras esa fachada de Gangster de la vieja escuela se escondía el corazón paternal de quien vela por su familia. Por eso le llamaban Pápa. Por eso elegí Little italy entre todos los guetos, y a él entre toda la chusma que habitaba las noches de Nueva York. Ellos conservaban el honor y se aferraban a él como yo a los recuerdos de mi vida humana. Ambos lo hacíamos para no caer en una espiral de decadencia animal.

-Muchísimas gracias por todo, Pápa -Le agradezco como manda la ley, besando su anillo y dándole un abrazo-. Sabía que podía contar contigo.

Pero no todo es miel sobre hojuelas, una leve punzada atraviesa mi muerto corazón al saber que Akiva quedara, quizá, demasiado lejos de mi protección. La bestia gruñe desconforme, pero me consuela saber que al menos sobrevivirá y, con un poco de suerte, quedará lejos de las grandes influencias de los vástagos de Nueva York de la que la llevo protegiendo desde mi abrazo. Al menos tendrá otras cosas en las que pensar por un tiempo y desviara su insidiosa curiosidad del que ahora es mi mundo.

-Lo sé, Pozzi -Asiento al tiempo que suelto el abrazo-, pero ella, además de no merecerse eso, tiene algo que necesito. Contactos que me pueden dar información sobre un testigo en un caso que ha sido secuestrado. Todo parece girar entorno al hotel W… pero no veo el patrón -sonrio-. Sabes de sobra que no se me caen los anillos por apretar el gatillo, ¿verdad? Descuida, que me andaré con tres pares de ojos.

Continuo con la charla hasta que Nicole aparece de vuelta. Hablamos de anécdotas, de como nos conocimos, como van las cosas por las calles estos días y cualquier cosa banal que me valga para distraerme del calvo que acabo de poner en el ataúd de la doctora Akiva.


Editor completo

Volver a “Coterie Nicole y Tadd”